12
Oct 12

Totonicapán de luto

Para mí, Totonicapán es sinónimo de pinabetes y de panaderías maravillosas. Toto no era sinónimo de luto. Hasta el jueves pasado. Urge una investigación científica, técnica y objetiva que aclare qué es lo que ocurrió en el kilómetro 170 y quiénes fueron los responsables de aquellos acontecimientos dolorosos. Dicha investigación sin embargo va a ser cuesta arriba. Para comenzar, la escena de los sucesos –como ocurrió en el caso Gerardi– no fue tratada responsablemente. Rigoberta Menchú, por ejemplo, se paseó por el lugar (que debería haber estado aislado) y anduvo por ahí, de forma antitécnica, supuestamente recogiendo cascabillos. Si ha visto CSI, debería saber que eso es muy inapropiado en una escena en la que ha habido muertos y heridos. ¿Dónde estaba el MP para evitar que Menchú contaminara el lugar.

Una investigación confiable va a ser difícil porque es un tema politizado. Hay organizaciones influyentes y poco escrupulosas que están comprometidas con hacer la revolución desde los movimientos sociales. Es la gente que organiza bloqueos e invasiones, entre otras acciones igualmente delictivas. Es la gente que acarrea a la mara y que se beneficia con los muertos y heridos de Toto; y con los Mario Alioto y los Abner Abdiel que pudieran darse por ahí.

La investigación científica, técnica y objetiva es importante para saber la verdad; y para ello los embajadores de países amigos deberían hacer chitón. Es una hipocresía que digan que el Ejército debe mantenerse al margen de este tipo de asuntos, cuando la Constitución lo faculta para ello; y mientras que sabemos que cuando Merkel visitó Grecia, para protegerla a ella y a su embajada (contra los manifestantes) había unidades antiterroristas y ¡francotiradores en los tejados!

Lo cierto es que, en casos así, fuerzas debidamente entrenadas y equipadas deberían actuar rápidamente; y coincido con que es una imprudencia mandarlos a esos lugares a pararse ahí, a hacer nada, y a elevar el nivel de tensión.

Las manifestaciones no deben ser criminalizadas; pero donde hay coacción, amenazas, robo, hurto e incendio agravados, e instigación a delinquir, hay delitos. Y donde hay delitos no hay ejercicio de derechos, sino actos delincuenciales. Para algunos, ¡la lucha sigue!…tristemente.

Esta columna fue publicada en El Periódico.


09
Oct 12

Marta Magdalena Ixbalán y meditaciones sobre Totonicapán

Mayra Mendoza, maestra de una escuela de Santiago Atiltán, Sololá, aseguró que Marta Magdalena Ixbalán murió por falta de atención médica luego de que se regresara la ambulancia que la llevaba hacia la capital, trassufrir heridas tras caer del segundo nivel de su vivienda. Mendoza contó que por la gravedad de las heridas la Ixbalán, madre de siete hijos, era trasladada a la capital; pero que por el bloqueo la regresaron y decidieron ir al hospital de Quetzaltenango.  Empero, murió en el camino, cuando iban por Sololá.  Emisoras Unidas reportó este suceso lamentable…y nadie más entre los medios tradicionales.  En las redes sociales, sin embargo, la noticia se regó como pólvora.

En los medios de comunicación tradicionales tampoco has leído comentarios acerca de que Rigoberta Menchú llegó al lugar de los hechos, en Totonicapán, y se paseó por la locación recogiendo cascabillos y contaminando la escena.  En los medios tradicionales viste la foto…pero, ¿quién se atrevió a comentarla? Cosa así sólo las ves en los nuevos medios y en las redes sociales.

Reitero lo que escribí el sábado pasado: La sangre de los muertos y heridos durante los acontecimientos del jueves en Totonicapán, cae en las manos de la “dirigencia popular” que organiza bloqueos e invasiones; y que lleva y trae a la gente para sus propósitos políticos. Urge, sin embargo, una investigación científica, técnica y objetiva que aporte luces sobre qué es exactamente lo que ocurrió en el kilómetro 170 de la Ruta Interamericana y quiénes fueron los responsables de aquellos acontecimientos dolorosos.  Urge una investigación que no se base en los prejuicios ideológicos y políticos de ninguna de las partes interesadas.

Dicho lo anterior, y en el supuesto de que no hay tal cosa como un bloqueo, o una invasión pacíficos -y que esos actos constituyen violencia y agresión-<, debería estar claro que las autoridades tienen no sólo la facultad sino la obligación de despejar las vías (o ejecutar los desalojos) en protección de los derechos de las personas que están siendo víctimas del bloqueo, o de la invasión.

Siendo que los derechos, como el de manifestarse y el de petición, son derechos no-rivales (es decir que no rivalizan con otros como el de la libertad de locomoción), aquellos deben ser ejercidos sin violencia y sin afectar los derechos de terceros.  No se vale argumentar que se está ejerciendo un derecho, cuando se están violando los derechos de otros.

Ahora bien…en ejercicio del Derecho y de la autoridad, la remoción de los bloqueadores y de los invasores debe hacerse de forma técnica.  En casos de bloqueos y de invasiones,  Inteligencia debe identificar a los dirigentes y negociadores profesionales deben tratar de resolver el asunto por las buenas -en un tiempo prudencial que no alargue ni aumente los costos (en vidas, tiempo y recursos) para las víctimas.  La policía debe llegar con cañones de agua, balas de caucho y bombas lacrimógenas y disolver los bloqueos (o las invasiones) si los bloqueadores, o invasores persisten en violar los derechos de terceros.

Por cierto que, en medio de la tragedia, llama la atención la hipocresía de los embajadores que cuestionan el uso del Ejército en estos casos.  Hipocresía que se hace evidente cuando nos enteramos de que Angela Merkel visitó Grecia y que para protegerla a ella y a su embajada -¡contra los manifestantes!- había 6,000 policías, incluyendo unidades antiterroristas y ¡francotiradores en los tejados!  También llama la atención, dijo mi amiga MD,  que si la manifestación de Totonicapán era pacífica, por qué es que las fotos publicadas en los diarios son tomadas no desde el lado de los manifestantes; sino del lado de las autoridades.  ¿Qué les hubiera pasado a los periodistas si hubieran ido a tomar fotos desde el lado de los bloqueadores?

Dicho lo anterior, ¿qué bien puede hacer mandar un grupo de soldados -armados- a pararse y quedarse quietos, durante horas, frente a un bloqueo, o a una invasión?  Imagínate la tensión que se va creando en esas circunstancias.  Tensión que beneficia a los que necesitan mártires para llevar a cabo la revolución desde los movimientos sociales.  Haz clic para escuchar un testimonio de lo angustiosas que pueden ser estas situaciones.

¿Cómo debe actuar la tropa si la dirigencia de los bloqueadores y los invasores los amenaza? ¿Cómo deben actuar los particulares si las turbas destruyen su propiedad -o los bienes que les han sido encomendados- o los  toman?

Hay técnicas para lidiar con estas circunstancias; y las autoridades están obligadas a utilizar esas técnicas para conservar  la autoridad.

Por cierto que en una sociedad que no esté bajo acoso, la vía sana y normal para que los ciudadanos resuelvan problemas políticos es la de sus representantes en el Congreso.  ¿Dónde está y qué papel juegan los diputados de Totonicapán?  ¿O cualquiera otro diputado?  El problema de fondo es no sólo que la institución parlamentaria ha sido minada y pervertida; sino que hay que estar claros en cuanto a que lo que ocurrió en el kilómetro 170 está íntimamente relacionado con una dirigencia popular cuyo lema es: ¡La lucha sigue!

El liderazgo de los 48 cantones está en un enredo.  Puede actuar responsablemente y buscar la solución de sus inquietudes por medios pacíficos e institucionales; o puede dejarse arrastrar por el camino por el que los están llevando los que al grito de ¡Estamos de frente!, siempre están en la retaguardia escondidos detrás de pañuelos.

A ellos, ni la señora Ixbalán, ni sus hijos, ni las otras víctimas de lo que organizaron en Totonicapán les importan.  Lo que les importa es hacer la revolución desde los movimientos sociales.

Actualización: María Xicay Ratzán de Ajcabul, es el nombre de  la persona que murió el día de los bloqueos en Totonicapán.  Ella se resbaló al tender ropa en la terraza de su casa en Santiago, Atitlán. Los bomberos la trasladaron del hospital local al de Sololá debido a una fractura en su cráneo, pero no pudo pasar por la ruta Interamericana para llegar a su destino.  Haz clic para escuchar una conversación con su hermano.


22
Jun 12

¿Y los pañuelos y las imágenes del Che?

Que interesante es que en las fotos de hoy, acerca del desalojo de las escuelas normales, lo que se ve es a niñas con flores y banderas de Guatemala.  Se escondieron los dirigentes con las caras cubiertas y las playeras del Che Guevara.

Ministra y estudiantes se reunirán el martes 26

Estudiantes y el Mineduc acuerdan un nuevo diálogo

Estudiantes desocupan Inca y Belén


21
Jun 12

¿Estos son los futuros maestros?

Si es cierto eso que una foto vale más que mil palabras, esta imágen no nos defrauda.  ¿Que nos muestra esta foto?

Vemos que mientras que muchos de los ocupantes de institutos normalistas dan la cara y asumen la responsabilidad de sus actos, hay ciertos dirigentes que se tapan la cara, que se ocultan y que operan en el anonimato.   Vemos que algunos de esos dirigentes están vinculados con movimientos revolucionarios que usan iconografía correspondiente a ideologías totalitarias y criminales cuyos muertos se cuentan por millones; tal es el caso de la imágen del Che Guevara, por ejemplo.   Vemos que los alumnos y los estudiantes ya están algo creciditos.

Estos dirigentes deberían recordar que estudian (si es que estudian) en planteles estatales sostenidos con dinero de los tributarios; y que está desperdiciando esos recursos.  Deberían recordar que hay compañeros suyos que sí quieren estudiar, y que los están perjudicando directamente.  Aunque claro, eso no tiene importancia desde la perspectiva de los que operan encapuchados y tienen por héroe a un asesino.

La foto es de El periódico, por Luis Soto.


20
Abr 12

“Un sueño de primavera”

Cuando se busca información sobre la Revolución de Octubre lo común es encontrarse con libelos que la atacan o que la defienden; verdaderamente escasos son los trabajos que se ocupan de analizarla en su exacta dimensión de acontecimiento histórico, de respuesta humana a una crisis determinada y como elemento aglutinante de gran variedad de ideas, de pasiones y de intereses creados.

Esta observación de Ramiro Ordóñez Jonama, en su libro enriquecedor Un sueño de primavera, es oportuna y valiosa porque, la historia estudia la acción humana, tal y como explica Ludwig von Mises en Teoría e historia. La historia no es solo una colección de datos, sino un relato acerca de las valoraciones y las motivaciones de sus actores; en contextos específicos.

En su libro, Ramiro hace tres contribuciones inestimables para entender aquella Revolución: la primera, es que pone al descubierto docenas de mitos que se repiten acerca de la gesta de 1944; pero no solo los expone, sino que, con los pelos de la burra en la mano nos muestra –con evidencias y no con meras opiniones– cuándo es pinta, y cuándo no. Además, el autor tiene gracia para hacerlo, gracia que yo ya había notado cuando leí su Primer suplemento de la biblioteca genealogía guatemalteca, en el que hizo lo mismo frente a las ligerezas de algunos autores de aquella especialidad.

La segunda, es que logra relatos coherentes y amenos –porque tiene el don de la pluma–, que nos facilitan entender a las personas y a sus vivencias de aquel pasado, no tan lejano. Pasado que no solo nos sirve para encontrarle sentido a nuestro presente; sino que, tiene que ver con el porvenir.

Un sueño de primavera tiene una tercera utilidad valiosa: con elegancia y acuciosidad da pie para la polémica sana y sanadora. Para la polémica que limpia y aclara. No basada en falacias de una y otra clase, sino en datos comprobados, sin duda como consecuencia de horas y horas de investigación, cotejo y verificación.

Si no te incomoda descubrir que el emperador no tiene ropa y si te molesta que el relato del pasado sea manipulado para servir a un proyecto ideológico que necesita justificarse, y que busca alcanzar por otras vías lo que no pudo conseguir por medios violentos, Un sueño de primavera no te va a decepcionar.

Esta columna fue publicada en El Periódico.


18
Dic 11

¡Muere dictador socialista Kim Jong-il!


Kim Jong-il, el dictador socialista de Corea del Norte se murió.  Como su padre, de quien heredó el poder, este tirano dedicó su vida a cultivar las virtudes socialistas y la causa de la revolución.

El vídeo que acompaña a esta nota es del funeral del padre de Kim, Kim Il-sung; y si las cosas siguen como son, lo que veremos en el funeral del hijo será -como en el caso del padre- la humillación completa de una nación.  El lugar más triste que he visitado en toda mi vida, según mi cuate Tom G. Palmer.

¿Para cuándo están Fidel y Chávez a quienes ya les vuelan encima los zopilotes?


20
Oct 11

La otra perspectiva de Arbenz y La Revolución

Hoy, que de forma ilegítima la administración de Los Colom/Espada le está rindiendo homenaje a la memoria de Jacobo Arbenz Guzmán, vale la pena explorar otra perspectiva de este personaje.  Esto es lo que escribí hace algún tiempo al respecto:

Uno de mis sobrinos pequeños, por decir el lobo que aulla, dice “el lobo cabulla”.  Anda por ahí con eso de el looooobo cabuuuuuulla y aunque uno le dé razones, la cosa no pasa de ahí. Esa actitud de no me confundan con hechos, porque ya tengo mis propias ideas, es tierna en un infante; pero no le luce a todos.

Se parece a la actitud de los apologistas de Jacobo Árbenz  y de la Revolución guatemalteca. El soldado del pueblo era algodonero, estaba casado con una rica heredera salvadoreña, vivía en un chalet en la Reforma y usaba corbatas Countess Mara (US$ 95 c/u actualmente). Pero esto no lo leyó usted en los panegíricos, ¿o sí?

Leo que la Liberación, que triunfó en junio de 1954, acabó con la primavera democrática de Guatemala.  Pero veamos qué clase de invierno era aquel otoño.

El primer gobierno de la Revolución le tendió una trampa a Francisco Javier Arana, candidato de oposición. Arana fue asesinado en una emboscada y eso allanó el triunfo electoral de Arbenz.  Eso es como si Portillo hubiera mandado a matar a Berger; y, como consecuencia, Colom hubiera ganado la elección. Y que encima, algunos anduvieran diciendo que este último había triunfado en elecciones democráticas y limpias. Haga cuentas.

Cuando el régimen revolucionario no estuvo de acuerdo con una importante decisión de la Corte Suprema de Justicia, en cuanto a la inconstitucionalidad de su reforma agraria, ¿qué hizo? ¿Se sometió al Estado de Derecho? No. Destituyó a la Corte.

Durante el segundo gobierno de la Revolución Jaime Rosemberg y Rogelio Cruz Wer, jefes de la Policía de la época, eran temidos porque aterrorizaban a la población por medio de capturas ilegales y torturas.  Que no le extrañe.  Las capturas ilegales y las torturas son características distintivas de las revoluciones como las que querían (y añoran) los fans de la Revolución.  Fue el mismísimo Juan José Arévalo en Carta política al pueblo de Guatemala con motivo de haber aceptado la candidatura y otros escritos, quien dijo que, en el gobierno de Arbenz, la policía fue obligada a practicar torturas repugnantes y a cometer crímenes contra la vida de los adversarios políticos.  En ese mismo documento, Arévalo habla de millones de dólares depositados en bancos de Suiza a nombre de personas particulares, habla de pérdida de contacto con el pueblo, y habla de amigos palaciegos que no ejercían función alguna en la administración, todo ello durante la adminstración de Jacobo Arbenz.

En uno de sus desmanes, la Revolución mandó a dinamitar el Templo de Minerva que adornaba el barrio de Jocotenango. Sólo porque sí.

Digamos que la Revolución hubiera prevalecido. ¿Qué hubiera ocurrido con los chapines? Pues hubiera pasado lo que les pasó a los europeos orientales, a los camboyanos, a los mozambiqueños y a los nicaragüenses, entre otros: que hace diez años, o ahora mismo, tendríamos que estarnos sacudiendo a los dictadores revolucionarios por asesinos, corruptos e ineptos.

Vaya un día de estos a la Hemeroteca Nacional y busque las proclamas que los revolucionarios de los 70 y 80 hacían publicar cuando secuestraban a alguien. Vea con sus propios ojos que lo que querían era instaurar la dictadura del proletariado. Lea, después, acerca de lo doloroso que fue, para muchos pueblos, sacar del poder a dictadores (Ceaucescu, Mengistu, Pol Pot y otros) como el que nos querían imponer los revolucionarios chapines.

Leí que la dimisión de Arbenz, le dio paso a 36 años cruentos.  Pero eso no tiene sentido. En primer lugar, porque la guerra de casi cuatro décadas la libraron los revolucionarios para reimponer su dictadura (lea los documentos de la guerrilla) y porque ya vimos que la primavera democrática nunca existió.

En segundo, porque la contrainsurgencia fue una reacción frente al terrorismo y al intento de imponer un régimen totalitario (no me crea a mí, lea los documentos de la guerrilla).

En tercero, porque los revolucionarios no se van así nomás; sino que tras de sí, dejan pilas de cadáveres.  Más de 35 millones en China, casi 62 millones en la URSS, más de 725 mil en Etiopía, unos 73 mil en Cuba, unos 5 mil en Nicaragua, y un total de ¡169 millones de muertos en el mundo!, entre 1917 y 1987.

Si te interesa este tema, te recomiendo:

Todo esto no lo oyes en los discursos oficiales, ni lo lees en los libros de historia oficiales, ¿o sí?


01
Jul 11

Sandra y Diego Rivera

Aprovechando el desmantelamiento de las tropas en Afganistán podrían instalarse bases de soldados estadounidenses en Guatemala para intensificar la guerra contra las drogas. Como quien dice mandame unas shecas, aquello opinó Sandra Evita Torres, la excandidata oficialista a la Presidencia de la República. La aspirante socialdemócrata dijo que yo aceptaría que vinieran soldados o bases militares de Estados Unidos, precisamente ahora que se están retirando de Medio Oriente sería una buena oportunidad.

Lo irónico y ¡hasta cínico!, es que, el año pasado, Evita y su exmarido, el presidente Alvaro Santa Clos Colom, se gastaron Q1.5 millones del dinero de los tributarios en organizar la exhibición ¡Oh Revolución!, en la que expusieron murales del mexicano Diego Rivera y la guatemalteca Rina Lazo. En los cuadros llamados Gloriosa Revolución Venceremos, los artistas citados denunciaban la intervención norteamericana en la supuesta Primavera chapina.

Supuesta digo, porque en aquel tiempo se hicieron los experimentos de enfermedades venéreas con locos y presos; porque en aquel tiempo se amordazó a la Prensa; porque el candidato de la oposición fue asesinado misteriosamente; porque en nombre de La Revolución, Rogelio Cruz Wer y Jaime Rosenberg perseguían y torturaban; porque los gobiernos revolucionarios usaban chiquilines o turbas para intimidar a la población.

A los Colom/Torres les gusta legitimarse mediante el uso y abuso de la iconografía y la retórica de La Revolución; pero ahora, con sus declaraciones en Induexpo, Evita se vio muy mal. Da la impresión de que los dólares y las tropas para la guerra perdida contra las drogas le parecen una buena oportunidad.

Con razón es que Alfonso Bauer Paiz, ministro de Trabajo y Economía durante el gobierno revolucionario de Jacobo Árbenz, calificó de farsa el hecho de que la administración de los Colom/Torres exhibiera la obra de Rivera y Lazo.

Por cierto que el candidato Otto Pérez Molina también estuvo a favor de que vengan tropas estadounidenses. Los únicos sensatos fueron Eduardo Suger y Harold Caballeros que se expresaron a favor de despenalizar las drogas, idea que comparten expresidentes de Brasil, Colombia, México y Suiza, Kofi Annan, Richard Branson, George Shultz, Paul Volcker y otros personajes.

Esta columna fue publicada en El Periódico.


10
Jun 11

La revolución de 1944 en vivo

Mis amigos Carlos Lizama, Moises Sabbaj y Tuto De León, cuentan sus vivencias durante la revolución de 1944 en una agradable conversación que organizó el Museo Popol Vuh.

Durante mi adolecencia y mi niñez tuve la oportunidad de escuchar varios relatos acerca de los inicios de aquella étapa histórica de Guatemala; y dos de mis favoritos eran los que contaba el doctor Lizama, y los que relataba mi tía abuela La Mamita.

Esta conversación es parte de una serie.  Esta otra, sobre los avances tecnológicos en Guatemala, y esta es otra sobre historias de barrios.


09
Abr 11

Experimentos y venéreas, ¿quienes eran los políticos?

Ayer nos enteramos de que Juan Manuel Funes, jefe de la División de Control de Enfermedades Venéreas del Servicio Público de Salud, a principios de 1940, fue quien sugirió llevar a cabo experimentos con guatemaltecos.  Carlos Salvadó, director del Hospital Nacional de Salud Mental, invitó al grupo investigador a trabajar con sus pacientes.

Es interesante saber quiénes eran los técnicos responsables de aquellos experimentos; pero…¿por qué es que nunca se termina de exponer qué funcionarios políticos de la Revolución tenían conocimiento de estos experimentos?  Siendo que eran experimentos que involucraban a extranjeros y a soldados, sin duda que el Ministro de Salud, el de Relaciones Exteriores y el de la Defensa tendrían que haber sabido algo. ¿Lo sabía el presidente Juan José Arévalo?