25
Feb 19

La mesa servida para salir de Maduro

Durante este fin de semana el régimen de Nicolás Maduro -en Venezuela- usó gente común, hambrienta y desesperada, como carne de cañon y quemó seicientas toneladas de alimentos y medicinas que servirían para aliviar las angustias de quién sabe cuántos venezolanos.  Por lo menos dos personas murieron a manos de esbirros bolivarianos. En mi pueblo, y en cualquier lugar descente estos son crimenes de lesa humanidad.

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El desalmado espectáculo que ofrecieron los esbirros de Maduro (y herederos del chavismo) fue de tal magnitudo que ni siquiera Michelle Bachelet y la ONU pudieron permanecer ajenos a la barbarie.

El régimen de Maduro perdió la oportunidad agradecer el gesto humanitario, de hacerese con el contenido de la caravana, revisarlo, repartir su contenido, tomar fotos y vídeos de su ejército haciendo la repartición y viralizarlas.  Ese régimen es tan cafre que prefirió hacer lo que sabe hacer mejor: usar la violencia y el terror, contra la gente.

La dictadura se ha pintado como lo que es: una tiranía socialista como cualquiera otra de las de su clase. Y con los actos que vimos durante el fin de semana, Maduro le ha servido la mesa a una intervención que acabe con su régimen vesánico y criminal.

La intervención internacional, por cierto, no es buena, ni mala en sí misma.  Depende de cuál es su propósito y ante qué tipo de actos responde.  No es lo mismo una intervención para ayudar a un pueblo a sacudirse a los tiranos que lo están matando de hambre; que una interención para establecer un régimen autoritario, o totalitario. No es lo mismo una intevención para evitar crimenes contra la población civil por parte de los gobernantes; que una para manipular instituciones, legislación, elecciones y la justicia con tal de establecer un tipo de gobierno al margen de la voluntad de los votantes y de los tributarios.

“Sólo en el socialismo quemas cosas gratis enviadas para salvar a tu gente hambrienta”

En todo caso, delincuentes como Nicolás Maduro, Diosdado Cabello y los líderes de la Guardia Nacional y de la Policía Bolivariana que no se acojen a la amnistía ya están durando mucho.

Yo pensé que hoy lunes amanecíamos sin aquellos déspotas.  Tic, tac, tic, tac.


25
Ene 19

Venezuela libre, ya

Juan Guaidó, líder de la oposición en Venezuela, juró como Presidente interino en medio de enormes protestas contra el régimen de N. Maduro, D. Cabello y sus secuaces. Ya hubo muertos, heridos y torturados.

Si los altos mandos del ejército actúan responsablemente, es posible que los venezolanos logren sacudirse la tiranía en esta ocasión; pero ya está costando sangre.

¿Lo has notado? Las tiranías socialistas del siglo XXI no salen tan pacíficamente como se enquistan. Se van enraizando despacito, despacito.  Tomando el control de las instituciones ideologizándolas y politizándolas. Convirtiéndolas al activismo. Manipulando elecciones.  Ahí las ves legislando con paciencia para servir a sus intereses. Invisibilizando a los opositores, insultándolos, expropiándoles sus bienes cuando no encarcelándolos. La mayoría de la gente no se da cuenta de lo que ocurre porque las tiranías consienten a sus clientelas y echan a andar una maquinaria perversa de desinformación, loas, elegías y madrigales entre políticos, ONG, medios de comunicación, celebridades, academia, clero y redes sociales que se refuerzan unos a otros para que no se note que la tiranía se está arraigando.  Las garantías constitucionales y los derechos individuales van siendo erradicados tan poquito a poco que casi nadie lo nota como en la historia de las ranas y el agua caliente.

Y cuando despiertas: ¡Zas, ya es tarde! Pasaron lustros.  Es tan tarde que a la tiranía ya no se la puede arrancar si no es por la fuerza. Y entonces –como ha ocurrido en Venezuela, en Nicaragua y posiblemente tenga que ocurrir en Cuba– hay que salir a la calle y poner muertos.  Y los muertos son los jóvenes.  Los que nada tuvieron que ver con la siembra y el cultivo de la tiranía.  Por eso es que al socialismo hay que detenerlo a tiempo.  ¿Y cómo se le detiene? En la opinión pública y en las urnas.  Se le detiene identificándolo; y denunciándolo en los medios de comunicación, en las redes, en púlpitos, en la academia, en la casa y con los amigos.  Se le detiene persuadiendo. ¿Para qué? Para evitar que haya que derramar sangre. ¡Animo venezolanos, ánimo!

Columna publicada en elPeriódico; la ilustración la tomé de Facebook.

Actualización: Guaidó resultó un fiasco.


11
Dic 18

Torres, Morales, Mencos y la UNE

Sandra Torres -exesposa de Alvaro Colom- aspira por tercera vez a la Presidencia de la República.  En esta ocasión, la acompañan en su pretensión Carlos Raúl Morales, excanciller de las administraciones de Otto Pérez Molina y Jimmy Morales, como candidato vicepresidencial; y Carlos Mencos, ex Contralor General de Cuentas durante la administración de los Colom-Torres, como candidato a diputado.

Algunos de mis cuates, que saben de estas cosas, sostienen que Morales es un consentido del Departamento de Estado de los Estados Unidos.  No de la administración del secretario Mike Pompeo, sino del Deep State.  

Carlos Mencos fue dos veces congralor general y durante su administración fue notoriamente permisivo con el programa de cohesión social que dirigía Sandra Torres, programa que fue muy cuestionado.  En estos comicios será el gran elector -a favor de la UNE, sospecho- por medio del contralor interino y su facultad de entregar, o no finiquitos.

Torres parece de teflón y todo le resbala.  Salió limpia de Cohesión social, salió limpia del negocio del Transurbano y nada se le adhirió durante la crisis de mayo de 2006 en el contexto de las muertes de Rodrigo Rosenberg y Khalil y Marjorie Musa.  En aquel entonces los que saben de estas cosas tenían la impresión de que los Colom-Torres eran protegidos por la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (2006).  ¿Por qué? Porque el proyecto para Guatemala era más importante que la justicia, o que el estado de derecho.

Torres y la Unidad Nacional de la Esperanza son miembros importantes de la Internacional Socialista, dato importante si te preguntas cuál es aquel proyecto. Torres, además, tiene indiscutibles talentos políticos.  Se mueve con comodidad entre sus bases populares y populistas y se mueve con igual comodidad entre buena parte de la dirigencia empresarial del país vinculada al Comité Coordinador de Asociaciones Comerciales, Agrícolas, Industriales y Financieras.  Con tanto talento político y en sus conexiones, Sandra Torres puede aparecer como moderada y como una candidata con la que se pueden hacer arreglos.

Pero ya sabemos cómo es Sandra Torres en el poder; y quienes no lo sepan pueden consultar medios de comunicación durante su administración al lado de Alvaro Colom, de quien se divorció para buscar su candidatura presidencial.  Sabemos que la dirigencia de la UNE puede ser muy inescrupulosa y si alguien tiene dudas, que se pregunte por qué es que aquella dirigencia trató de sacar de los próximos comicios al partido Semilla, que sería su mayor competidor en el segmento socialista moderado en la contienda electoral. Sabemos que los Colom-Torres fueron capaces de irse a humillar a Cuba con tal de entregarle la Orden del Quetzal a Fidel Castro, y que este no los recibió.

De cualquier manera, da la impresión de que mientras que Thelma Aldana es la precandidata de algun sector empresarial, del establishment de los derechos humanos, de algunas ONG y de la CICIG (2018) y sus aliados; Sandra Torres lo es de otro sector empresarial, del Deep State, del socialismo moderado, de exfuncionarios y de grupos con experiencia populista.

A ver qué pasa, pues. ¿Le toca?

La foto es por Edgar Pocón, de elPeriódico.


07
Sep 18

Misticos de dos clases

¿Te das cuenta? La batalla por la libertad de todos ante la ley la perdimos hace ratos cuando -por no hacer olas con los cuates, o por no pensar en términos de principios- renunciamos a ella y dejamos que los conservadores y los socialistas hicieran suyos temas como los derechos de las mujeres y los de las minorías…y ¿recuerdas? la minoría más pequeña es…el individuo.

¿Qué tienen en común los conservadores y los socialistas, que terminaron juntos en el canasto de los adversarios de la igualdad de todos ante la ley? Como productos de la división entre el alma y el cuerpo del hombre, hay dos clases de maestros de la moralidad de la muerte: los místicos del espíritu y los místicos del músculo, a quienes ustedes llaman espirituales y materialistas, aquellos que creen en la conciencia sin existencia y aquellos que creen en la existencia sin conciencia. Ambos exigen la rendición de su mente, uno a sus revelaciones, el otro a sus reflejos. No importa cuán fuerte se postulen en el papel de antagonistas irreconciliables, sus códigos morales son parecidos, y también lo son sus objetivos: en la materia -la esclavización del cuerpo del hombre, en el espíritu- la destrucción de su mente, explicó Ayn Rand.  Ambos grupos creen que pueden imponerles sus valores y sus códigos morales a los demás, y ambos creen que los individuos no son dueños de sí mismos.  Unos creen que las personas le pertenecemos a su dios (cualquiera que este sea) y otros creen que le pertenecemos al estado; y ninguno de los dos cree que está mal usar el poder de la ley y del gobierno para legislar sobre cómo deberían vivir sus vidas los individuos.

Recientemente, unos quieren que se ejereza la coacción del estado sobre las mujeres que hayan abortado de forma culposa, o sea sin la intención de abortar, por razón de negligencia, imprudencia, o impericia; y quieren prohibir el matrimonio igualitario (virimonio, o femimonio) y quieren que se prohiban programas educativos sobre la diversidad sexual. En tanto que otros quieren imponer el matrimonio igualitario, la ideología de género y la posibilidad de abortar en las primeras 12 semanas de embarazo.

La debilidad de ambas posiciones es su perspectiva colectivista de los derechos (de las mujeres, de las minorías, como si no se tratara de derechos individuales); pero tienen debilidades particulares. Una debilidad de la primera posición es que, mediante la legislación, quiere ponerle un alto al largo proceso de prueba y error que tanto y tan bien ha descrito Friedrich A. Hayek; y al dinamismo que tanto y tan bien ha descrito Virginia Postrel.  Una debilidad de la segunda es que toma el atajo legislativo para remontar el largo proceso de prueba y error y el dinamismo, para implantar políticas y legislación para las cuales la sociedad todavía no está preparada.  Parafraseando a Miguel de Unamuno, en Salamanca, ambas prefieren vencer, que convencer.

En la tradición racionalista y constructivista que la caracteriza, la segunda posición (la mística del músculo, o socialista) -unida al uso y abuso del esperpento como recurso expresivo- no sólo ha estropeado la lucha legítima por los derechos de las mujeres y de las minorías, sino que han despertado al monstruo del conservadurismo religioso (que es el misticismo del espíritu.  Miles y miles se juntaron el domingo en la Plaza de la Constitución y calles adyacentes para dejar bien en claro que: ¡No pasarán! y que la evolución social y el dinamismo terminan donde ellos han plantado la cruz.

¿Y los que no somos de aquellas persuasiones?  Unos callan para no meneallo y para no ofender a sus amigos y parientes conservadores. ¿Y otros? Se enredan porque no piensan en términos de principios y no terminan de entender que lo que es caldo para el pollo, es caldo para el chunto, es decir, que no terminan de entender la idea radical de que las demás personas no son tu propiedad y que ese principio no sólo se aplica al comercio, sino en mataria de conciencia y de proyecto de vida. ¿Y los demás?  Pues aquí…viendo como se pierden oportunidades de oro y cómo podriamos perder la batalla por la igualdad de todos ante la ley,

Una versión abreviada de esta entrada fue publicada en mi columna en elPeriódico.; y la ilustración la tomé de Facebook.


01
Jul 18

En honor a las víctimas en Nicaragua

Una vigilia en honor a las víctimas del régimen sandinista de Daniel Ortega y Rosario Murillo, en Nicaragua, se celebró ayer en la ciudad de Guatemala.

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La actividad tuvo lugar en el Monumento a los Próceres de la Independencia de Centroamérica, conocido como El Obelisco; y aunque no pude asistir; si logré pasar a echar un par de bocinazos.

Para mí, la historia reciente de Nicaragua es particularmente triste y aleccionadora.  Salieron de una dictadura cuando yo estaba en Quinto bachillerato; se entregaron a la Revolución y al socialismo en manos de Daniel Ortega y el sandinismo con los efectos empobrecedores y corruptores propios de aquel tipo de regímenes; y luego de salir de los sandinistas (no sin que eso costara vidas humanas)  los hermanos nicas cayeron en una serie de gobiernos oportunistas, sin principios y no menos corruptos que sus antecesores, para caer -de nuevo y por voluntad propia- en manos de Ortega, el sandinismo y Murillo, a quienes entregaron la libertad a cambio de ilusiones, seguridad y estabilidad.  Ahora, los mas jóvenes ponen los muertos.

Al recordar a los muertos y otras víctimas de Ortega y Murillo, esta es una historia de la que los chapines deberíamos aprender más de una lección.


01
Jun 18

Managua, Nicaragua donde yo me enamoré

No es cierto, nunca he ido a Managua y ciertamente no me enamoré allá; pero cuando mi padre trabajaba para el Incae, él viajaba allá con frecuencia y a veces cantaba la canción que le da título a estas notas.  De Nicaragua nos vinieron las carpas después del terremoto del 76.  La diáspora nica, después del 79, me proveyó con buenos cuates y me encantan el queso frito y la semilla de jícaro.

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Escucha el podcast aquí.

Hace unos años, cuando leí que un empresario chapín decía que las condiciones para los negocios eran muy favorables en Nicaragua debido al consenso entre el sector privado y el régimen de Ortega/Murillo; y que estaba impresionado por la sofisticación, la cultura de diálogo, la seguridad y el respeto a la institucionalidad que había allá, pensé que si algo deberíamos haber aprendido –en el siglo XXI– acerca de las tiranías del siglo XX es que las del siglo nuevo eran iguales a las del pasado pero más aburridas, como dijo J.M. Aznar, porque ya sabíamos en qué terminaban.

En eso pensé cuando vi la manifestación de madres del miércoles pasado, y en aquello he pensado cuando he estado viendo que los jóvenes, que nada tuvieron que ver con la llegada de Ortega/Murillo al poder, son los que tienen que salir a la calle y darse en la madre con gorilas que disparan a matar para defender el régimen y la revolución.

Muchas personas son blandas con gentes como Ortega/Murillo cuando se pueden beneficiar del poder que ejercen y cuando ignoran el consejo de B. Franklin en el sentido de que “aquellos que renuncian a la libertad para comprar un poco de seguridad, no merecen libertad, ni seguridad, y acabarán perdiendo ambas”.

Lo malo es que ese pragmatismo, que cree que antes que estar del lado de los principios hay que estar del lado de “la historia”, nos lleva a todos entre las patas.  El pragmatismo que creyó que podía apaciguar y convivir con gente como Ortega/Murillo, o Maduro/Cabello, el que cree que podrá hacerlo con AMLO -y el que coquetea con Podemos, o Morena, o el chavismo- cuesta vidas de jóvenes cuando no queda otra que salir a las calles.

Columna publicada en elPeriódico.


17
May 18

Mis respetos a Lesther Alemán

Usted [Daniel Ortega] es el jefe supremo de la Policía Nacional y del Ejército de Nicaragua, por ello le pedimos que ahorita mismo ordene el cese de estos ataques, de la represión y de los asesinatos por parte de las fuerzas paramilitares, de sus tropas, de las turbas adeptas al gobierno, le increpó el jóven Lesther Alemán al tirano de Nicaragua, en su cara.  Para eso se necesitan arrestos.

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Esta no es una mesa de diálogo. Es una mesa para negociar su salida y lo sabe muy bien porque el pueblo es lo que ha solicitado, dijo Alemán, con voz firme, tras tomar la palabra durante la sesión de instalación del diálogo nacional que busca una salida a la crisis política que sacude aquel país centroamericano.

¿Por qué estoy hablando y por qué me salto la palabra suya?, preguntó Alemán, con coraje,  Porque nosotros hemos puesto los muertos, nosotros hemos puesto los desaparecidos, los que están secuestrados.

Presente se hallaba, también, Rosario Murillo, mujer de Ortega, tirana por derecho propio y vicepresidenta del país.

…y es cierto, cuando se instalan el socialismo del siglo XXI y la tiranía en un pueblo -como el de Nicaragua, como el de Venezuela- como cualquiera que escucha los cantos de sirena de la revolución, son los jóvenes los que ponen los muertos, los desaparecidos y los secuestrados.  No los ponen los adultos y los viejos que crearon el ambiente intelectual y cultural propicio para la revolución y la tiranía.  No los ponen los adultos y los viejos que agitaron en las calles y las plazas para pedir revolución.  No los ponen los viejos que llevaron a los tiranos al poder, no los que compartiron el poder con los revolucionarios.  Los muertos, los desaparecidos y los secuestrados salen de la generación que tuvo que crecer bajo la tiranía revolucionaria del socialismo.  Salen de los que no tuvieron responsabilidad alguna en llevar al poder a gente como Ortega, Murillo, Maduro y otros de su calaña.

En estas cosas hay que pensar cuando sales a la calle a pedir revolución, a pintar hoces y martillos y llevas tu playera del Che y agitas tu bandera roja. ¿Quién va a poner tus muertos?

¡Mis respetos para Lesther Alemán! y para todos los jóvenes nicaragüenses y venezolanos que se arriesgan para rescatar la libertad.


08
May 18

¿Por qué se van los chapines y no regresan?

El ingreso de divisas por remesas familiares creció en el primer trimestre de 2018.  Mientras tanto, en Guatemala el Indice de confianza en la actividad económica sigue en picada, igual que el crédito bancario al sector privado, y en contraste la tasa de desempleo, en los Estados Unidos de América, ha llegado a su nivel más bajo en 18 años. Guatemala aleja a su gente y los migrantes chapines, ¿qué incentivo tienen para regresar si allá las cosas van bien y aquí las cosas pintan mal?

De aquellas circunstancias me acordé cuando leí el arttículo titulado George Soros and the “Caravan”, publicado en The Wall Street Journal.

La “caravana” de centroamericanos en la frontera sur de Estados Unidos, que busca asilo, tiene a algunos conservadores retorciéndose las manos a causa de una invasión hispana. Deberían, en cambio, preguntarse qué hay detrás de la desestabilización de los países a los que han huido esos migrantes desesperados, dice la columnista, y miembro del Consejo Editorial del WSJ, Mary Anastasia O´Grady.

De forma certera, la autora apunta a que la corrupción, el estatismo y el capitalismo de amigos [el viejo y conocido mercantilismo] en América Central han conducido a la región a la pobreza y la exclusión. También, de forma certera, O´Grady señala que los liberales clásicos de la región entienden esta conexión y han luchado para fortalecer el estado de derecho. Pero sus esfuerzos se han visto socavados por las redes criminales de financiamiento del narcotráfico que agobian a las instituciones.

Muchas personas, en Guatemala, creyeron que el remedio contra aquel azote y el de otras mafias, iba a ser la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala; pero yo advertí, desde que esa comisión era discutida y se iba a llamar Comisión de Investigación de Cuerpos Ilegales y de Aparatos Clandestinos, que el concepto presentaba dos peligros: 1. Que los chapines abdicábamos a la responsabilidad de resolver nuestros problemas; y 2. Que un organo perseguidor, todopoderoso, era un peligro.  Y dicho, y hecho.

La columnista dice que existe evidencia sustancial de que la solución financiada por los EE. UU. para el problema en Guatemala [la CICIG], utilizando un fiscal de las Naciones Unidas, ha sido corrompida por actores sin escrúpulos y la por ideología izquierdista de Organización de las Naciones Unidas, y más razón no podría tener. A mí, por cierto, ya no me gusta usar izquierda y derecha porque son términos vacíos y su significado cambia dependiendo de los contextos.  Yo digo, para aclarar las cosas, que la solución ha sido corrompida por la ideología socialista de la ONU…y por los actores inescrupulosos.  Hace ratos sostengo que los guatemaltecos enfrentamos un project of nation buliding diseñado para llevarse a cabo sin la aprobación de los chapines en las urnas electorales y para mí es cada vez más evidente que se hace por medio de los organos jurisdiccionales (los tribunales y las cortes) y del manejo de la opinión pública a nivel de acuerdos entre oligarquías de todos los colores. Para aclarar las cosas la oligarquía es un grupo minoritario de personas, pertenecientes a un mismo estrato social, generalmente con gran poder e influencia, que dirige y controla una colectividad, o institución.

Algunas de esas oligarquías son ese montoncito de organizaciones no gubernamentales y operaciones mediáticas que trabajan en Guatemala y que están financiadas por la Open Society Foundations de George Soros y otros de esa persuación. En ese caso, sus instrucciones son rodear los vagones para defender al fiscal de la CICIG, Iván Velásquez, y destruir a quienes se atrevan cuestionarlos.

Los estadounidenses se están preguntando, con razón, por qué es que los Estados Unidos financian aquella operación de la ONU carente de responsabilidad y transparencia.  El caso que disparó las alarmas es el de la familia Bitkov, porque parece evidente de que esa familia es víctima de persecusión por parte de Vladimir Putin, por medio del banco estatal ruso VTB y parece evidente que la familia fue embaucada por una red de corrupción en Migración, el Renap y otras oficinas estatales de Guatemala.  Este no es espacio para los detalles; pero lee otras entradas al respecto y el artículo  George Soros and the “Caravan”.

En el, Mary Anastasia O´Grady concluye: En una declaración hecha ante la audiencia de la Comisión Helsinki, el Senador Mike Lee (R., Utah) señaló que, si bien la CICIG fue “creada para erradicar la corrupción y defender el estado de derecho”, se ha convertido en un árbitro extrajudicial, parcial e injusto . “Su politización es injusta para todos los que buscan una Guatemala libre y próspera”. Algo en lo que pensar cuando los autobuses llenos de refugiados llegan a la frontera [entre México y los EE.UU.].


01
May 18

¿Las hoces y martillos están guardadas?

¿Sabes qué me sorprendió? Al atardecer de hoy fui a la Sexta avenida y no encontré las usuales hoces y martillos, ni las usuales consignas de odio pintadas en las paredes.  Y se me ocurrió:

  1.  Los revolucionarios -los comunistas- ya no son bienvenidos, ni participan en la marcha del Día del trabajo…y luego me dije: Naaaaaaaa. No es eso.
  2. Alguien se robó las latas de pintura y los esténciles.  Naaaaa, tampoco.
  3. La dirigencia dispuso que este año no sean exhibidos aquellos símbolos ominosos. Y luego me acordé de que en la minimanifestación que organizaron algunos amigos de los revolucionarios el pasado 21 de abril, no aparecieron las usuales banderas rojas, ni las consignas de siempre. Me acordé que durante la celebración de la revolución de 1944, el año pasado, tampoco hubo hoces, ni martillos.

¿Hay una estrategia de esconder quiénes son, en realidad? ¿Será que las denuncias de Carpe Diem han tenido efecto?

Quién sabe…lo cierto es que esta evolución de los revolucionarios merece ser reconocida porque, ¿qué necesidad hay de celebrar con inmundicia?; pero más que todo porque las hoces y martillos son iconos de una ideología que ha costado 100 millones de muertos en sus cien años de historia. Muertos frente a pelotones de fusilamiento, en campos de concentración, por hambrunas, y así.

En este 1 de mayo, día que solía ser de hoces y martillos, te recomiendo:

Sospecho que los partidarios del socialismo real, del socialismo científico, del comunismo o como quieras llamar a aquella ideología colectivista y totalitaria, están haciendo esfuerzos por probar que ya no son peligro.  Sospecho que la intención es descalificar -mediante la invisibilidad- y en una especie de efecto Pigmalión, cualquier advertencia sobre lo peligrosa que es su influencia, sobre todo en momentos de crisis, de confusión, de incertidumbre y en río revuelto.

Entre nosotros y en otros ambientes, la mayor parte de aquella influencia la consiguen alla Gramsci; es decir, en el entendido de que toda revolución ha sido precedida por un intenso trabajo…de penetración cultural.  En ese campo las ideas revolucionarias pasan por arte, por ejemplo, y su carácter no se nota a simple vista.  Además, quien ¿quién quiere ser tachado de intolerante y de no valorar el arte, por ejemplo?  Pero en el campo político y en el campo social es otra cosa.  Las hoces y martillos, las banderas rojas, las estrellas amarillas, son símbolos inequívocos.  Significan muerte, tiranía, miseria, opresión y odio.  Como estrategia, los revolucionarios han hecho bien en esconderlas (bien para ellos); si quieren llegar al  poder sin pasar por las urnas (donde sólo unos pocos votan por ellos) y a fuerza de plaza, no les conviene darse color; pero a las víctimas potenciales -a todos los demás- no nos conviene olvidar que están ahí guardadas…esperando su momento.

Sin embargo, luego de publicar esta entrada, el lector, Osmar, me envío esta foto:

…y, entonces, no me queda más que suspirar.  No hubo tantas hoces y martillos como en otras ocasiones; y no las hubo en la Sexta avenida.  ¿Por qué? ¿Hay facciones que quieren poner sus símbolos de odio y muerte a cualquier costo y las hay que entienden que eso ensucia (como ensuciarían las esvásticas) cualquier apariencia legítima?


25
Abr 18

¿Todos somos Nicaragua? Yo si

¿Sábes qué es lo que me conmueve más cuando veo lo que está ocurriendo en Nicaragua? Los miles de jóvenes que con poco más que sus manos y piedras tienen que enfrentarse a las fuerzas de seguridad del estado, armadas hasta los dientes y sin escrúpulo alguno para disparar a matar.

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En Venezuela ha sido igual, luego de años de revolución, luego de pagar los costos materiales y psicológicos del socialismo, lo único que queda para salir de la pesadilla es que los jóvenes salgan a tratar de recuperar la libertad.  Esa libertad que muchos jóvenes, diez, o veinte años atrás, no dudaron en entregar a cambio de promesas y sortilegios. Esa libertad que muchos empresarios mercantilistas, diez, o vente años después, no dudaron en entregar a cambio de su complicidad.

Cuando veía a los jóvenes nicas desencantados no sólo porque no les hizo justicia la revolución, sino porque el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo se ha convertido en una dictadura asesina y corrupta, me acordé de una canción que dice Young ones everywhere, making music they can share. Young ones everywhere,/ touching hands to show they care./ Young ones everywhere,/ get the feeling in the air./ Young ones everywhere,/ miss somebody who’s not there. Y pensé que es una desgracia -para una generación- que la siguiente generación de jóvenes en vez de hacer música que pudan compartir, tengan que exponer sus vidas para escapar de la revolucion y la dictadura que les dejó la generacion que los precedió.

En lo que va de las jornadas que viven los nicaraüenses, el costo ha sido de 34 muertos, y quién sabe cuántos desaparecidos; y no sabemos cuál va a ser el costo total.

En ese contexto es muy apropiado que el símbolo de la lucha de los nicaragüenses y los jóvenes sea la demolición de los aberrantes árboles de la vida, de Ortega y Murillo.  Arboles muertos, que no dan vida, áboles que no dan frutos y que costaron millones de dólares.  Buenos símbolos del socialismo del siglo XXI, asesino y corrupto por donde se lo vea, y en donde se lo vea.

Mis respetos, mi admiración y mis mejores deseos a los jóvenes nicas que luchan, en las calles y donde sea, contra la tiranía.  Pero, ¡Aguas!, la lucha será inútil, y los muertos serán en vano, si la lucha se trata de cambiar una forma de dictadura, por otra.  La lucha será yerma sin no se tiene claro que el enemigo no es sólo el tirano del momento, sino las ideas que lo hacen posible, el sistema de incentivos perversos que crean los tiranos y que aprueban los electores, y la creencia de que el gobierno de la mayoría, y no los límites al poder, es lo que importa luego de deponer una dictadura.

¿Todos somos Nicaragua? Pues aquí y ahora, yo soy Nicaragua.