Apocalypto, censura y arrogancia

La censura de la película Apocalypto, en Guatemala, le será pedida al Ministerio de Cultura y Deportes por el comisionado presidencial contra la Discriminación y el Racismo, Ricardo Cajas. Así lo informa el diario Siglo Veintiuno en su edición de hoy, página 21.

La censura es una práctica totalitaria que consiste en que el gobierno prohiba la discusión, el conocimiento y la difusión de ciertos temas e ideas.

En su soberbia, este dirigente político cree que ustedes y yo no debemos ver Apocalypto. Cree que tiene la facultad de utilizar la fuerza de la ley para impedir que usted y yo veamos la película. Cree que usted y yo no tenemos la capacidad intelectual para entender dicha peli. O talvez es peor, talvez cree que allá afuera hay una masa inculta, a la que él debe proteger aunque para eso tenga que pasar sobre la libertad de expresión, la libertad de empresa y las libertades de ver, leer, oír y conocer.

Señor Cajas: la época en que los dirigentes podían sacrificar a sus gobernados ya terminó (o debería terminar). Ni la vida, ni el intelecto de los guatemaltecos, aunque sea de los guatemaltecos más sencillos, tienen por qué estar sometidas a los dictados de políticos arrogantes que se pavonéan en la cima de sus pirámides imaginarias.

La foto de arriba muestra prisioneros a los que se les han arrancado las uñas y una cabeza sin cuerpo. Corresponde al arte que decora uno de los edificios de la ciudad maya de Bonampak.

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6 comments

  1. Coincido con tu crítica. Se le está haciendo mucho rollo a la película. Los libros, historia, etc… es decir, fuentes serias como la arqueología, nos revelan un pasado maravilloso de los mayas, que incluye ceremonias de auto castigo, sangrados, etapas de sacrificios, decapitaciones… Q me dicen de los 17 niños sacrificados en Topoxté? total, es una muestra de la ignorancia de nosotros mismos ante nuestro pasado. Hay que ver las cosas en contexto, igual los mayas brillaron, innegable.Es chistoso… vetarán la película pero los libros, UN SOLO LIBRO nos habla de atrocidades mayores… irónico…

  2. Ridículo que quieran censurarla. Yo no la vi, francamente porque no me pareció muy interesante el tema, y porque ya Mel Gibson se ha vuelto un poco cansón… Pero de eso, a que quieran censurarla por no ser políticamente correcta me parece absurdo.Si tan ofensiva la encuentran, ¿Por qué no simplemente organizar un boycot? De esa manera pueden hacer valer su punto, sin necesidad de hacer uso del poder gubernamental para violar los derechos de otros.

  3. y hablando de censura… como esta eso de que necesito que vos aprobes mi comentario para que aparezca?!?!?!jajajaja…. te estoy chingando… me imagino que lo hiciste para bloquear spam… no para bloquear opiniones contarias a tu punto de vista…. verdaaaad???

  4. Con eso de la censura les ocurriría como a la Iglesia Católica cuando, en su oportunidad, evitó que pasaran por el cable La última tentación de Cristo. Al final todo el que quiso la vió de una forma u otra; y actualmente la están pasando de nuevo.Les pasará como a aquella organización cuando pedía la censura de El código Da Vinci. Nadie les va a hacer caso y van a quedar como su planta.Nota: Efectivamente controlo los comentarios para evitar el spam. Como se puede ver en algunas entradas, ni siquiera bloqueo los insultos de algunos lectores. Saludos.

  5. Tu arítuclo me ha inspirado un escrito sobre la censura.http://lacriticadejack.blogspot.comGracias por tu visita. espero con ansia tu enriquecedor comentario.Un saludo cordial

  6. Daniel Mercado

    Muy bueno el post. Estoy de acuerdo en que hay una mitificación romántica del indígena. De pronto ese pasado es sinónimo del paraíso, como si todo lo que el ser humano ha ganado en siglos de historia no valieran la pena.Felicidades por tu artículo.