Si la Ley de las Alianzas Públicas Privadas no llevara un nombre tan coqueto, seguramente no sería objeto de celebración.
mercantilismo
14
Abr 10
Celebran ley para favorecer el clientelismo
23
Nov 09
El ALBA, la exguerrilla y algunos sindicatos contra Guatemala
18
Feb 09
Empresaurios en busca de rentas parasitarias
Los directivos de la Asociación Guatemalteca de Instituciones de Seguros le pidieron al Congreso que en la Ley de Seguros que discute el Parlamento se incluya un seguro agrícola que será financiado por el estado.
Este es un ejemplo más, por si hicieran falta, de cómo es que un grupo de interés utiliza sus posibilidades de cabildeo para conseguir que, por medio de la ley, el poder político le asigne recursos ajenos que de otra forma quién sabe si podrían conseguir. No en balde es que Federico Bastiat escribió que el estado es una ficción por medio de la cual unos intentan vivir a costillas de otros.
Con el pretexto de ayudar a los pequeños agricultores, los aseguradores mercantilistas aumentarán sus ganancias artificiosamente con este subsidio estatal. Y por supuesto que le darán un mal ejemplo a otros grupos de interés que quieren exactamente lo mismo: Mamar de la teta del estado.
15
Ene 09
Desencanto y superficialidad de Vielman
08
Ene 09
Calvin & Hobbes y los rescates de empresas
Calvin & Hobbes es una de mis caricaturas favoritas; y de mi amigo, Ramón, he recibido la siguiente, ¡dibujada hace 15 años! acerca de los subsidios (y los rescates) para empresas:
Calvin está atendiendo su puesto de venta de limonada y Susie exclama, frente al puesto: “¡15 dólares por un vaso!”. A lo que Calvin responde: “¡Así es!, ¿quiéres uno?”.
En la siguiente viñeta Susie pregunta: ¿Cómo pretendes justificar el precio de 15 dólares?”; y Calvin contesta: Oferta y demanda.
Acto seguido, Susie dice: “¡¿Dónde está la demanda!?, no veo demanda”. Y Calvin le responde: “Hay mucha demanda”.
En el siguiente cuadro Susie exclama: ¡Ah sí!. Y Calvin explica: “Seguro. Como único accionista de esta empresa, demando ganancias monstruosas para mi inversión. Y como presidente y CEO de la compañía, demando un salario anual exhorbitante. Y como mi empleado, demando un salario por hora más alto y toda clase de beneficios laborales; y además están los costos de producción”.
Susie se le queda viendo al pichel de limonada y comenta: “Pero parece que sólo echaste un limón en agua sucia”. A lo que Calvin explica: “Bueno, es que tengo que cortar costos en algún lado, si quiero ser competitivo”. Y Susie pregunta: “¿Y qué pasa si me enfermo por tomar eso?” A lo que Calvin responde: “Caveat emptor es mi lema. Yo tendría que cobrar más si hiciera caso de todas las regulaciones ambientales y de salud”.
Susie se da la vuelta y mientras se aleja del puesto de limonada comenta: “Estas loco, voy a ir a tomar otra cosa”. Y Calvin, con el puño en alto, le grita: “¡Claro! ¡Quítame el trabajo! ¡Son ustedes, los enemigos de los empresarios los que arruinan la economía!”
Calvin se queda trompudo y en la siguiente viñeta se le ve caminando, luego se acerca a su mamá y le dice: “Necesito ser subsidiado”.
Esta lección, escrita hace 15 años por el genial Bill Waterson, muestra como funcionan el mercantilismo, los empresaurios y los subsidios (o rescates).
02
Oct 08
Entendiendo la crisis: back to 2005
Freddie Mac: A Mercantilist Enterprise, es un magnífico artículo que, en 2005, escribió Paul Cleveland en el Mises Institute.
“The Federal Home Loan Mortgage Corporation, commonly known as Freddie Mac, has recently come under close scrutiny after it was forced to restate its earnings upwards for several years. While it might be easy to dismiss this event as insignificant since earnings and profits were higher than initially reported, these restatements point to a serious problem associated with all Government Sponsored Enterprises (GSEs). The unfolding story involving Freddie Mac provides ample evidence that GSEs are a perversion of free enterprise and actually work to undercut the very essence of what a free market should be“. El énfasis es mío y es muy recomendable leerlo completo.
Gracias al cuate, Edwin, por la pista.