Ya apareció mi amigo, David, en Puerto Principe. Su casa se desplomó y está viviendo en su oficina; si hubiera estado en su residencia, durante el terremoto, ahora no estuviera contando la historia. El sismo lo agarró en una calle comercial y vio como colapsaban muchos edificios.
riqueza
21
Ene 10
La peor forma de ayudar a los haitianos
17
Ene 10
La tragedia en Haití
08
Sep 09
Una dirigencia indígena atinada
Varias dirigentes indígenas afirmaron que el programa Mi familia progresa, que dirige Sandra Evita Torres, no soluciona la situación de pobreza. Juanita Batzibal dijo que el citado programa sirve sólo sirve para paliar necesidades inmediatas; y pidió no seguir con el paternalismo y el asistencialismo.
28
Dic 08
¡Por inocentes! Salario para agravar el desempleo
Una inocentada grosera es la noticia de que la administración socialdemócratá fijará el salario mínimo a Q52 diarios para todo el sector productivo.
La medida, que en apariencia busca “reducir la brecha entre el valor de la cansasta básica y el pago del salario mínimo en la ciudad y en el campo”, en realidad es el factor que más agrava el desempleo entre los jóvenes y entre aquellos que, o no tienen vocación alguna, o tienen poca educación. El salario mínimo perjudica a los más vulnerables; pero los prejuicios ideológicos prevalecientes se niegan a verlo.
Los trabajos de aprendiz, en los que el jóven sin educación y sin experiencia adquiría destrezas y aprendía oficios han ido desapareciendo porque se han vuelto muy costosos. El salario mímino hace que sea muy caro ofrecerles oportunidades de trabajo a los jóvenes inexpertos. Miles de empresas, que podrían entrenar y ocupar patojos, los han sustituido por nuevos procesos que no necesitan de esa mano de obra costosa. Un ejemplo de ellos son las gasolineras de autoservicio. No se necesita mucho para ser despachador de gasolina; pero para muchos jóvenes es un buen lugar para tener el primer empleo, adquirir conocimientos, obtener experiencia y disciplina laborales y para conseguir la primera carta de recomendación. Lo malo es que cuando contratarlos se hace muy caro, lo que queda es eliminar las plazas y cambiar los procesos.
Cuando yo era productor de un noticiario me opuse formal y judicialmente al salario mínimo para los periodistas. Esto es porque yo era testigo de cómo era que patojos chispudos, pero sin entrenamiento, entraban a trabajar como camarógrafos y hasta como editores e iban aprendiendo, entrenándose y creciendo mientras iba mejorando su situación salarial. En el momento en el que el salario mínimo hacía muy costos ese proceso educativo que les daba la empresa, en ese momento ya no era rentable contratar patojos inexpertos y había que contratar camarógrafos y editores en los que no hubiera que invertir, sino que ya vinieran entrenados. ¿Quiénes perdían? Los jóvenes que nunca tendrían la oportunidad de aprender aquellos oficios y educarse mientras trabajaban.
En tiempos de crisis, cuando las plazas de trabajo no sólo no están siendo creadas, sino que están siendo cerradas, ¿qué puede ser peor que encarecer artificialmente las pocas oportunidades que van quedando? Quienes defienden el salario mínimo ya tienen empleo, y me pregunto si harían lo mismo en el caso de que tuvieran la necesidad de encontrar uno.
En lugar de reconocer la realidad, quienes se aferran a aquellos prejuicios disfrutan con sinvergüenzadas como la de los empresaurios maquileros, que claman por el privilegio de no pagar el salario mínimo, sin que aparentemente les importe el daño de fondo que este le hace a los más pobres, y sin importarles el daño evidente que sus pretensiones le hacen al ideal de igualdad de todos ante la ley.
Yo estoy de acuerdo con que la mejor política social es un buen empleo; y entiendo que la única forma de elevar los salarios sanamente es elevando la productividad del trabajo. Cuanto más y mejor se produzca, más crecerá la riqueza de todos. Cuanto más productivo sea un individuo, tanto más valdrá su trabajo para los que ofrecen empleos. Si estas realidades no son reconocidas, y si seguimos haciendo lo mismo con la esperanza de obtener resultados distintos, seguiremos condenando a la pobreza y a la indignidad a todos esos miles de patojos inexpertos y ansiosos que quisieran trabajar, pero que no encuentran donde…porque es muy caro darles empleo.
Resumen publicado en Prensa Libre y en Siglo Veintiuno.
20
Dic 08
Trocitos 101 para el gabinete económico
Si la pobreza es lo contrario a la riqueza; si nos ofende y nos duele la pobreza; si quisiéramos elimiarla, ¿qué deberíamos propiciar? Yo digo que lo que deberíamos propiciar es más y más riqueza.
Los que dicen que saben de eso, estiman que “para lograr un verdadero desarrollo del país con avences significativos” es necesario crecer cerca de 8% anual durante 10 años consecutivos. Crecimiento y desarrollo son los eufemismos que la burocracia nacional e internacional usa para referirse a la creación de riqueza y a la riqueza, porque esta palabra les da vergüenza, o qué se yo.
¿Cuándo ha crecido la economía de los guatemaltecos? La Junta Monetaria acaba de vaticinar que el crecimiento a diciembre de 2008 andará por 4%; y en noviembre de 2007 fue de 5.3%. O sea que, vamos tarde, mal y nunca.
¿Cómo se genera la riqueza? Pues mediante el ahorro y las inversiones productivas. No mediante el gasto, ni mediante el desperdicio, ni mediante aparentes inversiones que resultan ser no sólo improductivas, sino consumidoras de la poca riqueza que ha sido creada.
Aparte de los porcentajes citados arriba, hay muchos signos de que en vez de estar creciendo, la economía chapina es está encogiendo: Tanto el comercio como la industria han tenido menos actividad que el año pasado; y, de hecho, como sus ventas han bajado, también está bajando su aportación al fisco. Esto es muy malo porque en el comercio y en la industria, así como en otras actividades económicas, es donde trabajan los chapines. Y si bajan las ventas, ¿cuánto durarán los empleos? Otro signo es que ha caído la demanda de gasolina super. Esto ha tenido que ver con los precios altos que había hace unas semanas; pero también tiene que ver con que la gente está cambiando sus hábitos de consumo de gasolina para economizar unos quetzalitos.
Este es mal momento para pensar en aumentar los impuestos. Primero, porque es evidente que si las actividades económicas están creciendo sólo 5.4% en este año, comparado con el 16.6% que creció en 2007, eso quiere decir que la industria, el comercio, la construcción, el agro y otras actividades de esa naturaleza están en problemas. Y si esas actividades están en problemas, sus empleados están en problemas. Segundo, porque el dinero que se les quita a los tributarios, en vez de irse a inversiones productivas en el sector privado, se va a gastos improductivos (cuando no a corrupción) en el sector público.
Si yo tuviera que favorecer el ahorro y las inversiones productivas, para que crezca la riqueza y disminuya la pobreza, ¿qué haría? 1. Eliminaría el impuesto a los rendimientos de capital para que hubiera mas disponibilidad de recursos para inversiones productivas. 2. Eliminaría aranceles y aduanas para reducir el alza en los precios relativos, por el lado de la oferta de bienes, y así conseguiría que a los chapines les abundara más el sueldo. 3. Eliminaría la inflexibilidad del Código de Trabajo, para facilitar la movilidad laboral entre los guatemaltecos.
Yo estoy convencido de que la mejor política social es un buen empleo; y si queremos eliminar la pobreza, ¿qué mejor que más y mejores empleos?
13
Nov 08
¿Quién, en sus 5 sentidos, quiere más pobreza?
¿Quién, en sus cinco sentidos, querría más pobreza?…y sin embargo, la pobreza está en todas partes. Y el problema no es por qué es que hay pobreza, sino cómo es que salimos de la pobreza; y qué hacemos, ahora que sabemos cómo salir de ella.
En esta conversación, William Lewis -director fundador del McKinsey Global Insitute y autor de The Power of Productivity- habla sobre la productividad y sus efectos en la eliminación de miseria.
07
Nov 08
S@kis se pegó un patinón
Hoy me sorpendió el bloguero y cuate S@kis; pero me sorprendió con una gurruminada. Hace poco celebré que en mi barrio ha sido inaugurado el hermoso Oakland Mall. Hermoso, digo, no sólo porque es arquitectónicamente bello, sino porque a mi me pasa que cuando veo algo así, pienso en toda la gente que pudo llevar pan a su mesa durante la construcción del edificio. Y pienso en toda la gente cuya vida será mejor porque ahora tiene un empleo en el Centro Comercial.
21
Oct 08
El dogma de Colom
Alvaro San Nicolás Colom, presidente socialdemócrata de Guatemala, ha hecho una notable contribución a las ciencias sociales, quizás del tamaño de la que conocemos como El Dogma de Montaigne.
24
Abr 07
Viajes interplanetarios (suspiro)
“¡Así que tú serás un hombre espacial! Algunos de ustedes casi seguramente lo serán, porque muchos hombres de ciencia afirman que en unos veinte años se podrá viajar al espacio”; así decía la enciclopedia Mis primeros conocimientos.
Crecí leyendo Mis primeros conocimientos y la Enciclopedia Estudiantil; y uno de los volúmenes que leía una y otra vez era el de Trenes, Aviones y Viajes Interplanetarios, en una época en la que los viajes al espacio eran una utopía.
Ahora ha llegado el momento. No fue en veinte años porque aquel vaticinio de la Enciclopedia era de 1961; pero ahora la Space Adventures Company ofrece viajes a la Luna por US$ 100 millones. Uno dirá que es muy caro y que sólo es para los muy, muy, ricos; pero, ¿se acuerda de cuando las VCR eran sólo para los ricos? Los automóviles y los viajes en avión fueron sólo para los ricos. Hubo un tiempo en que sólo los ricos tenían televisión. ¿Verá mi generación, o la siguiente, el momento en que uno pueda ahorrar como loco y viajar a la Luna?
Gracias a Mi punto de vista por el tip.