Es una iniciativa estupenda, útil e ingeniosa la de el Movimiento Cívico Nacional, Guatemala Visible, la Red Nacional por la Integridad y Un Joven Más , organizaciones que a partir del 14 de enero iniciarán la fiscalización del trabajo de cada diputado electo al Congreso. El MCN integrará un grupo de 158 ciudadanos que, en la primera fase, verificarán la asistencia al pleno y comisiones, así como las votaciones en el pleno. El objetivo del proyecto es contar con información objetiva del trabajo de cada legislador. Luego del reclutamiento de los voluntarios, cada uno de ellos será evaluado de acuerdo a sus estudios, o experiencia de trabajo, y se le asignará un diputado. Cada mes, las organizaciones de jóvenes presentarán un informe sobre la evaluación de los 158 congresistas y eventualmente visitarán a la persona designada.
Felicito a los chicos por esta iniciativa que puede ser muy valiosa y educativa para contruir una República sana.
Por eso es que, paralelo a la fiscalización en sí, es preciso establecer criterios de fondo. Por ejemplo, no es mejor diputado el que más iniciativas presenta, o el que más iniciativas aprueba. Los congresos no son fábricas de salchichas cuyos resultados se pueden medir por la cantidad de leyes (o salchichas) que producen. La calidad de las leyes también es importante. No es mejor diputado el que aprueba la mayor cantidad de regulaciones concretas y específicas; sin el que evita que estas prosperen. Es, sin embargo, un mejor diputado el que sabe que las leyes deben ser generales y abstractas. No es mejor diputado el que propone normas violatorias de los derechos individuales y normas que restringen las esferas de acción privada de las personas; sino aquellos que protegen la vida, la libertad y la propiedad de las personas; y los que cuidan como tesoros las esferas de acción privada de las personas.
La iniciativa de los jóvenes será valiosa, de verdad, no sólo por el monitoréo, sino en la medida en la que ponga en evidencia a los diputados que respetan los derechos individuales de todos, y los que no; y en la medida en la que ponga en evidencia a los diputados que respetan la igualdad de todos ante la ley, y los que no. Si no hace esas diferencias, la iniciativa no desarrollará todo su potencial.