01
Feb 07

Tumbas reales en Waka´-El Perú

Este soy yo, en la ciudad maya de Waka´-El Perú, en la Reserva de la Laguna del Tigre, Petén. La foto viene al caso porque el jueves 8 de marzo, alas 6:30 p.m. el arquéologo Héctor Escobedo dictará una conferencia sobre las tumbas reales en aquella urbe. La conferencia será en el Museo Popol Vuh, de la UFM.

El centro prehispánico de El Perú, Petén, emerge poco a poco como un actor estratégico en la historia política del mundo maya clásico. Después de cuatro temporadas de investigación arqueológica, se empiezan a entender la historia y los programas constructivos de los gobernantes locales. Las excavaciones de 2006 dieron lugar al descubrimiento de tumbas espectaculares, con vasijas policromas, figurillas cerámicas, y artefactos de jade y concha del periodo clásico tardío (550-820 DC). La extraordinaria calidad de estas suntuosas ofrendas funerarias sugiere que los restos humanos a los que acompañan corresponden a individuos de la realeza. En esta conferencia, el codirector del Proyecto Arqueológico El Perú-Waka’ dará a conocer el hallazgo y el contenido de tales tumbas, y su interpretación de la enigmática identidad de sus ocupantes, de cuyos reinados no se han hallado registros escritos. El Doctor en Antropología Héctor Escobedo ha realizado investigaciones en sitios arqueológicos tan importantes como Piedras Negras, Kaminaljuyú, Dos Pilas y San Bartolo. Es autor y editor de numerosos libros y artículos, enfocados principalmente en la arqueología y la escritura jeroglífica de las tierras bajas mayas.

Actualización: esta es la columna que publiqué cuando viajé a Waká:

Mi primer viaje a la selva fue por medio de las páginas de La Mansión del Pájaro Serpiente; y años después, con los orquideólogos de verdad, tuve la oportunidad de visitar los bosques de las verapaces y de la costa sur, en varias ocasiones.
No soy ecohistérico, pero como me gustan los huevos de parlama y la sopa de tortuga, estoy absolutamente convencido de que la felicidad humana está mejor servida si conservamos a los quelonios, que si permitimos que se extingan. Y quien dice tortugas, dice cocodrilos, jaguares, y otras especies de fauna y flora.
Además, soy de esos que se emocionan si pueden probar la quinina directamente del arbol y si pueden oler el copal recién extraido de la corteza. Ya no digamos si puedo caminar por una ciudad maya, rodeada de lianas, guacamayas y monos. Eso sí, que nadie me diga que no puedo usar el aire acondicionado, o que no puedo comer Whoppers dobles con queso y tocino.
¿Donde puede uno disfrutar de todo aquello, con exepción de la hamburguesa, los huevos y la sopa? Pues en en el parque nacional Laguna del Tigre. Más exactamente en la estación biológica Las Guacamayas, donde efectúan un valioso trabajo de conservación, y en el sitio arqueológico El Perú.
¡Chispas!, donde convergen los rios San Pedro y Sacluc, la vida se aprecia desde un nuevo punto de vista. Se aprende, también. No sabía, por ejemplo, que las guacamayas viven hasta 80 años y que son muy difíciles, aunque no imposibles, de reproducir artificialmente. Principalmente porque para averiguar su sexo era necesaria una operación quirúrgica, hasta que la tecnología mejoró y ahora se envían muestras de sangre a laboratorios especializados en Estados Unidos.
Aprendí que hay mujeres campesinas que en la selva cultivan hierbas medicinales para vender, y que con ello cuidan el ambiente y sus recursos naturales renovables. Claro que nadie saldrá de pobre si no empacan aquellos productos en bolsitas elegantes de papel reciclado, y si no les ponen una marca atractiva para venderlas en Nueva York, San Francisco y Dallas. Valor agregado que le dicen; pero Roma no se constuyó en un día.
Comprobé, con tristeza, que El Perú fue totalmente saqueado antes de que los arqueólogos pudieran excavarlo y estudiarlo científicamente. Lo que ahí queda es lo que no quisieron llevarse los depredadores; pero a pesar de ello, hay magia en sus plazas.
La conservación del ambiente y de los animales y plantas que viven de él, no debe reñir con los intereses y necesidades de las personas. Por eso es que en Kenya (donde está prohibida su caza) se están acabando los elefantes, y en Zimbabwue (donde está permitida su caza de forma racional) la población de paquidermos es estable. Y no aumenta, sólo porque el comercio del marfil está vedado en el mundo, lo cual desincentiva a quienes tiene que criar a aquellos gigantes.
A la larga, no debería haber conflicto entre los intereses de conservación y los de progreso y de abandono de la pobreza. Hay, eso sí, que entender las necesidades de las partes involucradas, actuar con responsabilidad e invertir en educación y tecnología.


26
Ene 07

Sus dientes, el flúor y el estado niñera

En Guatemala, el Acuerdo Gubernativo 29-2004 obligaba a los salineros a añadirle yodo y flúor a su producto. Adicionalmente, los miembros de la Asociación Nacional de Salineros consiguieron que la sal importada -que carecía de flúor- fuera retirada del mercado.

El estado niñera chapín relevaba a los guatemaltecos de la responsabilidad de velar por su nutrición adecuada; y un grupo de empresaurios obtuvo protección contra la competencia. ¿Se dá cuenta?

Ahora, un grupo de salineros ha conseguido que la Corte de Constitucionalidad revoque la obligación de ponerle flúor a la sal. Esto es porque si toda la sal que hay en el país está fluorizada, por mandato de la legislación, ¿qué pasará con aquellas personas que sufren de fluorosis? Ellos no tendrían la posibilidad de conseguir sal sin flúor debido a que el estado niñera obliga a que toda la sal tenga flúor y a que los empresarios mercantilistas consiguieron prohibir que sea importada la sal sin el elemento que perjudica a quienes padecen por exceso de exposición al flúor.

Yo creo que la decisión de la CC, con respecto a revocar la obligación de fluorizar la sal es muy acertada. Yo digo que los guatemaltecos -por razones de salud y por respeto a la libertad individual- debemos tener derecho a escoger si queremos consumir ciertos productos, o no. ¡Sobre todo si nuestra salud está en riesgo!

Foto de un diente maya por http://ess.geology.ufl.edu/hodell/Maya_tooth.jpg


19
Ene 07

Apocalypto y la indignación indigenista

En la foto, la señora Xoc, de la ciudad maya de Yaxchilán, se pasa un lazo con espinas a través de su lengua. Sugiero que, para poner en perspectiva la indignación de la dirigencia indigenista con respecto a la violencia en la película Apocalypto, de Mel Gibson, uno debe ver algo del arte de los mismísimos mayas. Este muestra escenas como la que vemos aquí; y también muestra personas usando la piel de otros, cráneos empalados, hombres decapitados, y prisioneros espantosamente torturados.

Hoy, César Sactic, del Consejo de Organizaciones Mayas Cakchiquel de Sacatepequez, dice que “Apocalypto representa un atropello contra la dignidad y la historia de quienes conforman el área mesoamericana, sobre todo porque el no hacerlo, es seguir atado y aceptar esa línea que se nos ha impuesto por medio de la educación oficial, en donde no se dice la verdad de nuestros antepasados”.

Adicionalmente Ricardo Cajas, Comisionado Presidencial contra la Discriminación y el Racismo, considera que “es conveniente alertar a la población de que esta cinta no puede verse como un referente, ni mucho menos como algo creado con contenido científico, en el marco del análisis de la historia de los pueblos mayas, pues su argumento está basado en hechos de ficción”.

A la dirigencia indigenista le parece que no se dice la verdad y que son hechos de ficción cuando en la película se muestra lo mismo que muestra el arte maya. ¿Usted, qué opina?

La cultura maya fue fascinante y admirable en muchos aspectos; de hecho, en la película se ve bien cómo es que los sacerdotes hacen que los sacrificios coincidan con un eclipse para que las masas crean que con con la sangre se apaciguan los dioses. Aquello requería conocimientos astronómicos específicos. Pero de admirar la cultura maya, a idealizarla hasta creerse el mito Thompsoniano de los mayas como inofensivos observadores del cielo, hay una gran distancia. Los mayas eran tan sanguinarios (o quizás más, a juzgar por su arte) que muchos otros seres humanos.


15
Ene 07

Apocalypto y la negación necia de la realidad

La foto muestra filas de cráneos humanos empalados. Este mural adorna un edificio en la ciudad maya de Chichén Itzá; y me recordó una escena de Apocalypto en la que se ven cabezas humanas en estacas.

La foto viene al caso porque recibí una comunicación en la que la Asociación Maya de Estudiantes Universitarios anuncia que “socializamos con ustedes nuestro pensamiento en torno al controversial cineasta Mel Gibson”.

Gibson, en lo personal no me importa mucho, y francamente el texto no se refiere a él como lo anuncia el título; pero como he estado tocando el tema de Apocalypto aquí les paso el comunicado, o como dirían los estudiantes: aquí se los socializo. No voy a comentarlo, porque he preferido que el propio arte de los mismísimos mayas hable sobre lo que a los dirigentes indigenistas tanto les incomoda: la espantosa violencia a la que las élites mayas sometían a su pueblo y a sus víctimas. Si hace clic en el enlace Apocalypto, de abajo, verá otras muestras de arte maya en las que se observan torturas y otros actos horriblemente cruentos.

Hecatombe maya, una afirmación falaz y pírrica

Felicidades señor Mel Gibson, por ser acreedor de cuatro premios Óscar por Braveheart. Además de dirigir, la película, La Pasión de Cristo y recientemente, por conducir la película “Apocalypto”. Cineastas de su altura, son admirables, independientemente de la connotación que desde su subjetividad le atribuyen a las religiones, a las culturas, a las visiones, a las epistemologías y a la semiótica.

En la contemporaneidad, si bien es cierto, que lo que impera es la cinética, sin embargo, ésta misma, debe estar basada en la cinestética como condición indefectible para la armonía, la sincronía y el mantenimiento equitativo del desequilibrio de las culturas del mundo.

Algo que no es nada novedoso, que nos presenta el neoliberalismo, es el solipsismo cuyas características entre otras, se encuentran la hegemonía, el acumulativo de bienes y la profanación de los valores por la avidez crematística, condiciones que desconfigura el humanismo y los folcloriza; disipando por ende, la sustancia humana como un ser en sociedad y un ser haciéndose.

En cuanto al salvajismo que presenta la película, a nuestra consideración es simplemente un estado primario de la evolución humana, tal como lo presenta el pensador F. Engels, al afirmar: “el salvajismo es un estadio inferior. Infancia del género humano. Los hombres permanecían aun en los bosques tropicales o subtropicales y vivían, por lo menos parcialmente, en los árboles; ésta es la única explicación de que pudieran continuar existiendo entre grandes fieras salvajes”, lo que significa que toda cultura, germina desde este principio prístino.

Para nosotros entonces, la hecatombe maya dentro de la película, está mal connotada, en virtud de que el verdadero significado de dicha acción es el acto de abnegación total que se lleva a cabo por amor y por dignificación a un pueblo. Basta hacer referencia a Rabinal Achi, quien se abnegó a la vida por la emancipación del Pueblo Achi.

Otro ejemplo que es digno de referir es la elegía por la pérdida del brazo de uno de los gemelos Hun-Hunahpú e Ixbalanqué en manos de Vucub-Caquix, como estrategia de vencimiento de Vucub-Caquix, al despojarle de sus alhajas, ornamentos y la dentadura que lo acreditaban como gran Señor, y en su lugar se le colocó granos de maíz blanco. Lo interesante en esta escena, es el hecho de que los gemelos han vencido al gran señor, pero al mismo tiempo, han recuperado el brazo de Hun-Hunahpú, para la consecución de la estirpe y la generación del pueblo Kiche, tal como reza el Popol Wuj.

Para finalizar, es interesante también hacer referencia a la transmigración o metempsicosis del alma, a pesar de que es una doctrina religiosa y filosófica oriental, aplica también a la cultura Maya, en virtud de que cuando Hun-hunahpú e Ixbalanqué fueron vencidos por Xibalbá y posteriormente molidos sus huesos y convertidos en polvo, fueron lanzados al río, éstos convirtieron en peces, que también refiere el Popol Wuj.

En otro orden, lo del desasosiego de las culturas es una verdad, basta con hacer referencia a la cultura griega y la romana, y por supuesto la maya; sin embargo, las culturas persisten en el tiempo y en el espacio. En el caso de los mayas, para nosotros, la muerte no es el ocaso, por el contrario, es una fuente inagotable de inspiración que aunque muchos atribuyen este numen solamente al pasado, sigue siendo vigente y aun más en la actualidad, puesto que sus cuadros recrean el pensamiento.

Para finalizar, la connotación de las culturas depende de quien las mira, pero quien las vive las entiende mejor.

Asociación Maya de Estudiantes Universitarios
AMEU


11
Ene 07

Ilustrador comentario sobre Apocalypto

Del estimado lector, César Elí Rivera, recibí la siguiente nota:

Quienes critican el trabajo de Mel Gibson argumentan entre otras cosas que Apocalypto no es real porque siendo los mayas conocedores de los fenómenos de los eclipses no deberían estar asustados como ocurre en la película. Sin embargo, quienes ya hemos tenido la oportunidad de ver la cinta podemos distinguir que los únicos que no están asustados son los sacerdotes arriba de la pirámide. Es decir que son ellos los únicos que sí sabían del eclipse. Por esa razón una ceremonia de esa naturaleza estaba siendo realizada sabiendo que el eclipse ocurriría en ese preciso momento y así poder mostrarse a sí mismos ante el temeroso pueblo como aplacadores de la ira del dios kukulkán. Pero la cinta en sí no debe ser criticada sin haber sido vista antes. Lo contrario es querer continuar ocultando el sol con un dedo.

Lo puro cierto, don César.


10
Ene 07

Apocalypto, hipocresía y corrección política

Lo que se ve aquí es una pieza maya. El personaje que vemos usa como máscara la cara de otra persona. El personaje lleva sobre su cara la piel desollada de alguien.

Seguro que es políticamente incorrecto contradecir la antigua idea de Eric Thompson en cuanto a que los mayas eran pacíficos e inofensivos observadores del cielo; pero es tremendamente hipócrita negar que los mayas eran seres humanos como cualquier otro, con sus luces y sombras.

Claro que, como dice Ricardo Cajas hoy, “los mayas tenían estudios astronomicos muy precisos”; pero su arte está lleno de escenas espeluznantes como la cabeza que ilustra esta nota, las decaptiaciones en Tonalá, los sacrificios sanguinarios en Yaxchilán, las uñas arrancadas en Bonampak, y muchas más. En la nota citada, Andrés Cholotío, del Consejo Nacional de Educación Maya dice que los mayas “en ningún momento fueron salvajes e ignorantes”. Y a mí que me perdonen; pero ¿por qué es que los mayas iban a ser diferentes a cualquier otro ser humano? Los griegos cometieron atrocidades, del mismo modo en que las cometieron los egipcios, los romanos, los aztecas, los cruzados, los nazis, los comunistas, los talibanes y los hutus.

El berrinche de la dirigencia indígena, alrededor de Apocalypto, se ve muy mal porque su posición es insostenible frente a la evidencia que nos proporcionan los mismísimos mayas en su arte: El derramamiento de sangre era fundamental para su civilización.


09
Ene 07

Apocalypto, censura y arrogancia

La censura de la película Apocalypto, en Guatemala, le será pedida al Ministerio de Cultura y Deportes por el comisionado presidencial contra la Discriminación y el Racismo, Ricardo Cajas. Así lo informa el diario Siglo Veintiuno en su edición de hoy, página 21.

La censura es una práctica totalitaria que consiste en que el gobierno prohiba la discusión, el conocimiento y la difusión de ciertos temas e ideas.

En su soberbia, este dirigente político cree que ustedes y yo no debemos ver Apocalypto. Cree que tiene la facultad de utilizar la fuerza de la ley para impedir que usted y yo veamos la película. Cree que usted y yo no tenemos la capacidad intelectual para entender dicha peli. O talvez es peor, talvez cree que allá afuera hay una masa inculta, a la que él debe proteger aunque para eso tenga que pasar sobre la libertad de expresión, la libertad de empresa y las libertades de ver, leer, oír y conocer.

Señor Cajas: la época en que los dirigentes podían sacrificar a sus gobernados ya terminó (o debería terminar). Ni la vida, ni el intelecto de los guatemaltecos, aunque sea de los guatemaltecos más sencillos, tienen por qué estar sometidas a los dictados de políticos arrogantes que se pavonéan en la cima de sus pirámides imaginarias.

La foto de arriba muestra prisioneros a los que se les han arrancado las uñas y una cabeza sin cuerpo. Corresponde al arte que decora uno de los edificios de la ciudad maya de Bonampak.

08
Ene 07

Y los xincas, ¿qué?

El Ministerio de Educación, de Guatemala, publicó este anuncio hoy. En él se les da la bienvenida a clases a los niños chapines en español, en garífuna y en 21 idiomas mayenses; pero, ¿ y en el idioma xinca? Ese no está incluido.

¡Que discriminación y que exclusión!

¿Sería a propósito, o sería un descuido?


27
Dic 06

Terremotos

Hace poquito más de un año, con mis amigos Ami, Hue-ying, Ho-don, Raúl y Alejandro, volvimos de nuestra aventura en la ciudad maya de El Mirador, Petén. Ahora que hubo un terremoto en Taiwán, espero que mis amigos taiwaneses y sus familias se encuentren bien.

Curiosamente en el Oeste de El Salvador ya van 10 días seguidos de sismos; y ha estado temblando en Nicaragua.

¿Qué edad tenía usted cuando fue el terremoto de Guatemala, el 4 de febrero de1976? Yo tenía 14 años.

Recuerdo que me despertó el sonido horrible, y luego el estremecimiento de la tierra. Mi cama se agitaba y yo tardaba en despertar del todo. Cuando cesaron los movimientos me levanté y me vestí.

Mientras lo hacía escuchaba los llamados confusos de mis padres y mis hermanos. Una librera había caído sobre la cama de mi hermano, Gustavo. Pero había sido detenida por la cabecera y no lo había lastimado. Mi madre, o mi padre habían sacado a mi hermana, Guisela, que era la más pequeña; y mi hermano Juan Carlos estaba sano y salvo.

Salimos a la calle y todo estaba en orden. Mis padres sacaron los carros a la calle y empezaron a sacar de la casa agua, colchas, y seguramente algo de comer.

Al día siguiente todo estaba bien a nuestro alrededor. Parecía que no había pasado nada porque todas las casas estaban en pie y el único daño en la nuestra lo había sufrido una botella de Emulsión de Scott que se había caído en el comedor.

No había teléfonos y no había forma de comunicarse con mis abuelas que vivían del otro lado de la ciudad así que temprano, con mi papá, fuimos en su busca.

Cuando salimos de la zona 15 y llegamos a la bajada de Vista Hermosa vimos los primeros y alarmantes daños. La carretera estaba quebrada. Más adelante había una pared colapsada.
En la medida en que nos adentrábamos a la ciudad veíamos más destrucción, y el corazón se me aceleraba. Recordaba las historias que mi tía abuela, La Mamita, contaba acerca de los terremotos de 1917 y 18. De la ciudad devastada, de cómo habían tenido que ir a acampar al Parque Concordia. De la escasez y de la Gripe Española. Todo eso daba vueltas en mi cabeza.
Llegamos a la zona 3 donde vivían mi abuelita Juanita y La Mamita. Ahí la devastación era casi total. Había casas totalmente destruidas y había escombros en las calles. Yo me imaginaba sacando los cuerpos de las dos viejitas y en fin…fue un inquietante caminar a lo largo de tres, o cuatro cuadras de ripio esparcido en las calles.

Cuando llegamos a la casa las viejitas estaban bien. La casa estaba totalmente quebrada pero en pié. Ellas y unas amigas, tomaban café en la sala y todo estaba bien. Sacamos a las señoras y nos llevamos lo más necesario antes de cerrar la casa y luego nos fuimos a la casa de mi abuela Frances.

Al llegar a la Avenida Independencia nos enteramos que varias casas se habían ido al barranco y que había muertos. Rápidamente llegamos a la casa que estaba en perfectas condiciones. Ahí estaban mi bisabuela Mami, mi abuela Frances, una amiga de ella y mi tía Patricia y mis primos. Luego de constatar que todo estaba bien pasamos gasolina del carro de mi abuela al de mi padre y como yo tragué un poco de combustible, en el proceso, fui al enorme congelador de mi abuela y me comí dos panes congelados. Y ese fue mi desayuno.

Entonces volvimos a nuestra casa, con la abuelita Juanita y La Mamita, y mi madre ya tenía todo organizado allá.

Para hacer la historia corta, durante varios días las viejitas durmieron en la sala mientras la demás familia dormíamos en el jardín en carpas que nos enviaron de Nicaragua unos amigos de mis papas. Yo dormí con mi ropa a la mano durante casi tres años.

El terremoto de Guatemala, en 1976 costó más de 23,000 vidas.


18
Dic 06

Para Ripley: racismo y privilegios

“La sentencia de la Corte Suprema de Justicia, que en el 2005 decretó que a una persona juzgada por sistema indígena no se le puede volver a juzgar por el occidental, es el primer caso de reconocimiento del derecho maya.
Un hombre que fue acusado por la comunidad de haber robado un vehículo, pero que lo devolvió al ser descubierto, fue sentenciado por el sistema indígena a servicio comunitario y a reconocer su falta públicamente. Como era confeso, la Policía Nacional Civil lo detuvo, y el Ministerio Público pidió ocho años de cárcel para él.
Finalmente fue sentenciado por robo. La Defensa Pública Penal, asesorada por varias organizaciones, pelearon el proceso, y en casación, la Corte Suprema de Justicia dictaminó que si ya había sido juzgado por un sistema, no podía volver a ser acusado.
Esta resolución sentó un precedente legal sobre la legitimidad del derecho indígena y su coexistencia con el oficial”, dice un reportaje de hoy y las negritas son mías.
Hasta aquí llega, oficialmente, la igualdad de todos ante la ley en Guatemala. Como están las cosas, si alguien se roba un carro ¡y lo devuelve al ser descubierto!, tiene dos opciones: se acoge el sistema occidental y corre el riesgo de pasar 8 años en la cárcel, o se somete al drecho maya y hace algunas tareas indefinidas luego de pasar una vergüenza. Usted, ¿qué preferiría?
Pero la cosa no se queda ahi. ¿Puede, un ladron ladino someterse al derecho maya? ¿Cuánto de sangre maya debe tener uno para someterse a la opción más benigna? Si el derecho maya es sólo para los mayas, ¿viola el principio de igualdad de todos ante la ley? Si asi fuere, de plano que es un privilegio. Y si lo fuere, ¡es un privilegio basado en la étnia! En esas condiciones, ¿es un privilegio racista? ¿Es excluyente?
Yo digo que sí. Es excluyente, es racista, es un privilegio y viola el principio de igualdad de todos ante la ley. ¿Qué ladrón atrapado, en sus cinco sentidos, no quisiera recibir la pena más benigna? y ¿Qué pasará si el ladrón vuelve a ser atrapado robando, o cometiendo algún otro delito?
Si la práctica de este “derecho indígena” está siendo promovida por la embajada de Noruega y por la gente de Cirma, ¡y avalada por la Corte Suprema de Justicia!, la muerte oficial de la igualdad de todos ante la ley, en Guatemala, ya tiene responsables.