22
Feb 22

“Sobreviviente designado” y la agenda progre

 

Toda la agenda progre de los demócratas liberals es retratada en sucesión, en la serie Designated Survivor que estoy viendo en Netflix.  Entonces, ¿por qué la veo?

Primero, y en alusión a la frase del presidente Tom Kirkman que ilustra esta nota, es porque en su obra La fatal arrogancia, Friedrich A. Hayek denuncia a los gobiernos por haber abandonado su misión -la de proteger los derechos individuales de todos por igual- y dedicarse a satisfacer necesidades.  Me parece chistoso el contraste entre Fritz y Kirkman ya que este último, sus ideas, sus políticas y su equipo representan toda aquella fatal arrogancia contra la que nos advierte el austriaco.  Kirkman de verdad cree que su responsabilidad como presidente es la de satisfacer las necesidades de los ciudadanos.

Segundo, porque no puedo ni imaginarme a Joe Biden en las situaciones en las que se encuentra el presidente Tom Kirkman en cada capítulo.  Puedo imaginar a Reagan, a Trump, a Clinton y a Obama…¿pero a Biden…o a Kamala Harris? Naaaaaaaaa. Puedo imaginar, sí, la dudas, la incompetencia y la debilidad en los momentos más retadores; y entonces pienso que  triste por donde y hasta donde ha caído la gran nación de Thomas Jefferson, Benjamin Franklin y otros padres fundadores.

Y tercero, la veo porque entretiene….sin ser la gran cosa.

En última instancia, es una lástima que en los tiempos que vivimos, al frente de la nación más poderosa del mundo no haya un líder que dé la talla.


25
Ene 22

“Los lobos” una historia diferente sobre migración

 

Los lobos es una peli sobre migrantes; pero no es cualquier peli sobre migrantes.  Max y Leo -personajes entrañables- pueden robarte el corazón a lo largo de una historia positivamente cargada de humanidad y de autenticidad; y la madre, Lucía, no se queda atrás.

Max y Leo son niños de 8 y 5 años, que viajan de México a los Estados Unidos de América con su madre en busca de una vida mejor. Consiguen un apartamento en un condominio de mala muerte habitado principalmente por latinos y asiáticos.  Mientras esperan que su madre regrese de sus dos trabajos, los niños observan a través de la ventana de su departamento el entorno inseguro en el que se halla el lugar donde viven. Para pasar el tiempo, los niños escuchan los cuentos, reglas y lecciones de inglés que la madre les deja en una grabadora vieja de cassettes, y construyen un universo imaginario con sus dibujos, mientras anhelan que su mamá cumpla su promesa de ir juntos a Disneylandia.

¿Quieres ver una peli -bien lograda- que te deja con buen sabor de boca acerca de la humanidad? Mira Los lobos. Está en Netflix.


17
Ene 22

Dos pelis francesas

 

En el fin de semana vi dos películas francesas que quiero compartir: Calle de la humanidad, 8; y Mala hierba.

El título en inglés de Calle de la humanidad, 8 es Stuck Together; y es más atinado.  Es la historia de varias personas que viven en un edificio de apartamentos, en París, Francia, durante la peor parte de los encierros de 2020.  Me pareció genial porque, es admirablemente respetuosa del dolor de las personas que han perdido seres amados y cercanos durante la pandemia, y aborda con un sentido extraordinario del humor los absurdos, y sin sentidos que abundaron -y abundan- en el contexto del covid-19 y de los confinamientos forzados y arbitrarios.  No es para personas sin sentido del humor, ni para personas como el personaje Martin Becquart.

Mala hierba es diferente.  Es una peli de redención y de perdón.  Es la historia de Wael -un estafacor- y de su madre adoptiva, Monique.  Ambos paran colaborando con un amigo de Monique que trabaja con un grupo de jóvenes problemáticos.  Podría ser la típica peli de patojos rebeldes; pero no lo es porque está construida de forma ingeniosa y tiene muy buenas actuaciones.  Eso hace que los clichés pierdan relevancia.  Además, en los tiempos que vivimos, luego de dos años de encierros forzados con sus consecuencias devastadoras material y espiritualmente, los jóvenes necesitan más atención de la que posiblemente les estamos prestando.

Ambas están en Netflix y otras pelis el sábado y domingo; pero estas fueron las que más me gustaron.


04
Dic 21

Dos pelis que te recomiendo

 

En esta semana he visto dos pelis que te recomiendo: Green Book: amistad sin fronteras; y El poder del perro.

Ambas son buenas historias y bien contadas.  De la primera -que es la historia  de un italiano prejuicioso y un pianista negro que viajan en auto por el sur profundo de los Estados Unidos de América en 1962- te dejo mis tres frases favoritas de Green Book.

No preguntes qué puede hacer tu país por ti, sino qué puedes hacer tu por ti mismo.  Un giro que convierte la célebre frase colectivista y estatista de J. F. Kennedy en una idea valiosa.

Ser un genio no es suficiente, hace falta valor para cambiar el corazón de la gente.  Frase que nos invita a la acción si queremos cambiar las ideas prevalecientes.

La única victoria es mantener tu dignidad porque la dignidad siempre prevalece. Algo que se nos olvida cuando creemos que el éxito depende de alcanzar nuestras metas y perdemos de vista que es más importante actuar de acuerdo con nuestros valores y virtudes, aunque no alcancemos nuestros objetivos.

Me shockleo, pero no debería sorprenderme la existencia del Green Book; y voy a decir que es un peliculón que aborda los prejuicios y el racismo desde una perspectiva ajena a las tendencias woke y colectivistas que prevalecen entre mucha gente.  Prepárate para algo refrescante e inspirador.

El poder del perro es inquietante.  Todo el tiempo tuve la impresión de que algo estaba por pasar.  La peli consigue tenerte a la expectativa de que algo muy malo está por ocurrir.  Algo violento y desagradable.  Entre la música, la tensión constante, la fotografía magnífica, las actuaciones impecables y personajes bien logrados, esta historia te va a sorprender.

Que no te desanime la lentitud inicial de la peli…y ponle atención a los detalles. Es una peli emocionalmente compleja y demandante; y como en Green Book, es una en la que la dignidad tiene mucho que ver.

¿Mis citas favoritas?

– Bronco Henry told me that a man was made by patience in the odds against him.

What kind of man would I be If I don´t save my mother.


31
Jul 21

“The Conductor” música y una lección de historia

 

Cuando yo estaba bachillerato iba siempre que podría a los conciertos de la Orquesta Sinfónica Nacional en el Conservatorio.  Mi papá nos llevaba a mi amigo Ricardo y el papá de Ricardo nos recogía al finalizar la presentación.  Durante mucho tiempo tuve mi colección de programas autografiados por directores de orquesta y solistas.  Tenía los autógrafos de Ricardo del Carmen y de Jorge Sarmientos -celebérrimos directores guatemaltecos- junto a los de otros directores nacionales y extranjeros invitados.

Haz clic en la foto para ver el trailer.

En recuerdo de aquello y porque me gusta la música clásica (no toda, claro) me llamó la atención la pelicula The Conductor.  No sabía, yo, que me iba a encontrar con Antonia Brico y su historia fascinante.  Una historia de amistad, de disciplina y perseverancia,  una que ilustra la importancia de tener un propósito y una de lucha contra los prejuicios y la pusilanimidad.

No te cuento más para no destripar la peli; pero Antonia Brico (1902-1989)  fue la primera mujer en dirigir la Filarmónica de Berlín y la Orquesta Filarmónica de Nueva York contra viento y marea.


28
Jul 21

“Retratos de una guerra” y los horrores soviéticos

 

Los soviéticos -los comunistas soviéticos- tuvieron campos de trabajos forzados, realizaron deportaciones masivas, cometieron actos de genocidio e hicieron atrocidades indecibles; pero…¿cuántas películas de aquellos horrores has visto? ¿Cuántas novelas has leído sobre aquellos actos espantosos? Seguro que no muchos y seguro que muchos menos que los que has visto sobre los nazis.

Haz clic en la foto para ver el trailer. Foto por desconocido, via Wikimedia Commons.

Retratos de una guerra, o Ashes in the Snow es tu oportunidad de acercarte a la verdadera cara del comunismo y a sus monstruosidades. Acercarte de la mano de la mano de Lina Vilkas, una niña de 16 años y su familia, luego de que su padre es asesinado y ella, su hermano y su madre son capturados y llevados a un campo de trabajos forzados durante la ocupación soviética de Lituania. A pesar de la brutalidad y la infamia que la rodea, Lina consigue documentar sus experiencias por medio del arte.

La peli está basada en la novela Between Shades of Gray y en la vida de Irena Spakauskiene, una chica lituana de 13 años que fue deportada a los gulags de Siberia en 1941.

Creo que debería haber, y deberíamos ver más pelis sobre los horrores cometidos por los regímenes colectivistas y totalitarios comunistas; así como los hay sobre los cometidos por los regímenes colectivistas y totalitarios fascistas. Películas como Retratos de una guerra, The Lives of Others, First They Killed My Father, o The Killing Fields.


20
Jul 21

“La muerte de Stalin”, peli

 

La muerte de Stalin es el nombre de una sátira notable que vi la semana pasada y que les recomiendo.

La foto la tomé de Facebook.

La peli -que está en Neflix- se inspira en los momentos que sucedieron a la muerte de Joseph Stalin; y con un humor negro, de la mejor calidad, ilustra las luchas de poder dentro del Consejo de ministros de la Unión Soviética con el propósito de sustituir al dictador. Con un sentido del absurdo quizás sólo igualado por el de Gary Larson, autor de The Far Side, esta película será disfrutada no sólo por quienes conocen algo de la historia del Imperio del mal, sino por quienes valoran la buena sátira.

Quienes vieron Chernobyl -aunque no conozcan algo de historia soviética- fácilmente podrán imaginar los procesos de decisión que había en la URSS; sobre todo cuando estaban involucradas la honestidad (o la falta de honestidad), la independencia (o la falta de independencia), y la sed (o la necesidad) de ejercer el poder.

La Unión Soviética, un país del tercer mundo con un ejercito del primero, fue el reino del absurdo, reino que logró -¿por qué no?- convertir el disparate en miedo feral y en tragedia para millones y millones de personas.


06
Abr 21

¡Que peli tan fuerte! “El club”

El club es una película chilena fuerte y estremecedora.  Si aguantas este tipo de pelis, si tienes una mente activa y no te asustas frente a temas controversiales e incluso siniestros, esta es para ti.

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Guardados por una mujer que los cuida, cuatro sacerdotes viven en una localidad remota de Chile. Todos ellos cometieron actos delictivos y se encuentran en aquel lugar castigados por las autoridades eclesiásticas. La mujer es una monja y la casa sirve de refugio para sacerdotes pecadores.

Escena de “El club”.

La peli está en Netflix y no hay que confundirla con la serie homónima.


22
Feb 21

“Descuida, yo te cuido”; la peli del fin de semana

Descuida, yo te cuido, es la peli que vi el fin de semana; y como tiene que ver con el despojo de la dignidad humana y con métodos coercitivos para quitarles a las personas su propiedad, su libertad y su responsabilidad, me recordó los trabajos de Thomas Szasz, psiquiatra que visitó Guatemala en 1979.

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La de la peli -de un humor negro encantador- es la historia de dos mujeres que, con la complicidad culposa de un juez, la ayuda dolosa de una médica y la del administrador de un hogar de ancianos, montan una operación para esquilmar ancianos; operación que es posible sólo sobre la premisa de que el estado debe velar por el bienestar de ciertos individuos, sí, o sí. Incluso contra su voluntad y su juicio propio.

En The Myth of Mental Illness, Thomas Szazs sostuvo que la medicación, la hospitalización y la psicoterapia obligatorias son poco más que formas de práctica clínica coercitivas y que anulan la dignidad de las personas. Como muchas personas valoran la seguridad y la sumisión por encima de la incertidumbre y la responsabilidad,  para algunos pacientes aquello significa abdicar del control sobre sus vidas frente a la autoridad de sus síntomas y la de sus médicos; mientras que a estos los obliga a creer en la enfermedad mental como una enfermedad que debe curarse. El doctor Szasz abordó el tema de la libertad y la necesidad de cuestionar la naturaleza potencialmente coercitiva inherente a la psicoterapia y la psicofarmacología.

En esa dirección, Szasz explicó que la verdadera libertad significa tomar el control y la responsabilidad de nuestras elecciones y sus consecuencias. Ni la psicoterapia, las drogas ni el poder de nuestras técnicas restaurarán el sentido personal de agencia de un paciente; y Szasz hace que los interesados se sientan lo suficientemente incómodos como para pensar de manera diferente sobre todo lo que se hace clínicamente, desde el diagnóstico hasta la planificación del tratamiento, especialmente con los más vulnerables: los niños, los presos, los llamados enfermos mentales…y los ancianos.

Es importante anotar que Szasz no estaba contra la psiquiatría, sino que se oponía a la psiquiatría coercitiva. Era un oponente acérrimo de la institucionalización involuntaria y del tratamiento psiquiátrico involuntario, pero practicaba la psiquiatría y la psicoterapia entre adultos que consentían los tratamientos.

La peli me llevó a pensar que, así como ocurre con los llamados enfermos mentales -al amparo de legislación colectivista y anacrónica, con la complicidad de jueces y profesionales (de forma culposa, o dolosa)- los ancianos, los niños y los presos son muy vulnerables. La peli tiene que ver con la institucionalización involuntaria de una anciana.

Las ideas de Thomas Szasz fueron muy controversiales durante su vida, y continúan alimentando las perspectivas críticas en torno a temas aparentemente divergentes como el Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders (DSM) y la despenalización del uso de drogas. 

El doctor Szasz vino a Guatemala para recibir un doctorado honoris causa de la Universidad Francisco Marroquin.  La última vez que supe Szasz fue en 2012, poco antes de su muerte, cuando yo andaba con Ethan Nadelmann en La Antigua y esta llamó a aquel para contarle que estaba en Guatemala y en la UFM; y a Szasz le dio mucho gusto.


08
Feb 21

“La valla” y el colectivismo totalitario entre nosotros

La valla es una serie de Netflix y supongo que ya sabes de ella, porque es muy popular.  Pues empecé a verla el sábado y me incomodó.  Me incomodó mucho y al principio no sabía por qué.  A mí me encanta V for Vendetta y La valla va por ahí, de modo que sentí muy raro que me incomodara tanto.  Luego, hoy en la mañana di por qué.  La valla me incomodó porque la sentí muy cerca.  Escalofriantemente cerca.

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Spoiler potencial en el siguiente párrafo:

En una escena, Emilia le explica a su nieta, Marta, que luego de un enfrentamiento global muy fuerte, en el que murió mucha gente (una Tercera guerra mundial, de hecho), y y luego de que surgieron muchas enfermedades que no se pueden curar y de que el planeta se puso muy enfermo, había mucho miedo.  En consecuencia, explica Emilia, las personas querían gobiernos fuertes que garantizaran su seguridadEso es normal, dice la niña, Marta.  A lo que la abuela, Emilia, contesta: Bueno, sí; pero lo malo es que esos gobiernos provocaron la guerra y en nombre de esa seguridad nos quitaron los más importante que tenemos las personas. ¿Sabes lo que es? La libertad. Y luego la familia brinda por la libertad…y por la vida.

Esta escena es riquísima en elementos perturbadores.  Primero el uso de la neolengua; ya que a la Tercera guerra mundial, se le llama enfrentamiento global, que es una forma de quitarle contenido al concepto original. Luego la extraña aparición de enfermedades que no se pueden curar.  A ello le sigue la idea de que el planeta se enferma, como si fuera algo vivo.  Vale decir que antes de aquel diálogo la familia recuerda que había en la tele muchos canales y teléfonos individuales para toda la gente.  Pero se quejan de que había mucha contaminación y de que había muchos automóviles y mucho ruido.  Quejas curiosas porque en la serie,  la gente vive en un mundo en el que no hay carne, ni comodidades (excepto para las élites gobernantes).  ¿Ves por dónde voy?

El miedo hace que las personas exijan que el gobierno les garantice seguridad, y Marta ve que eso es normal…excepto por un detalle macabro que destaca Emilia: Los gobiernos causaron las guerras y en nombre de la seguridad que quería la gente, eliminaron la libertad y con ella, la vida.

Ya lo dijo Benjamín Franklin: Aquellos que sacrifican libertad por seguridad no merecen tener ninguna de las dos.

La valla se parece muchísimo a lo que nos ha estado ocurriendo desde marzo de 2020.  Mucha gente tuvo miedo y clamó porque el gobierno eliminara la libertad, a cambio de la ilusión de seguridad.

Lo dice V, en V for Vendetta, otra peli distópica en la que la gente vive bajo una dictadura totalitaria luego de guerras, enfermedades y caos.  La verdad sea dicha, si estáis buscando un culpable, sólo tenéis que miraros al espejo. Sé por qué lo hicisteis, sé que teníais miedo ¿Y quién no? Guerras, terror, enfermedades. Había una plaga de problemas que conspiraron para corromper vuestros sentidos y sorberos el sentido común. El temor pudo con vosotros y, presas del pánico, acudisteis al actual líder, Adam Suttler. Os prometió orden, os prometió paz. Y todo cuanto os pidió a cambio fue vuestra silenciosa y obediente sumisión.

El miedo hace que muchas personas pidan gobiernos autoritarios y hasta totalitarios, con tal de hacerse la ilusión de seguridad, y a cambio no sólo no dudan en renunciar a la libertad, sino que aprueban que se imponga la dictadura a todos los demás.

La escena de La valla y el discurso de V, también me recordaron un texto inquietante de C.S. Lewis (1942):

Un diablo joven: “¿Cómo lograste enviar tantas almas al infierno?”

Viejo diablo: “¡Con miedo!”

El joven: “¡Buen trabajo! ¿De qué tenían miedo? ¿Guerra? ¿Hambruna?”

El viejo: “¡No, de una enfermedad!”

El joven: “¿No han estado enfermos? ¿No estaban muriendo? ¿No había cura?”

El viejo: “Se enfermaron, murieron, hubo cura”.

El joven: “No entiendo …”

El viejo: “¡Creyeron accidentalmente que lo único que tenían que conservar a toda costa era la vida! No se abrazaron, no se saludaron, se alejaron el uno del otro. ¡Dejaron todo contacto humano y todo lo que era humano! Se quedaron sin dinero, perdieron sus trabajos, pero optaron por temer por sus vidas, aunque ni siquiera tuvieran pan. Creían todo lo que escuchaban, leían periódicos y creían ciegamente todo lo que leían. Renunciaron a su libertad, nunca salieron de casa, no fueron a ningún lado. No visitaron a familiares ni amigos. El mundo se ha convertido en un gran campo de concentración con prisioneros voluntarios. ¡Aceptaron todo! Solo para sobrevivir a otro día miserable … ¡No vivieron, murieron todos los días! Fue fácil llevarse sus almas miserables … “

¿Así, o más perturbador?

El miedo es el común denominador de los tres textos que ocupan estas meditaciones; también lo es la renuncia a la libertad y a la vida, a cambio de seguridad.  A la vida no como algo biológico, claro, sino a la vida como la oportunidad de perseguir propósitos y valores, como oportunidad para florecer y ser felices.

Hay un cuarto texto que quiero compartirles, lo leí en Facebook y no lo encuentro de nuevo, así que lo voy a parafrasear:  Si le das al gobierno la facultad de violar los derechos individuales en caso de emergencias, los gobiernos van a crear los casos de emergencias.

Es el caso de La valla, de V for Vendetta y el del diablo viejo de C.S. Lewis.  ¿Te acuerdas de la gente que estaba contenta durante el encierro porque no había carros y se oían los pajaritos? ¿Te acuerdas de la gente que esperaba con ansias las instrucciones presidenciales en cadenas mediáticas? ¿Te acuerdas de la gente clamando por generalizar y hacer más duro el encierro -aunque muchas personas se quedaran sin trabajo y aunque muchas abuelas no pudieran abrazar a sus nietos? ¿Te acuerdas de la hostilidad y el miedo de las primeras semanas?

Por eso celebro que el intento reciente de limitar la libertad de las personas encontrara oposición activa y no pudiera materializarse.  Los colectivistas, socialistas autoritarios y totalitarios de todos los colores son minorías y sus intereses no deben prevalecer. Los sacerdotes del miedo -a lo largo y ancho del espectro político- no deben prevalecer.  El diablo viejo, el canciller Suttler y los dictadores de La valla, no deben prevalecer.

Deben prevalecer la libertad y la vida.  Y la responsabilidad de que sea así es tuya.