21
Sep 16

¡No son sacrificios!

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Admiro a atletas y personalidades como Jorge Vega y otros similares.  Celebro sus triunfos como atletas, como científicos, como emprendedores y como personas. Entiendo que para alcanzar los niveles de excelencia y competitividad que alcanzan necesitan ejercer virtudes como la racionalidad, la integridad, la laboriosidad, la ambición, la determinación, el orgullo, la perseverancia, la responsabilidad, la confiabilidad, el fortalecimiento, la prudencia, la limpieza y ciertamente el egoísmo.

A veces resiento que persigan sus objetivos personales mediante el uso de dinero ajeno tomado por la fuerza y luego repartido políticamente por quienes usufructuan el poder.  Pero aún así me maravillo con lo que logran como consecuencia de ejercer aquellas virtudes.  Perseguir valores como superarse uno mismo y vencer los límites propios requiere de un código específico que no admite trampa, ni inconsistencias.  Si entendemos que lo que las necesidades del organism vivo son las que determinan qué es lo que aquel organismo necesita para fomentar su vida, entendemos por qué es que los atletas de aquella talla (y otros atletas similares) necesitan vivir vidas buenas; y son ejemplos de vidas buenas.

Por eso me incomoda mucho, tanto como para compartir estas líneas, la forma en la que se venden los éxitos de Jorge Vega y de otras personas extraordinarias y dignas de elogios.  En el contexto de los logros de Vega, Pepsi invita a las personas a descubrir los sacrificios que tuvo que hacer para llevar a nuestro país a lo alto del deporte.

Sacrificio, sin embargo, es la entrega de un bien de mayor valor a cambio de un bien de menor valor, o de un no-valor. Digamos que un atleta valora muchísimo llevar a nuestro país a lo alto del deporte; si ese es el caso, todo lo que deja de hacer para alcanzar ese valor tiene menos valor que llevar a Guatemala a lo alto del deporte. Dejar de ir al mar para entrenar significa que se valora menos la ida a la playa, que las horas de entrenamiento.  Dejar de echarse los tragos para no exponer el cuerpo a toxinas significa que se valora más la salud que el placer de unas copas.  No es sacrificio dejar de ir al mar, o decirle no a unos cutos, si se tiene claro que hay valores superiores.  De ahí la necesidad de ejercer virtudes como la racionalidad, la prudencia y la determinación, para citar unas.

¡Sacrificaos!, es un mal consejo; y lo que la gente de buena voluntad quiere decir -realmente- cuando les aconseja a otros que se sacrifiquen (en este conexto), es perseveren, sean determinados, sean responsables.  ¡Esas sí son virtudes!

El principio racional de la conducta es exactamente el de actuar siempre de acuerdo con la jerarquía de los valores propios y racionalmente elegidos, y nunca sacrificar un valor mayor a uno menor.  Sin una jerarquía tal son imposibles los juicios de valor y de conducta racional, como son imposibles las elecciones morales. 

En todo caso, cuando un atleta le dice no a una parranda, porque ese fin de semana quiere dedicarlo a entrenar, lo que hace es descartar un bien que valora menos y pagar el costo de oportunidad porque no puede tener el pastel y comértelo también.

En ese sentido, Vega y otros atletas similares convierten sus sueños en oro -sus sueños- y ponen en alto el nombre de Guatemala, no porque sacrifiquen valores, sino porque persiguen aquellos valores (sus sueños y poner en alto el nombre de Guatemala) y ejercen las virtudes necesarias para alcanzarlos. ¡Por eso son ejemplares!

Respeto y celebro los éxitos y lo que representan atletas y personalidades como Jorge Vega y otros similares; y por eso me entristece que sus sueños y sus logros sean confundidos con algo tan deplorable como el sacrificio.

Seguramente seríamos mejores personas y viviríamos en una mejor sociedad, si en vez de promover el sacrificio, promoviéramos el hábito de adquirir y crear los valores de carácter necesarios para hacernos merecedores de florecer y sentirnos dignos de vivir y de gran estima, sin culpas inmerecidas y sin dejar de corregir errores cometidos. Sin aceptar el papel de animal de sacrificio, de esclavo, o de objeto.

Si te llamaron la atención estas ideas, seguramente quieras leer Objetivismo: la filosofía benevolente; por Warren Orbaugh.


07
Jul 16

Cine, felicidad y la guerra de las ideas

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En el último día de sesiones de la Objectivist Summer Conference 2016, mis tres conferencias favoritas fueron: Cinema as Art; It´s Not Just Enterteinment: How to Analyze Judge and Discuss Movies, por Michael Paxton; la segunda parte de Being Selfish, being Happy, por Tara Smith; y la conferencia filal titulada What Can We Do? por Yaron Brook.

Michael Paxton presentó un útil y práctico sistema para analizar y discutir películas que abarcó desde la formulación del tema hasta los arios elementos cinematográficos que integran una película.  Una guía conceptual y práctica para los amantes de la forma más compleja de arte ya que usa e integra otras formas de arte con el propósito de contar una historia.  En la sesión explicó el papel del director, del cinematógrafo, del guionista, el editor y otros roles clave.  Ciertamente fue una ayuda para aquellos que queremos mejorar nuestra capacidad de discutir películas objetivamente y con la terminología apropiada.

Puedes ver la lista en la ilustración de esta entrada.

También mostró como identificar el tema de una película por medio de preguntas: ¿Quién, o quienes son los personajes principales? ¿Cómo, o donde empiezan? ¿Qué clase de personas son? ¿Que camino han andado? ¿Cómo cambian, o qué aprenden?

Objetivista y feliz

En la segunda parte de su conferencia, iniciada ayer, Tara recordó que la razón es el medio que el hombre tiene para sobrevivir y el medio que el hombre tiene para ser feliz. Recordó que la receta para la felicidad se halla fundamentalmente en la ética, en una moral racional y en una filosofía que nos guía para florecer, que nos permita vivir de forma virtuosa consistentemente; no se puede transferir.  Aunque entre personas podemos afectarnos unos a otros y no somos inmunes a las acciones de otros, no podemos hacer felices a otros; ya que el núcleo de la felicidad es en función de cómo vivimos nuestras vidas; y no en lo que nos pasa en ella.

Habló de la virtud de la productividad y recordó que el trabajo con propósito, el trabajo productivo, es el medio que tenemos para proveer nuestras necesidades materiales y espirituales.

Habló de la perfección, que debemos entender en el contexto de la realidad, de modo que la perfección es posible cuando no se persigue en circunstancias irreales.

La felicidad, dijo, es un proceso, no es estática, reside en hacer el bien de una manera que sirva a la vida.  Pero, claro, no a la vida como existencia, sino a la vida plena, a la vida de uno, a la vida en la que es posible florecer virtuosamente.

¿Qúé podemos hacer?

En su artículo titulado What Can We Do? Ayn Rand abordó el tema de qué puede hacer un individuo para tener efecto en el cambio cultural de carácter filosófico.  En esta conferencia Yaron Brook abordó magistralmente aquel tema enel conexto del Movimiento Objetivista 2.0.

Con la maestría que sólo él puede hacerlo, Yaron Brook llamó la atención sobre el hecho de que nos hallamos en una guerra de las ideas en la que lo que está en riesgo es nuestra libertar, nuestra propiedad y nuestra vida. Al preguntar por qué deberíamos luchar en esa guerra resumió: porque lo que está en juego es nuestra vida y nuestros valores.

Recordó que el mundo no es determinista y que lo único que determina el mundo son las decisioines de las personas que vivimos en él.  Recordó que -al mismo tiempo que ocurren cosas horribles en el mundo- están ocurriendo cosas maravillosas también. Soy optimista, dijo, porque veo lo que están haciendo algunas personas y veo que podemos cambiar las cosas. Este es un mundo de ideas y de filosofía y lo que causa los cambios son las ideas.  En ese contexto, a la pregunta de cómo cambiar el rumbo del mundo y la civilización respondió: Learn, o sea profundizar el conocimiento del objetivismo como filosofía; Live, o sea vivir esa filosofía al máximo; Speak, o sea participar activamente en la guerra de las ideas; y Support, o apoyando con los medios que estén al alcance de uno a quienes están en la primera línea de aquella guerra.


07
Jul 16

Cuentos cortos, egoismo y felicidad, y la cultura

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Tres fueron mis conferencias favoritas de ayer durante la Objectivist Conference 2016: Finding Fuel in Short Fiction: Giving Full Conscious Value to the Writer´s Choice, por Shoshana Milgram; Being Selfish, Being Happy, por Tara Smith (que es una de mis expositoras favoritas); y Objectivism Indispensable Value to Understanting -and Changing- the Culture, que fue un panel en el que participaron Don Watkins, Steve Simpson (que acaba de editar un libro que te recomiendo: Defending Free Speech) y Elan Journo, autor de Winning the Unwinnable War, libro que he recomendado en ocasiones anteriores.

El objetivismo es radical no sólo en sus ideas morales y políticas sino, especialmente, en cómo guía el pensamiento.  Ofrece un marco intelectual poderoso para conceptualizar y tener impacto en temas culturales y políticos.  Los presentadores, autores de los libros mencionados arriba, ofrecieron perspectivas objetivistas con respecto a temas como la desigualdad, la libertad de expresion y la política internacional.

Combustible espiritual

La mañana, sin embargo, empezó con la parte de literatura del curso Spiritual Fuel: Appreciating Various Forms of Art.  Para el curso leímos el cuento The Last Sixty Minutes, por la ganadora del Premio Pulitzer Susan Glaspell.  Un cuento inequívocamente romántico, por una autora que en su momento defendió El manantial contra la censura.

En esta obra y luego de reflexionar sobre su vida y su carrera, un hombre decide cambiar el curso de aquella. Te recomiendo que la leas y te preguntes si puede inspirarte y por qué.

Durante la conferencia, Shoshana nos recordó que dado que tenemos la facultad volitiva, las elecciones que hacemos son importantes y son la clave para el arte romántico; y comentó que el hecho de que las puedan cambiar el curso de sus vidas, incluso al final de las mismas, da pie para una grandes historias.

Objetivista y feliz

La idea de que una persona pudiera ser egoísta es tan ajena a nuestra cultura, que las personas luchan para entender qué querrá decir Ayn Rand con aquello. En esta primera parte de su conferencia, Tara Smith, explicó las características cruciales del egoísmo racional, qué no es egoísmo racional, y para qué sirve aquel.  Empezó a explorar laforma en la que el egóismo de las personas es su único medio para conseguir la felicidad sostenible.  Hoy continuará con este asunto.

El principio del egoísmo es la razón, su objetivo es el florecimiento y la pregunta clave es: ¿Qué significa para ti?  Explicó que la vida es un proceso autogenerativo y auto sostenible y que para florecer, para alcanzar la felicidad debemos actuar y promover nuestros intereses propios.

Tara explicó que el egoísmo no es transparente porque no siempre sabemos como promover nuestro propio interés; el egoísmo no es subjetivo porque no todo lo que pensamos que es en nuestro propio interés lo es en realidad; no es materialista porque, aunque tiene componentes materiales, lo cierto es que las personas también tenemos una dimensión espiritual, entendiendo espiritual como atingente a la mente, necesidades como orgullo, relaciones, o arte, por ejemplo; el egoísmo no es automático, hay que pensarlo; y tampoco es hedonista porque el placer no es un estándar; sin embargo, el egoísmo no es anti-placer, no por ver el árbol debemos perder de vista el bosque (digo yo); el egoísmo es notablemente apasionado porque la vida está en la mente; el egoísmo no es depredador ya que abusar de otros no resulta en nuestro propio mejor interés, el egoísmo no sanciona el sacrificio de otros.

Tara aconsejó que para construir un yo, para uno mismo, hay que ponerle atención a las cosas que a uno le gustan y pensar acerca de ellas, pensar por que es que le gustan a uno y cuando eso está entendido hay que perseguirlas y disfrutarlas.

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20
May 16

El “bullying” y lo peor entre nosotros

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¿Viste las reacciones en redes sociales luego del error que una chica cometiera en el programa de televisión Combate?

Para hacer la historia corta una chica hizo mal una suma en un concurso y el asunto es Trending Topic en Twitter y se volvió viral.  Hay personas que entran al perfil de Facebook de la chica y la insultan hasta con saña, los memes abundan y hasta hay empresas que se apresuraron a sacar publicidad burlándose del asunto.

Entre nosotros, ¿de verdad está bien atacar de forma grosera a una persona porque cometió un error, o porque no sabe algo? ¿En serio?

De cuando en cuando un hecho saca lo mejor de los guatemaltecos: la tragedia de El Cambray, huracanes y tormentas tropicales y terremotos por ejemplo; pero de cuando en cuando algo saca lo peor.  ¿Te acuerdas cuando una casa estuvo por caer en la carretera a El Salvador? Los mensajes de odio y de rencor daban escalofríos.  Lo que está ocurriendo ahora con una chica de la tele, en un programa irrelevante (y que pudo tener su origen en algo fabricado por los productores), ¿significa que hay -por ahí- demasiada gente con el gatillo rápido para atacar, insultar y bulear? ¿Hay demasiada gente lista para aprovecharse del error de alguien aunque eso signifique humillar a quien lo haya cometido? La gente que no se anima a salir a disparar en una carretera porque no le dan vía, ¿no duda en vejar y ofender a otros, sólo por que puede y da risa?

Quizás deberíamos revisar nuestros códigos para interrelacionarnos por medio de teclados y pantallas; porque, ¿de verdad está bien humillar a una persona y decirle groserías, sólo porque se puede hacer en Facebook?

Esta entrada salió en Vanidades,  Publinews y en Soy 502.


29
Oct 15

No, no son empresarios

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Al referirse al presunto cabecilla de la red de corrupción en el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social, puesta al descubierto ayer, los medios de comunicación se refieren a él como empresario.  Esto es porque es propietario de las empresas que se beneficiaban de las compras privilegiadas en el IGSS y que obtenían contratos y vendían medicinas mediante la práctica de sobornos en dinero, o en viajes.

Es común, en parte porque los medios de comunicación así los describen, que la gente crea que todos propietarios de negocios son empresarios.  Leemos, vemos y escuchamos que a los dueños de autobuses del transporte colectivo se les llama empresarios; y que a otros propietarios de negocios -que viven de privilegios y de la teta del presupuesto y de los tributarios- también se les da aquel título.  ¡Hasta ha habido quienes han dicho que los narcos son empresarios, o se han referido a la industria del secuestro!

Esta práctica laxa confunde y es peligrosa.

Confunde porque el hecho de que alguien sea un alto ejecutivo en una empresa comercializadora de medicinas, por ejemplo, (ya sea que esta empresa sea privilegiada, o no), no lo hace empresario.   Un ejecutivo, no es un empresario.  El hecho de que alguien compre empresas (con dinero mal habido, o bien habido), tampoco lo hace empresario. El hecho de que alguien funde empresas para participar de una red de defraudación, o al amparo de protección legislativa, o política, tampoco lo hace empresario.

Un empresario emprende, innova, descubre, crea y toma riesgos, no se cobija.  El empresario no depreda sino que produce; de ahí que el mejor nombre para los propietarios de negocios que medran al amparo del poder político y de la legislación hecha a la medida, o del delito, es el de empresaurio (o pirata, o gangster).  Empresaurio es una palabra que alude muy bien al carácter depredador y saqueador (cuando no delictivo) de gente como los autobuseros y miles de proveedores del estado.

La actividad de los empresaurios sólo es posible gracias al estatismo y al colectivismo (bases del socialismo, del mercantilismo y del capitalismo de amiguetes), cuyos ideales hacen posible la corrupción y el parasitismo que vemos en el seguro social, en las aduanas y todavía falta por ver en el resto de la administración pública.

La práctica laxa de definir empresario sólo como el propietario de un negocio (sobre todo si es un negocio corrupto) es peligrosa porque la función de la definición es identificar la naturaleza de las unidades contenidas en un concepto.  El propósito de la definición es distinguir ese concepto de otros (distintos, o parecidos) y mantener sus unidades diferenciadas de todo lo existente.  ¿Te das cuenta?  Un productor es diferente a un depredador.  Un emprendedor es diferente a un parásito.  Un empresario es diferente a un empresaurio.  Y si no hacemos el ejercicio intelectual  y práctico de diferenciarlos abdicamos a la responsabilidad que tenemos de distinguir entre el bien, del mal.  Así, ¿o más peligroso?


17
Jul 15

Maldiciones y religiosos

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Es un error grave confundir la religión con la ética. ¿Por qué no es virtuoso Tomás, el discípulo de Jesús?  Porque no creyó ciegamente; porque su creencia necesitaba pruebas y porque quería evidencias para creer.  Porque en realidad no quería creer, sino saber.  Creer sin ver es el campo de la religión.

¿Cuál es el de la ética? Esta es el código de valores que sirve para guiar nuestras elecciones y acciones con el propósito de ser felices y vivir como seres humanos.  Y para vivir como seres humanos debemos elegir hacerlo.  La razón, y no la fe es la herramienta que nos permite conocer e integrar los valores que –de acuerdo con la realidad y la naturaleza– hacen posible que vivamos como seres humanos pensantes y productivos.

Esto viene al caso porque se avivaron los intentos de imponer la enseñanza de la Biblia en las escuelas y colegios, por parte del diputado Marvin Osorio y un grupo de fanáticos.  En ese contexto, el consultor Carlos Mendoza fue maldecido y acusado de ser enviado de Satanás, durante una intervención en el Congreso.  Te recomiendo que veas el vídeo publicado por el diario La Hora.  Es una muestra de lo que ocurre cuando los fanáticos del pensamiento único tienen, o pretenden controlar el poder y hacer uso de la ley para imponer sus creencias

En julio de 1562, el mismo celo que animó a los religiosos en el Congreso chapín el miércoles pasado, animó a Diego de Landa y a otros frailes a quemar los códices de los mayas porque no tenían cosa en que no oviesse supersticion y falsedades del demonio.

El control político de la educación es el semillero del pensamiento único emanado del ministerio del ramo y de la ideología que lo controla.  De ese tipo de educación salen los ciudadanos obedientes que son más súbditos que otra cosa.  De ahí salen los mandantes y tributarios que no cuestionan a sus mandatarios, que creen que estos tienen derecho a expoliarlos y que más que mandantes se sienten gobernados.  ¿También van a salir de ahí fanáticos que en vez de atender razones sólo puedan lanzar maldiciones y gritar ¡Saquen a Satanás!?  Es mala idea forzar la Biblia (o cualquier otro libro) en la educación.

Columna publicada en elPeriódico.


05
Sep 14

Septiembre

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El 2 de septiembre, en la boda de Jim Taggart, Francisco d´Anconia le explicó a Hank Rearden el valor moral del dinero; y un año después la empresa d´Anconia Copper fue nacionalizada.  Francisco desapareció y dejó a todos pasmados y aterrorizados.  En una valla, Francisco dejó un mensaje: Tu lo pediste, hermano.

El 2 de septiembre de 1946 fue el día en el que Ayn Rand comenzó a escribir La rebelión de Atlas, de donde salieron los hechos que relaté arriba. Si ya leíste la novela los reconociste rápido; pero si no la has leído, ojalá que la frase El valor moral del dinero te pique la curiosidad y te animes a leerla.

D´Anconia dice del dinero: Comerciar por medio de dinero es el código de los hombres de buena voluntad. El dinero se basa en el axioma de que cada hombre es dueño de su mente y de su esfuerzo… El dinero te permite obtener por tus bienes y tu trabajo lo que ellos valen para los hombres que los compran, pero no más….El dinero exige de ti el reconocimiento… de que el lazo común entre los hombres no es el intercambio de sufrimientos, sino el intercambio de bienes. El dinero exige que vendas, no tu debilidad a la estupidez de los hombres, sino tu talento a su razón; exige que compres, no lo peor que ofrecen, sino lo mejor que tu dinero pueda encontrar. Y cuando los hombres viven a base del comercio –con la razón, no la fuerza, como árbitro final– es el mejor producto es el que triunfa, la mejor actuación, el hombre de mejor juicio y más habilidad, y el grado de la productividad de un hombre es el grado de su recompensa.

El 2 de septiembre aparece dos veces más en la novela: en la primera escena, cuando leemos por primera vez: ¿Quién es John Galt? Y esa es la fecha en la que Hank y Dagny Taggart descubren el motor que revolucionará la energía en el mundo.  ¡Además, en septiembre es mi cumpleaños!

Estas meditaciones septembrinas son apropiadas porque las calles están tomadas por dirigentes y seguidores que creen que es moralmente aceptable tomar valores por la fuerza y exigirlos mediante el chantaje.  Un poco del discurso de Francisco no les cae mal a ellos, ni a quienes los subestiman.

Columna publicada en El periódico, la ilustración la tomé de Facebook.


19
Jul 13

Con la Biblia en la mano…eso sí

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Con presuntos argumentos bíblicos un odontólogo pediatra agredía a su esposa física y psicológicamente, además de practicar con ella actos sádicos.

La foto de Pensa Libre muestra al personaje con una Biblia en sus manos y el reportaje cuenta que entre los abusos que cometía el dentista contra la víctima figuran que le orinaba la cabeza, le escupía el rostro, la obligaba a desnudarse en la madrugada y, a manera de sometimiento, la tiraba al suelo y le ponía el pie encima. En uno de sus últimos actos de maltrato la golpeó y le recordó que ya le había fracturado un brazo y una rodilla. ¿Ahora qué querés, que te mate?, le preguntó, sin que ella pudiera responder.

¿Será cierto que sin religión no puede haber comportamiento moral? ¿Será cierto que mientras más religiosa es una persona, mejor es su confiabilidad moral?

Hace unas semanas grupos de religiosos y conservadores la emprendieron contra una campaña sobre la tolerancia y contra la discriminación; campaña que estimaban inmoral.  ¡Había que ver lo arrogantes que se pusieron cuando creyeron que habían conseguido la censura de la campaña! I am hollyer than thou!, parecían gritarle a quien quisiera escucharlos.

La noticia del dentista fue publicada ayer…y esta es la hora en la que no he leído comentarios al respecto de ninguno de los religiosos y conservadores que se indignaron por la campaña citada arriba.  ¿Por qué es que una invitación a respetar la vida y las decisiones libres de otras personas enardece a los somatadores de biblias, en tanto que el asunto del dentista golpeador y aferrado a su Biblia pasa inadvertido?

La foto la tomé de Facebook.


11
Jul 13

La ética en Aristóteles y Ayn Rand

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Existe una moralidad de la razón, una moralidad apropiada para los hombres, y la vida humana es su estándar de valor, recordó Gregory Salmieri durante la sesión general de ayer, en la mañana, en la Objectivist Conference 2013.

Salmieri también apuntó que la vida es una actividad, en oposición a un atributo estático.  La vida es una actividad, en oposición a un proceso con un fin más allá de el; el propósito de la vida humana está en ella misma.  Otra idea que ofreció es la de que lo bueno y el propósito de algo hacen que valga la pena hacer, o tener ese algo.  Lo bueno y el propósito de algo unifican sus componentes.

Una actividad, a diferencia de un producto, es un fin último de alguna manera; pero puede ser valorado en función de otra actividad a la que está subordinada.  El bien humano es el fin último de toda acción humana.  Para Aristóteles el bien humano es una vida virtuosa de actividad racional; y Aristóteles distingue entre vivir y vivir bien.

La vida -recordó Salmieri- es algo que hacemos, no algo que tenemos…y los héroes actúan para promover la vida y lo hacen con gran habilidad.

Las sesiones generales están disponibles, aquí, hasta el 15 de agosto.

Durante la tarde Harry Binswanger y Yaron Brook hicieron un recorrido por el estado de la cultura.


07
Jul 13

Lo moral y lo práctico en Ocon 2013

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El querer algo implica una gran responsabilidad, dijo Onkar Ghate durante la primera sesión de la Objectivist Conferencie 2013, que comenzó en Chicago.

La conferencia de Onkar se refitió a que un error crucial en la ética es enfrentar lo moral contra lo práctico.  En su charla, Onkar repondió a preguntas como: ¿Cuáles son algunas de las fuentes de este error? ¿Cuáles son algunas de sus manifestaciones existenciales? ¿Cuáles son los efectos de este enfrentamiento en pensamiento, incluidos los menos evidentes? ¿Cuál es la relación apropiada entre lo moral y lo práctico? ¿Qué lugar ocupa este asunto en la ética y en la vida?

Onkar también explicó como es que la moral es un entendimiento profundo de lo que uno hace y practica.

Las sesiones generales están disponibles, aquí, hasta el 15 de agosto.

Durante el día también participé en el curso sobre la historia y filosofía de los experimentos cruciales, por Daniel Schwartz. Un experimento crucial es definido, usualmente, como uno que decide -de forma concluyente- cuál de un grupo de teorías rivales es verdader.  Actualmente muchos filósofos de las ciencias, influidos por el problema de la indeterminación, sostienen que la posibilidad de experimentos cruciales es un mito. Más que abandonar una hiótesis que es contradicha por un experimento crucial, dicen, posdemos sostener la hiipótesis y, en cambio, abandonar una suposición más bbásica.

El curso busca iluminar la importancia y belleza de los experimentos cruciales por medio de la discusión de su historia y filosofía.  Ayer, Schartz se enfocó en definiciones y contexto; pero hoy empezaremos con algunos de los experimentos cruciales en los trabajos de Francis Bacon e Isaac Newton con respecto a la naturaleza de la luz que es, ¿una partícula, o una onda?  Esta discusión histrórica será fundamental para responderle al problema de la indeterminación.

Luego participé en el curso sobre la historia de Inglaterra: los Estuardo y los puritanos, por Andrew Lewis.  Siempre que puedo me meto a un curso de Lewis porque me encanta la Historia, me gusta mucho leer sobre la Historia de Inglaterra y porque sus cursos no sólo informan, sino que son muy entretenidos.

Lewis nos cuenta cómo es que la asención de los Estuardo escoceses disparó un choque intrigante entre tresideologías políticas: la del derecho divino de los reyes (sostenida por los Estuardo)  la teocracia (sostenida por los puritanos calvinistas) y el constitucionalismo (sostenido por el Parlamento británico).  En las próximas sesiones Lewis mostrará cómo es que la DIM hypothesis de Leonard Peikogg puede ser aplicada para entender la agitación política durante aquella época.  También discutiremos los fundamentos de La revolución gloriosa.

Ayer comenzamos con el contexto social, político y cultural de la época, así como con el árbol genealógico de los Estuardo.

En la tarde hubo una sesión sobre el futuro del objetivismo -la filosofía de Ayn Rand– en la academia.

En esta ocasión, a Ocon están asistiendo mis amigos Marta Yolanda Díaz-Durán, profesora de Retórica de la Escuela Austriaca en la Universidad Francisco Marroquín; Warren Orbaugh, director del Centro Henry Hazlitt, de la UFM; y Juan Carlos Ceballos, miembro del Club de Rand en la Biblioteca Ludwig von Mises.