13
Mar 20

La estatización del cuerpo

Ayer fue el Día mundial del riñón y es ocasión propicia para meditar sobre la iniciativa de legislación para la disposición y trasplante de órganos, tejidos y células humanas que es discutida en el Congreso; misma cuyo nombre más certero sería legislación para la estatización del cuerpo humano.

La iniciativa 4712 viene desde 2014.

Para comenzar, dicha normativa crea un cacique de los trasplantes; ese burócrata que tendrá a su cargo administrar la política y la mecánica de los trasplantes al margen de los deseos de donantes y receptores.  Claro que con criterios técnicos y políticos. Uno puede suponer, sin mucho temor a equivocarse, que tal y como se vio recientemente en España en el contexto del coronavirus.

Crea un Consejo Nacional de Trasplantes integrado por Raimundo y todo el mundo, siempre que los integrantes formen parte de la tribu del sistema político de la salud estatizada.  Esa tribu que luego resulta involucrada en la creación y usufructo de plazas para fantasmas, por ejemplo. Y luego, ¿te imaginas a qué hora se ponen de acuerdo 12 directores? Eso devendrá en poder absoluto para el cacique.

Preocupa, de sobremanera, que la legislación prohíba la compensación económica para los donantes (tomando en cuenta que compensación no implica pago, ni compra-venta) ya que, ¿quién compensa al donante que tenga que pasar dos meses sin trabajar a causa de la donación? Si algo sale mal para el donante, ¿cómo paga los costos de su recuperación?

La propuesta de normativa dice que los tributarios tienen que proveerle al receptor la medicación necesaria para el mantenimiento del órgano trasplantado, en forma gratuita, oportuna y permanente y con los más altos estándares. ¡Pero si en el sistema estatizado de salud a veces no hay ni antiácidos!  Y haz números, un tratamiento de inmunosupresores puede costar unos US$14 mil al año, que debes multiplicar por 40 trasplantes por millón al año, que es el estándar para Guatemala.

Es triste; pero otro nombre para esta normativa sería: Legislación antitrasplantes.  Gracias al doctor Fredy Abed, por las conversaciones que llevaron a estas reflexiones.

Columna publicada en ElPeriódico.


13
Dic 19

Robespierre y la presunción de inocencia

En 1793-94 Maximiliano Robespierre y su Comité de salvación pública lidereaban el Reino del terror -durante la Revolución francesa-; y entonces la presunción de inocencia debe haber sido como una cadena con bola para la imposición de las aspiraciones revolucionarias. Aquel fue un período de persecuciones, señalamientos y acusaciones celebradas por un Robespierre confiado y autoritario que, con los jacobinos, estaban decididos a purificar a Francia de cualquiera que se opusiera a sus ideas.

La ilustración es de dominio público, via Wikimedia Commons.

Escucha el podcast aquí.

Así son los revolucionarios. Lenin, por ejemplo, dijo que las cortes no deben prohibir el terror… deben legalizarlo como principio. Y en el contexto de la dictadura del proletariado (una forma de Reino del terror), hizo énfasis en que el término de dictadura significa autoridad sin las trabas de la ley, no restringida por normas y basada en la violencia.

En 1794, sin embargo, Robespierre sucumbió ante la inestabilidad que él y los jacobinos habían generalizado; y fue guillotinado durante el mismo proceso que había cultivado.  En mi pueblo se diría que le dieron una cucharada de su propio chocolate.

En la Declaración de los derechos del hombre, la presunción de inocencia está redactada así: Todo hombre es considerado inocente hasta que ha sido declarado convicto…; y en la Constitución guatemalteca está expresado como: Toda persona es inocente, mientras no se le haya declarado responsable judicialmente….  La mayoría de la gente lo interpreta como que todos (tirios y troyanos) somos inocentes hasta que no se demuestre lo contrario, y es cuestión de sentido común esta interpretación.  Excepto en ambientes purificadores donde -en el altar del pensamiento único y de las consignas- la presunción de inocencia no se les debe aplicar a los otros; pero sí a los propios.

¿Qué podemos aprender de esta historia? Quizás…que las garantías y principios de derecho deben ser para todos por igual, siempre, sin privilegios, sin prejuicios ideológicos, porque nadie está seguro de que no va a caer en manos de los robespiers de esta tierra y de los jacobinos que los han aplaudido.

Columna publicada en elPeriódico.


15
Nov 19

Impuestos y los derechos del hombre

La Declaración de los derechos del hombre y del ciudadano fue aprobada por la Asamblea constituyente francesa en 1789  Es un documento precursor que atisba que los derechos son condiciones de la existencia requeridas por la naturaleza de los hombres para vivir de manera adecuada; y que violar los derechos del hombre significa forzarlo a actuar contra su propio criterio, y a expropiar sus valores.

Puedes escuchar el podcast aquí.

En su artículo 14, la Declaración dice: Todo ciudadano tiene derecho, ya por sí mismo, o por su representante a constatar la necesidad de la contribución pública, a consentirla libremente, a comprobar su adjudicación y a determinar su cuantía, su modo de amillaramiento, su recaudación y su duración.  Amillarar es calcular cómo se van a distribuir los tributos.

¿Cuándo fue la última vez que constataste la necesidad de los impuestos que te quitan? ¿Cuándo consentiste –libremente– aquella expoliación y su adjudicación? ¿Cuándo y a qué hora consentiste su cuantía y duración? ¿Quién te representa? ¿Ya le pediste cuentas?

La gráfica es de Prensa Libre.

Estas meditaciones vienen a cuento porque el presupuesto para los políticos y burócratas y sus clientelas, conocido como Presupuesto del Estado, es tradicionalmente deficitario porque los encargados de servirse de él gastan más de lo que pueden tomar. En promedio, la brecha fiscal es de Q.1,552 millones al año. Normalmente ese agujero se atribuye a que los burócratas calculan mal cuánto van a poder tomar del sector voluntario de la economía y trasladarlo al sector coercitivo; y a que los publicanos son incapaces de despojar lo que los burócratas han calculado mal.

Los análisis suelen centrarse en la incapacidad de expoliar, en vez de en la necesidad de limitar los gastos de los beneficiarios del presupuesto. ¿Cuándo fue la última vez que escuchaste acerca de congelar los gastos para detener la necesidad de imponerle más tributos a la gente productiva? ¿Cuándo fue la última vez que oíste de la necesidad de sacar del presupuesto a todos los gastos clientelares y a los intereses específicos y particulares para detener la necesidad de elevar y multiplicar impuestos?

Tú, ¿qué piensas?

Columna publicada en elPeriódico.


09
Oct 18

Mural de Carlos Mérida, y Benito Juárez

Hay alboroto porque en una casa de la zona 9 -que es propiedad privada- hay un mural de Carlos Mérida y algunas persona temen que sean destruidos. Los estatistas quieren que el Instituto de Antropología, Etnología e Historia (o alguna otra autoridad) proceda a conservar el mural y quieren que sea declarado patrimonio cultural de la nación, lo que equivale a expropiarlo.

Foto tomada de Facebook.

Los más moderados entienden que el mural es propiedad privada y que es a su propietario a quien le corresponde decidir qué hacer con él, y cómo conviene a sus intereses. En última instancia, el respeto al derecho ajeno es la paz, como dijo Benito Juárez. Por cierto que, antes de opinar (a veces vehementemente), ¿alguien le ha preguntado el propietario qué planes tiene para el mural?

No soy fan de eso que llaman arte abstracto, pero personalmente yo lamentaría la destrucción del mural en cuestión porque decora bonito un área urbana que no tiene mayor atractivo. Sin embargo, entiendo que los derechos individuales deben prevalecer sobre los intereses colectivos.

Hace años, yo mismo lamentaba la destrucción de varias casas de arquitectura extraordinaria y cincuentera, por Wilhelm Krebs, que estaban ubicadas en la Avenida de la Reforma, y que fueron sustituidas por edificios; del mismo modo que lamenté la pérdida de una gasolinera de arquitectura curiosa, en la Avenida de las Américas.  Pero una cosa es lamentar un cambio y otra muy diferente es pretender que el propietario de un inmueble, o de una obra de arte, no pueda disponer de ella como corresponde, sólo porque un grupo de interés estima que no deba hacerlo….o peor aún, pretender que no tenga derecho a hacerlo.

Foto tomada de Facebook.

Por otro lado, ¿sábes qué ocurrirá si prevalece la idea de que en la arquitectura (y en el arte en general) el propietario debe estar sometido a los intereses colectivos? Pues pasará que ya no habrá incentivos para hacer buena arquitectura, o para incluir obras de arte en casas y edificios. ¿Quién querría correr el riesgo de que luego, la gente no lo deje modificar el inmueble, o demolerlo cuando fuera necesario? Sacarán del mercado a los buenos arquitectos y artistas.

El arquitecto de la casa en cuestión, por cierto es Carlos Haeussler.

Hay precedentes en casos como el del mural de Mérida.  En la Quinta avenida y 16 calle de la zona 1 murales de Roberto González Goyri fueron removidos y luego vueltos a colocar en un edificio que fue remodelado.  Pero tengo entendido que fue por voluntad de sus propietarios y no por algún tipo de intervención estatista a modo de coacción.  ¿Fue así?

De cualquier manera, si alguien cree que el mural merece ser conservado, ¿qué es lo que corresponde? Que lo compre y que haga lo necesario para conservarlo cuando sea de su propiedad.  La compra puede ser individual, o por medio de algún tipo de acción colectiva, incluyendo el crowdfunding.  Lo que no se vale es imponer valores, preferencias y necesidades sobre otros.

La foto 1 la tomé de Fotos antiguas de Guatemala.


29
Abr 18

El sistema penitenciario es una bomba de tiempo

El sistema penitenciario de Guatemala -que es horriblemente inhumano- va a estallar y a pesar de las evidencias: Mañana hago mi nido, dijo el zope.  Sólo en esta semana que termina, un motín en la Granja Penal Canadá, Escuintla, dejó ocho reos muertos y 25 heridos.

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Al parecer grupos que luchan por el poder o negocios ilícitos tuvieron una pelea que desencadenó en el enfrentamiento con armas de fuego, dijo el Director General del Sistema Penitenciario.

¿Cómo iba a ser de otra forma si, entre otras cosas, las cárceles están saturadas?

La Dirección General del Sistema Penitenciario registra 23,962 presos a nivel nacional. Este nivel sobrepoblacion representa un 351% de saturación, ya que los 21 centros habilitados solo poseen espacio para 6,812 personas. Corinne Dedik, investigadora del CIEN, expresó que Guatemala se encuentra entre los diez países con mayor hacinamiento en cárceles a nivel mundial. Agregó que el 48 por ciento de las personas en las cárceles cumplen prisión preventiva y anotó que la aplicación de una medida sustitutiva al 15 por ciento de esas personas, por medio del monitoreo electrónico, permitiría una mejora en la seguridad. Pero, ¿qué ocurre? Niente, nada.  Excepto, claro, que actualmente el Ministerio de Gobernación licita tres mil brazaletes electrónicos para monitoreo de personas ligadas a procesos penales…pero estos podrán utilizarse hasta 2019 y mientras tanto tic, tac, tic, tac, tic, tac.

La peli que ilustra esta entrada es Presunto cuplable y es mexicana.  No se si hay algun reportaje, o documental parecido de aquí de Guatemala; pero sospecho que cualquier parecido con el sistema de justicia y el sistema penitenciario chapín, no es cuento.


30
Ene 18

San Pedro la laguna, libertad de expresión bajo ataque

Una resolución del Tribunal de Sentencia Penal de Sololá, les prohibió a cuatro vecinos de ese departamento criticar al Concejo de San Pedro La Laguna en medios de comunicación, luego de que aquellos presentaran una denuncia por supuesta sobrevaloración en obra pública.  Esa resolución es violatoria de la libertad de expresión y podría ser prevaricato.

El artículo 35 de la Constitución es clarísimo en cuanto a que es libre la emisión del pensamiento por cualesquiera medios de difusión, sin censura ni licencia previa. Este derecho constitucional no podrá ser restringido por ley, o disposición gubernamental alguna; y es clarísimo en cuanto a que no constituyen delito o falta las publicaciones que contengan denuncias, críticas o imputaciones contra funcionarios o empleados públicos por actos efectuados en el ejercicio de sus cargos.  Además, de acuerdo con el Código Penal, comete el delito de prevaricato el juez que, a sabiendas, dictare resoluciones contrarias a la ley.

La libertad de expresión está bajo ataque desde distintos flancos: Desde la corrección política, por ejemplo, y ahora desde el pretendido gobierno de los jueces.  Este fenómeno indeseable -que es el gobierno de los jueces- fue identificado por primera vez en 1921 por Edouard Lambert y es un sistema de revisión judicial verdaderamente sin restricciones, que no pudiera ser limitado ni siquiera por medio de una enmienda constitucional. El gobierno de los jueces no debe ser confundido con el control jurisdiccional que es, este último, un componente del estado de derecho.

A los jueces como el que emitió la resolución violatoria de la libertad de expresión, en Sololá, les viene como anillo al dedo ese neoconstitucionalismo que, con el pretexto de superar al constitucionalismo liberal clásico, cuyo eje es limitar el poder de los gobernantes y proteger a los mandantes todos por igual, les atribuye a los jueces (y a otros funcionarios) facultades novedosas. Dichas facultades  no sólo consisten en dispensar favores a grupos de interés específicos, con criterios políticos; sino que hacen posible que jueces (y a otros funcionarios) sacrifiquen los derechos individuales, no sólo en favor de intereses colectivos, sino en favor del ejercicio del poder; ejercido este no sólo en supuesto beneficio de la gobernabilidad, sino en abierto beneficio del abuso del poder.

Te has preguntado, ¿cuál es tu opinión sobre la libertad de expresión?

La ilustración la tomé de Facebook.


29
Nov 17

Acerca de limpiar Guatemala

Imagínate que fuera así de fácil limpiar Guatemala.

Hoy anduve por el Mapa en Relieve y el hombre de la limpieza estaba haciendo lo suyo con una sopladora.  Lo que se me vino a la cabeza fue: ¡Qué tal si fuera así de fácil limpiar Guatemala!

Pero…¿de qué la limpiaría? La limpiaría de privilegios.  Me gustaría una ley que dijera: en ningún caso el Congreso dictará ley o decretos arbitrarios o discriminatorios, en los que explícita o implícitamente se concedan prerrogativas, privilegios o beneficios que no puedan disfrutar todas las personas que tengan la oportunidad de hacerlo.  Eliminaría del Prepupuesto del estado toda partida y asignación destinada a intereses específicos y particulares.

¿De qué más la limpiaría? De toda legislación que no protegiera los derechos individuales de todos por igual.

La limpiaría de delincuentes y de prevaricadores -de acuerdo con la ley penal- claro.

Pero no se puede, ¿verdad? ¿O sí?


18
Oct 17

Hoy, “We the Living”

La película We the Living, basada en la novela homónima de Ayn Rand, será objeto de un cine foro a las 7:00 p.m. en el Auditorium Milton Friedman, de la Universidad Francisco Marroquín, el mismo será conducido por Warren Orbaugh, director del Centro de Estudio del Capitalismo. La entrada es gratuita.

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La peli fue hecha en Italia durante la Segunda guerra mundial y fue prohibida por régimen fascista de Benito Mussolini. Durante mucho tiempo estuvo perdida y olvidada hasta que, en 1986, fue presentada en los Estados Unidos de América.

We the Living, o Los que vivimos es la adaptación de la primera novela publicada por Ayn Rand.  No es autobiográfica, pero se basa en experiencias de la autora durante su vida en la Unión Soviética.  Para su publicación -en 1934- recibió el apoyo de uno de mis personajes favoritos: H. L. Mencken.  Es una historia que ocurre en medio del miedo y del hambre, en medio de la lucha del individuo contra la colectividad y muestra lo que es la vida en un régimen comunista.

En Guatemala es exhibida en el marco de la conmemoración de los 100 años de la revolución bolchevique, desde la perspectiva de los derechos humanos, que tiene lugar en la UFM, que recuerda esa efeméride con una serie de actividades académicas del 17 al 25 de octubre de este año. Aquel es uno de los eventos que más ha influido en la historia contemporánea.

Entre los conferencistas invitados a participar se cuentan: José María Alvarez, poeta y literato español; y Carlos Alberto Montaner, periodista y autor cubano, cuyas conferencias se titulan Perspectivas sobre los Derechos Humanos en Cuba y Por qué murió el comunismo y porqué revive incesantemente; también Armando Valladares, que hablará sobre El siglo más sangriento de la historia moderna y, además, recibirá un doctorado honoris causa por sus contribuciones a la causa de la libertad.

José María es un intelectual de esos de verdad; un pensador profundo y contundente, además de encantador. Con él tuve el gusto de pasear por la ciudad el domingo pasado en compañía de Carmen, su esposa; y de Ami, su asitente.  Carlos Alberto -a quien conozco desde 1986, poco más o menos- es siempre una fuente generosa de información y de insights.  A Armando Valladares lo saludé hace unos 10 años en Miami, y lo tengo por uno de los heroes del siglo XX.  Tengo muchas ganas de conversar con él, en cuanto venga, la semana entrante.

La Revolución de octubre, o Revolución bolchevique no solo cambió la forma de vivir en Rusia, sino la forma de vivir en todo el mundo. No pasó mucho tiempo hasta que países en el este de Europa, Asia, África e incluso América fueran conquistados por las ideas de esta revolución y finalmente terminaran bajo regímenes del mismo tipo.

En China, Mao replicó sus ideales, y creó el régimen que sigue en el poder hoy en día. Otros países comunistas, como Corea del Norte y Cuba, siguen, también, los ideales de la Revolución de octubre. Latinoamérica y África fueron vistas como campos de batalla ideológicos. Las consecuencias de esta revolución no se acabaron con la caída del Muro de Berlín en 1989 perduran hoy en día; y podemos verlas reaparecer en países cercanos como Venezuela.

Entre las actividades programadas se cuentan dos cineforos: uno sobre la película We The Living, dirigido por Warren Orbaugh, director del Centro de Estudio del Capitalismo; y otro sobre la película The Inner Circle, dirigido por estudiantes de la Escuela de Cine y Artes Visuales.

Hay dos exhibiciones. Una intervención de espacio –multimedia- , en colaboración con la Victims of Communism Memorial Foundation, de Washington, D.C.; y una exhibición de libros y películas, así como de carteles y pines soviéticos, en la Biblioteca Ludwig von Mises.


27
Jul 17

¡Volvieron los murales de González Goyri!

Para  nada soy fan de eso que la gente llama arte abstracto; y entiendo que los derechos individuales deben prevalecer sobre los intereses colectivos.  Sin embargo, lamenté en su momento la remoción de unos murales de Roberto González Goyri, de un edificio de la zona 1.  Y me alegra que hoy vayan a ser reinaugurados, luego de volver a su lugar.

Esta es la historia de por qué.

En 1976 yo recibía clases de mecanografía en un colegio que está situado a dos cuadras del parque Enrique Gómez Carrillo y la camioneta Uno me dejaba en ese lugar.  En una de tantas pasadas vi para arriba y en el edificio localizado en la Quinta avenida y Quince calle noté unos murales firmados por Roberto González Goyri, uno de los más notables, admirados y respetados artistas guatemaltecos. Hay murales bellísimos suyos en el Banco de Guatemala, el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social y otros edificios.  El Tecún Uman monumental de la zona 13 es del maestro.

A lo largo del proceso de deterioro de la zona 1 a veces pasaba por mi mente el hecho de que era notable que aquellas obras de arte estuvieran por ahí sin que nadie -aparentemente- reparara en ellas.  En medio de la fealdad y de la inmundicia del área, y aunque artisticamente  no fueran de mi gusto, era bonito saber que estaban ahí.  Y me hubiera gustado que se quedaran ahí. En esa cuadra estaba  la casa de mi bisabuela, Gilberta a principios del siglo XX, lo cual le añadía encanto a todo el asunto.

Los murales fueron removidos hace dos años y los clamores, las vestiduras rasgadas, los puños cerrados y el crugir de dientes a causa su eliminación no se hicieron esperar. A  mucha gente le  gusta pensar que ciertas obras de arte, incluidas las de arquitectura, no son propiedad de sus propietarios, sino que son algo así como propiedad de todos. Esa forma colectivista de ver las cosas supone que si algo es del gusto de algún colectivo, su propietario no puede disponer de él.  Sucedió hace poco con las estructuras de una gasolinera en la Avenida de las Américas y sucedió hace ratales con un mural pintado en un teatro.

Hace años, yo mismo lamentaba la destrucción de varias casas de arquitectura extraordinaria y cincuentera, que estaban ubicadas en la Avenida de la Reforma, y que fueron sustituidas por edificios.  Pero una cosa es lamentar un cambio; y otra muy diferente es pretender que el propietario de un inmueble, o de una obra de arte, no pueda disponer de ella como corresponde, sólo porque un grupo de interés estima que no deba hacerlo….o peor aún, que no tenga derecho a hacerlo.

La pretensión de que los propietarios de un edificio (o de una obra de arte) no pueden cambiarlo porque hay un grupo que valora  el edificio (o la obra de arte)  parte de la pretensión arrogante de que todos deben valorar lo mismo; y parte de la pretensión peligrosa de que lo tuyo, no es tuyo.  Si prevaleciera el criterio de que los propietarios de una obra de arte en un edificio no pueden alterarla, se crearía un incentivo perverso: el de que es mejor no añadir obras de arte a los edificios para no correr el riesgo de que luego, haya gente que disponga que no se pueden alterar la obra de arte, ni el edificio.

Lamenté la sustitución de los murales del maestro González Goyri por azulejos anodinos; pero respeto el derecho de los propietarios de los murales no sólo a tener gustos distintos a los míos, sino a disponer de su propiedad como le convenga. ¿Por qué? Porque ya lo dijo Benito Juárez: el respeto al derecho ajeno es la paz.


20
Jun 17

El caso de Otto Warmbier

Otto Warmbier de 22 años, fue arrestado en Pyongyang, Corea del norte en enero de 2016, y acusado de haber intentado tomar un afiche de propaganda.  La corte suprema de justicia, de Norcorea lo condenó a 15 años de trabajos forzados.  Poco después de su detención, el joven cayó en coma por causas desconocidas (aunque el régimen de Kim Jong-un asegura que fue por botulismo).   Warmbier fue liberado y llegó a Cincinnati, Ohio sólo a morir, y con pérdida de tejido cerebral, según los médicos de allá. Un coagulo de sangre, privación de oxígeno en el cerebro por períodos prolongados y una infección, o neumonía podrían ser las verdaderas causas de su muerte.

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La historia me conmovió.  ¿Quince años de trabajos forzados por supuestamente haber intentado robar un afiche?  Aún si fuera cierto que intentó tomarlo, ¿quince años de trabajos forzados? ¿A qué tipo de agresiones físicas y mentales debe haber estado expuesto Warmbier?

Recordé que mi cuate, Markus, estuvo hace poco más de un año en Corea del norte, y recordé sus fotos y descripciones inquietantes.   Un país como salido de una distopía, o de una pesadilla.  Me acordé de los esfuerzos de la Human Rights Foundation, y de mi cuate, Thor, por apoyar a la gente de Corea del norte contra la tiranía.

Al leer la historia de Warmbier, recordé El expreso de media noche, una peli que me impresionó y conmovió mucho en mi adolescencia.  Salvando las distancias, claro, ya que el motivo de la captura de Bill Hayes (en El expresso…) es muy distinto al de Warmbier.  Sin embargo, hay muchas similitudes en el tono antioccidente y en la naturaleza de la justicia en ambos casos.

¿Qué clase de mensaje manda el régimen de Kim a Occidente y especialmente a los Estados Unidos de América?  ¿Qué clase de mensaje debe recibir de vuelta la tiranía más abyecta y perversa del siglo XXI?