21
Ago 07

La hormiga y la cigarra en versión chapina

La de la hormiga y la cigarra es una fábula de tradición clásica; pero gracias al cuate Gustavo, he aquí una versión chapina. A ver si no…

La versión clásica:
La hormiga trabaja a brazo partido todo el verano bajo un calor aplastante.Construye su casa y se aprovisiona de víveres para el invierno. La cigarra piensa que la hormiga es tonta y se pasa el verano riendo, bailando y jugando.

Cuando llega el invierno, la hormiga se refugia en su casita donde tiene todo lo que le hace falta hasta la primavera.

La cigarra tiritando, sin comida y sin cobijo, pasa frío y penurias.

La versión chapina:
La hormiga trabaja a brazo partido todo el verano bajo un calor aplastante.

Construye su casa y se aprovisiona de víveres para el invierno.

La cigarra piensa que la hormiga es tonta y se pasa el verano riendo, bailando y jugando.

Cuando llega el invierno, la hormiga se refugia en su casita dondetiene todo lo que le hace falta hasta la primavera.

La cigarra tiritando organiza una rueda de prensa en la que se pregunta por qué la hormiga tiene derecho a vivienda y comida cuando quiere,cuando hay otros, con menos suerte que ella, que tienen frío y hambre.

En la televisión se transmite un programa en vivo en el que la cigarra sale pasando frío y calamidades y a la vez muestran extractos del video dela hormiga bien calentita en su casa y con la mesa llena de comida.

Los chapines se sorprenden de que en un país tan próspero como el suyo se deje sufrir a la pobre cigarra mientras que hay otros que viven en la abundancia.Una multitud de ONG; observadores del las embajadas de Noruega, Holanda, Suecia, Cuba, Venezuela y de otros “países amigos”; el Procurador de los Derechos Humanos; el diputado Baldizón; y otros se manifiestan delante de la casa de la hormiga.

Varios periodistas publican una serie de reportajes en los que cuestionan como la hormiga se ha enriquecido a espaldas de la cigarra, e instan al gobierno a que leaumente los impuestos de la hormiga de forma que la cigarra pueda vivir mejor.

Respondiendo a las encuestas de opinión y a los reportajes, el gobierno elabora una ley la igualdad económica y una ley con carácter retroactivo, anti-discriminación.

Los impuestos de la hormiga han aumentado y además le llega una multaporque no contrató a la cigarra como ayudante en el verano. Las autoridades embargan la casa de la hormiga, ya que esta no tiene suficiente dinero para pagar la multa y los impuestos.

La hormiga se va de Guatemala y se instala con éxito en otro lado.

La televisión transmite un reportaje en el que sale la cigarra con sobrepeso; pero pasando hambre ya que se ha comido casi todo lo que había, mucho antes de que lleguela primavera.

La antigua casa de la hormiga se convierte en albergue social para cigarras y se deteriora al no hacer su inquilino nada para mantenerla en buen estado.

Al gobierno se le reprocha porque no aporta los recursos necesarios.

Una comisión de investigación que costará 100 millones de quetzales se pone en marcha; y algunos se preguntan si este no es un caso para que lo investigue también la CICIG.

Entretanto la cigarra muere de una sobredosis . Los medios de comunicación comentan el fracaso del gobierno para corregir el problema de las desigualdades sociales.La casa es ocupada por una banda de arañas inmigrantes. El gobierno se felicita por la diversidad cultural de Guatemala.


09
Mar 07

¿Cada vez más pobres?

Carlos Marx estimaba que los proletarios, cada vez más empobrecidos a causa del capitalismo, iban a iniciar la revolución y a establecer la dictadura del proletariado. Como nunca hubo tal empobrecimiento, nadie se animaba a iniciar una revolución; entonces, a Lenin se le ocurrió que la vanguardia del proletariado (él y sus cuates) harían la revolución y establecerían la dictadura.

Años mas tarde, los socialistas estimaron que la globalización ha empobrecido a las masas; y cómo donde hubo fuego, cenizas quedan, no falta quién crea que se aproxima el momento para la revolución.

La pregunta, sin embargo, es: ¿Es cierto que cada vez hay más pobres? Para contestar, sugiero que le echemos un ojo a la realidad, basándonos en los hechos.

Gracias a Juan Carlos, por la pista.


06
Mar 07

¿Cómo hacemos para salir de pobres?

El problema, para los pobres de todo el mundo, es cómo mejorar su nivel de vida. Cómo hacer para que los niños no se mueran antes de cumplir los tres años por un resfriado, o por diarrea. Cómo hacer para no sólo tener lo mínimo necesario para sobrevivir, sino que, además, gozar de cosas de menor prioridad e incluso de cosas superfluas.

En la tradición de La filosofía de la libertad, aquí les va la animación de Cómo mejorar el nivel de vida.


26
Ene 07

Dilbert y la ONU

Con respecto a este tema me atrevo a recomendar dos libros: Lords of Poverty, the power prestige and corruption of the international aid business, por Graham Hancock; y El espejismo humanitario, la especie solidaria al descubierto; por Jordi Raich.

Este último no está disponible ahora mismo en Amazon; pero recuerdo haberlo comprado en Sophos, talvez todavía lo tengan ahí.
El chiste es de http://www.unitedmedia.com/comics/dilbert/


14
Oct 06

Hermano lejano

En San Salvador me causó gracia, y algo de ternura, un monumento que allá llaman Al hermano lejano; y en Nuestro Salvador, en Nueva York, el presidente Oscar Berger fue a recibir palo de parte de los chapines lejanos.

“Es lamentable ver a los adolescentes arriesgando su vida porque en Guatemala no encontraron apoyo”, dijo una migrante. “Nos damos cuenta de que la mayoría de promesas que con entusiasmo nos hiciera han quedado insatisfechas”, expresó otra.

Por su parte, Berger les dijo a los migrantes que “ustedes son héroes, no sólo por los $ 3 mil millones de divisas que le dan al país al año, sino por el ejemplo de lucha”; a lo que un migrante le respondió que “los héroes, como usted nos nombra, necesitamos un pronunciamiento más fuerte”. Los migrantes no quieren que Berger respalde la propuesta de “trabajos temporales”, del presidente George Bush.

Berger es tan bueno que, como aquel personaje de Quevedo, salió de la Gran Manzana acompañado por doscientos cardenales.

La paliza, claro, no fue del todo inmerecida. En el mundo, unas 200 millones de personas, o sea el 3% de la población del Globo ha salido de sus países y envían a ellos unos $ 250 mil millones en remesas, según estimaciones del banco mundial. “Las remesas son la más grande fuente de financiamiento externo para los países en desarrollo”, dijo Dilip Ratha, del World Bank, citado por un artículo publicado en Investor´s Business Daily, publicado el 15 de septiembre pasado.

Pero aquí viene lo bueno. El artículo citado cuenta que Kofi Annan acaba de decir que “los gobiernos están empezando a ver a la migración internacional a través del prisma de la oportunidad, en vez de hacerlo a través del prisma del miedo”, en el supuesto de que la emigración beneficia a los países desarrollados.

La tesis del artículo es que si bien es cierto que algunos gobiernos se benefician de la migración, estos no son los que Annan supone. ¡Los que se benefician de la migración son los gobiernos miserables del Tercer Mundo!

En países como Guatemala, la migración sustituye a las oportunidades económicas; y los gobiernos malos disfrutan de las remesas como una recompensa para su mala administración. Las remesas engrosan las reservas internacionales y tienen efectos parecidos a los ingresos por exportaciones y por turismo: le permiten al gobierno seguir gastando dinero.

Por eso, dice el artículo, es que en México las remesas han alcanzado cifras record, algunas veces excediendo los montos de la inversión extranjera y drenando a los talentos del los países que generan migrantes.

“Tanto en México como en las Filipinas [y ahora en Guatemala] los gobiernos califican de héroes a sus trabajadores en el exterior”, dice el artículo, y anota que el presidente de Ghana le agradeció a sus trabajadores migrantes por las remesas que envían. 21% de los filipinos, que generarán cerca de $12 mil millones en remesas en 2006, consideran que su gobierno es “totalmente sin esperanzas”; ¿Qué pensarán los emigrados chapines que producen $3 mil millones?

Zimbabwe tiene 80% de desempleo, 1,200% de inflación y 90% de sus graduados universitarios viven en el exterior. Las remesas son lo único que mantiene a flote el odioso régimen marxista de Robert Mugabe. La mitad de la población depende de las remesas y algunos Zimbabweses le han dicho, a la prensa local, que sin las remesas ellos se morirían.

Según información de Reuters, la ONU parece creer que Occidente tiene el deber de procurarle un empleo a cada ciudadano de aquellos países cuyos gobiernos han colapsado y que se rehúsan a facilitar el desarrollo y la creación de riqueza para sus habitantes. “Esto es, esencialmente, una transferencia de riqueza de parte de Occidente hacia países fracasados a los que les importa poco el desarrollo económico y los derechos individuales”, dice el análisis de Investor´s.

¿Quién se beneficia netamente de la migración? Gobiernos miserables como los de México, Filipinas, Ghana, Zimbabwe, Ecuador, El Salvador y Guatemala.


14
Oct 06

Otra Guatemala

Para la perpetuación de la miseria en Guatemala, el legado de la Revolución del 44 sigue siendo la plataforma de la izquierda y de los populistas chapines.

Aquel proceso está asociado a calamidades como la reforma agraria (una cruzada contra el derecho a la propiedad), el Código de Trabajo (y a la muerte del derecho de trabajo), la educación pública (y la negación del derecho de los padres a elegir la educación para sus hijos), y la seguridad social (o sea al monopolio y el empobrecimiento de las clases pasivas).

Una tarea permanente de las izquierdas, y de los populistas, ha sido la recuperación de aquella plataforma nefasta. De ahí la guerra, con sus asesinatos, secuestros y extorsiones, llevada a cabo por las guerrillas marxistas leninistas durante 36 años. La firma de los Acuerdos de Paz pretendió detener aquella historia de terror; pero como los acuerdos eran ilegítimos y las izquierdas no alcanzan sus objetivos de poder, la paz sigue postergada.

La criminalidad, la impunidad, los abusos, el racismo y la pobreza de millones de personas siguen caracterizando la polarizada realidad nacional. El Estado, colapsado y totalmente carente de autoridad moral, ha sido engordado por redes de corrupción y de grupos de interés. Las formas de opresión clasistas y etnicistas se han convertido en relaciones de muerte.

Las elites dominantes y sus socios, los exguerrilleros, persisten en usurpar el Estado para preservar sus privilegios. No están dispuestos a perder el control del gobierno y vuelven a abusar de su poder con el continuismo de políticas que concentran la inversión pública para sus proyectos, abusan de la ingenuidad de los tributarios, saquean los recursos naturales y violan los derechos individuales y la igualdad de todos ante la ley.

La soberanía agoniza frente a procónsules europeos, norteamericanos, sudamericanos y de organizaciones internacionales que favorecen sus intereses y los de su clientela local.

Un régimen que basa su funcionalidad en la impunidad y en la ignorancia pretende sellar en piedra un modelo socialista que profundiza los mismos problemas estructurales. La juventud, la población migrante y la mayoría de familias sienten como nunca el impacto de aquel sistema que cierra los caminos para vivir en paz. Hoy se desbordan el crimen organizado y la inseguridad ciudadana. El Estado es cebado por alianzas mafiosas que ejercen control sobre áreas extensas del territorio nacional.

Guatemala necesita un cambio de dirección. Nuestra nación reclama con urgencia una reforma profunda del Estado con la participación cívica de todos los individuos que respetan la vida y la libertad. Guatemala exige acción de parte suya, lector, para detener aquel sistema perverso de poder.

Es el momento de convocar a una alianza que se base en una propuesta coherente, en la que quepan todos menos aquellos que hayan sido parte de actos terroristas y violatorios de los derechos individuales, o violatorios de la igualdad de todos ante la ley; así como de hechos de corrupción pública y privada, del crimen organizado, del narcotráfico y de la guerrilla.

Es el momento de llamar a todas las personas, sin distingo de clase, etnia, género, religión, edad, ocupación, o preferencia deportiva, para formar un frente cívico social para la reforma del Estado. Uno que no se deje engañar por los cantos de sirena de los multiplicadores de privilegios y de los generadores de enfrentamientos.

En el mes de la patria y de mi cumpleaños, esta columna está dedicada a los guatemaltecos buenos; en especial a los que, de buena fe, firmaron el campo pagado titulado Otra Guatemala es posible, suscrito el 10 de septiembre pasado. ¡Animo!