El gobernador de Huehuetenango, José Antonio López , está en la cuerda floja, ya que podría ser destituido, entre otras razones, por proponerle a la empresa Energuate que instale pantallas gigantes para ver el Mundial de Futbol, en el contexto de las platicas para resolver el conflicto por robo de energía eléctrica en su jurisdicción.
¿Cómo está eso de que está en la cuerda floja y podría ser destituido? ¿Todavía lo están pensando?
Deja el gesto populista de conseguirle pantallas gigantes al pueblo futbolero…los gobernadores son representantes del Ejecutivo en sus departamentos y el hecho de que uno de estos funcionarios le insinúe a una empresa que está siendo víctima de actividades criminales, que para empezar a resolver sus problemas, sería bueno que esta haga algo como colocar pantallas gigantes para que la mara pueda ver el fútbol es escandaloso, e inaceptable, aunque el acto tiene algo de postivo: ¡Por supuesto que siempre se ha sabido que el gobierno es la fuerza y que el poder sirve para hacer que otros hagan lo que no harían si no se les amenazara con el uso de la violencia!; pero cuando esta capacidad se pone en evidencia, así de pelada, deberíamos aprovechar el llamado de atención.
¿Vamos a seguir permitiendo la extorsión y la espoliación al amparo del poder? ¿Cuántos casos más hay por ahí, de esos en los que los funcionarios piden algo a cambio de hacer lo que es su deber?
La ilustración es por Andy Beecroft [CC-BY-SA-2.0 (http://creativecommons.org/licenses/by-sa/2.0)], via Wikimedia Commons