15
Nov 23

Que dicha conocer a Richard E. Wagner

 

Richard E. Wagner ha dedicado buena parte de su vida académica a estudiar la teoría de la opción pública (Public Choice), área que me gusta por dos razones: le da una base praxeológica a la ciencia política y desromantiza la política.

Richard E. Wagner y Yours Truly luego de que el primero recibió un doctorado honoris causa de la UFM. Foto por Luis Fernando Samayoa.

La primera parte debería ser obvia, pero no lo es.  La política, como la economía es una manifestación de la acción humana y ¿por qué iba a estar al margen de la teoría general de la acción humana? La segunda parte es valiosa porque todavía hay gente, y seguro que conoces a más de una persona, que cree que los políticos no actúan en su propio beneficio y que, cuando alguien se dedica a la política lo hace para el bien común principalmente.

Tuve el gusto de conocer a Richard porque visitó Guatemala para recibir un doctorado honoris causa de la Universidad Francisco Marroquín el 11 de noviembre pasado. El jueves anterior tuve el honor de mostrarle la Sala de Colecciones Especiales de la Biblioteca Ludwig von Mises y el viernes le di un paseo por el Museo Popol Vuh. En ambas locaciones disfruté mucho de la curiosidad del homenajeado y de su sentido del humor. 

Richard E. Wagner trabajó con James M. Buchanan, también doctor honorífico de la UFM, a quien conocí aquí durante una serie de conferencias en 2001.


04
Oct 23

Semilla y la Internacional Progresista: ¿Izquierda más allá de la izquierda?

 

El Movimiento Semilla se unió a la Internacional Progresista, organización que es una escisión de la Internacional Socialista; y se deriva de los movimientos socialistas de Yanis Varufakis y de Bernie Sanders; y cobija a grupos que se sitúan a la izquierda de la izquierda, según explica Enrique Gomáriz, de latinomerica21.com.

En Hispanoamérica la Internacional Progresista integra organizaciones sociales y de comunicación, pero a pocos partidos políticos y uno de ellos es Convergencia Social, de Gabriel Boric. Acoge regímenes como los de Daniel Ortega y Nicolás Maduro y a personajes como Rafael Correa.

Para los que leen Carpe Diem no es sorpresa; pero nunca faltan los inocentes; y, claro, todo esto hay que documentarlo. Así que ¡Estás advertido, otra vez!, y hay más. ¿En qué creen los grupos que integran la Internacional Progresista?

Nuestra misión es construir poder popular a escala planetaria. Las elecciones son oportunidades para transformar la política y convertir las demandas populares en políticas gubernamentales. Pero sabemos que ganar elecciones no es suficiente para cumplir nuestra misión.  Las elecciones son solo un medio para llegar al poder, y como el poder no se suelta, después cambiar la Constitución -y la institucionalidad- para servir a los objetivos 1 y 7 de abajo.

Nuestro objetivo es la acción colectiva. No nos conformamos con montar una red social. Nuestras actividades nos preparan para la movilización planetaria, haciendo coincidir la escala de nuestras crisis con la escala de las acciones que emprendemos contra ellas.  No es casualidad que La Internacional sea el himno en este lado del espectro político. Leon Trotsky se opuso al internacionalismo de Lenin y mira cómo le fue. 

Y se pone mejor, te comparto una selección de perspectivas; pero te recomiendo que las leas todas para entenderlas bien. 

  • Aspiramos a erradicar el capitalismo en todas partes. Ese era el objetivo de Marx, Engels y Lenin.
  • Nuestro objetivo es trascender las barreras lingüísticas para encontrar nuestro propio lenguaje común de resistencia. De ahí la neolengua.
  • Reconocemos que la supremacía blanca es un principio organizador del sistema mundial. De ahí el racismo.
  • Nuestra demanda es una reparación integral por los crímenes pasados y la restauración inmediata de la tierra, los recursos y la soberanía para todos los pueblos desposeídos del mundo. Una visión colectivista de la historia.
  • Nuestro objetivo es romper con el patriarcado y al mismo tiempo alterar la estructura binaria de género en la que se basa. No es la lucha legítima por la igualdad de todos ante la ley; sino la sustitución de la lucha de clases por la lucha de identidades.
  • La paz sólo puede durar en la seguridad de la justicia social. Y la justicia social es la negación de la justicia.
  • Revolución, no cambio de régimen. Vuelve a leer la primera.

El presidente electo, Bernardo Arévalo, por cierto, recién participó en el encuentro del Grupo de Puebla, entre cuyos fundadores se cuentan: Cuauhtemoc Cardenas, Rafael Correa, Ignazio Lula da Silva, Alvaro Garcia Linera, Alberto Fernández, José Mujica, Evo Morales, Irene Montero, Ana Isabel Prera, José Luis Rodríguez Zapatero, Dilma Rousseff, Ernesto Samper, y Manuel Zelaya. 

Asociado en sociedad con tales socios, te puedes imaginar…como escribió Joaquín Sabina.

Por cierto que no me gusta usar términos como izquierda, ni derecha sin explicar el contexto específico: En un espectro filosófico de individualismo frente a colectivismo la derecha es individualista y la izquierda es colectivista.  El individualismo sostiene que los individuos tenemos derechos que el colectivo no debe violar y que los intereses colectivos no deben prevalecer sobre aquellos derechos de las personas individuales; y el colectivismo sostiene que los individuos no tenemos derechos porque los intereses colectivos deben prevalecer sobre los derechos de las personas.


08
Sep 23

Deshojando margaritas: El dilema entre ley y gobernabilidad

 

Mi nana, Elena, fue quien me enseñó a deshojar margaritas. Al ritmo de Me quiere, no me quiere deshojamos varias en el jardín de la casa de mi abuela cuando yo estaba en Primer grado de primaria.

De aquello me acordé cuando pensé en que los guatemaltecos nos debatimos en un dilema moral/político: optamos por que se cumplan las leyes (que son las reglas del juego), o nos vamos por la vía de romper las reglas del juego para tratar de afianzar la gobernabilidad.

La pregunta para la margarita es: ¿Respetamos las leyes, o tratamos de afianzar la gobernabilidad?

Cinco margaritas. Foto por Friedrich Haag, via Wikimedia Commons.

Me explico:

Porque toda persona es inocente mientras no se le haya declarado responsable judicialmente, en sentencia debidamente ejecutoriada, las autoridades correspondientes -tanto en el ámbito administrativo, como en el judicial, cuando toque- están obligadas a probar, sin duda alguna, que los hechos y actos que le atribuye al Movimiento Semilla son reales.  Tal es el caso del uso de personas fallecidas, personas que no han firmado hojas de adhesión, datos de nombres y DPI inexistentes, y anomalías de datos repetidos para su inscripción como partido político.

Si han sido cometidos aquellos actos, que seguramente han sido cometidos por otros partidos políticos, la pregunta para la margarita es: ¿Respetamos las reglas, o nos hacemos los locos para no perturbar la gobernabilidad?

Si no se investigan y se someten a procedimiento administrativo y judicial los supuestos actos de corrupción cometidos por los directivos de Semilla, la pregunta para la margarita es: ¿Qué vale más, la igualdad de todos ante la ley, o la pureza del proceso electoral?

Otra pregunta para la margarita es: ¿Detenemos aquí las malas prácticas electorales, o -como antes ha habido errores y arbitrariedades- los seguimos tolerando para no incomodar el proceso democrático y la gobernabilidad?

Voy a atreverme a decir que una gobernabilidad fundada sobre la aplicación casuística de la ley para no incomodar el proceso democrático es un desatino.  Me recuerda una frase de Nicolás Maquiavelo que dice: El que tolera el desorden para evitar la guerra, primero tendrá el desorden y luego la guerra; idea muy parecida a una de Winston Churchill que dice: El que se humilla para evitar la guerra tendrá la humillación y la guerra.

Es decir que no puedes conseguir algo valioso como la paz, el orden, ni la gobernabilidad, ni un proceso democrático sano sostenibles, si en el corto plazo sacrificas lo que en hace posibles aquellos valores: En este caso las reglas del juego, la ley, la igualdad de todos ante la ley…y la confianza.

La historia de la margarita es útil para ilustrar el problema; pero este es un asunto que no se puede dejar al azar y demanda un ejercicio responsable de parte de los ciudadanos y de los tributarios. ¿Qué vamos a elegir? ¿Respeto a las reglas del juego, o la gobernabilidad?

El tema de la gobernabilidad tiene su trampa porque es de orden político* y su importancia es más evidente y emotiva que la del respeto a las reglas del juego. La gobernabilidad indica el grado de cooperación e interacción entre el gobierno y los actores no gubernamentales, para la toma de decisiones que tienen efectos en la sociedad. Y en ese contexto, si un grupo de aquellos actores bloquea carreteras o comete otros actos de violencia, o de amenazas de violencia para impedir la aplicación de las reglas del juego, puede surgir el desorden.  Este desorden, puede generar ingoberanbilidad. ¿Hacemos una excepción a la aplicación de las reglas del juego para evitar el desorden? ¿Cuándo se vale eso, y cuándo no?

Como a la gente no le gusta el desorden -con razón- ¿vale la pena sacrificar las reglas del juego?  No se qué dirá la margarita; pero parafraseando a Maquiavelo y a Churchil, el ciudadano y el tributario conscientes -y honestos, para no falsear la realidad- deberían responder: El que prefiere la gobernabilidad en el corto plazo, termina perdiendo el respeto a la ley en el largo plazo.  El que tolera la violación a la ley para conseguir gobernabilidad, primero tendrá ingobernabilidad y luego la ley perderá su valor.

*De naturaleza política, porque tiene que ver con la posibilidad de ejercer el poder. 

Columna publicada en República.


02
Mar 23

El voto nulo y anda suelto Satanás

 

Hay una canción que dice: Cae fuego en lugar de maná/ Se disfraza el asfalto de mar/ El zapato no encuentra el pedal/ Parece que anda suelto Satanás. De esa canción me acuerdo cuando veo las listas de candidatos presidenciales, candidatos a diputados y candidatos a alcaldes para los próximos comicios.

No sólo es que en los mal llamados partidos políticos están raspando las ollas para encontrar las sobras, sino que pareciera que anda suelto Belcebú. Con razón se hace muy difícil decidir por quién votar y con razón se discute bastante sobre el voto nulo.

Por un lado está quienes ven en esa opción un acto soberano de negarles su particular mandato a los aspirantes a cargos de elección popular.  La racionalidad de esa preferencia es que si no les das tus votos a los candidatos estos no te representan, no les das autoridad, ni apoyo, ni legitimidad.

Añádase que el voto nulo deslegitima un sistema que para nada sirve a los electores y a los tributarios; que el voto nulo significa menos dinero para las roscas electoreras, y que incluso puede conducir al cierre de aquellas organizaciones incapaces de conseguir más del 5% de los votos.

No es poca cosa el voto nulo desde aquellas perspectivas.

Por otro lado está quienes destacan que con tu voto, o sin tu voto, alguien va a ser electo, sí, o sí.  Como hay candidatos peores que otros, desde distintas perspectivas, el voto nulo es peligroso porque puede beneficiar a la opción más incapaz, más corrupta, o más criminal.  De modo que la opción más ética, para el elector, es tratar de evitar al mal mayor.  No por darle un mandato al menos peor; sino por negárselo al más nefasto.

Otro detalle es que no es lo mismo no ir a votar, que votar nulo.  Cuando alguien no va a votar puede ser que lo haga porque estaba enfermo, porque estaba fuera del país, porque tuvo una emergencia, porque está preso, o algo parecido y por lo tanto su acción de no acudir a las urnas es políticamente vacía.  Pero si alguien se toma la molestia de acudir a un centro de votación y vota nulo, ahí sí hay una expresión manifiesta. Eso hago siempre en las papeletas para diputados del Parlacén.

El proceso para tomar una decisión electoral debería ser personal, pensado y contextual.  No es one size fits all; y dicho esto siempre tengo presente la frase de Dante Alighieri:  Los lugares más oscuros del infierno están reservados para aquellos que mantienen su neutralidad en tiempos de crisis moral.

Voy a repetir que el proceso para tomar una decisión electoral debería ser pensado, personal y contextual; y que no es de talla única. De modo que aquel proceso incluye votar por el candidato A, por el candidato B, votar nulo, o no votar.  Claro que incluye el acto de dar un mandato, pero también el de negar un mandato; posibilidad esta última que, en el contexto apropiado, es tan importante como la primera.

¿Y cuál es la clave para no ir a parar a uno de los lugares más oscuros del infierno?  La de asumir la responsabilidad moral personal de la decisión tomada en el contexto temporal y espacial de cada elección particular. En no falsear la realidad y en reconocer que así como a veces es útil y valioso dar un mandato, otras veces es igual de útil y valioso negar un mandato, impedirlo, o por lo menos obstaculizarlo.

¿Qué piensas?


16
Ene 23

Noelia Núñez y los jóvenes en política

 

Vivimos tiempos convulsos, la generación un poco mayor que yo vivió una crisis económica a la que la política no supo darle respuestas, y durante la pandemia se restringieron derechos y libertades a mansalva.  La situación económica ahora es preocupante y pareciera que los políticos estamos hablando otro lenguaje, alejado de lo que interesa a los jóvenes.  Eso dijo Noelia Núñez, política española, al comentar por qué es que los jóvenes se alejan de la política.

Noelia Núñez en conversación con Luis Figueroa. Haz clic en la foto para ver esa plática.

Pero los jóvenes deberían entender que una buena situación política es fundamental, y los jóvenes deberían acercarse a la política y si es desde una perspectiva liberal, mucho mejor, explicó durante una conversación que tuvimos el 2 de septiembre del 2022.  Los jóvenes deberían conocer de política y saber qué se hace en política y participar en la vida pública, interesarse en las instituciones.

Noelia comentó que la honestidad y la humildad son las virtudes que debería tener una persona que quiere dedicarse a la política.  Tener formación jurídica y saber comunicar y tener don de gentes y empatía es muy útil.

Desde otra perspectiva, las características que no debería tener un político son falta de ética, ni ambición desmedida de poder, ni falta de compañerismo.

Me frustra la percepción de que los políticos no servimos para nada y cuando nos enfrascamos en debates que de verdad no sirven para nada.  Me frustra mucho que el socialismo sea tan aceptado y que no se dé una verdadera batalla de las ideas.

Consultada sobre qué consejos le daría a un joven que quiere participar en política, Noelia comentó: que estudie, que se forme, que aprenda y que tenga bien claro por qué se va a meter a política y que tenga bien claros sus principios, que no se deje manejar y que busque ser útil a la sociedad.

Noelia Núñez ocupa un escaño en la Asamblea de Madrid, España; y ha sido concejal en Fuenlabrada.

Comparto esta conversación porque como desarrollé mi ciudadanía en los años 80, en aquel tiempo no era bien visto que los jóvenes se involucraran en política.  Con todo y eso tuve participación en dos partidos sólo para darme cuenta de que la de político no era mi vocación.  Pasada la primera mitad de los 80 ya no fue tan mal visto que los jóvenes se metieran a política y hubo un boom de patojos en esa actividad; sólo para que luego hubiera mucha decepción porque varios de aquellos jóvenes hicieron papelones.  Ahora, luego de las persecuciones selectivas protagonizadas por la CICIG, no veo mucho entusiasmo de participación política entre los jóvenes, como no sea entre el grupúsculo que era protegido por aquella comisión.

¿Será que aquel estado de cosas puede a cambiar? ¿Será que es posible el surgimiento de noelias chapinas? ¿Puedes ser el agente de cambio?


06
Dic 22

Manipulación del precio del dólar

 

De que Guatemala es un estado benefactor mercantilista no hay duda alguna cuando persiste la manipulación alcista del tipo de cambio por parte de las autoridades monetarias desde el penthouse del Banco de Guatemala.

El tipo de cambio del dólar -con el que se pagan combustibles, alquileres, bienes de capital, importaciones y otros- está elevado de forma política, perjudicial y artificial por disposición de la Junta Monetaria en beneficio de quienes reciben dólares ya sea por sus exportaciones, o por remesas.

US$ 1,472 millones es la cantidad que el Banguat ha retirado del mercado para crear una escasez artificial de dólares y engrosar innecesariamente las reservas de la moneda estadounidense.

No se puede promover la estabilidad en el nivel general de precios, que es la misión del banco central, si sus autoridades manipulan políticamente el precio del dólar, ni si crean inflación.

Las autoridades del banco central dicen que es un tema de estacionalidad y de oferta y demanda; pero la demanda artificial y política desde el Banguat pesa demasiado, frente a la demanda de mercado.  Mis amigos que saben de estas cosas comentaron que los que controlan la política moneteria cuando hubo “sobre oferta” salieron a acumular reservas; pero ahora que hay “sobre demanda” no salen a vender reservas. Por tres años han tratado de no permitir la apreciación del quetzal.


30
Nov 22

Taxonomía de la religión “woke”

 

Me llegó la Taxonomía de la religión “woke”, por Michael Shellemberger y Peter Boghossian y te la comparto porque es de gran utilidad para entender lo que ocurre en la cultura, en los negocios, en la política, en la ética y en la justicia.

Además, leí que en Twitter, Elon Musk encontró una torre de tshirts con la leyenda: Stay Woke.

Con respecto a la taxonomía, Boghossian escribió esta aclaración necesaria:

Michael Shellenberger y yo escribimos “Woke Religion: A Taxonomy” para ayudar a las personas a entender la religión “woke”.

Quiero ser muy claro en algo: la intolerancia y la discriminación racial son reales y no tienen cabida en la sociedad. Sí, hay un racismo continuo. Sí, hay homofobia en curso. Sí, existe un odio continuo hacia las personas trans. Estos son moralmente abominables y todos debemos trabajar juntos para lograr su fin. La religión “woke”, sin embargo, no es la forma de detener estos horrores morales. Está haciendo que nuestros problemas compartidos sean más difíciles de resolver.

Este es el espíritu con el que ofrecemos esta taxonomía.

Tiene que haber una forma mejor re resolver aquellos problemas. Esa solución -necesaria y urgente- pasa por el respeto de los derechos individuales de todos por igual y por la administración de justicia no politizada.

Si te interesa el tema, haz clic aquí para leer un artículo que escribí sobre la cultura “woke”


23
Abr 22

La cultura “woke” pasa factura

 

En 2017, la editora en jefe de la National Geographic Magazine anunció que una carátula woke de la revista le costó a la misma la pérdida de unos 10,000 suscriptores.  La noticia me llamó la atención porque ya desde los años 90 yo ya había perdido el interés por aquella publicación.  Yo, que en los años 70 esperaba con ansia febril su llegada por correo, yo que -según cuenta mi amigo, José Eduardo- no salía al recreo, en el colegio, por quedarme leyendo la revista.

La ilustración a tomé de https://xarxatic.com/pegagogia-woke/

Esta semana leí que Netflix perdió más de un tercio de su valor en la bolsa, digamos que unos US$ 54 millones, debido al rechazo de los suscriptores y accionistas que “están hasta el gorro” de la programación woke de ese canal que, en algún momento de su historia, era visto como un fenómeno imparable.

Debido a la orientación woke de la empresa, las acciones de Disney+ han perdido unos US$ 14 millardos como parte de reacciones de advertencia por parte de los suscriptores.  La magia de Disney -otrora una de las empresas más admiradas del mundo- está desapareciendo. También hay menos viajes a los parques.

La cultura woke ha infectado muchísimas instituciones e incluso empresas en muchas partes del mundo -incluida Guatemala-. Ha infectado las artes y la educación, el periodismo, las redes sociales virtuales y los deportes.  En ese ambiente el único antídoto para una filosofía corrupta e irracional como la del movimiento “woke” es una filosofía racional, apoyada en la razón, la lógica, la objetividad y el libre albedrío.

¿Estamos viviendo una reacción de esa naturaleza por parte de accionistas, suscriptores y clientes?

Seguro que es tiempo de que el liberalismo rescate causas legítimas como la igualdad de todos ante la ley y el antiracismo, aunque se incomoden sus socios desde el conservadurismo.  Quizá es tiempo de que los activistas colectivistas y constructivistas reconozcan que al despreciar el poder de la evolución social y forzar políticas en favor de sus intereses sólo han logrado alienar a posibles aliados y han dañado las causas que dicen defender.

Columna publicada en elPeriódico.


22
Feb 22

“Sobreviviente designado” y la agenda progre

 

Toda la agenda progre de los demócratas liberals es retratada en sucesión, en la serie Designated Survivor que estoy viendo en Netflix.  Entonces, ¿por qué la veo?

Primero, y en alusión a la frase del presidente Tom Kirkman que ilustra esta nota, es porque en su obra La fatal arrogancia, Friedrich A. Hayek denuncia a los gobiernos por haber abandonado su misión -la de proteger los derechos individuales de todos por igual- y dedicarse a satisfacer necesidades.  Me parece chistoso el contraste entre Fritz y Kirkman ya que este último, sus ideas, sus políticas y su equipo representan toda aquella fatal arrogancia contra la que nos advierte el austriaco.  Kirkman de verdad cree que su responsabilidad como presidente es la de satisfacer las necesidades de los ciudadanos.

Segundo, porque no puedo ni imaginarme a Joe Biden en las situaciones en las que se encuentra el presidente Tom Kirkman en cada capítulo.  Puedo imaginar a Reagan, a Trump, a Clinton y a Obama…¿pero a Biden…o a Kamala Harris? Naaaaaaaaa. Puedo imaginar, sí, la dudas, la incompetencia y la debilidad en los momentos más retadores; y entonces pienso que  triste por donde y hasta donde ha caído la gran nación de Thomas Jefferson, Benjamin Franklin y otros padres fundadores.

Y tercero, la veo porque entretiene….sin ser la gran cosa.

En última instancia, es una lástima que en los tiempos que vivimos, al frente de la nación más poderosa del mundo no haya un líder que dé la talla.


11
Feb 22

Un caballo de Troya

 

La idea de que los diputados impongan legislación para forzar que los comerciantes les exijan una constancia de vacunación a sus clientes es, como mínimo, inaceptable. Intolerable porque legislación así les daría origen a personas de primera clase y de segunda clase, al forzar una discriminación legislativa. Intolerable porque arrinconaría y estigmatizaría a quienes no desean meterse ciertas sustancias en sus cuerpos. Intolerable porque forzaría a los comerciantes a actuar de forma policíaca.

La foto la tomé de aquí: https://bit.ly/3uDYj1i

¿Es que quienes promueven ese tipo de legislación no ven lo que está ocurriendo en el mundo?  Los camioneros y agricultores en Ottawa y en otras partes de Canadá le han dado inicio a una revolución contra las medidas absurdas y arbitrarias de los socialistas como Trudeau.  Los primeros ministros de otros territorios canadienses ya están echando marcha atrás en aquellas medidas. En los Países Bajos, en Francia y en Austria -de forma masiva- la gente está rebelándose contra las dictaduras covidianas.  Todo el edificio de la coacción arbitraria covidiana se está derrumbando.

Es cierto que la mayoría de medios de comunicación masivos les ocultan aquellas manifestaciones a sus lectores y televidentes; pero las redes sociales virtuales informan abundantemente sobre ello, por lo que no hay excusa para que los diputados y los promotores de la tiranía covidana no se den por enterados.

Yo, por cierto, fui productor de noticias internacionales en dos noticiarios guatemaltecos; y no hay forma…¡No hay forma!…de que me hubiera salido con la mía si no hubiera informado a mis televidentes de algo como lo que ocurre en Canadá y en otros países.  Mis jefes y compañeros no lo hubieran permitido; pero eran otros tiempos y otras “mores”.

De cualquier manera, son un caballo de Troya, son inmorales y abusadoras las pretensiones de forzar a las personas a usar sustancias, discriminarlas por no hacerlo, obligar a los comerciantes a actuar como polizontes y usar la facultad legislativa para perpetuar prácticas que en otras sociedades la gente ya está rechazando -admirablemente- por liberticidas y totalitarias.

Columna publicada en elPeriódico.