Digamos que hay algo que ¿admirarle? a esta gente: Esto es que tiene agallas. O por no decir desfachatez, o sinvergüenzura, la de defender a la dictadura asesina de Nicolás Maduro en Venezuela….pero entonces ya no es de admirar.
En la carta que ilustra esta entrada, Convergencia denuncia a los medios informativos que ponen en evidencia al régimen revolucionario bolivariano; y condena el apoyo que recibe el pueblo de Venezuela en su lucha contra la tiranía.
Una vez más se hace evidente la vinculación entre la tiranía de Caracas y la exguerrilla guatemalteca, que se halla entre los más entusiastas defensores de la reforma constitucional que se discute en el Congreso de Guatemala, contra viento y marea.
La semana pasada el director de la academia Hugo Chávez que opera en la universidad estatal de Guatemala se presentó al Congreso de la República y acompañó a la barra que apoya las reformas constitucionales y del sistema de justicia que también apoyan otros simpatizantes del socialismo en general y del chavismo en particular.
A los socialistas les incomoda la prensa que no es complaciente y que no hace activismo por su causa. Por eso es que muchos socialistas y simpatizantes (en oposición a los liberales) consideran que la prensa debe ser regulada, no dejarla a la libre. Esto es para que reine el pensamiento único, su pensamiento único. La cita es de un lector, ex funcionario público, que me escribió en privado -¿porque no quiso dar la cara en este espacio?-.
Pienso, por mi parte, que la libertad de expresión debe ser total, que la prensa (y los individuos que se expresan, sean periodistas, o no) debe ser libre y que no debe ser regulada, aunque haya que aguantar a lo socialistas defendiendo a su tirano favorito.