04
Jun 13

El Ministerio de Finanzas, a jugar de mercado

Ayer, con un grupo de colegas, jugamos de mercado (como en el colegio) en un seminario con Martín Krause, autor de La economía explicada a mis hijos.  A mí me tocó vender manzanas y…adivina qué.  ¡No las podía vender si pedía más quetzales que los que los compradores estaban dispuestos a gastar!  Y los compradores de manzanas no podían conseguirlas, si ofrecían menos de lo que esperaban los potenciales vendedores.  Cuando juegas de mercado aprendes cosas sorpendentes.  Por ejemplo: si quieres algo de valor que tiene otra persona, debes ofrecerle -a cambio- algo que esa persona valore más.  Nadie te va a dar sus quetzales a cambio de tus manzanas, si no valora más tus manzanas que sus quetzales.

Hoy que leo que el Ministerio de Finanzas no ha podido vender unas letras de Tesorería que anda ofreciendo, se me ocurre que sería bueno que los funcionarios de esa cartera jugaran de mercado con Krause.   Esto es porque los funcionarios están vendiendo papeles que ofrecen tasas de interés tan bajas que no tienen valor para los potenciales compradores.  La tasa de interés, ¿sabes?, es el precio del credito; y el crédito está íntimamente relacionado con la confianza.  De hecho, la palabra viene del latín credere que significa creer y de ahí, confiar.

Si bien es cierto que a los banqueros les gusta comprar papeles porque son inversiones de relatiavamente poco riesgo; también lo es el hecho de que las tasas que ofrecen esos papeles deben ser lo suficientemente atractivas como para competir con otras opciones de inversión de bajo riesgo.  Recuerda que aquí estamos hablando de confianza.  Las tasas tienen que ser proporcionales al nivel de confianza que generan, o no, los papeles.

Como los recursos son escasos, cuando los banqueros compran papeles del Ministerio para invertir cómodamente y sin mayores riesgos, el dinero que usan para esas inversiones no es dado en crédito para actividades productivas como comercios, industrias, fincas y otras.  Las inversiones en papel sustituyen a las inversiones productivas.  Y tu ya sabes qué ocurre cuando disminuyen las inversiones productivas a cambio de las de papel: crece el endeudamiento de los tributarios y disminuyen la creación de riqueza y de oportunidades de empleos productivos.

Es curioso que quienes manejan las finanzas del país prefieran endeudar a los tributarios y obstaculizar la creación de riqueza y de oportunidades de empleos productivos, antes que entrarle a la disminución radical del gasto público y a la sanación fiscal.  Pero es más curioso que quieran comprar manzanas a precios que los vendedores no están dispuestos a aceptar.  Esto es porque con sus papeles (y sus tasas de interés), los funcionarios están tratando de comprar crédito.

Ah, yo insisto en que los funcionarios deberían jugar de mercado.

Originalmente publicado en el Centro de Estudios Económico-Sociales.


23
Mar 13

La venta de entradas para el concierto de Arjona

Como consecuencia de que algunas personas están vendiendo entradas para el concierto de Ricardo Arjona, hoy en Cayalá, otras personas están expresando molestia, indignación, enojo y otros sentimientos. Esto es porque se supone que el concierto es gratis y que -para conseguir entradas- la gente tenia que participar en distintas promociones como se dice por aquí.

Para entender el fenómeno sugiero una perspectiva. Milton Friedman ya nos había advertido que no hay tal cosa como un almuerzo gratis, ni un concierto gratis, en este caso.  Alguien está pagando lo que cuesta este concierto.  Los músicos no trabajan de gratis, los sonidistas y los de las luces no trabajan de gratis, la energía eléctrica no es gratis, como no lo son la seguridad, el transporte, el alojamiento, y todo lo demás.  Alguien lo está pagando…y se los está pagando a aquellos que recibieron entradas sin tener que pagar por ellas (directamente).

Ahora bien, esas entradas constituyen bienes; y una característica distintiva de los bienes es que son escasos.  Sólo hay X número de entradas, y no hay más.  Seguramente hay más fans de Arjona, que el número de entradas disponibles.

Dicho lo anterior,  las entradas escasas son regaladas por quienes pagan el concierto para el que las obtiene primero; y luego…entran en juego las valoraciones personales propias de las personas con respecto a los bienes.  Pero antes de continuar, por favor recuerda que las valoraciones son temporales y teleológicas (o sea que cambian y tienen propósitos).   De modo que, aquí y ahora, puede que el que las haya obtenido regaladas primero, valore aquellas entradas/bienes menos que X cantidad de quetzales; y que haya alguien más que valore las entradas/bienes más que X cantidad de dinero. El mercado de entradas hace felices a ambos, al que no quiere ir y tiene las entradas, y al que quiere ir y no tiene entradas.  Ambos ganan si hay intercambio.  Que es lo mismo que decir que ambos salen ganando, si llegan a un acuerdo voluntario y pacífico acerca de quién debería quedarse con las entradas e ir al concierto y quién debería quedarse con los quetzales y hacer otras cosas con ese dinero.  Toma nota de algo…las promociones para obtener entradas siempre involucraba que, quien las quería, tenía que comprar algo, comer algo, beber algo.  El que las quería tenía que invertir algo de dinero, sin tener la seguridad de que se iba a ganar la entrada que quería. Para muchos, las entradas tienen valor…y sólo es cuestión de hallar el precio.

Dicho lo anterior, el intercambio de entradas no debería molestar al que regala las entradas.  En parte porque mucha gente es fan de Arjona y mucha gente, de verdad quiere ir al concierto. En parte porque no es razonable querer forzar a la gente a asistir a un concierto al que no quiere, o no puede ir, aunque haya participado en el concurso y se haya ganado una entrada.  Tampoco es razonable la pretensión de forzar a la gente a desperdiciar el valor que podría tener una entrada/bien, que no va a a ser aprovechada; de modo que no pueda intercambiarla por algo que valora, o podrá aprovechar, más.  Y el argumento anterior también funciona para quienes quieren cambiar sus quetzales, por las entradas.  Finalmente, intuyo que la prohibición de intercambiar las entradas (o revender entradas en el caso de otras actividades) no es posible de hacer cumplir.

Tutti contenti si las entradas son intercambiadas pacífica y voluntariamente.  Pero, no.  Sospecho que la pretensión de eliminar el dinero en todo este asunto de las entradas viene de dos ideas muy malas.  La primera es una pretensión igualitaria según la cual todos tienen las mismas oportunidades de ir al concierto si las entradas/bienes son regaladas de acuerdo con un sistema en el que la suerte juega un papel importante. Pero ahí está que la suerte no está repartida de forma igualitaria (como nada lo está).  Esta idea tiene algo de demagógica y de populista.  La segunda es la idea de que si hay dinero involucrado las cosas son menos puras, menos bellas, menos elevadas.  Pero ya lo dijo Francisco d´Anconia: El dinero es un instrumento de cambio, que no puede existir a menos que haya bienes producidos y hombres capaces de producirlos. El dinero es la forma material del principio según el cual, los hombres que quieran tratar entre sí deben hacerlo a través del intercambio dando valor por valor.  Aquella idea es moralmente destructiva.

En conclusión, es mejor y más sano para todos que las entradas/bienes sean valoradas e intercambiadas sin que se censure, criminalice o desprecie a ninguna de las partes involucradas en aquellas valoraciones e intercambios.


01
Mar 13

“Las apuestas” sobre el sucesor de Ratzinger

¿Qué dice el mercado de predicciones sobre el sucesor de Joseph Ratzinger al frente del Vaticano? Intrade es un mercado de predicciones; uno que te permite hacer predicciones sobre los resultados de cientos de acontecimientos en el mundo.  La bosa de valores encuentra los precios de acciones, mercados de futuros y materias primas; en tanto que el mercado de predicciones encuentra la probabilidad de que algo predefinido, incierto y futuro ocurra.

Puedes comprar acciones que respalden tus predicciones; y si aciertas ganas dinero.

Al momento de hacer estas anotaciones:

Hay 40% de posibilidades de que sea de Italia.

Hay 6% de posibilidades de que sea de Centro o Sudamérica.

Hay 25% de posibilidades de que sea electo en la segunda votación.

Hay 25% de posibilidades de que sea de Africa.

Hay 1% de posibilidades de que sea de España.

 


05
Nov 12

Obama en el mercado de predicciones

Si entiendes el significado de la frase To put your money where your mouth is, entiendes el valor de Intrade, un mercado de predicciones.  Este es un mercado que te permite hacer predicciones acerca de los resultados de cientos de acontecimientos en el mundo real.  Si las bolsas de valores encuentran los precios de las acciones, y los mercados de futuros encuentran los precios de las materias primas, los mercados de predicciones encuentran la probabilidad de que algo ocurra -un acontecimiento futuro, incierto.  Si tienes una opinión, sobre algún acontecimiento futuro incierto, puedes hacer tu predicción en Intrade y si tu predicción resulta correcta puedes ganar dinero real.

¿Cuál es una de las predicciones más calientes ahora mismo? La de que Barack Obama ganará la elección en los Estados Unidos de América.   Haz clic en el enlace por curiosidad, o para poner a prueba tu capacidad de predecir qué ocurrirá.  Al momento de publicar esta entrada la compra-venta de acciones indica que hay un 66.8% de que aquello ocurra.

Yo creo que reelegir a Obama es muy mala idea.  Me da escalofríos la posibilidad de un Obama cut loose sin el freno de ya no tener que preocuparse por la reelección.  Y me siento muy, pero muy incómodo con Romney y los conservadores religiosos.  Me da escalofríos pensar que si ganan Romney y Ryan la gente pensará que ese par son afines a la filosofía de la libertad y que a esta le echarán la culpa de los fracasos de sus políticas mercantilistas y estatistas.

Best case scenario? Que gane Obama la Presidencia; y que los conservadores controlen el Congreso.


24
Jun 12

Mercado para todo: se renta estufa

¿Quién dice que no hay mercado para todo? Aquí se alquila estufa con tres hornillas.


20
May 11

Dólar y “mercado negro”

El mercado es lo que ocurre cuando las personas intercambian voluntariamente su propiedad. No es un dios, ni un lugar. Hay mercado cuando una persona camina por la séptima avenida con sus dólares, y habla con otra con el propósito de adquirir quetzales. Si ambos llegan y se van en paz, contento uno con los dólares que quería, y el otro con los quetzales que deseaba, ese fue un fenómeno de mercado.

¡Que mala taza hay que ser, para llamar a aquello “mercado negro”! Los políticos socialistas y sus burócratas, creen que el mercado es otra cosa. Algo en el cual se imponen precios, y requisitos y condiciones coactivas y complejas. Algo tapizado de formularios y plagado de prohibiciones. Y por eso es que les conviene que al mercado se le llame “negro”, para ensuciar y para desprestigiar.

Hay un fenómeno de mercado cuando llegas a La Villa y compras aguacates. Llegas, saludas, preguntas cuánto valen, regateas, das el dinero, te ponen los aguacates en una bolsa y te vas.

El mercado tampoco es informal y no es cierto que no haya regulaciones en él. Intenta comprar, o vender dólares falsos, en el mercado, y vas a ver cómo se te reclama el cumplimiento de formalidades y regulaciones mínimas y razonables. Lo que pasa es que en el mercado lo que la gente quiere es que seas honrado, y no que seas beato.
Los precios, como el de las monedas extranjeras, son mensajeros que les informan a los actores económicos dónde colocar sus recursos. Por eso es importante que los precios sean reales, para que los actores económicos cuenten con información verdadera y hagan su cálculo económico sin engañarse, y ¡sin ser engañados!
Si el dólar está barato, a lo mejor no te conviene vender tus dólares; y si los aguacates están caros, de repente es mejor que compres otras frutas.

Hay personas a quienes no les conviene los precios reales porque -si son muy altos, o muy bajos- estos afectan sus negocios particulares; y por eso prefieren que los políticos y sus burócratas asignen precios políticos que sirvan a sus intereses. Y como “el nene es llorón y la nana lo pellizca”, a veces los políticos sucumben a las insinuaciones y a las presiones de aquellos grupos. Y cuando eso ocurre, todos perdemos porque los recursos en la sociedad son asignados con base en información falsa.

Yo, por eso, confío en el mercado; más que en las malas artes de grupos de interés, políticos, técnicos y funcionarios en convivencia.

Esta columna fue publicada en El Periódico.


27
Oct 10

¿En defensa del “azote de la economía”?

Me encanta la respuesta de José Alejandro Arévalo, exministro y actual diputado de Alvaro Arzú, a mi entrada titulada Arzú el azote de la economía.

Me encanta porque:

1.  El comentario de Alvaro Arzú renegaba de que creímos que la política debía someterse a la economía y ahora nos damos cuenta de que es al revés; pero su exministro y actual diputado pretende defender lo que su exjefe repudia.  Arévalo asegura que entre 1996 y 1998 la política económica fue orientada por el mercado.  ¡Y eso es, precisamente, de lo que está renegando el Alcalde y Expresidente!  Arzú no quiere que la economía se rija por a las leyes de la praxeología (como lo están el mercado, ¡y la política!), sino que quiere que la economía esté sometida a las demandas del ejercicio del poder. ¡A sus demandas en el ejercicio del poder!

2.  José Alejandro cree que es posible una economía de mercado, si un grupo de políticos maneja -como con botones y palancas- las variables macroeconómicas; y, en su respuesta, nos cuenta cómo ese manejo racionalista y constructivista (impropio de una economía de mercado) produjo estabilidad en materias monetaria, cambiaria y crediticia.

Al final ni el Expresidente, ni el Exministro se dan a entender bien porque, en realidad, lo que le gusta a Arzú es ser el árbitro en el partido de fútbol, pero tener la facultad de decirles a los jugadores cómo jugar; y José Alejandro cree que una economía dirigida por estrategias diseñadas desde el Ministerio de Finanzas y desde la Junta Monetaria, o desde Washington, es una economía de mercado.


21
Jul 09

¡Los sorprendentes mercados informales!

Los mercados informales funcionan en cualesquiera condiciones posibles.


30
Dic 08

¡Hay mercado para todo!

“¿NECESITA FACTURAS? ¿NO COMPLETA EL MONTO DE LA PLANILLA DEL IVA/ISR?¡¡¡REMATO Q350.00 cash!!! Kit de facturas por consumo y/o compra realizadas por un monto de:Q3,972.63 Son documentos contables debidamente registrados, operados y/o debitados en sistemas contables a lo largo del 2008 por máquinas facturadoras y en negocios de prestigio por ser motivadas por transacciones reales. Tel.: xxxxxxxx y/o xxxxxxxx”.

Este mensaje lo he recibido hoy, en mi correo electrónico, y me ha caído en gracia por dos razones: Primero, porque pone en evidencia, como si hiciera falta, que hay mercado para todo; y segundo, porque demuestra, como si hiciera falta, que si el 100% de lo pagado por concepto del Impuesto al Valor Agragado no puede ser descontado del impuesto a los rendimientos del capital, llega un momento en el que las facturas dejan de tener valor para alguien, y lo adquieren para otro. De modo que lo chucho del fisco genera los incentivos necesarios para que haya un negocio. Oportunidad que no existiría si cada quién tuviera la oportunidad de aprovechar a tope sus propias facturas.


04
Nov 08

El mercado y la predicción de resultados electorales

To put your money where your mouth is, es una expresión que invita a respaldar con dinero, lo que uno asevera. Es decir: estar dispuesto a arriesgar un valor, cuando uno está convencido de algo. Por eso me gusta Intrade, The Prediction Maket.

Como el mercado es lo que ocurre cuando las personas pueden intercambiar su propiedad libremente, este mercado para las predicciones es fascinante.

Sirve mejor que las encuestas porque con cada opción hay dinero en juego; de modo que el nivel de precisión es altamente confiable. Y esto es porque las malas decisiones tienen un costo.

Intrade ha servido para simplezas tales como para predecir quién ganará el concurso American Idol; pero, es un instrumento extraordinario en materia de predicciones electorales.

Mi tía Rita me dijo hace unos días que A ver si tomamos champagne el martes; y yo le contesté que no hago eso, como consecuencia de una elección -local, o extranjera-, desde la primera vez que fue electo Ronald Reagan. Y esta vez no será la excepción, sea cual sea el resultado de los comicios en los Estados Unidos de América. Por eso es que en este espacio no había escrito nada sobre ese tema.

Sepa usted que, segun los usuarios de Intrade, a la hora en que escribo este post hay un 91.7% de posibilidades de que gane Barak Hussein Obama. Una acción de Obama vale 91.7; en tanto que una de McCain vale 9.1.

Por cierto que sería interesante saber qué piensan de este instrumento las autoridades electorales guatemaltecas -y ciertos políticos chapines- que, de forma tercermundista, quisieran eliminar las encuestas electorales y las encuestas a boca de urna.