17
Ago 10

Meditaciones sobre Pavón y el uso de la fuerza

George Washington escribió que el gobierno no es la razón, ni es la elocuencia; es la fuerza. Como el fuego es un sirviente peligroso, y un amo temible. Tenemos gobierno y lo dotamos con un formidable monopolio del uso de la fuerza para defendernos de los delincuentes; pero por esa naturaleza ígnea a la que hizo referencia Washington, es que aquel monopolio formidable y aquella fuerza, deben estar sometidos al imperio de la ley. ¿Y la ley? Son aquellas normas generales y abstractas cuyo propósito es proteger nuestros derechos individuales no sólo de los delincuentes, sino de aquellos que controlan aquel monopolio formidable del uso de la fuerza.


A esto se refieren los artículos constitucionales que dicen que el ejercicio del poder está sujeto a las limitaciones señaladas por la Constitución y la ley; y que los funcionarios son depositarios de la autoridad, responsables legalmente por su conducta oficial y sujetos a la ley, jamás superiores a ella. La ley, pues, no sólo está hecha contra los malos, sino contra los que se dicen buenos; ¡y hasta para frenar a los buenos!

Mucha gente cree que los problemas de Guatemala se resolverían si los buenos tomaran el control y acabaran con los malos. Como en la peli Las pandillas de Nueva York, no falta quién crea que los problemas de Guatemala se acabarían si los buenos cañonearan a los malos y de ahí salen las hipótesis que creen que la solución está en la limpieza social. El problema, claro, es que si al monopolio formidable del uso de la fuerza lo dejamos sin la obligación ineludible de someterse a la ley, aquel monopolio formidable del uso de la fuerza sirve a los intereses de quienes lo controlan y puede ser dirigido contra cualquiera que se interponga entre ellos y sus objetivos.

En septiembre de 2006 mucha gente vitoreó a los funcionarios que tomaron la decisión y ejecutaron las acciones que culminaron con lo que se conoce como La toma de la Granja Penal de Rehabilitación Pavón, porque había evidencia de que las mafias tenían el control de aquellas instalaciones penitenciarias. La Prensa, la comunidad internacional y el clamor popular querían la toma; y la administración de Oscar Berger y Eduardo Stein actuó en consecuencia. Y los protagonistas directos de la toma se convirtieron en los héroes de muchas familias que le dijeron a quienes quisieran oírlos: ¡Al fin alguien está haciendo algo!

Sin embargo, sic transit gloria mundi; porque el amor de la plebe es flor de un día. Como lo son el amor de la Prensa y el de la comunidad internacional. Para la opinión pública y para quienes la hacen, los héroes de ayer, pueden ser los villanos de hoy. Yo nunca votaría por Alejandro Giammattei, por ejemplo y se que Carlos Vielmann es de carácter volado; pero por más defectos que tengan, la verdad no creo que sean los asesinos que ahora se les quiere hacer parecer.

¿Y cuál es el resultado de estas meditaciones? Uno que no debería sorpendernos: que una república sana no puede irse formando sobre las virtudes de los hombres (y menos sobre los caprichos de la gente). Una república sana sólo es posible si se funda sobre leyes. Leyes iguales para todos. Leyes que protejan los derechos de todos. Leyes que impidan los privilegios. Las leyes son la clave, no los hombres.

Ya lo dijo Javier Bardem: Cuando las cosas salen mal todos cerramos los ojos y esperamos que haya alguien más fuerte y sabio y más capaz que nosotros que nos ayude. Yo creo que esa es la solución equivocada, y por eso es que apoyo a ProReforma.

La caricatura es por Fo y fue publicada en Prensa Libre el 18 de agosto de 2010 y hace alusión a los problemas en la universidad estatal.

23
Jun 10

Lo que faltaba: funcionarios con orden de captura

Lo que faltaba no es exactamente correcto, porque todavía falta muuuuuuuuuucho por ver. Empero, por mucho que uno esté acostumbrado a lo inusual y a lo escandaloso en la esfera pública, no deja de ser casi increíble el hecho de que Alvaro San Nicolás Colom haya nombrado, como su Secretario, a un personaje sobre el cual pesa una orden de captura -¡desde 2006!- por hacerse pasar por abogado.

Rafael Espadita Espada dice que resolverá los problemas que tiene en la contratación de colaboradores de dudosa reputación, mediante el expediente de pedirles que tengan visa de los Estados Unidos de América. ¿Cómo los resolverá San Nicolás? ¿Sabía, San Nicolás, esto de la orden de captura? ¿Le importaba?
¿Qué tan valioso, útil, importante o influyente es el sindicado, como para haber conseguido el nombramiento?

10
Mar 10

Caso Siga: Un criterio judicial peligroso

Peligroso es el criterio del juez que determinó que la Asociación de Empresas de Autobuses Urbanos no podrá exigir ningún dato ni documentos a los usuarios del transporte urbano para obtener la tarjeta de prepago que se utilizará en el Sistema Integrado Guatemalteco de Autobuses, ya que se trata de un contrato mercantil.

Resulta que parte de la naturaleza de todo contrato mercantil (de verdad) es que los acuerdos entre las partes son libres, pacíficos, voluntarios y responsables. De modo que si -sin mediar el uso de la fuerza- las partes involucradas en un contrato acuerdan entregar un bien, o o hacer un servicio a cambio de un pago y la entrega de cierta información -por privada que sea-, ese acuerdo debe ser respetado tanto por las partes, como por los jueces. Precisamente porque es voluntario y pacífico. El carácter mercantil de un acuerdo de aquella naturaleza, no debería ser razón para invalidar el contrato.
Temo que el criterio subyacente en la resolución es que si la información fuera requerida por políticos y funcionarios, en los ámbitos coercitivos del Derecho Administrativo, entonces sí sería válido que a los individuos se les exigiera información. No así en el campo del Derecho Privado, al cual pertenece el Derecho Mercantil.
Hay, sin embargo, un elemento que hace de aquel contrato mercantil algo viciado y que lo saca del Derecho Privado propiamente dicho. Esto es que a los autobuseros y a Siga, los políticos y sus funcionarios -en ejercicio de sus facultades administrativas- les compran los buses, les subsidian la operación con dinero de los tributarios, los exoneran de impuestos y les garantizan el monopolio de las líneas. Esto no sólo es crony capitalism; sino que involucra demasiados elementos coercitivos, propios del Derecho Público, como para considerar que los términos en los que Siga ofrece sus servicios, y los usuarios no tienen más que aceptar, sean algo más que un contrato de adhesión al amparo de la fuerza coercitiva que a Siga le da el privilegio de ser la única prestataria de un servicio que la gente necesita. Y encima, el suyo es un contrato de adhesión.
¡En esas condiciones sí que no es válido pedir tanta información! Cuando al cliente no le queda otro palo en qué ahorcarse -porque los políticos y sus funcionarios han creado el privilegio de un monopolio- es cuando los jueces deberían proteger la privacidad de las víctimas o clientes. No porque sea un contrato mercantil.
La resolución en cuestión refuerza el criterio totalitario según el cual, los políticos y sus funcionarios pueden demandar todo de los ciudadanos y tributarios; en tanto que estos no son libres de pactar pacífica, voluntaria y responsablemente lo que convenga a sus necesidades. Esto es muy peligroso.
La noticia fue publicada en la página 3 de Prensa Libre de hoy. No puse el enlace porque no encontré la nota en su sitio Web.

04
Mar 10

Atinada modificación a la ley de divorcio

Muy atinada me parece la iniciativa de la Comisión de la Mujer, en el Congreso de la República, en cuanto a modificar la ley de divorcio en dos aspectos muy importantes. La iniciativa:


Modifica el artículo 156 del Código Civil y otorga el derecho a la mujer de comenzar sola los trámites de divorcio, es decir sin el consentimiento del esposo. La acción podrá ser promovida por cualquiera de los conyuges.

Deroga la prohibición a la mujer de contraer matrimonio antes de transcurridos 300 días de la disolución del anterior compromiso, con el argumento de la igualdad de derechos que establece la Constitución, y admite la prueba de ADN, en temas de paternidad responsable.

No se justifican, sino en un contexto machista insostenible, las normas decimonónicas que la iniciativa modificaría y derogaría. Las leyes deben ser generales, abstractas e impersonales. Iguales para todos, sin distinción de sexo, etnia, religión, ni nada parecido.

12
Feb 10

El poder, Los Colom y Les Luthiers

El trono lo quiero para posarme sobre el, y satisfacer mis deseos, los mas sublimes y los mas perversos, en cambio a Maria la quiero para …. caramba, !que coincidencia!

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Estos versos, de El rey enamorado, de Les Luthiers, son lo que vino inmediatamente a mi mente al ver, en el noticiario Hechos Guatemala, con el periodista José Eduardo Valdizán, que Alvaro San Nicolás Colom le prometió a su Sandra Evita, hace ocho años, que podría hacer lo que quisiera en el gobierno.

Tanto Enrique VI -el personaje del drama que da origen a estas meditaciones- como San Nicolás, entienden que el trono o el poder, son para satisfacer deseos sublimes y perversos, según uno; y para hacer lo que se quiera, según el otro. La mentalidad totalitaria cree que se llega al poder para usarlo sin límites y para hacer con él lo que se desee, para bien, o para mal.

La mentalidad totalitaria no reconoce límites para el poder y ve a la ley como un obstáculo que le impide hacer uso pleno del poder que, en aquel contexto, le ha sido dado para hacer y deshacer a su antojo. La filósofa Hannah Arendt sabía que esta mentalidad es peligrosa para los gobernados y por eso advirtió que a lo que aspiran las ideologías totalitarias no es a transformar el mundo exterior o a transmutar revolucionariamente la sociedad, sino a transformar la propia naturaleza humana. ¿Cómo iba a ser de otra forma? Si es para mal, la mentalidad que cree que el poder es para usarlo plenamente y sin límites, o para hacer con él lo que se quiera, lo usa para su propio beneficio, para el de sus cómplices y para el de su clientela; y si cree que es para bien, la mentalidad totalitaria usa el poder para transformar a la sociedad -e incluso transformar la naturaleza humana- para que se ajusten a lo que esa mentalidad cree que deberían ser la sociedad y las personas. La mentalidad totalitaria, constructivista y racionalista, cree que el poder es para hacer lo que se quiera hacer en el gobierno.

Cuando estemos en el poder puedes hacer lo que quieras en el gobierno, es una promesa peligrosa. Se empieza con manejar fondos con completa discrecionalidad y al amparo de secreto; pero, ¿dónde se termina?


07
Sep 09

Rigoberta Menchú tiene razón, otra vez

La juventud se está acercando más a la posibilidad de construir un país más incluyente; dijo Rigoberta Menchú en una entrevista.

Estoy de acuerdo con esta observación de la señora Menchú, porque cada vez conozco más jóvenes a los que les repugna la idea de los privilegios. Cada vez conozco más jóvenes que entienden la importancia de la igualdad de todos ante la ley; sin que la condición social, el sexo, la étnia, la nacionalidad, o la relgión, por ejemplo, sean motivos para exclusiones o tratos diferenciados por parte de la ley.
Si el lector está contra los privilegios y contra las exclusiones que estos generan, seguramente estará de acuerdo con una norma que le prohiba al Organismo Legislativo emitir leyes o decretos arbitrarios o discriminatorios en los que explícita o implícitamente se concedan prerrogativas, privilegios o beneficios que no puedan disfrutar todas las personas que tengan la oportunidad de hacerlo.
Si es así, el lector tiene un motivo para interesarse en ProReforma.

22
Ago 09

El gato en las postuladoras debe ser impugnado

El acta de las reuniones recogerá en forma íntegra las votaciones y los integrantes de la comisión deberán procurar todos los medios para cumplir su objetivo de la forma más transparente posible; así dice la Ley de Comisiones de Postulación. Leo mi amansaburros y me entero de que íntegro quiere decir no sólo que tiene todas sus partes y como todos los medios no quiere decir algunos medios, no encuentro justificación alguna para que los miembros de las comisiones postuladoras violen la ley y dispongan que no cumplirán con el requerimiento de transparencia que hace el artículo citado.

La decisión de votar en secreto debe ser impugnada porque es violatoria de la ley: impide que las actas recojan en forma integra las votaciones, ya que algunas partes de las partes -la de quién votó por quién y la de la la responabilidad personal- no pueden ser recogidas; y porque, si bien es cierto que la impugnación podria retrasar el proceso, también lo es que si no se va a cumplir con la ley, entonces, ¿para qué fregados está la ley? Es absurdo que haya leyes y que aquellos a quienes se les aplica -¡sobre todo si están ejerciendo una función pública importante!- pueden decidir que no van a cumplir con ella para no tener que ser accountable. La decisión de los postuladores debe ser impugnada para dar el ejemplo de que no porque haya prisa, ni porque algo sea políticamente conveniente, se va a pasar por alto con el cumplimiento de la ley. Si la decisión no es impugnada, el mensaje para los actores políticos será el de siempre: No se preocupen, pueden incumplir con la ley a su antojo, siempre y cuando hagan las cosas tan a útima hora que lo urgente termine teniendo prioridad sobre lo importante.
Valga la analogía, el bien jurídico tutelado por el artículo 9 es la transparencia en las decisiones de los postuladores. Y, ¿qué transparencia va a haber si los postuladores ocultan por quién votaron? ¿Cómo será posible que el acta recoja todas las partes de las votaciones, si es imposible recoger por quién votaron los postuladores?
No es cierto que la secretividad contribuya a la libertad de los postuladores. Como saben hasta las piedras, la libertad y la responsabilidad son dos caras de la misma moneda; y siendo que la intención de esta ley es que hombres probos, honrados y rectos elijan de forma transparente a los candidatos para magistrados, es fundamental que los postuladores sean responsables y accountable por sus decisiones. Dicho en otras palabras, la gracia es que se sepa por quién votaron porque por sus frutos los conocereis. ¿Cómo van a ser responsables y a entregar cuentas, si nadie sabe qué hicieron en realidad?
Es impropio comparar la secretividad propia de las votaciones en los comicios generales con la secretividad sucia de las votaciones en las comisiones de postulación.
La primera secretividad es en el contexto del ejercicio de un derecho cívico en el cual el elector asume libremente y ante sí la responsabilidad de elegir autoridades; y su responsabilidad y accountability es con su conciencia de ciudadano. La secretividad en ese contexto significa que nadie debe obligar a otros a revelar su voto y que nadie está obligado a revelarlo; pero, incluso, no quiere decir que uno no pueda revelarlo.
La segunda secretividad es en el contexto de una obligación legal que tiene características legales bien definidas: debe ser tan transparente que el acta que la recoja debe mostrar todas sus partes. El postulador no ejerce un derecho, sino que cumple con una obligación específica; y su responsabilidad y su accountability no son consigo mismo, sino con aquellos que le impusieron la obligación de tomar decisiones con transparencia. Por eso es una secretividad sucia, ya que enturbia la necesaria transparencia que hay en la naturaleza de este proceso.
La primera secretividad protege al votante en el ejercicio de un derecho; en tanto que la segunda oscurece el proceso, en el ejercicio de una obligación. La segunda secretividad es un gato metido para beneficio del establishment.
Si los postuladores incumplen con aquella obligación legal, incurren en ilegalidad.
La foto es por Raúl Contreras, en La Recoleta.

28
Mar 09

El gobierno y la libertad

El gobierno es la negación de la libertad, es el titulo de la playera anarquista que ayer tenía el cuate Richard.  
No soy anarquista; pero entiendo que el más formidable enemigo de la libertad es el gobierno.  Los gobiernos, por ejemplo, son responsables de la mayor cantidad de muertes.  Los gobiernos roban al amparo de normativas que aparentan ser leyes.  Los gobiernos desarman a los individuos y los despojan del derecho a defender sus derechos.  Los gobiernos redistribuyen la riqueza, con criterios políticos, entre su clientela.  
Aaaaaaaaaah, el costo de tener gobierno es alto, ¿o no?
Playeras como la de Richard pueden ser adquiridas aquí.

Digg!


25
Dic 08

¿Cohetes sin cigarrillos?

A las 0 horas del 25 de diciembre, para celebrar la Navidad, los chapines quemamos cohetes. Y a la ensordecedora y luminosa quemazón de las 12 de la noche, le sigue el ritual de despenicar una ametralladora y de quemar uno por uno cada cohetillo.

Debido a que en Prensa Libre leí que “El Congreso aprobó ayer una ley que prohíbe fumar en lugares públicos —sean abiertos o cerrados—, y fija sanciones para las personas y establecimientos que incumplan esa disposición”, pensé que aquella práctica tan chapina iba a ser muy difícil cuando entrara en vigor la fascista ley antitabaco que nos recetó el Congreso. Esto es porque quemar cohetes con cigarrillos es muy práctico. En cambio, hacerlo con una candela, un encendedor, una brasa, o con un ocote, por ejemplo, resulta muy impráctico. Ya sea porque el viento apaga las llamas, o porque es más complicado conseguir y hacer brasas, que encender un chancoaco.

Yo no fumo, ni me gusta. Fumé, y no me gustó. Pero hice mis primeros tanes…para aprender que no me iba a gustar fumar, cuando mis padres me daban cigarrillos para quemar cohetillos. Y más tarde traté de fumar en serio…pero igual no le agarré el gusto.

Y bueno, sip. Confieso que yo era de esos chicos desesperantes que quemaban cohetillos uno por uno. Por eso es que anoche disfruté mucho viendo a mi sobrino cómo quemaba los suyos…y pensé mucho en cómo vamos a solucionar lo del cigarrillo sin correr el riesgo de ser multados. Claro que anoche no pasó ni un policía por la calle mientras quemabamos cohetes; ya me imaginaba yo que, si la ley hubiera sido como decía el reportaje, ¿habría patrulleros en busca de patojos delincuentes que, cigarro en mano, quemen petardos y violen la ley? Y si un chico es inimputable porque es menor de edad, ¿se lo llevarían a un tribunal de menores, o multarían a los padres…o a los tíos?

Si no se aplican la ley anticapuchas, ni la pena de muerte, ¿el estado niñera aplicaría las multas contra los niños que quemen cohetes y los encendieran con cigarrillos? ¿Cuánto costaría perseguir fumadores de Nochebuena? Una vez más, ¿quedaría en ridículo el estado niñera?

Menos mal que la prohibición no es tan absurda como decía el reportaje en cuestión; pero…¿cuánto falta para que fumar sea absoluta y totalmente prohibido? Quizás hasta dentro de la propiedad de uno. La realidad, siempre puede superar a la ficción.


04
Oct 08

Marlene me decepciona

Marlene Blanco es la nueva directora de la Policía Nacional Civil; y yo no había escrito nada sobre su nombramiento porque quería darle el beneficio de la duda. Sin embargo, hoy me decepcionó. Leo que la Directora advirtió que sólo hay 23 agentes a cargo de la seguridad de los 350 mil habitantes de la ciudad de Quetzaltenango; por lo que “pidió a sectores sociales que se organicen, para prevenir hechos de violencia”.

Yo digo que, si la razón por la cual tenemos gobierno es ¡precisamente! para que proteja nuestras vidas, libertades y propiedades -y que nos de seguridad-, la petición de Blanco es improcedente y peligrosa.

Si las personas tienen que organizarse para prevenir la delincuencia, ¿qué sentido tiene que haya 23, o 230 policías en Quetzaltenango? ¿O en cualquiera otra parte? Si los policías son los secuestradores, asesinos y extorsionistas, ¿qué sentido tiene que haya 23, o 230 de ellos?

La única razón por la cual se justifica la existencia del gobierno es que las personas renunciamos (condicionadamente) a nuestro derecho a defendernos de la delincuencia; y le entregamos al gobierno el monopolio de la fuerza coercitiva para que, en aras del orden, sea él quien nos defienda de la criminalidad. Si el gobierno es incapaz de cumplir con ese mandato, y si sus fuincionarios nos devuelven aquella facultad, ¿para qué queremos PNC y todo eso?

¿Cuáles son las condiciones bajo las cuales renunciamos a nuestro derecho a defender nuestras vidas, libertades y propiedades por mano propia?

1. Que las autoridades a las que se lo entregamos estén sometidas a la majestad de la ley;
2. Que las autoridades cumplan con el mandato que tienen.

Marlene Blanco recomienda que las personas “no permitan que un grupo de delincuentes se lleven el dinero que se ganan con el sudor de su frente”.

Si así es la cosa…está bien. Pero entonces, la administración debe hacerse a un lado y no estorbar, porque el costo del tener gobierno es demasiado alto. A los ciudadanos honrados se les debe reconocer el derecho a defenderse; deben explorarse otras formas de proporcionar seguridad ciudadana sin que la administración pretenda tener ese monopolio.