11
Ene 07

¡Se han perdido la ética y los valores!

Usted, ¿ha oído, o dicho alguna vez la exclamación que le dá título a esta entrada? Ayn Rand nos ofrece una explicación en esta colección de ensayos.

Dado que el egoísmo es, en palabras de Ayn Rand, “la preocupación por el interés personal*”, todo ataque contra el egoísmo es un ataque contra la autoestima del hombre. Esa es la conclusión principal de The Virtue of Selfishness, obra de Rand que ya se encuentra disponible en español, con el título de La virtud del egoísmo.

En la introducción, Rand explica que “el título de este libro puede suscitar el tipo de pregunta que me formulan de vez en cuando: ¿Por qué utiliza la palabra egoísmo para describir virtudes de carácter, cuando es incompatible con el concepto que tienen de ella muchas personas para las cuales no significa las cosas que usted desea expresar? A quienes me lo preguntan les contesto: por la misma razón por la que usted le teme. No se trate de una simple cuestión de semántica ni de una elección arbitraria. El significado que se da a la palabra egoísmo en el lenguaje popular no es meramente erróneo: representa una devastadora tergiversación intelectual, que es responsable, más que cualquier otro factor, de la paralización moral de la humanidad.

La virtud del egoísmo es una colección de ensayos por Ayn Rand y Nathaniel Branden, en la cual se definen los fundamentos y principios morales del Objetivismo.

Con respecto a la importancia de la ética, y en esta edición de La virtud del egoísmo, Manfred F. Schneider y Rosa Pelz escribieron que “la ética no es una fantasía mística, un convencionalismo social o un lujo subjetivo del que puede prescindirse. La ética es una necesidad objetiva para la supervivencia del ser humano, no por gracia de lo sobrenatural o por el deseo de sus semejantes. Tampoco obedece a los propios caprichos. Es consecuencia de la realidad misma y de la naturaleza de la vida”.

La obra ya está a la venta en en Sophos; y pronto estará en otras librerías de Guatemala.

*Selfishness, en los diccionarios en inglés.


18
Nov 06

¡De esmoquin y a La Scala!

1. Cuando yo tenía unos 13 años, para una Navidad, mis hermanos y yo entramos a la sala; y alrededor del Nacimiento y del árbol navideño vimos nuestros regalos y empezamos a abrirlos. Mis padres observaban desde un rincón y nosotros no notábamos nada raro. En eso mi papá me preguntó: “¿No viste atrás?” Y como no lo había hecho contesté que no y volví la cabeza; sólo para encontrarme con la increíble sorpresa de que allí había una motobicicleta con una gran moña roja.

Ahora imagínese el reguero de adrenalina y cómo me daba de vueltas la cabeza.

Por esos años leí que en Milán había un indigente cuyo sueño era asistir a una presentación en La Scala. Un revista lo bañó, le puso esmoquin y lo mandó a la opera en limosina. Pues así mismo, como se debe haber sentido aquel indigente y como me sentí cuando vi la bicimoto, fue que me sentí cuando recibí la invitación para asistir al Mont Pelerin Society General Meeting 2006.

Sin bulla y en privado, el mismo se celebró aquí en Guatemala, y coincidió con el año en que se celebran los 35 años de la Universidad Francisco Marroquín, que actuó como anfitriona.

Usted dirá que qué le pasa a este que se emociona así con un encuentro de economistas, filósofos, historiadores, periodistas y otros. ¡Pero no es cualquier encuentro! Es uno que sigue los pasos de Aristóteles, Smith, Locke, Hume, Ortega y Gasset, Alberdi, Rand, Mises, Hayek y Friedman, entre otros íconos de la civilización occidental.

Es caminar ese sendero en compañía de David Kelley, Leonard Liggio, Thomas Hazlett, David Friedman, Carlos Sabino, Alberto Benegas Lynch (h), James Tooley, Michael Novak, Carroll de Rodríguez, Dwight Lee, Bruce Benson, Andrew Morris, Roberto Blum, Mary O´Grady, Richard Epstein, Charles Baird, Tom Palmer, David Schmidtz, Manuel F. Ayau, Giancarlo Ibárgüen, Ed Crane, Roberto Salinas, Karen Horn y José María Aznar entre muchos otros.

La MPS fue establecida después de la Segunda Guerra Mundial como iniciativa de F.A. Hayek. Parte de la idea de que los valores fundamentales de la civilización están en peligro; pero el grupo no busca crear una ortodoxia, ni formar un partido, o hacer propaganda. Su objetivo es facilitar el intercambio de ideas entre personas que comparten los mismos principios, propios de una sociedad de personas libres, así como estudiar los resultados, las virtudes y los defectos de los sistemas de mercado.

La Sociedad tiene unos 500 miembros en más de 40 países. Entre aquellos, se encuentran varios intelectuales que han recibido el Premio Nobel, como James M. Buchanan y Vernon L. Smith que, por cierto, también son doctores honoríficos de la UFM. Para Guatemala es un honor que Manuel F. Ayau, rector emeritus de esa casa de estudios, presidiera la MPS de 1978 a 1980.

¿Qué confirmé durante mi experiencia en la MPS? Pues que sin Estado de Derecho son imposibles el desarrollo y el bienestar. Que lo que es correcto es más importante que lo que funciona. Que no debemos esperar a que nuestra vida, o nuestra honra estén en peligro, para defender la libertad. Que las personas que son grandes intelectualmente, son las más generosas y magnánimas. ¡Todo eso y mucho más! Ahora ya me quité el esmoquin, y estoy de vuelta en la vida normal.

2. Y hablando de vida normal, ¿qué le pareció a usted eso de los diputados viajeros? ¿Usted cree que fueron engañados, o que iban con conocimiento de causa? Si fueron engañados, ¿de dónde pudo haber venido el engaño? ¿Cuántos diputados viajan de esa forma, durante una legislatura? Si esto ocurre cuándo “los buenos” están a cargo, ¿habrá forma de que no ocurra, y punto?

3. Mojito patriótico en tierra cubana. El inspector de la escuela le pregunta a Pepito: “¿Quién es tu madre?”; y Pepito responde: “La patria, inspector”. Y el inspector vuelve a preguntar: ¿Quién es tu padre?”; a lo que Pepito responde: “Fidel, inspector”. La tercera pregunta del inspector es: Y tu, ¿qué quieres ser, Pepito?” A lo que Pepito responde: “Yo quiero ser huérfano, inspector”.

Publicada en Prensa Libre el 19 de noviembre de 2006.