05
Nov 10

¡Recuerden, recuerden el 5 de noviembre!

There is something wrong with this country.  Lástima que ahora Youtube no me permite insertar el discurso de V; pero si hace clic aquí usted puede escucharlo y celebrar este 5 de noviembre.

Brindaré por la libertad y por los que luchan por defenderla.  Sin duda es un buen día para ver la peli por primera vez, o para volverla a ver.  Quizás sea buena ocasión para verla en familia y explorar ideas como:

-400 years later, an idea can still change the world.

-Symbols are given power by people.

-A revolution without dancing is a revolution not worth having!

-People should not be afraid of their governments. Governments should be afraid of their people.

-Certainly there are those who are more responsible than others, and they will be held accountable.

-Regardless of what weapons they try to use to effect silence, words will always retain their power. Words are the means to meaning, and for some, the annunciation of truth

En la foto somos un grupo de amigos, y yo, en Halloween de 2008.


27
Oct 10

¿Qué clase de libertad es esta?

¿Qué anda cantando Cándido mientras toma su capuccino madrugador?

Qué clase de libertad es ésta
que cuando alguien dice algo se molestan.

Qué pasa, qué pasa si digo algo se me molesta la raza.

Ah, una canción de Alejandro Sanz


25
Oct 10

No nos puede ocurrir lo mismo que a nuestros padres

Algo tiene que cambiar, a mi generación no le puede ocurrir lo mismo que a la de mis padres; escribió hoy @yoanisanchez desde Cuba.  Salvando las distancias, porque Yoani vive en una dictadura fuertemente enraizada, creo que los guatemaltecos deberíamos hacer propia esa frase.  ¡No nos puede pasar lo mismo que a nuestros padres!


21
Oct 10

Hoy sí estoy de acuerdo con Alvaro Velásquez

Hoy si estoy de acuerdo con Alvaro Velásquez, columnista que hoy escribió que quienes piensan que ser libertarios significa solamente defender la la propiedad privada y la libertad de empresa se equivocan.  La libertad tiene muchas implicaciones y alrededor de ella, la coherencia entre teoría y práctica es una necesidad moral y científica.

Muchos críticos de la filosofía de la libertad, del liberalismo clásico y del libertarianismo (como usted prefiera llamarlo) creen que el liberalismo es un asunto propio de la ciencia económica, creen que se trata sólo de la facultad de usar, gozar y disfrutar lo que es propio, y creen que se trata sólo de la posibilidad de emprender.  Velásquez tiene razón al subrayar que la libertad implica mucho más y que la coherencia es necesaria.

Coincido con los que advierten que la defensa de la filosofía de la libertad es un asunto de orden ético; y se explica de la siguiente forma:  la alternativa fundamental que tiene todo ser humano es la de vivir, o morir.  Si opta por la segunda posibilidad, no hay nada que discutir; pero si opta por la primera, hay que tomar en cuenta que para los seres humanos vivir es hacerlo qua seres humanos.  Vivir, pues, no es sólo existir, sino vivir plenamente.  Una orquidea, una gallina y una ameba existen en términos del vocablo griego zoe; pero los seres humanos vivimos en términos del vocablo griego bios, porque no sólo existimos, sino que los individuos humanos somos seres teleológicos y tenemos circunstancias.  Y sólo vivimos plenamente si nuestras acciones, elecciones y decisiones están a salvo de la coacción arbitraria de parte de otros; presión que elimina al individuo como ser pensante que tiene un valor intrínseco y hace de él un mero instrumento en la consecución de los fines de otro.  Friedrich A. Hayek, además, es clarísimo cuando dice que la libertad no significa la posesión de toda clase de bienes, o la ausencia de toda clase de males.  Entonces, la libertad es un impertativo moral para la vida humana digna; y moralmente bueno es aquello que no impide la vida humana qua vida humana.

Lo de la coherencia entre la teoría y la práctica también es una observación valiosa de Velásquez.  Un principio liberal, liberal clásico o libertario es el de que, en las relaciones sociales, los intereses colectivos no deben prevalecer sobre los derechos individuales.   Si alguien se dice libertario; pero sostiene lo contrario,  pues entonces no, no es libertario.  Es al revés de aquello de que si algo camina como pato, tienes plumas de pato, tiene pico de pato y hace cuac como pato, entonces es pato.  Es que si algo no camina como pato, no tiene plumas de pato, no tiene pico de pato y hace guau, como perro; a lo mejor no es pato.

Desde otra perspectiva, otro principio liberal, liberal clásico o libertario es el de la igualdad de todos ante la ley; y si se diera el caso de que alguien dice ser libertario, pero estima pertinentes, o útiles algunas excepciones o privilegios, pues entonces no es libertario.  El hecho es que las partes no contradicen al todo.  Y, entonces, no se puede criticar al liberatrianismo, o a los libertarios, por ideas que no sostiene el libertarianismo, o acciones que no haría un libertario.

La filosofía de la libertad tiene inmensas dimensiones éticas, jurídicas, estéticas y económicas; y por eso es injusto -e intelectualmente deshonesto- encasillarla en la facultad de tener, o en la libertad de emprender. Y por eso es muy atinada la observación de Alvaro Velásquez.


15
Oct 10

Los talibanes y La Antigua

Las malas leyes crían la inexistencia de autoridad.  ¿Quién va a respetar a la autoridad si hay una ley que prohibe que vayan más de una persona en moto, y por todas partes circulan ¡hasta dos asaltantes por moto!?

A mí me gustaría que los medios noticiosos que informaron cuando en Todos Santos Cuchumatán se estableció la prohibición de vender y consumir licor, informaran qué ha pasado en aquella población (y en otras que hicieron lo mismo) ahora que ya pasó un buen tiempo desde la prohibición.  Estoy seguro de que encontrarán que la gente se va a chupar al pueblo vecino, que hay gente que chupa a escondidas, que hay contrabando de guaro, que casi nadie respeta aquella norma absurda, que se ha convertido en delincuentes a gente que no hace nada que sea criminal, que una moralina ridícula ha ocasionado enfrentamientos que hacen muy tensas las relaciones sociales.  Lo que pasa en Chunimá, Quiché, es un ejemplo de lo que ocurre cuando las leyes dejan de ser aquellas normas generales y abstractas, de conducta justa, que deberían ser; para convertirse en regulaciones espacíficas, concretas e intrusivas.  Lo que ocurría (¿u ocurre?) en Acatenango es otro ejemplo de lo que hacen las leyes malas.

Y que aquello ocurra en los grupos tribales (gemeinshaft) no debería extrañarnos; empero, cuando empieza a ocurrir en las ciudades y las hordas prohibicionistas y controladoras empiezan a infectar a la sociedad (gesellshaft) , entonces hay que alarmarse.  Esto es porque se está admitiendo que el supuesto interés colectivo, puede y debe privar sobre los derechos individuales.  Y eso es muy peligroso.

Esto está ocurriendo en La Antigua Guatemala, en donde como no se pudo prohibir totalmente la venta de licor, los talibanes están por conseguir que sean aprobados horarios de convento para los negocios de aquella ciudad.  Los proponentes de las regulaciones pretenden que, si usted tiene hambre a las 10:01 de la noche, no pueda encontrar un restaurante abierto para cenar.  Pretenden que si usted necesita leche, pan, huevos, mantequilla, o jalea a las 5:00 de la mañana, no encuentre una tienda abierta para adquirirlos.


15
Oct 10

Y…¿qué tal si tuviéramos una ciudad libre?

Una ciudad libre es aquella que es gobernada por sus propios estatutos y no por las leyes provinciales, estatales, o nacionales. De esa forma, los habitantes de la ciudad -unidos en la comunidad de valores- garantizan que estos van a ser respetados, independientemente de los valores de los habitantes de otras ciudades, provincias, estados, o del estado nacional.

El vídeo que ilustra esta entrada fue preparado por los estudiantes de Arquitectura del cuate Gonzalo Melián.  Si quiere saber más sobre las ciudades libres, he aquí, en inglés y con subtítulos en varios idiomas, una estupenda conferencia por Paul Romer, sobre el asunto.


13
Oct 10

¿Cuánto de libertad estamos dispuestos a ceder?

El Presidente del Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras señaló  la necesidad de todos los sectores de decidir cuánto de libertad estamos dispuestos a ceder.  Pero, ¿será que eso quiere decir el autor de la opinión?


En una sociedad hay libertad cuando en las relaciones sociales está ausente la coacción arbitraria.  Es libre la persona  cuyas acciones no están sujetas a la voluntad antojadiza de terceros.  La coacción, por cierto es la presión autoritaria que una persona ejerce en el medio o en las circunstancias de otra; bajo esa presión el presionado se siente forzado a actuar conforme los deseos de quien ejerce la presión, y no en persecución de sus propios planes, y objetivos. La coacción es un mal porque elimina al individuo como ser pensante que tiene un valor intrínseco y hace de él un mero instrumento en la consecución de los fines de otro.  Hay libertad en una sociedad cuando la coacción -bajo las leyes, y no arbitraria- ha sido reducida al mínimo, sólo para ser usada contra aquellos que, en vez de basar sus relaciones sociales en las relaciones voluntarias y pacíficas las basan en la fuerza; como los delincuentes, por ejemplo.  Las leyes, eso sí, no son cualesquiera regulaciones emanadas por el Legislativo; leyes son sólo aquellas normas generales y abstractas que protegen la vida, la libertad y la propiedad de todos. 

Dicho lo anterior, a la pregunta de cuánto de libertad estamos dispuestos a ceder sólo puede haber una respuesta: Niente.  Nada porque, ¿para qué querríamos ceder 10%, 30%, o 90% de uso legal de la coacción arbitraria en la sociedad? ¿Por qué querríamos cederle espacio a las relaciones forzosas, a costa de las relaciones pacíficas y voluntarias? ¿Por qué querríamos sustituir un estado de cosas en el que podemos hacer todo, excepto aquello que está prohibido por la ley, a cambio de un estado de cosas en el que sólo podamos hacer lo que la ley nos permite?

La libertad, que es ausencia de coacción arbitraria, sólo se cede a cambio de presencia de coacción arbitraria.  Si lo opuesto a la libertad es la coacción arbitraria, cuando tenemos menos libertad porque la cedemos, entonces tenemos más coacción arbitraria; es decir, más presión autoritaria que nos obligue a actuar conforme los fines de otros; en vez de hacerlo conforme a nuestros fines propios.  ¿Para qué querríamos eso, sino para destruir a la sociedad? 

Si queremos una mejor sociedad, que creo que es lo que sinceramente quiere el Presidente del CACIF, la vía no va por ceder la libertad.  Va por protegerla, garantizarla, y defenderla total y absolutamente para todos y siempre.  El uso de la coacción arbitraria en las relaciones sociales debe ser rechazado y prohibido sin excepción.  Y aquellos que hagan uso de ella, como los delincuentes, deberían ser castigados moral y penalmente.  Una sociedad que admite el uso de la coacción arbitraria, porque cedió parte de su libertad, es una sociedad condenada a caer en manos de aquellos que viven de la coacción arbitraria y que por eso desprecian la libertad, y las leyes que la protegen.

29
Sep 10

Pelis inspiradoras: Braveheart

Imagen de previsualización de YouTubeEn esta escena de Braveheart, William Wallace conduce su ejército durante la guerra de Independencia escocesa contra Eduardo I de Inglaterra.  Wallace arenga a sus hombres y hace énfasis en que enfrentar la muerte en la batalla es menos temible que vivir la vida sin libertad.  Su discurso inspira a sus hombres a rebelarse contra la tiranía y a defender su libertad.

Gracias a Moving Minutes.


28
Sep 10

Hay esperanza para la libertad en América Latina

El electorado venezolano se volcó a las urnas y 52% de los votantes le dieron la espalda Hugo Chávez.  Pero claro, mediante prácticas mañosas como el gerrymandering, por ejemplo, el régimen consiguió que esa mayoría de votantes se tradujera sólo en 62 escaños; de modo que el oficialismo se quedó con 96 diputados.    Esto es, con 14 menos de los que necesitaba para tener mayoría calificada y dominar por completo la Asamblea.

Está por verse qué hará el mico-mandante para reponerse de este golpe y para no perder el control y el poder a los que está acostumbrado.  Está por verse si los opositores aguantan la presión.

Por lo pronto lo que ocurrió en Venezuela nos deja lecciones valiosas:  Cuando una sociedad permite que la democracia sea utilizada al margen de las instituciones republicanas, le abre la puerta a la arbitrariedad y luego es muy difícil sacarla de casa.  Si las elites de una sociedad optan por proteger sus intereses colectivos y dejan a un lado la defensa de sus derechos individuales, la sociedad empieza a disolverse para convertirse en una competencia de intereses.  Si las dirigencias políticas se dispersan para ocuparse de sus miserias, el oficialismo tiene la mesa servida.  Si no se impide de entrada, el ingreso de la arbitrariedad, luego ya sólo queda frenar su avance.

Chávez, ahora, no la tiene tan fácil como la ha tenido en los últimos 5 años; y si la oposición logra perseverar en los principios, sin distraerse en detalles irrelevantes, hay esperanza no sólo para Venezuela, sino para toda América Latina.  ¡Es posible evitar la dictadura, de forma pacífica!, pero la lucha por la libertad sólo está empezando.


12
Sep 10

Muso rocks!!

¡Hoy celebramos la vida y el legado de Manuel F. Ayau!, en recuerdo de este maestro, amigo y campeón de la libertad.