27
Jun 07

Un vistazo a La Encuesta

Hoy fue publicada La Encuesta, de Prensa Libre. Así, a ojo de buen cubero, sigue llamando la atención que después de tres campañas electorales seguidas Alvaro Colom ande volando bajo con 20.75%. Rigoberta Menchú, Premio Nobel de la Paz, dirigente indigenista y mujer de pelo en pecho, anda por 1.5%. Eso sí, siempre arriba de Miguel Angel Sandoval y Pablo Monsanto, que después de 35 años de ejercer el terrorismo y de 10 de vivir de los Acuerdos de Paz, entre los dos a duras penas arañan un 0.33%.

Yo creía que el efecto Cayo Castillo iba a tener más peso en los resultados que obtuvo el de la mano dura; pero Otto Pérez Molina anda por 12.25. Alejandro Giammattei, el candidato oficial, obtuvo un magro 8.7 que no debería parecer extraño ya que la gente se ha de preguntar: ¿cómo se atreven a ofrecer lo que no han podido cumplir?

Mi candidato, el voto nulo, no está para celebración alguna ya que sólo llega a 1.58, que sumado a los 0.92 del voto en blanco y al 3.17 de los que talvez no voten, llega a 5.67%.


19
Jun 07

El gobierno como monopolio del poder

“El gobierno no es sino el monopolio del poder; a quien o a quienes llegan, les estamos dando la capacidad de utilizar la fuerza y la coacción. Emplear todo eso para promover intereses particulares tiene graves consecuencias”, dice mi amigo y maestro, Julio César De León Barbero en una entrevista que publicó hoy el suplemento Tribuna, de Prensa Libre.

De León comparte otras ideas útiles para el elector y para el tributario en tiempos de elecciones:

Si quisiéramos erradicar la corrupción, se debería impedir a los gobernantes, a todo nivel, precisamente promover intereses particulares.

Nada más equivocado que poner la confianza no en la ley y el derecho, sino en el carácter o el estado de ánimo de alguien.

Necesitamos una mayor madurez cívica: abandonar el estado de infantilidad, en el cual el ciudadano ve al Gobierno como papá.

La vida nos ha sido dada, pero cada uno tiene la harta obligación de mejorarla, siendo productivos, y no esperando que a costillas de otros yo pueda mejorar mi propia calidad y mis propias condiciones de vida.

El filósofo español José Ortega y Gasset se quejaba, a principios del siglo 20: “No hay partidos alrededor de una idea, hay agrupaciones alrededor de un jefe”. Yo cambiaría la palabra por cacique, y ya estamos en Guatemala.

Foto por Prensa Libre.


12
Jun 07

¿Y el sacerdocio maya?

Cuando conocí a al candidato presidencial Alvaro Colom, por medio del proyecto Visión Guatemala, él todavía no era candidato; y presumía mucho de ser sacerdote maya. Así fue durante mucho tiempo; pero ya no lo hace más. Ni lo menciona, siquiera.

Hoy, por ejemplo, Prensa Libre publica una entrevista con él y se habla de que ha sido empresario y funcionario y candidato presidencial tres veces. Pero nada, nada, de su sacerdocio maya. ¿Por qué será?


12
Jun 07

En mi barrio, no; pero en el tuyo, sí

Hoy, en la sección de Opinión de los lectores, de Prensa Libre, una lectora que vive en la zona 1 y final de la zona 2 se queja de que “nos hemos visto afectados porque todos los días tenemos que soportar escándalos de trabajadoras del sexo”. La lectora le pide al alcalde Arzú, que cree “zonas rojas”.

“Es urgente que se coloque a las trabajadoras del sexo en áreas específicas, y que ya no se siga contaminando el Centro Histórico”, dice la lectora en cuestión.

¡Ay juer!, digo yo. La lectora no quiere a las prostitutas en su barrio y quiere que las “coloquen” en el barrio de otros. ¿Qué tendrá en mente la lectora? ¿Qué “manden” a las meretrices a la zona 3, a la zona 6, a la zona 9, a la 14, a la 15, o a la 21? ¿O qué querrá? ¿Que las manden lejos, lejos, lejos, a algún paraje desabitado?

La nota me pareció de mal gusto porque como a la lectora no le gustan las ménades, no le importa sugerir que se las “coloquen” a otros. Por otro lado, si las peperechas causan escándalos pues lo que corresponde es pedirles que cesen y desistan de esa conducta. Pero creo que está mal eso de perseguirlas e impedir que ejerzan su comercio en paz.

No pongo enlace a la nota en cuestión porque no está en prensalibre.com.gt; pero en el diario impreso se halla en la página 17.

La foto la tomé de leforo.com


12
May 07

Feliz, como una lombriz

1. En 1972 el rey de Bután decidió hacer de la Felicidad Nacional Bruta la prioridad de su país; y cuando leí aquella noticia, en The New York Times que publica Prensa Libre, pensé: De plano que es un truco publicitario para atraer al turismo New Age, y a imitadores de George Harrison, el ex Beatle que se volvió budista.

Sin embargo resulta que no. Algunos científicos sociales, economistas, y burócratas decidieron entrarle en serio a la investigación de la felicidad mediante el uso de encuestas y en el caso de la Subjective Well-Being Rankings of 82 Societies, de World Values Survey, uno se entera de que México ranquea en 4.32; El Salvador lo hace en 3.67 y que Perú está en 1.32. Puerto Rico ranquea alto en 4.67, e Indonesia ranquea bajo en -2.4. Guatemala no está incluida en el estudio.

Me hubiera gustado saber en qué rango está Guatemala, debido a que entre mis inclinaciones epicúreas, hedonistas y sibaritas considero que el derecho a la búsqueda de la felicidad es el más importante de los derechos individuales. Me adhiero plenamente a la frase de Ayn Rand, que dice que “El propósito de la moral es enseñarte, no a morir y a sufrir; sino a disfrutar y a vivir”.

Aquí hay que hacer un alto y tomar en cuenta algunos detalles que importantes: 1. las encuestas son instrumentos burdos para la exploración de la psique de las personas; 2. La noción de felicidad es algo muy personal; y 3. Las palabras feliz y felicidad no se traducen en forma directamente proporcional de un lenguaje a otro, y en todo caso expresan expectativas culturales e ideales que no son universales. Entonces, ¿no resulta muy subjetiva la medición del bienestar subjetivo?

Aquellos temas los explora el estudio In Pursuit of Happiness Research. Is it Reliable? What Does It Imply for Policy?, elaborado por Will Wilkinson, del Cato Institute; y tienen importancia actual porque en el ambiente electoral chapín, no falta quienes crean que las políticas públicas que apuntan al socialismo, son más efectivas que las políticas públicas capitalistas, en cuanto a favorecer aquella búsqueda.

La gente tiende a creer que el capitalismo “materialista” hace infelices a las personas; pero la evidencia muestra la libertad económica está fuertemente relacionada con niveles altos de felicidad. Para probar esto, Willkinson muestra los resultados del estudio Economic Policy and the Level of Self –Perceived Well-Being, por Ovasaka y Takashima.

Aquellos resultados “sugieren que la gente se preocupa, inconfundiblemente, acerca del grado en el que la sociedad en la que vive le provee de las oportunidades y de la libertad necesarias para emprender nuevos proyectos y para tomar decisiones basadas en sus propias preferencias”.

Hay verdades que se nos olvidan y que Willkinson nos recuerda con gracia: “Si usted quiere personas menos materialistas, cree más cosas materiales disponibles para ellas, de modo que puedan dejar de preocuparse tanto por lo material y empiecen a preocuparse por cosas como la felicidad y el significado de la vida”.

En conclusión: hay más posibilidades de encontrar la felicidad cuando tenemos libertad para elegir de acuerdo con nuestras preferencias, que cuando legisladores, burócratas e ingenieros sociales diseñan lo que debería hacernos felices.

2. Por error paré en la 8ª. Avenida de la Zona 1 el viernes pasado; y me llevé una sorpresa agradable al ver que en el sector por el que andaba los vecinos han pintado sus casas y han puesto macetas en los balcones. El área se ve muy agradable. Ojala que los cambios hayan sido voluntarios, y no bajo algún tipo de coacción.

3. Desde que leí un titularcito que decía Derrota al socialismo, aquí en Prensa Libre, he notado un silencio ensordecedor entre mis colegas. Claro que en Francia todavía están pendientes las elecciones parlamentarias de junio, y ahí se definirá todo. Empero, es un buen momento para ver el documental Heaven on Earth, The Rise and Fall of Socialism, que está disponible en Take One, la tienda de vídeos de Futeca, en la zona 14.

Publicada en Prensa Libre el sábado 12 de mayo de 2007


05
May 07

La mera historia

En 1519 el uei tlatoani, Moctezuma, se enteró de que Quetzalcoatl había vuelto; y con él, vio venir el fin de su imperio.

Claro que el que venía no era Quetzalcoatl; sino Hernán Cortés, a quien los pueblos de Cempoala y Tlaxcala vieron como su libertador frente a la tiranía mexica que los hacía fuentes de tributos onerosos y de carne para sacrificios humanos.

Por eso es que los pueblos sojuzgados de Mesoamérica se aliaron con los invasores en la empresa de conquistar el área para la cristiandad y para la corona española. Los tlaxcaltecas ayudaron a Pedro de Alvarado en la primera incursión hispánica en Guatemala; los cakchiqueles se aliaron a los españoles contra sus opresores quichés; y los quauhquecholtecas fueron socios y protagonistas de la conquista definitiva de este Goathimala, junto a Jorge de Alvarado.

La historia de aquella aventura fue relatada por los co-conquistadores de este país en un lienzo y el objetivo del mismo era relatarle y probarle a Carlos I que las fuerzas militares de los quauhquecholtecas habían participado en la conquista en igualdad de condiciones con sus socios ibéricos.

Durante años el lienzo ha estado en el Museo Casa del Alfeñique, en Puebla; y ahora una copia extraordinaria, acompañada por una presentación de primera, está a disposición de los guatemaltecos bajo la Plaza de la Libertad, en la Universidad Francisco Marroquín. La restauración digital del Lienzo y su presentación audiovisual se basan en la tesis doctoral y en el libro Conquered Conquerors de la arqueóloga Florine Asselbergs, complementada con estudios efectuados por la UFM.

El lienzo es un mapa geográfico vivo cuya presentación se hacía acompañada por el relato oral que no sólo representaba características territoriales, sino que contaba una historia. Por eso es que al seguir la gesta en el Lienzo de Quauhquechollan, el observador es involucrado en los acontecimientos. Personajes, lugares, batallas, encuentros, acuerdos, ahorcamientos y actividades como el espionaje están perfectamente descritos e identificados.

Lugares tan familiarmente actuales para los chapines, como San Martín Zapotitlán, donde ahora está el parque Xetulul; o Quetzaltenango, que era famoso por su mercado de plumas, se encuentran fácilmente en el Lienzo. Igual cosa ocurre con Amatitlán, Escuintla, Ciudad Vieja, Cobán, y Huehuetenango, entre otros.

Rico en detalles sobre accidentes geográficos y sobre la naturaleza del país, quien recorre el camino de la conquista, de la mano de los quauhquecholtecas, encuentra ríos caudalosos y volcanes en erupción, así como pinos, piñas y ceibas.

Llaman la atención las barricadas que bloquean carreteras, las temibles trampas de varas afiladas al estilo Vietnam, y el hecho de que los quauhquecholtecas se pintan a sí mismos de color blanco, como sus aliados españoles, en tanto que pintan a los quichés, cakchiqueles, pocomames, pipiles y quekchies conquistados, de color oscuro. Algunos detalles, como los ataques de perros, dan escalofríos.

Son impresionantes los detalles con los que están pintados los ricos atuendos de los caciques y el armamento que usaban los diferentes ejércitos tanto indígenas como españoles. Destacan las insignias de las casas nobles y las de las prestigiosas órdenes militares de los conquistadores quauhquecholtecas.

El lienzo también es rico en elementos culturales más pacíficos como danzas, rituales y mercados, por ejemplo.

La presencia de esta restauración digital en Guatemala ha sido posible gracias a un uso intenso de la tecnología. Uso que nos permite enfrentar mejor el reto intelectual de aclarar y comprender nuestra historia por medio de la comprensión de la naturaleza de la acción humana.

En aquella tareas, ha sido muy feliz la conjunción de la UFM, de la Casa del Alfeñique, y del Banco G&T Continental.

Publicada en Prensa Libre el sábado 5 de mayo de 2007


29
Abr 07

¿Voto, o no voto?, ¿Voto, o no voto?

Mientras deshojo la margarita, pienso: ¿Voto, o no voto? Pero no en el sentido de realmente no ir a votar. Mis opciones son: ¿Le doy mi voto a alguien, o voto nulo? Es que se me hace cuesta arriba plegarme a las posibilidades que me dan. ¡Quiero mejores opciones!

Por si me hicieran falta, ayer, Margarita Chojolán, lectora de Prensa Libre, me dio más razones para rechazar el sistema y votar nulo en las condiciones particulares de estos comicios, lo que quiere decir que en otras condiciones podría tomar otra decisión:

“Es penoso ver cómo los diversos partidos políticos están empeñados en ensuciar y contaminar el paisaje guatemalteco, con pintas en piedras, banquetas, postes, árboles y todo lo que encuentran.

Ojalá después de las elecciones quiten esos rótulos, y así como han invertido en pintar, que también gasten en despintar.

Nuestro país está promoviendo el turismo como fuente de ingresos, pero no creo que sea motivador para quienes viajan a Guatemala encontrar ese paisaje multicolor y grotesco.

Con esa actitud, los partidos políticos solamente demuestran “cuánto aman a Guatemala”. Y si así es la víspera, cómo será la fiesta.

Con cualquiera que llegue al poder, estaremos a merced de personas que no saben de respeto a la población, la propiedad privada y, mucho menos, de contaminación visual. Todavía no han entendido de que con pintas no convencerán al electorado”.


28
Abr 07

El Obispo

Cuando el 26 de abril de 1998 ocurrió el ominoso asesinato del obispo Juan Gerardi, yo estudiaba en la University of Maryland y pasé la vergüenza de haber llegado de un país en el que ocurrían esas cosas. Y la vergüenza parece no terminar nunca.

A nueve años de aquel crimen, los autores del asesinato siguen libres, mientras que guarda prisión y silencio la única persona que seguramente sabe exactamente qué ocurrió en aquella noche fatídica; y están presas personas a las que se les acusa de estar involucradas indirectamente. Había un tercer preso; pero Obdulio Villanueva fue asesinado en febrero de 2003 durante un motín carcelario. Para él, nunca habrá justicia.

El 24 de abril pasado la Corte de Constitucionalidad ratificó la sentencia de 20 años contra Mario Orantes, Byron Lima Oliva y Byron Lima Estrada.

El caso de Gerardi siempre me da escalofríos porque prueba que la malignidad existe y que anda suelta por ahí. Y si a usted le hacen falta pruebas de que existe lo siniestro, seguramente querrá leer Quién mató al obispo, la obra de los periodistas Maite Rico y Bertrand de la Grange que pone al descubierto las conspiraciones y enredos alrededor del citado asesinato.

En este aniversario lamentable, cuando los verdaderos asesinos todavía andan sueltos, y mientras todavía se urden quién sabe que maquinaciones oscuras para que no se resuelva el caso, comparto con ustedes algunos párrafos de la obra citada.

“Las únicas sorpresas del juicio fueron el cúmulo de irregularidades, desde los falsos testimonios a la manipulación de las actas. A falta de pruebas, los testigos brotaban por arte de magia e iban llenando los huecos del rompecabezas, como siguiendo un macabro guión. Nada importaba que fueran tipos venales, marginales sin credibilidad o delincuentes: se les tomaba declaración y se les enviaba al extranjero sin más trámite ni comprobación”.

“Lo más desolador es que los asesinos de Gerardi andan libres y que los cerebros de la conspiración retomaron sus posiciones de poder”.

“Para mí no es creíble que Estados Unidos no tenga toda la información sobre el caso, y a pesar de eso, su embajador protestó cuando la sala de apelaciones anuló el primer fallo y ordenó un nuevo juicio”.

“Los que no tienen nada de ingenuos son los de la ONU, Ellos dieron un seguimiento milimétrico a la investigación. A pesar de todo, obviaron las inconsistencias manifiestas, los testimonios fabricados y las incontables aberraciones”.

“En una primera lectura, era lógico pensar que el ejército hubiese decidido vengarse de Gerardi. El problema es que cuando aparecieron las primeras pruebas de la participación de Mario Orantes ya era tarde”.

“El problema es que hay demasiados intereses en juego. La gran paradoja es que los mismos que traman la muerte de Gerardi, se sirven de los colaboradores del obispo para lograr sus objetivos”.

“Todo este proceso recuerda el caso de Alfred Dreyfus, el capitán francés que fue condenado a cadena perpetua por un asunto de espionaje a finales del siglo XIX. La vida política francesa estaba envenenada por el antisemitismo y Dreyfus era judío. Como no había pruebas, fabricaron documentos falsos y recurrieron a testigos dudosos”.

A final de cuentas queda en evidencia, otra vez, que el estado guatemalteco es incapaz de velar por la seguridad de sus habitantes y de garantizar una administración de justicia pronta y cumplida. El estado, sin embargo, negocia con chantajistas y en medio de una insufrible corrección política hace parecer legítimas hasta las más absurdas y abusivas pretensiones de los grupos de interés.

Y mientras tanto, en el marco del ignominioso caso Gerardi, algunos de aquellos grupos de interés se benefician de la memoria del obispo asesinado, en tanto que sus ejecutores andan sueltos.

Publicado en Prensa Libre el sábado 28 de abril de 2007


20
Abr 07

Nos vamos a quedar solitos

Alguien propone hoy, en las cartas de los lectores en Prensa Libre, que se regule el ingreso de los turistas pobres a Guatemala, porque no tienen dinero y regatean. Hace poco, el director de Migración, con la bendición del Congreso, prohibió la entrada de el autodenominado Anticristo. Pocos saben que para un indio, o un paquistaní, es prácticamente imposible conseguir una visa para ingresar a Guatemala. Si seguimos así, nos vamos a quedar solitos. Pero, ¿quiénes?


19
Abr 07

En la bola de cristal

Leo, en Prensa Libre, que para los comicios de septiembre próximo el Tribunal Supremo Electoral colocará más de siete mil nuevas mesas de votación; algunas en caseríos y aldeas donde nunca antes se habían instalado urnas.

Le echo un ojo a la bola de cristal y me atrevo a decir que el porcentaje de votantes no crecerá y que el esfuerzo será peligroso cuando no inutil.

Inutil porque “no es que como Mahoma no va a la montaña, la montaña tenga que venir a Mahoma”. La gente no vota porque no hay por quien votar. Los candidatos actuales y sus supuestas plataformas no se distinguen unos de otros. No ofrecen más que lo mismo. No tienen credibilidad, ni liderazgo. Cada vez hay más gente que se da cuenta de que “lo importante no es cambiar al piloto, sino que es necesario cambiar al pichirilo”. El sistema es el que está podrido y aunque a la gente le lleven la urna a su casa, la gente se pregunta ¿vale la pena?

Peligroso, porque siempre recuerdo una conversación que escuché cuando tenía unos 13, o 14 años. Este grupo de personas contaban cómo es que en las fincas y en los caseríos se hacían tremendos fraudes. Como se anulaban votos, como se perdían urnas, y cómo se engañaba a la gente.

Las elecciones, en los últimos años, han sido limpias y transparentes, no porque la gente haya adquirido “conciencia democrática”, sino porque hacer fraude se ha hecho difícil. Especialmente en aquellos rincones del país que más parecen feudos que otra cosa. En fin, a lo mejor mi bola de cristal y yo nos equivocamos. Pero no está de más prevenir, ¿o no?