Ahora que leo que 2748 habitantes del muncipio de Chuarrancho se opusieron a la construcción de una hidroeléctrica en aquella localidad, encuentro algunos paradigmas que paran el pelo con respecto a a la calidad de la dirigencia popular que hace posible aquella oposición.
Rodolfo Quezada
03
Ago 09
Los paradigmas de Chuarrancho
16
Jun 09
De lejos se ven los toros
Rodolfo Quezada, alto dirigente de la iglesia católica chapina, informó que su organización evaluará si continúa, o no, formando parte el grupo garante del Acuerdo Nacional de Seguridad y Justicia. El gobierno cambian funcionarios a cada momento, como cambiarse de camisa, por lo cual realmente es muy difícil ponerse de acuerdo, dijo el Cardenal.
11
Jun 09
La imagen, la realidad y la insoportable levedad
Cuéntase, ¿de Jorge Luis Borges?, que alguna vez le hablaron para que trabajara con el gobierno argentino para mejorar la imagen de aquél país. Dícese que, ante la propuesta, respondió que lo que había que mejorar no era la imagen, sino la realidad de la Argentina.
01
Jun 09
El veneno de Quezada
El cardenal mediático, Rodolfo Quezada, aprovechó el velorio de las niñas Heidy, Diana y Wendy, en San Lucas Sacatepéquez, para lanzar el veneno de la lucha de clases.
06
Mar 09
El padre Rojas pide socialismo, patria, o muerte
Socialismo, patria, o muerte, es el llamado que hizo el padre Adolfo Rojas. El sacerdote pronunció su homilía con motivo de la celebración del golpe de estado del 4 de febrero de 1992, en Venezuela.
02
Mar 09
Solidaridad vulgarizada
“Ya me da pena utilizar la palabra solidaridad, porque creo que se está vulgarizando demasiado”, dijo Rodolfo Quezada luego de haber oficiado misa el domingo. El Cardenal dijo que está “ muy molesto con eso de quitar los ingresos a organizaciones tradicionales como la Sociedad Protectora del Niño y las Señoras de San Vicente de Paúl que, vendiendo cosas en el puerto libre del aeropuerto, juntaban dinero precisamente para hacer el bien, y ahora una dirección general se lo da a otro”.
Esta vez coincido con Su Eminencia porque la administración socialdemócrata, como el perro del hortelano, ni come ni deja comer, y encima disfraza de solidaridad, que es una virtud, el vicio de tomar lo ajeno y redistribuirlo políticamente.
Lo que la administración de Los Colom está haciendo con la Sociedad Protectora del Niño y con las Señoras de la Caridad, es una sinvergüenzada.
11
Ene 09
Golpe duro para la administración Colom
Miles y miles de guatemaltecos abarrotaron, ayer, la Plaza de la Constitución y se manifestaron contra la criminalidad y la delincuencia. Esto es consecuencia de que la administración socialdemócrata, que fue electa porque supuestamente iba a combatir la violencia con inteligencia, no sólo ha sido incapaz de mostrar buenor resultados, sino que “el desenfreno delictivo ha agravado la incertidumbre y la desconfianza pública en la autoridad”; y, en esas condiciones, 9 de cada 10 guatemaltecos teme ser secuestrado, extorsionado, o asaltado, y casi 8 de cada 10 se siente inseguro cuando va por la calle.
03
Nov 08
No se oye, Padre
Rodolfo Quezada se queja de que “La última vez que les hablé de los impuestos me malinterpretaron algunos, pero siempre hablar de impuestos es desagradable, y sin ellos no se puede vivir en Guatemala porque tienen que cubrir el presupuesto”.
22
Oct 08
Los fariseos y los impuestos que no pagan
Rodolfo Quezada exhortó a su rebaño para que pague impuestos y yo me acordé del Evangelio según San Mateo: Al referirse a los escribas y fariseos, Jesús le habló a la multitud y a sus discípulos diciendo: No hagáis según sus obras porque ellos dicen y no hacen. Atan cargas pesadas y difíciles de llevar, y las ponen sobre los hombros de los hombres; pero ellos ni con un dedo quieren moverlas.
El Cardenal dijo que es obligación aceptar el pago de impuestos y dijo que aunque a muchos no les agrada lo ideal es que quienes ganan más paguen más. La audacia del Príncipe de la Iglesia lo llevó a recomendar los impuestos directos; y advirtió que no quiere entrar en controversias. PL, 20/10/2008, P.10
Ellos dicen y no hacen; y ponen cargas pesadas sobre los hombros de los hombres, pero ellos ni con un dedo quieren moverlas.
El de los impuestos es uno de los mejores ejemplos del fariseísmo en acción; pues resulta que con extraordinaria habilidad política la organización que Quezada representa consiguió estar exenta del pago de impuestos. Así, ¡¿cómo no?! Puesto de otra forma, haciendo uso de sus influencias en el poder, la Iglesia consiguió el privilegio de no pagar impuestos.
¡Con razón es que el Purpurado anda proponiendo ataduras y cargas para otros! ¡Con razón es que no quiere entrar en controversias! Y por supuesto que la Iglesia no es ajena al negocio ese de los privilegios. La Bula de la Santa Cruzada, por ejemplo, facilitaba indulgencias a los que le habían hecho la guerra a los infieles, y a los que socorrían los gastos de la Iglesia con limosnas. Quienes sacaba la Bula de la Santa Cruzada, mediante el pago correspondiente se libraban de penitencias, ayunos y abstinencias.
Pero veamos qué ocurre cuando la Iglesia sí está obligada a pagar impuestos porque no ha tenido la capacidad política de conseguir que se le exonere de hacerlo. En Costa Rica la Iglesia Católica trasladó fondos de inversionistas que mantenía en una sociedad off shore, en Panamá, para evitar los controles de la Superintendencia General de Entidades Financieras. Esta historia está bajo el titular de Iglesia católica de Costa Rica evade impuestos, publicada el 23/5/2008, en la página 39 del diario Prensa Libre.
Dicha Superintendencia “le ordenó a la Conferencia Episcopal de Costa Rica cesar las operaciones ilegales de intermediación financiera que efectuaba a través de sus cuentas bancarias en las cuales recibían inversiones de costarricenses y extranjeros y daban créditos”.
El Presidente de la Conferencia Episcopal dice que su organización fue víctima de una estafa; pero uno de los inversionistas relató que cuando los obispos se dieron cuenta de que no era bueno que la gente conociera que la iglesia tenía todas esas cosas “comenzaron a hacer todo a través de sociedades anónimas”. Ni la historia de MDF, ni las aventuras de Carlos Llort, o de Eduardo Meyer, aquí en Guatemala, tienen nada que envidiar a las maniobras de la Iglesia Católica tica.
Y por cierto, ¿qué tipo de impuestos directos debería pagar esa organización por los $58.9 millones que tiene invertidos en la sociedad financiera panameña?
Con razón es que Quezada no quiere entrar en controversias.
La Iglesia Católica ha tenido una historia interesante en materia de impuestos. Cuando pudo, porque tenía el poder político para hacerlo, le cobraba a su rebaño diezmos y primicias. Los primeros son un impuesto de 10% sobre los frutos de los propios bienes, o industria; y los segundos son los primeros frutos de la tierra, o de los animales, que había que entregar a al iglesia.
Eso sí, nada lentos, los dirigentes católicos hacían esos cobros por concesión; de modo que no eran ellos quienes tomaban diezmos y primicias del rebaño, sino los concesionarios que, por ello, ganaban un porcentaje.
A final de cuentas, la organización que dirige Quezada, cuando no puede cobrar impuestos para sí, hace todo lo que sea necesario para no pagarlos; pero eso sí -como los fariseos que oran de pié en el templo y limpian el exterior de la copa, o el plato- no dudan en recomendar que otros sí paguen…y mucho.
15
Sep 08
Quezada corta varas
Cuenta la leyenda que un campesino bastante sordo fue saludado desde lejos por un compadre suyo; y entre ellos se produjo el diálogo siguiente:
-“Adiós, compadre”.
-“Aquí, compadre, cortando varas”.
-“Adiós, le digo”.
-“Sí compadre, para hacer un cerco”.
Y por eso es que aquí, en Guatemala, se dice que alguien está cortando varas cuando -fingiendo demencia, o ignorancia- lleva el diálogo por donde le conviene, independientemente de los hechos, o de la naturaleza de aquel.
Eso mismo hizo el purpurado Rodolfo Quezada en su mensaje dominical. “Para Quezada”, dice la nota mediática correspondiente, “la firma de la Independencia conllevó más situaciones negativas que positivas”. Por lo que cabe preguntarse si, a juicio del Príncipe de la Iglesia, hubiera sido mejor que Guatemala continuara siendo una colonia española, y no un país distinto.
El Cardenal asegura que “hay muchas sombras en nuestra historia, como la polarización entre los partidos Liberal y Conservador”, explicación que no está alejada de la verdad; pero que queda sospechosamente incolclusa si no se aclara que el Partido Conservador era el partido de la organización que dirige Su Excelencia. De hecho, en Guatemala todavía les decimos cachurechos a los iglesieros, de la misma forma en que,antaño, se les decía así o cachos, a los Conservadores.
Por supuesto que a la dirigencia cachureca le molesta que hubiera enfrentamiento; pero, ¿cómo no iba a haberlos si la Iglesia Católica se aferraba a sus privilegios económicos y políticos? La Revolución Liberal -con todo y sus defectos constructivistas, racionalistas y de corrupción- fue un paso adelante en el desmantelamiento del sistema feudal y colonial que tanto agradaba a los Conservadores y a sus patrocinadores entre la aristocracia y el alto clero.
Otro de los bemoles que Quezada le encuentra a la Independencia es “la exclusión de los indígenas por la ausencia de un prócer de ese grupo”. Y claro, hora en estos tiempos de corrección política está de moda ningunear cualquier proceso social que no incluya a todos; pero ningún proceso importante incluye a todos. La Revolución Americana fue hecha por individuos que pertenecían a una elite: Washington, Adams, Hamilton, Franklin, Madison, Mason, y otros de esa estatura. La Revolución Francesa fue consecuencia de las ideas y las acciones de personajes como Diderot, D`Alambert, Rousseau, Voltaire, Robespierre, y otros parecidos. El mismo Lenin se dio cuenta de que la Revolución Proletaria no iría a ningún lado si seguía esperando a que –según lo había predicho Marx- los proletarios se alzaran contra la burguesía. Y por eso es que Ilich Ulianov se sacó de la manga el concepto de la Vanguardia de la Revolución, que no era sino él y sus amigos, constituidos en elite revolucionaria. Los procesos sociales importantes no los hacen todos; los hacen unos: los que en ese momento histórico específico pueden pensar y tienen los arrestos para actuar.
Como Su Eminencia corta varas, se le olvidó un detalle: Aquel 15 de septiembre de 1821, en aquel acto que Quezada ningunea y califica de excluyente, junto al Jefe Político y los miembros del ayuntamiento, junto a los ministros de la audiencia y los diputados provinciales, estaban presentes Ramón Casaus y Torres, José María Castilla, Luis Escoto, Antonio Tabeada, Mariano Pérez y Antonio García, ¡la mismísima elite! de la organización que ahora encabeza Rodolfo Quezada. Casaus, por cierto, se opuso a la Independencia, no quiso firmar el acta y era conocido por su postura conservadora o cachureca. Luego, cuando era políticamente seguro y “para bien de las almas” se adhirió a la nueva República. El Arzobispo Casaus murió en La Habana; ciudad que, por cierto, todavía vivía a plenitud el ambiente colonial que satisfacía al Prelado.
Algo se salva del discurso de Quezada; y esto es que, al menos, es consistente con la posición de su antecesor, Casaus. Ambos comparten el criterio de que la Independencia es y era negativa.
En su perla dominical de Independencia, Quezada dijo que “hizo falta un proyecto de nación, para que la riqueza se distribuyera de manera equitativa y no concentrada en un solo grupo”; y aquí también corta varas a conveniencia; porque, ¿qué grupo, sino su organización era el mayor terrateniente del país; qué grupo, sino el suyo, era el mayor prestamista; qué grupo, sino el suyo, cobraba diezmos y primicias; qué grupo, sino el suyo, poseía monasterios inmensos, ingenios, viñedos, y otras riquezas que contrastaban notablemente con la miseria de los indígenas por los que suspira el Cardenal?
Quezada dice que corta varas; pero engaña a muy pocos.