15
May 23

Den las gracias y digan Adiós

 

Den la gracias y digan Adiós es uno de los consejos heredados de mis padres –a mí y a mis hermanos– y que a la fecha sigo aplicando.   Ahora que cierra elPeriódico es una ocasión para estar agradecido y para la despedida.  Una de esas despedidas que son tristes en muchos niveles.

Agradecido estoy con el equipo de este diario, con su dirección y con José Rubén.  A lo largo de más de 10 años, de ellos y siempre no recibí más que respeto, un trato atento y, muchas veces, paciencia.  Agradecido estoy con ustedes los lectores, ¿cómo iba a ser de otra forma?  Son ustedes y la causa de la libertad los que siempre me animan a escribir mi columna. ¡Carpe Diem nunca dejó de ser publicada! ¡Nunca, nadie, me dijo de qué podía escribir y de qué no! Gracias por resistir las pretensiones de quienes tratan de imponer un pensamiento único.  Agradecido estoy con mis compañeros columnistas por expresar ideas que comparto y por retarme con ideas que no comparto.  Gracias por el ambiente civilizado de conversación.  Arrieros somos, y por el camino vamos.

Sólo me queda desear que el caso judicial que enfrenta José Rubén se resuelva por el camino de la credibilidad y la confianza en la justicia, que tanto, tanto hace falta en Guatemala.  

Columna publicada en elPeriódico.


12
May 23

Pelusa en el ombligo

Veo los resultados de la Encuesta Libre y me sorprendo; pero no debería sorprenderme.  Muchísimas personas están hartas de la vieja política y han vuelto sus ojos hacia lo que perciben como un outsider; y como lo explica mi cuate Bryan Caplan, la mayoría de votantes actúa irracionalmente en democracia.   Sin aprender de experiencias pasadas, muchos electores potenciales dan la impresión de que están en busca de un salvador para que gobierne y mande. Aunque sea uno como el puntero Carlos Pineda…que es ex UCN y ex Baldizón.

Después de la sacudida, el aroma de café despierta al optimista moderado que hay en mí y busco algo que me haga sonreír.

El colectivismo más extremo –que parte de él está vinculado con la exgurerrilla y con sus organizaciones afines– es pelusa en el ombligo.  Está, como dicen en mi pueblo, en la calle y sin llavín. Su discurso decimonónico los tiene ahí, como se tiene un tchotchke. Sus candidatos son líderes de nada. Son gobernadores de pueblo sin gente, diría mi abuela.  

La intención de voto para personajes como Manuel Villacorta está al nivel de la de Amílcar Rivera y Sammy Morales.  Amílcar Pop, con todo el pedigrí de la URNG y de Winaq (¿de Rigoberta Menchú?) ni siquiera está en el radar; y lo mismo pasa con Bernardo Arévalo, cuya mejor carta es el linaje que lo conecta como hijo de un presidente muerto hace 33 años. La semilla está argeñada y… ¿Dónde está el caudal de Thelma Cabrera y de Jordán Rodas? ¿No lo comparten?

¡Se nos está muriendo la izquierda más mesozoica! ¿Qué queda?

¿Será la Unidad Nacional de la Esperanza que se cuenta entre los miembros plenos de la Internacional Socialista?  ¿Te acuerdas de cuando Sandra Torres y su marido, Álvaro Colom, viajaron a La Habana para darle la Orden del Quetzal al tirano Fidel Castro y este ni siquiera los recibió? Pero no hay que engañarse, en la mera realidad la UNE y su candidata son la vieja política y el establishment hechos carne.  ¿Será Zury, que implosionó? ¿Serán los partidos Valor y Unionista que representan al conservadurismo con olor a naftalina? ¿Será Mulet? ¿Mulet el del viagra gratis? ¿El paradigmático burócrata internacional? ¿El que, cuando era presidente del Congreso era caricaturizado halando un Lincoln Continental? 

¿Y qué hay de los demás?  Entre todo lo demás hay muy estatistas y muy, muy estatistas.  Entre la oferta electoral parece predominar la idea de que los intereses colectivos deben prevalecer sobre los derechos individuales.  Parece preponderar la idea de que la justicia se hace desde el Legislativo y no en el Organismo Judicial. Da la impresión de que prima la idea de que la mayoría (o por lo menos quienes dicen representar a la mayoría) debe mandar.  No es aventurado decir que entre los demás candidatos sobresale la idea de que los diputados representan los intereses de quienes los eligen; concepto de representación que también aplican a los alcaldes y al presidente.

¡Uf! Los electores chapines la tenemos difícil. ¿El antivoto de Sandra Torres la coronará como tricampeona del arte de hacer presidentes? ¿Mulet tiene alguna posibilidad de escalar y sustituir a Torres en el segundo puesto? ¿Zury se va a quedar chiflando en la loma? Sabes qué… No quisiera tener 18 años y que esta fuera la primera vez que voy a votar. 

Columna publicada en elPeriódico


28
Abr 23

Lecciones de la CICIG: ¿Hasta dónde mejoró las instituciones?

 

La CICIG, ¿experimento, o conspiración? es el título del más reciente libro del historiador Carlos Sabino.  Por andar escribiendo de otras cosas me había olvidado de reseñarlo; pero nunca es tarde porque esta es una obra imprescindible para quienes están interesados en la historia reciente de Guatemala.

Carlos Sabino y Ricardo Rojas conversaron sobre la CICIG.

Dos eventos hacen que un vistazo a este libro sea oportuno ahora: Iván Velásquez, ex jefe de la CICIG y ministro de la Defensa del presidente colectivista de Colombia, Gustavo Petro, parece haber sobrevivido al remezón que sufrió el gabinete en Bogotá y continúa en el gobierno colombiano.  La semana pasada hubo una enriquecedora conversación entre el exjuez argentino Ricardo Rojas y Carlos Sabino en la Universidad Francisco Marroquín.

La obra que les comento, sin duda, es una puerta de entrada para empezar a entender la historia y el rol que jugó aquella comisión controversial que fue establecida para combatir cuerpos ilegales y aparatos clandestinos en Guatemala. A falta de aquellos, sin embargo, terminó dando la apariencia de que luchaba contra la corrupción, mientras actuaba como un instrumento para cambiar institucionalmente a este país, al margen de las elecciones y de la voluntad de electores y tributarios, y sin responder moral, ni políticamente de aquellos, a pesar de sus altos niveles de poder e influencia.

Aquellas circunstancias y una serie de abusos, así como la hubris, hicieron posible que Guatemala no renovara el convenio para el funcionamiento de la CICIG y que el comisionado y su equipo cerraron la tienda con un ¡Puf! de despedida.  De varios de esos abusos y arrogancia desmedida, da cuenta Sabino en la segunda parte de la obra que nos ocupa al estudiar casos emblemáticos.

Durante la conversación entre Sabino y Rojas recogí algunas observaciones valiosas para meditar, que te comparto:

La CICIG fue un experimento fallido, hasta sus promotores principales se trataron de distanciar de ella; si fue una conspiración, esa conspiración no funcionó y es parte de un pasado del que casi nadie quiere hablar, dijo Carlos Sabino.

El comisionado de la CICIG no era un funcionario de la ONU, sino que estaba bajo un régimen sui generis, era un híbrido y el convenio de. su creación no olía muy bien… Podemos aprovechar la experiencia de la CICIG para mejorar las instituciones, si sigue todo mal quiere decir que aquello no sirvió…Las soluciones mágicas no sirven, dijo Ricardo Rojas.

Hace falta escribir sobre el debido proceso legal, los atajos no son buenos, es una lección que podemos aprender de la experiencia de la CICIG, dijo Ricardo Rojas.

La corrupción no se combate desde un superpoder, ni con burocracia, no se debe explotar políticamente el tema de la corrupción, dijo Carlos Sabino.

En el mundo, en el derecho penal hay una moda llamada el derecho penal del enemigo que no es para delincuentes ordinarios, esa idea de Gunther Jacobs influyó en la CICIG, dijo Ricardo Rojas.

Con la CICIG hubo pánico con respecto a la falta de seguridad jurídica…La administración de justicia da miedo, se ha politizado, aquí y en todo el mundo…La CICIG no sustituyó al MP, sino que lo manejó, creó juzgados ad hoc, puso a su gente. Hubo testigos falsos y chantaje en procesos de la CICIG, dijo Carlos Sabino.

El problema es la arbitrariedad del poder. Una vez se violan las reglas del debido proceso, todo es posible e incluso se puede condenar personas apretando testigos, y hasta sin pruebas, dijo Ricardo Rojas.

La CICIG se contaminó y no pudo salir del juego local y optó por ciertas salidas políticas, hubo errores de cálculo creyó que la gente los apoyaba en sus planes para el país, le apostaron todo a Velásquez, dijo Carlos Sabino.

No escribí para atacar a la CICIG; compren el libro, léanlo hasta el final y saquen sus propias conclusiones, dijo Carlos Sabino.

Columna publicada en elPeriódico.


21
Abr 23

Réquiem por la autopista

 

La autopista Palín-Escuintla pasará a manos de políticos y burócratas el próximo 30 de abril.  Propongo una oración de difuntos dedicada a aquel tramo carretero de 22 kilómetros.  Autopista, te vamos a extrañar.

¿Por qué soy pesimista?

Carretera al puerto Quetzal

Porque si a la autopista estatal le va como a la educación estatal estamos fritos. Ni siquiera dos de cada 10 graduados de secundaria en las escuelas del Ministerio de Educación obtienen un buen desempeño en matemáticas; y a duras penas tres de cada 10 tienen un buen desempeño en lectura.  En manos de políticos y burócratas, el sistema educativo chapín  es un engaño para los estudiantes y para sus padres, o encargados y es un robo para los tributarios como tu.

Porque si a la autopista estatal le va como al sistema de salud estatal estamos fritos. Dime si no has leído, numerosas veces, acerca de las miserias a las que se enfrentan los guatemaltecos que hacen uso de los servicios de salud estatales donde imperan el desabastecimiento de medicinas, la falta de personal, el hacinamiento y la inexistencia de salas de espera. El sisetma de salud estatal es un robo par los tributarios como tu.

Una carretera que uso con frecuencia es la que une Tecpán con Chiché y pasa sobre el río Motagua sobre el puente Chimaché.  Es cierto que te ahorra como una hora de viaje; pero… políticos y burócratas construyeron aquel puente y abrieron la ruta sin ampliar apropiadamente la carretera que va de Tecpán a Chimaché, de modo que el transporte más pesado posible circula por ahí en un camino estrecho y mal mantenido que no está hecho para aquello.  La carretera entre el puente y Chiché se desmorona en tiempos de lluvia y pasas por ahí esquivando piedras; el talud es tan vertical que le añade mucha tensión a una situación peligrosa.

¿Has visto cómo está la carretera estatal entre Escuintla y el puerto Quetzal?  Se mantiene tan llena de hoyos y parches que de nada sirve que sea recta y de concreto porque no es posible ir a una velocidad razonable sostenida sin correr el riesgo de un reventón de llanta, por lo menos.  En la carretera hacia Quetzaltenango -y durante años- el concreto ha estado tan resquebrajado que hace un tiempo a mi auto le rebanó una llanta.  Desde entonces, cuando he circulado por ahí lo he hecho muy nervioso. La cosa no pasó a más, pero…¡Qué peligroso, ¿verdad?!

Carretera panamericana.

En occcidente docenas de caminos están plagados de túmulos, y detrás de los túmulos hay hoyos. ¿Quieres que te recuerde lo qué ocurre con el libramiento estatal de Chimaltenango?

¿Es aquel el futuro de la difunta autopista? ¿Le espera verse igual a su hermana que va entre Escuintla y el puerto? Dime…¿por qué es que la autopista estatal va a ser diferente a otras carreteras controladas por políticos y burócratas? ¿Por qué va a ser diferente a otros servicios estatales como la salud y la educación?

Ya me veo a a la autopista rezando, con Mozart: Condenados los malditos, arrojados a las llamas voraces, llámame entre los benditos. Te lo ruego, suplicante y de rodillas, con el corazón acongojado, casi hecho cenizas: hazte cargo de mi destino.  ¡No quiero caer en manos del Micivi, ni de Caminos, ni de los políticos y burócratas que controlan las carreteras! No quiero que el dinero que saquen a mi costa sirva para engrosar la piñata estatal.

Yo digo que sí, que la autopista se merece un réquiem.

Columna publicada en elPeriódico.


14
Abr 23

En su casa los conocen y los tratan de tu

 

En su casa lo conocen y lo tratan de tu era el dicho que mi abuela tenía para referirse a alguien desconocido; en el sentido de que a la persona en cuestión no era conocida más allá de su círculo familiar.  Para esos casos, Frances tenía otro dicho más chistoso: A saber qué pata puso ese huevo, para decir que quién sabe de dónde la persona en cuestión.

De aquellos dos dichos me acordé cuando un extranjero me preguntó que cuántos candidatos presidenciales había para los próximos comicios. Unos 23, le dije sin estar seguro…y añadí: Pero de esos, sólo unos tres cuentan.  El visitante preguntó, entonces, ¿Cuáles tres? y rápidamente produje tres nombres.  Y la siguiente pregunta fue: ¿Quiénes son los otros?.  Me quedé en silencio unos segundos y poco a poco, poco a poco empecé a producir nombres…y no pasé de cinco.  Después de ahí, a los demás en sus casas los conocen y los tratan de tu.

Lejos están los días en los que los candidatos presidenciales eran -te gustaran, o no- personas con trayectorias largas y ejecutorias notables.  Mucho de lo que hay ahora entre los candidatos presidenciales son tipo A saber qué pata puso ese huevo, y ya no digamos lo que hay en los listados de candidatos para alcaldes, y en los listados de candidatos para diputados.  ¿Sabes quiénes son los dos candidatos a diputados que encabezan cada una de las listas de los tres partidos políticos que tengas top of mind?

Si este desconocimiento ocurre entre personas que leen diarios en línea y leen columnas de opinión, ¿qué crees que ocurre con el ciudadano y tributario promedio?

La primera elección general de la que tengo memoria es la de 1970.  Estaba, yo, en segundo grado de Primaria y uno de mis compañeros le preguntó a la maestra que qué quería decir PR, porque toda la ciudad estaba pintada con esas siglas. La maestra le explicó que quería decir Partido Revolucionario, de Mario Fuentes Pieruccini y que las pintas eran porque pronto había elecciones.  Mi compañero preguntó que si ganaba el PR iba a haber revolución y mi maestra le dijo que no, y que el PR era el partido que gobernaba en ese momento.

De ahí se disparó mi interés por los comicios, me acordé de que había un candidato de apellidos Lucas Caballeros, que decía ser el de las manos limpias y de que, en alusión a él, había pintas en las paredes que decían Lucafé.  Luego me enteré de que era porque tenía vínculos con la caficultura.  Me acordé de haber oído que, en casa, el candidato favorito era Carlos Arana.

Las elecciones de 1974 las viví con más conciencia.  Recuerdo la canción que decía Mi papá votará por Ríos Montt, del Frente Nacional de Oposición con Alberto Fuentes Mohr; no me acuerdo de nada con respecto a Ernesto Paiz Novales; y los votos en mi casa iban por Kjell y Mario.

En 1978 me acuerdo de Peralta Méndez, Peralta Azurdia y Romeo Lucas; y en 1982, la primera elección en la que participé activamente, son inolvidables Maldonado Aguirre, Guevara, Anzueto Vielman y Sandoval Alarcón.

Mi punto es que, aún de niño, me daba cuenta de que todos aquellos nombres tenían historia y presencia en el país y en las conversaciones que había en casa.  En mi círculo -nos gustaran, o no- se sabía qué patas habían puesto aquellos huevos.

En aquellos días y con cualesquiera que fueran sus defectos y limitaciones, los partidos eran ideológicos.  No era como ahora que son puras roscas electoreras diseñadas para conseguirles boletos de participación para los candidatos.  No era como ahora que da la impresión que lo único que une a los miembros, directivos y candidatos es el afán de conseguir el poder, conservarlo, o influir en él en cualquier circunstancia, a cualquier costo.

Lo que ahora se ve en las listas de candidatos presidenciales, a alcaldes y a diputados no son personas de talla y altura.  En esas listas abundan puros personajes de oportunidad, sin conexión ideológica de unos con otros, o con los partidos que los postulan.  Están ahí porque alguien los puso.  No están ahí por sus largas trayectorias y ejecutorias notables.

Y todo esto es muy malo en muchos niveles. En su más pura expresión, la democracia tan cacareada ha desplazado al ideal republicano. Ya no importa si a muchos candidatos sólo los conocen en sus casas y los tratan de tu, porque los que hay en las listas son pa mear y no echar gota y los que resulten electos va a tener poderes legislativos, impositivos, punitivos y administrativos.

Columna publicada en elPeriódico.


31
Mar 23

El noveno círculo del infierno

 

En la cuarta zona del noveno círculo del infierno, en la Divina Comedia, se encuentra Judas Iscariote.  Está completamente inmerso en hielo, en el infierno más profundo y ahí es castigado por el mismísimo Lucifer que desgarra su cuerpo con sus dientes.  El noveno círculo -si uno cree en esas cosas, o si sólo disfruta del relato de Dante- está reservado para los traidores y en consecuencia ahí van a ir a parar los gobernantes de Honduras, El Salvador, Costa Rica, Panamá y República Dominicana que han traicionado a Taiwán y han abrazado a China continental y al régimen del Partido Comunista de China.

Pedro Ribeiro Simões de Lisboa, Portugal, CC via Wikimedia Commons.

Establecer relaciones diplomáticas con el régimen de Pekín es hacer negocios con un gobierno totalitario que viola los derechos individuales. El gobierno chino encarcela disidentes políticos, reprime la libertad de expresión y comete abusos contra los miembros de las minorías étnicas. ¿Hasta dónde es inmoral buscar relaciones con gobiernos que irrespetan los derechos individuales, a cambio de estadios y bibliotecas?

Taiwán es un país independiente que ha funcionado como una república durante décadas. Establecer relaciones diplomáticas con China Popular significa negar la existencia de Taiwán como país independiente y socavar su sistema republicano. Cortar relaciones con Taiwán es un error ético, ya que priva a los países de la oportunidad de mantener relaciones con una sociedad abierta en la que se vive por derecho, y no por permiso. Taiwán, además, es una economía avanzada que hace contribuciones importantes en tecnología, ciencias y medicina.

Establecer relaciones diplomáticas con China continental tiene efectos negativos en la política interna de los países. El gobierno del PCC a menudo exige que los países que establecen relaciones diplomáticas con Pekín, tomen medidas contra las voces críticas hacia China roja, incluidos defensores de los derechos individuales y grupos que apoyan el sistema republicano.

Establecer relaciones diplomáticas con China Popular podría tener implicaciones en la seguridad nacional de los países. China continental usa la tecnología y el comercio para ejercer influencia sobre otros países y usa la diplomacia del dólar para imponer su voluntad. Establecer relaciones diplomáticas con China roja luce como una muestra de apoyo a sus políticas expansionistas.

Establecer relaciones diplomáticas con China Popular tiene implicaciones en la seguridad cibernética. China continental usa la tecnología para robar secretos comerciales y militares de otros países. Establecer relaciones diplomáticas con China roja pone en riesgo la seguridad de la información confidencial de los países.

A pesar de los estadios y de las bibliotecas que ofrece el PCC,  hacer negocios con un régimen que viola los derechos individuales, socavar el sistema republicano de Taiwán y cortar relaciones con una sociedad abierta no son las decisiones adecuadas para un país en el largo plazo.

La cuestión de Taiwán y China Popular es un asunto que debe ser resuelto por los taiwaneses y chinos. La comunidad internacional debe respetar la autodeterminación y la soberanía de Taiwán y China Popular, y trabajar para promover el diálogo y el respeto entre partes. No olvides que Taiwán es la República de China, la legítima República de China que tuvo que mudarse a Formosa luego de que los comunistas tomaran el poder por la fuerza en el continente.

La cuestión de establecer relaciones diplomáticas con China Popular y romper relaciones con Taiwán es  compleja y requiere una evaluación cuidadosa de las implicaciones políticas, económicas y sociales. En general, es importante mantener una política de compromiso y diálogo con ambas partes involucradas. Al hacerlo, se puede contribuir a la estabilidad regional y mundial, y se promueven los valores republicanos y los derechos individuales que son fundamentales para occidente.

Al hacerlo, los políticos y gobernantes pueden evitar un viaje eterno por la cuarta zona del noveno círculo, donde están los traidores.

Columna publicada en elPeriódico.


17
Mar 23

Historias de horror y lecciones de vida

 

Una cuestión que siempre me ha llamado la atención es la capacidad que tienen algunas personas de sufrir tortura, prisión, vejaciones, y otros males sin guardar rencores y sin perder la alegría de vivir.

¿Cómo reaccionarías si fueras reina de belleza en tu país y el dictador te violara porque te rehusaste a casarte con él? ¿Cómo sería tu vida si te encarcelaran a los 17 años y no te liberaran hasta cumplidos los 23 luego de torturarte a diario? ¿Qué tal si no te dejaran entrar a tu país porque ha sido ocupado militarmente? ¿Qué tal si te recluyeran en el mayor centro de torturas en Hispanoamérica? ¿Y si fueras madre, esposa, hermana, novia, o hija en prisión por desafiar a la dictadura? ¿Qué tal si un régimen tiránico encarcelara a tu padre por protestar contra los abusos de poder? ¿Qué tal si vieras a jóvenes siendo asesinados por resistir a la dictadura?

Aquellos son el tipo de historias que se viven, no que se escuchan, sino que se llegan a vivir intensamente durante el College Freedom Forum que se celebra en la Universidad Francisco Marroquín en sociedad con la Human Rights Foundation.   Este año fueron Toufah Jallow, de Gambia; Omar Alshogre, de Siria; Chemi Lhamo, de Tíbet; Victor Navarro y Génesis Dávila, de Venezuela; Carolina Barrero, de Cuba; y Luis Fernando Camacho, de Bolivia quienes nos compartieron sus historias de horror…que también son lecciones de vida.

Cuando uno asiste a un CFF, vive aquellas historias y la vibra que se crea entre los conferencistas y los estudiantes que asisten a la actividad, ya no puede, nunca más, ver el tema de los derechos individuales con la ligereza con la que suelen ser vistos.  Uno ya no puede pensar en dictaduras y en tiranos con la misma perspectiva banal con la que suelen ser vistos.  Los monstruos existen y en todo el mundo no sólo asesinan, sino que dañan vidas por millones; sobre todo en sociedades cerradas donde no sólo es muy difícil oponerse a las satrapías, sino que cuando hay protestas y oposición, estas son acalladas, u ocultadas al mundo por los regímenes, o por los medios de comunicación cómplices.

¿Sabes? Me gustaría ser una mosca en la pared para escuchar las conversaciones de los jóvenes cuando salen del College Freedom Forum.  Es más, me gustaría ser una mosca en la pared para escuchar las conversaciones entre esos jóvenes y sus padres cuando comparten lo que escucharon en el foro.  Cuando era adolescente tuve la dicha de conversar alguito con mi padre acerca de aquellos temas; pero nunca, nunca, tuve acceso a testimonios personales de aquellos horrores.  Que enriquecedoras y aleccionadoras hubieran sido las conversaciones durante el almuerzo en casa.

Te dejo con algunas ideas que me quedaron de esta sexta edición del CFF/UFM:

  • ¡Aguas con la pragmática de los políticos!
  • ¡Aguas con la normalización de la arbitrariedad!
  • La libertad está perdida siempre y debemos luchar todos los días por rescatarla.
  • Aprovechemos las redes sociales para luchar por la libertad y por la esperanza.
  • Nunca nos quedemos callados frente a la injusticia.
  • Seamos curiosos
  • No permitamos que los dictadores entren en nuestras mentes, ni en nuestros corazones
  • La dictadura nos puede pasar a todos.
  • En Hispanoamérica se tortura, hay violencia sexual, hay crímenes de lesa humanidad.

Columna publicada en elPeriódico.


10
Mar 23

No a la guerra cultural

 

El miércoles pasado guerreras del feminismo radical revolucionario tomaron la Sexta avenida y cometieron desmanes y actos vandálicos similares a los que han hecho en años anteriores; y parecidos a los que sus colegas hacen en otras latitudes.  Aquí hicieron pintas y prendieron fuego frente a una panadería y ensuciaron las paredes de una iglesia, por ejemplo.

Haz clic en la foto para ver el vídeo.

Casi al mismo tiempo, en el Congreso de la República, grupos de la derecha conservadora y religiosa hicieron sonar dos shofares en el Congreso para sacar los demonios de la agenda globalista y celebrar el primer aniversario de la declaratoria de Guatemala como capital próvida de Iberoamérica.

Así se pelea, en Guatemala, la absurda guerra cultural.

Un día los tirios enarbolan la poderosa vulva, disfrazada de la Virgen de la Medalla Milagrosa, y la pasean frente a la Catedral Metropolitana; y acto seguido los troyanos llenan la ciudad capital con imágenes de vírgenes y santos, sólo para que a los pocos días varias de ellas fueran vandalizadas.

Un día los orcos salen cual esperpentos, suspirando por el che Guevara, y otro día sus compas descabezan a José María Reyna Barrios; sólo para que al rato, los cazadores farisaicos prohíban que toque un grupo de rock llamado Marduk…porque los meapilas dicen que la banda es satánica.

Así se pelea la guerra cultural en Guatemala.

Haz clic en la foto para ver el vídeo.

Hace años, un amigo y maestro me recomendó no usar lenguaje militar cuando se habla de economía y entiendo que tampoco es apropiado usarlo cuando se discuten ideas y ponen a prueba ideas.  A pesar de eso, a veces he caído en el error de hablar de la batalla de las ideas, lenguaje que lleva a equívocos, al menos en un ambiente liberal clásico.  En otros ambientes, como los mencionados arriba, tiene sentido que los protagonistas piensen en términos de guerras porque estatistas unos y estatistas otros, ¿cómo van a ser inapropiados el uso de la coerción, el uso de la legislación y el uso del poder político para imponer sus valoraciones y sus perspectivas?

En un mundo consensual, la prevalencia de valores a nivel social se consigue mediante la persuasión, la negociación y el encanto; no mediante la legislación, el vandalismo, y la imposición.  No cabe el concepto de guerra en un mundo consensual.  El concepto de guerra cultural inflama y alborota pasiones, sólo para minar las condiciones apropiadas para el diálogo y el entendimiento.

Pinta en la Sexta avenida, de la zona 1.

En un contexto liberal clásico se reconoce y protege la diversidad de perspectivas y creencias y no se busca imponer visiones particulares del mundo a los demás; y entendida esa idea, no es difícil concluir que la idea de una guerra cultural va contra los principios fundamentales del liberalismo clásico ya que aquella implica una lucha por la supremacía de una ideología sobre las demás.

La guerra cultural es cosa de los cachurecos y los chairos para quienes Miguel de Unamuno parece haber dicho Venceréis, más no convenceréis.

Columna publicada en elPeriódico.


03
Mar 23

Vienen a por la libertad de expresión

 

La libertad de expresión está bajo asedio.  El acoso, cuando no el ataque comenzó con la [in]cultura woke y con las exigencias de lo políticamente correcto.  Siguió con las prácticas de cancelación.  En 2020 y 2021 se materializó contra cualquiera que se atreviera a cuestionar la validez científica y ética de los encierros forzados, el uso de mascarillas, las vacunaciones forzadas, por ejemplo.

La ilustración la tomé de aquí http://bit.ly/3ZkuaQT

Los ataques contra la libertad de expresión son muy peligrosos porque esa libertad es es socialmente útil para tres cosas: proteger la dignidad humana, controlar la actividad social y estatal; y buscar la verdad.

De ahí que, por ejemplo, sea inaceptable que un fiscal pida la investigación de periodistas (incluidos columnistas) a causa de notas y comentarios referentes a actores de procesos judiciales.  Más inaceptable es que un juez emita una resolución que avale aquella pretensión.  Lo correcto es que si en notas periodísticas, o columnas de opinión se hallan injurias, calumnias y claro que difamaciones, los afectados acudan a la Ley de Libre Emisión de Pensamiento en vez de usar un instrumento como la Ley de Delincuencia Organizada; práctica que recuerda las mañas de la CICIG.

En Guatemala, la libertad de expresión está ampliamente protegida por el artículo 35 de la Constitución como debe ser en una sociedad abierta; y la deberíamos defender tanto tirios, como troyanos. ¿Por qué?

Porque como manifestación de la facultad que todo individuo debería tener para decidir y actuar de acuerdo con su mejor juicio, sin estar sometido a coacción arbitraria, la libertad de expresión es la facultad de decir con enunciados, o mediante otros signos lo que se piensa, siente, o desea. Hace posible la exploración de ideas y posibilidades que pueden ser verdaderas -que sean producto de la identificación de hechos de la realidad-…o no. Uno deja de ser un individuo pleno y digno si debe callarse por temor a la legislación, al poder, o al linchamiento.

Porque como contralora de la actividad de los individuos en sociedad y de las actividades de aquellos que ejercen el poder (formal, o informalmente), la libertad de expresión nos faculta para cuestionar, o reforzar las costumbres y las ideas.  Nos permite poner en duda, o consolidar las facultades de aquellos que -por el momento- ejercen el poder; y las de aquellos que son sus patrocinadores, electores, o clientela. La libertad de expresión hace posible la discusión cívica de nuestros sistemas de creencias, de nuestros patrones de crianza y de nuestros valores.

Porque como herramienta para la búsqueda de la verdad, la libertad de expresión hace posible que pongamos a prueba nuestras ideas, tecnologías, conocimientos y más.  Es peligroso que una marea de pensamiento arrase con la diversidad de perspectivas e ideas (sobre todo si no es orgánica, sino impuesta y como consecuencia de la intimidación, o de la fuerza).  Sin la posibilidad de explorar, someter a prueba, o expresar lo  aún no ideado, o lo diferente, ¿cómo podemos aprender de nuestros errores e identificar lo que es falso? ¿Cómo podemos aprender de nuestros éxitos e identificar lo que es verdadero?

En ausencia de plena libertad de expresión se imponen el pensamiento único y la historia única; y como dijo la escritor nigeriana, Chimamanda  Adichie, es imposible hablar de pensamiento único sin hablar de poder. ¿Qué opinas?

Columna publicada en elPeriódico.


17
Feb 23

En busca de un seguro social digno

 

El motivo por el cual se menciona que al sistema centralizado y monopólico de seguridad social que hay en Guatemala el gobierno le debe Q60 mil millones -por cuotas no pagadas- es para señalar la total falta de autoridad y la total falta de calidad moral que tienen los políticos y burócratas para exigir que otros paguen.

A pesar de todos los sofismas, humo y espejos a los que acuden que los políticos y burócratas, lo cierto es que todas las administraciones, a lo largo de la historia del IGSS se han hecho las locas con los pagos que están obligadas a hacer como patronos.

La ilustración la tomé de http://bit.ly/3YWidAr

A aquella falta de autoridad y falta de calidad moral, añádele que la misma ley que crea el IGSS dispone que la cuota del gobierno (o sea de los políticos y burócratas que controlan el poder) debe ser financiada con los impuestos que se creen para tal efecto.

Mira cómo funciona:  Los políticos y burócratas crean el IGSS (por mandato del Tío Sam).  Los políticos y burócratas disponen que tú, como patrono, o como empleado tienes que pagar directamente ese monopolio centralizado.  Te hacen creer que el gobierno es el tercer socio de esa asociación forzada; pero…¿de dónde sale el dinero del gobierno?  ¡Exacto!… De los impuestos que los políticos y burócratas te fuerzan a pagar mediante extorsión.

¿Me sigues hasta aquí? No hay nada, nada, nada que den los políticos y burócratas que controlan el poder (el gobierno) que no se lo hayan quitado a alguien más.   Todo lo que da el gobierno es pagado con dinero que han sacado directamente de tu bolsillo y del de los demás tributarios (menos lo que se pierde en corrupción, en mala administración y en repartición de privilegios).   Es decir, de impuestos.

Pero también de lo que han expoliado indirectamente de los tributarios; porque a veces lo que dan los políticos y burócratas es financiado con préstamos.  ¿Y con qué crees que se pagan los préstamos? Con los impuestos que te quitarán a ti, a tus hijos y a tus nietos.   Otra forma de extracción indirecta es mediante la inflación, porque cuando los políticos y burócratas inflan la cantidad de dinero que hay en el mercado lo que hacen, al final de cuentas, es robarle valor a tu sueldo y a tus ahorros.

Los guatemaltecos merecemos una forma de seguro social que esté a la altura de nuestras aspiraciones y de la dignidad humana.  Uno que no se base en relaciones forzadas, uno que no se base en el engaño, uno que no se apoye en la expoliación, uno que no sea atol con el dedo. Es una canallada que para que los políticos y burócratas cumplan con la obligación autoimpuesta (y engañosa) de pagar una cuota patronal al IGSS, sean los trabajadores y patronos los que tengan que desembolsar el pago por medio de impuestos.

No se trata, pues, de que el gobierno pague la cuota que siempre se ha negado a pagar (con el dinero que te quite).  Se trata de que el IGSS necesita una reforma profunda, y no ideológica, que resuelva las necesidades de seguridad social de los más vulnerables. No se trata de que salga más caro el caldo que la gallina, ni de castigar a los chapines con más impuestos en defensa de una conquista revolucionaria.  Se trata de que cuando tú seas viejito, o si quedas viudo, o si tienes una incapacidad, o tengas necesidad de una cirugía costosa, encuentres alivio digno y consuelo.  En vez de toparte con lo que sobró y con lo que no pudieron, o no quisieron llevarse los políticos y burócratas.

Columna publicada en elPeriódico.