10
Ago 10

La CICIG acusa a Vielmann, Giammattei "et al"

La Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala ha acusado por ejecuciones extrajudiciales a Carlos Vielmann, ex ministro de Gobernación; Alejandro Giammattei, ex director de presidios y aspirante a la Presidencia; Erwin Sperisen, ex director de la Policía y a Javier Figueroa, ex subdirector de Investigación Criminal. Y, en consecuencia, el JuzgadoPrimero de Instancia Penal emitió sendas órdenes de captura. En septiembre de 2006, los acusados, funcionarios todos, protagonizaron la toma de la Granja Penal Pavón, que era controlada por los reclusos.

A mí, todo esto, me da mucho que pensar; y lo primero es que me asalta la duda de si en realidad la CICIG busca acabar con las mafias que están asfixiando a los guatemaltecos y lo poco que está quedando de nuestras instituciones; o si bien, se está perfilando como una especie de policía política que -a la luz de los casos Rosenberg, Rivera y este que comento ahora- está más enfocada en la publicidad y en proteger a la administración de Los Colom, que en otra cosa.
Lo segundo que se me viene a la cabeza es que, aunque yo nunca votaría por Giammattei y se que Vielmann y Sperisen son volados y a Figueroa no lo conozco, mucha gente celebró que los primeros tres llegaran a dirigir la seguridad ciudadana, y recuerdo que mucha gente celebró la toma de Pavón. La gente los tiene por gente buena. Y entonces, luego de esta persecución, ¿qué clase de gente va a aceptar ser funcionario? ¿Cómo se defiende, de la delincuencia desbocada, una sociedad con instituciones débiles, o sin ellas?
Me acordé de la película Las pandillas de Nueva York, y me pregunto si la Historia de esa ciudad sería la misma sin el bombardeo contra las pandillas y si hubo persecución alguna contra quienes lo ordenaron, lo dirigieron y lo ejecutaron. Me acordé de que al mafioso John Dillinger, la Federal Bureau of Investigations lo esperó a la salida de un cine y tres agentes del FBI lo liquidaron en un callejón.
¡Por supuesto que no estoy defendiendo la posibilidad de que quienes detentan el poder puedan ejercer actos de violencia impune contra las personas! y tampoco estoy sosteniendo el indefendible vox populi, vox dei; pero, creo que sí es válido tratar de entender como es que se forjan las sociedades que hoy tenemos como razonablemente pacíficas e institucionalizadas. ¿Por dónde se empieza a sanear una sociedad enferma y violenta? Puse los dos ejemplos anteriores para ilustrar la pregunta, y no como una recomendación.
A mí me gusta decir que estamos escribiendo -ustedes y yo- las páginas de la Historia de Guatemala que serán leídas dentro de 50, 100, o 500 años. ¿Qué verán los que vienen atrás cuando lean la Historia del país que les dejamos? ¿Quiénes serán los héroes y quiénes serán los villanos en los libros de Historia chapina?

29
Jul 10

"Peor es meneallo"

La columna de hoy, de Sylvia Gereda, pregunta: ¿por qué tanto silencio con Valdés, Alejos y Banrural?; y señala las conexiones que hay entre los negocios de Gregorio Valdés, Luis Alejos y aquel banco cuyas acciones mayoritarias controlan funcionarios de la Administración. Negocios a los que se vinculan un exministro, un grupo de exguerrilleros afines a Sandra Evita Torres y más de una docena de funcionarios, el Registro Nacional de Personas, el Caso Rosenberg y el asesinato de Los Musa. ¿Podría ser más grande el camote?

La importancia de aquel exministro y sus aliados es tal que hoy leemos que motivó un desacuerdo entre Alvaro San Nicolás Colom, y su vicepresidente Rafael Espadita Espada.

En principio, creo que la experiencia del twittero @Jeanfer han inhibido bastante que en los medios no tradicionales y hasta en la Prensa más rancia se evite casi cualquier tema que involucre cuestionar los negocios de los bancos…especialmente los del banco involucrado en estos asuntos.

Más en el fondo, sin embargo, creo que el triangulo mencionado por Gereda amenaza peligrosamente la más profunda e innombrable misión de la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala, que es defender y apuntalar la socialdemocracia guatemalteca. Por eso es que ni Carlos Castresana, ni la CICIG han dado señas de vida al respecto. Y como la Prensa tradicional parece bailar al son que le toca la Comisión, pues a casi nadie le ha dado curiosidad este asunto.

Por eso es que, como dijo don Quijote, este asunto es peor meneallo.

21
Jul 10

Adivina, adivinico, ¿qué problemas tuvo el mico?

El nuevo jefe de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala , Francisco Dall’Anese, dijo que espera no arrastrar los problemas que su antecesor tuvo con el gobierno. Se refiere, claro, a la Administración de Los Colom.


La noticia me llamó la atención porque hay quienes creen que Castresana se entendía muy bien con Los Colom en el sentido de que los sirvió muy bien en el contexto del caso de Rodrigo Rosenberg. Empero, también hay pistas de que la Administración de Los Colom obstaculizó cuanto pudo el trabajo de Castresana en el contexto de destentrañar las conexiones que hay entre la mafia, y los negocios que se hacen a costa del Presupuesto General de la Nación y al amparo del poder.

Castresana no se atravió a decir que Los Colom no habían cumplido con la parte que les correspondía para que la CICIG tuviera algún éxito en el combata contra la impunidad; pero sí tiró la chinta de que Guatemala había incumplido. Sin embargo, Dall’Anese ha sido más franco; porque él espera, claramente, no arrastrar los problemas que Castresana tuvo con el gobierno y específicamente con las autoridades guatemaltecas.

19
Jul 10

CICIG: ¿miedo, o desconocimiento?

Poco más de la mitad de los guatemaltecos consultados en una encuesta sobre el desempeño del Ministerio Público -y de la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala- prefieren no opinar sobre la labor de Carlos Castresana al frente de la CICIG; y me pregunto si eso es por miedo, o por desconocimiento.

Digo, porque Castresana no ha cesado de decir que en su contra existe una campaña negra impulsada por la mafia. En algunos ambientes, se insiste mucho en hacer parecer como que cualquier cuestionamiento contra la Cicig y su exdirector son parte de algún tipo de conspiración.
¿Será que la gente teme que por opinar sobre la Comisión se la tache de ser parte de la pretendida conspiración? Este fenómeno ha ocurrido en tras ocasiones: Ni siquiera los periodistas más independientes se atreven a tocar a los bancos, ni con el pétalo de una rosa, luego de que que al bloguero @Jeanfer se lo persiguió por opinar, mediante el uso de la ley de pánico financiero. Sólo los más audaces se atreven a metarse con Rafael Espadita Espada, luego de que el vicepresidente se querelló contra la periodista Marta Yolanda Díaz-Durán.
El uso de güizachadas y el uso de cortinas de humo para neutralizar la libertad de expreasión y a la opinión pública es by the book; ¿habrán funcionado en ese sentido para Castresana y para la CICIG?

16
Jul 10

Rosenberg: ¿Juicio "express" y a la medida?

En el que talvez haya sido el juicio más rápido de la historia judicial guatemalteca, ayer el tribunal que siguió la causa del asesinato de Rodrigo Rosemberg emitió sentencias y nueve resultaron condenados.


Detalles aparte me quedó con dos ideas:

1. Que el Tribunal sólo hizo el trámite necesario para confirmar la hipótesis planteada por la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala.

2. Que este fue una asunto entre compadres hablados.

Por cierto que, una de las novedades que ofreció el juicio express fue que el testigo Mario Fuentes, amigo del abogado asesinado, declaró que Rafael Espadita Espada sí tenía conocimiento de las investigaciones que estaba haciendo la víctima con relación al asesinato de Khalil Musa y su hija Marjorie; y Eduardo Rosenberg, hijo del abogado asesinado, declaró que su padre sí se reunió con el Vicepresidente para darle datos de la muerte de los Musa.

Esto es importante porque Espadita, ¡en su calidad de Vicepresidente!, se querelló contra la periodista Marta Yolanda Díaz-Durán por dar a conocer que él sí se había reunido con Rosenberg, antes de su asesinato, cosa que el Vice niega haber hecho.

…y usted, ¿qué opina?

14
Jul 10

¿Efe miente?

Un cable de la agencia Efe informó sobre supuestas declaraciones de Carlos Castresana, titular de la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala, en el sentido de que que Guatemala tiene un statu quo” endémico de corrupción, con 10 familias que son dueñas del país desde el tiempo de la colonia, y esa situación perdurará en el futuro, aunque ahora ha irrumpido un nuevo jugador: el narcotráfico. Según la agencia española de noticias, el Jefe de la Cicig también dijo que el país es un Estado en el que nadie cree, creado por unas élites criollas que nunca quisieron justicia. Además, se quejó por la falta de compromiso de los partidos políticos con su causa, vinculando su salida a “una campaña negra” impulsada por las mafias. Dicha información, que ayer mismo se publicó en las ediciones digitales de varios diarios, fue desmentida por la tarde por medio de un comunicado de la CICIG, en el cual se niegan dichas declaraciones.

Pues…puede ser que Efe mienta, o que su reportero no haya entendido lo que en realidad dijo Castresana; pero lo cierto es que, en mi experiencia de periodista, aprendí que muchos funcionarios y con demasiada frecuencia, dicen imprudencias y disparates que no quisieran ver publicados. Y entonces, alegan que no los dijeron, o que fueron malinterpretados por los reportaros. Por eso yo siempre usaba grabadora, aparato que me sacó de apuros en un par de ocasiones.

Por otro lado, ¿que es lo que, supuestamente, dijo Castresana? ¿Que Guatemala tiene un statu quo endémico de corrupción? Como dice mi amigo, Raúl: ¡Selena ha muerto! ¡Cantinflas está grave! Mi abuala, Frances, diría: So what else is news?

¿Dijo Castresana que son 10 familias que se sienten dueñas del país? A mí eso siempre me da algo de risa porque en ciertos círculos no se ponen de acuerdo en si aquellas familias son 12, o 14. ¡Y ahora el Jefe de la Cicig dice que son sólo 10. Lo que nunca he oído es que alguien que use este argumento enumere a las 14, 12, o ahora 10 familias esas. Su Castresana dió aquellas declaraciones, ¿está desinformado? ¿Por qué le faltaron entre 2 y 4 familias? ¿De veras ya son sólo 10?

La mera verdad, yo si creo que hay ciertas élites que se creen dueñas del país; pero honradamente también creo que es injusto decir que los buenos, entre ellos, nunca han querido justicia. Lo que creo es que nunca se han tomado el tiempo para explorar qué exactamente quiere decir justicia, no lo han hecho para explorar cuáles son los principios sobre los cuales fundamentan sus vidas y sus acciones en la esfera de la cosa pública. Creo que, cuanto mucho, han preferido irse por la vía del pragmatismo y del posmodernismo. Creo que ahora están shockeados porque, efectivamente, ese nuevo actor que es el narcotráfico, tiene una billetera más grande que la de ellos. Creo que se creyeron muy salsas y que creyeron que el problema no era el sistema, sino las personas.

Adicionalmente, esa consigna de las familias que desde la colonia controlan el país no es cierta porque cualquiera que conozca un poco de Historia de Guatemala sabe que las familias que eran económica y políticamente dominantes durante la época colonial, empiezan a dejar de serlo durante la primera época republicana; y nuevos grupos dirigenciales se constituyen con la Revolución de 1871 para ser, estos, sustituidos a mediados del siglo XX. Y ya lo dijo Ayn Rand, mi filósofa favorita: Las clases altas son el pasado de la nación, y la clase media es su futuro.

Finalmente, las declaraciones que se le atribuyen a Castresana muestran amargura porque no hubo compromiso con su causa. Pero, ¿y qué esperaba el autor de las declaraciones? En Guatemala no hay tal cosa como partidos políticos porque lo que hay con maquinas electoreras diseñadas para llegar al poder. La mafia, o las mafias y la Administración (porque no gobierno), no se de distinguen claramente unas de otra. Y en general, como decía el periodista Alvaro Contreras: En Guatemala no se puede levantar la frazada, porque uno no sabe a quién le va a dar frío. Adicionalmente, ¿de verdad alguien esperaba entusiasmo para recibir a un procónsul? ¿De verdad alguien esperaba entusiasmo por la abdicación de la Administración a sus obligaciones en materia de seguridad y justicia?

Esta polémida, entre Efe y Castresana me lleva a pensar, otra vez, que estoy en lo correcto cuando apoyo ProReforma.


29
Jun 10

Los Valdés se entregaron

Ayer, los hermanos Francisco José y José Estuardo Valdés, acusados de ser los autores intelectuales del asesinato de Rodrigo Rosenberg, se entregaron a la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala y fueron conducidos al Juzgado Décimo de Instrucción Penal, para luego ser llevados al cuartel de Matamoros en donde permanecerán durante el proceso que se sigue en su contra.

Por supuesto que esta es una pieza importante que ayudará a seguir explorando la verdad sobre lo que ocurrió con Rosenberg y Los Musa.
Hablando de verdad, sin embargo, lo primero que me llamó la atención al enterarme de que Los Valdés se entregaron, fue que Carlos Castresana dijo que a las ocho de la mañana y por medio de una llamada telefónica le avisaron de la disposición de los Valdés para entregarse y que unos 15 minutos después los hermanos ya estaban en la sede de la CICIG.
Se que Castresana tiene muchos fans y que estos se incomodan si uno pone en duda las cosas que afirma, así que no voy a suponer que el jefe de la Comisión hizo las de Pinocho. Lo que voy a hacer es suponer que en un contexto posmodernista, el jefe de la CICIG entiende que no hay tal cosa como la verdad singular y absoluta; sino que lo que hay son verdades o historias.
¿Por qué es que no me convence lo de la entrega espontánea en cuestión 15 minutos?
1. Porque no tiene sentido que Los Valdés descuidasen algo tan elemental y tan by the book como negociar su seguridad y sus condiciones de entrega.
2. Porque coincidentemente, fue durante este fin de semana que se arregló aquello de que los reos vulnerables puedan ser recluidos en cuarteles militares.
3. Porque es muy conveniente, para todas las partes involucradas, que la entrega sucediera antes de que Castresana dejara el país, luego de su recién anunciada renuncia.
Veamos, pues, qué camino toma todo esto.

15
Jun 10

Cuestionar y analizar, ¿son conspirar?

Cuando se empezó a hablar de la nonata Comisión de Investigación de Cuerpos Ilegales y Aparatos Clandestinos y de Seguridad, que luego se convirtió en la Comisión Internacional Contra la Impunidad den Guatemala, advertí contra dos peligros:


1. Que cómo los guatemaltecos teníamos la costumbre de no resolver nuestros problemas, sino que, en vez de eso lo que hacíamos era darles vuelta a los asuntos, la Comisión iba a quitarnos responsabilidades e iba a minar la institucionalidad. Puse como ejemplos aquello de que como los Ministerios no funcionaban, en vez de hacerlos funcionar, lo que hacíamos era multiplicar los Fondos de Inversión; y que como estos no funcionaban, lo que hacíamos era idear los Comisionados (era el tiempo de los Comisionados, de Oscar Berger).

2. Que la Comisión podía convertirse en una especie de policía política que -al estilo de la KGB, la Stasi, o la Gestapo- iba a servir para neutralizar a los críticos del establishment.

…y ojalá que las cosas no estén apuntando hacia esa dirección.

Por un lado, llama la atención que luego de la renuncia de Carlos Castresana, y luego de su sentencia en el sentido de que Guatemala no tiene remedio; ha cundido el pánico. En la calle ya se da por hecho que si se va Castresana, nos quedamos huérfanos. Se habla, otra vez, de un estado fallido y el mensaje que circula es que todo está perdido. ¡Hasta escuché que debería haber una intervención directa de la Organización de las Naciones Unidas en el país!

Los chapines hicimos lo mismo de siempre: en vez de fortalecer política y presupuestariamente al Ministerio Público, al Organismo Judicial y a la Policía Nacional Civil, nos buscamos un superhombre, y ahora que se nos va, nos quedamos sin el mico y sin la montera.

Acostumbrados al caudillo, al pastor y al líder, el asunto está tan personalizado que toda discusión se centra en la persona de Castresana; y se pasa por alto que la Comisión seguirá su trabajo. Y peor aún, hemos abierto la puerta para que sí los guatemaltecos no hacemos exactamente lo que quieren la Cicig y el establishment –digamos que si no elegimos a los funcionarios que ellos quieren y como ellos quieren- corremos el riesgo de que nos cuelguen un sambenito.

Por otro lado, también llama la atención que empieza a ocurrir que cuestionar y analizar las hipótesis de Castresana -y de la Cicig- puede ser interpretado como conspiración. Empieza a ocurrir que si un politólogo, un columnista, o cualquiera persona comparte su opinión sobre las hipótesis de la Cicig, o sobre el trabajo de Castresana, o sobre el trabajo de la Comisión, esa opinión y su responsable pude ser convertido en pieza de una conspiración. Así como el tema de la corrupción en algunos bancos desapareció del radar de la opinión pública, luego de la persecución contra el twittero @Jeanfer en mayo de 2009; así es como toda disidencia con respecto al trabajo de la Cicig y al de Castresana van a ir desapareciendo. Cuando la Comisión y el establishment hayan tratado de desprestigiar y de intimidar a dos, o tres politólogos, columnistas y analistas, ¿quién quedará con ganas de expresarse libremente acerca de las hipótesis y el trabajo de la Cicig y de Castresana o sobre el papel que juega, en todo esto, el establishment?

En Venezuela, Hugo Chávez y sus esbirros están utilizando instrumentos de la ley ordinaria para silenciar las expresiones críticas, o disidentes. Ojalá que eso no ocurra por aquí cuando politólogos, columnistas y analistas, entre otros, traten de expresar puntos de vista y de contribuir a entender los fenómenos sociales y políticos por los que está pasando el país. Ninguna república sana puede desarrollarse en un ambiente en el cual las personas teman expresarse, por miedo a ser señaladas como parte de conspiraciones ciertas, o inventadas.

La libertad de expresión es fundamental; no sólo para el desarrollo de la República, sino para la buena salud de todas las demás libertades.

Si le interesa el tema, vea: Libertad coartada; y Chávez´s Prisoners.

09
Jun 10

Entre la espada y la pared

Si obtiene del Consejo del Ministerio Público un informe circunstanciado de las acusaciones que Carlos Castresana hizo contra el Fiscal General, Conrado Reyes, -y estas resultaran probadas- Alvaro San Nicolás Colom tendría suficientes elementos para remover al Jefe del Ministerio Público. Esa es la espada; porque ¿quién quiere un Fiscal General con las características que se le endilgan al actual titular?

¿Cuál es la pared? Conrado Reyes fue electo de entre los candidatos que se presentaron; es decir: Eso es lo que había para escoger.
Adicionalmente, Reyes fue seleccionado, como candidato, por la comisión a la que, de acuerdo con la ley, le correspondía seleccionar candidatos. Esa comisión no estaba integrada por cualesquiera ciudadanos. Sus miembros son los decanos de las facultades de Derecho; incluido el de la universidad estatal y un representante del Colegio de Abogados; así como uno del Tribunal de Honor de aquel grupo corporativo. Y si en aquel grupo de élite hay tres elementos distorsionadores, eso es otro par de zapatos.
Si quisiéramos mejores candidatos, y mejores comisionados, ¿a dónde tendríamos que ir a buscarlos? Y dicho aquello, lo cierto es que los candidatos que hubo, electos por los comisionados que manda la ley -y que en general no son cualquier cosa-, fueron seleccionados de acuerdo con los procedimientos que manda la ley.
…y resultó que los resultados no les gustaron ni al Presidente, ni al jefe de la Cicig, ni a la comunidad internacional, ni a ese nudo de intereses que dicen ser los representantes de la sociedad civil. Y seguramente no es el mejor resultado, al final de cuentas.
Pero…¿cuál es la opción?
La pared es que los comisionados elijan a alguien del gusto de los personajes citados arriba. Que no se molesten en evaluar y que mejor, desde el principio, pregunten: ¿A quiénes quieren sus mercedes? Sólo así se podría garantizar que los seleccionados fueran del gusto de los que parecen ser, en realidad, los grandes electores.
Digo que estamos entre la espada y la pared porque es malo si el Fiscal electo es el personaje que la Cicig et al dicen que es; pero también es malo pasar sobre la ley y la poca institucionalidad que hay, sólo porque el candidato electo no es el que quieren el Presidente y algunos grupos de interés. Ahora bien, la Comisión postuladora no sólo le presentó un candidato al Colom. Si Reyes es Fiscal, es porque de los candidatos que había disponibles, el Presidente lo eligió a él. ¿O no? Esa parte me parece rara.
¿Cómo es que dice la maldición china? Ah, Ojalá que vivas en tiempos interesantes.

08
Jun 10

"Guatemala no ha cumplido su parte"

Carlos Castresana dijo ayer que, para la Organización de las Naciones Unidas, Guatemala no ha cumplido su parte. Puesta así, la frase es algo vacía porque, ¿qué es Guatemala? ¿Quién es Guatemala? Más bien…¿quienes dicen representar a Guatemala? Yo creo que la mentalidad colectivista mueve a decir Guatemala, donde se debió haber dicho los guatemaltecos. Y puesta así, la frase no deja de tener razón: muchísimos guatemaltecos no han cumplido su parte.

El concepto de una Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala, y el de un supercomisionado con poderes de procónsul es muy cómoda para algunos grupos de chapines. Por un lado están aquellos que no quieren mojarse los pantalones y que prefieren dejar en manos de la comunidad internacional la solución de nuestros problemas. Por otro están aquellos que ven en la Cicig una oportunidad más para ganar -quedito y desde el poder- lo que no pudieron ganar durante la guerra de 36 años. Por otro lado están los resignados, los abúlicos y perplejos. Tres de aquellos grupos, sólo para dar tres ejemplos.
Hay, sin embargo, más de 73,000 guatemaltecos que apoyan ProReforma. 73,000 que no están esperando a que vengan a barrernos la casa; 73,000 que no están minando la institucionalidad que hay; 73,000 que no están sentados soñando con que esto también pasará. ¡Hay miles de patojos participando en Jóvenes por Guatemala, en Un techo para mi país, en el Movimiento Cívico Nacional, en Un joven +, en Rotarac y en muchas otras iniciativas ciudadanas!
Claro que ProReforma, por ejemplo, no es del gusto de todos; y claro que ProReforma no es perfecto, como les gusta decir a algunos críticos; pero, ¿quién tiene una mejor propuestas? ¡¿Quién tiene una propuesta?! ¿Quién se atreve a poner una norma que prohíba expresamente todos los privilegios? ¿Quién se atreve a dividir la facultad legislativa, de la facultad normativa?
En cierto sentido, es verdad que Guatemala no ha cumplido su parte; pero sólo es porque hay guatemaltecos que no actúan como ciudadanos.
Más interesante resulta, el asunto, si tomamos en cuenta lo que nos advierte el lector Luis Godoy: Me parece que no es exactamente lo que dice Castresana, ya que escuchando la grabación dice: “para las autoridades de los tres poderes del estado es necesario recordar que…las autoridades de Guatemala no están cumpliendo”. Minuto 4:45 del Tercer vídeo de la página de la Cicig. Si así es como es la cosa…ciertamente que es un grupo bien identificado de chapines el que no está cumpliendo. Y qué casualidad…es el grupo que tiene el poder.