02
Sep 11

¿“Swing Kids” chapines?

¿Has visto una película que se llama Swing Kids?  Estos eran un grupo de patojos, de allá por los años treinta, que gustaban del swing y del jazz y que terminaron enfrentándose contra el nacionalsocialismo.

Los nazis consideraban que el swing y el jazz eran música depravada porque eran propias de negros y judíos.  En aquel ambiente opresivo los swing kids terminaron siendo una forma de contracultura porque su forma de vestir y sus gustos musicales no eran del gusto de Hitler, ni del de los que lo apoyaban, porque les gustaban el orden y la disciplina que ofrecía.

Los  swing kids fueron reprimidos por la Gestapo y ya te imaginas. Los suertudos tuvieron que aguantar que les cortaran el pelo, como aquí en Guatemala, la Policía de los años setenta  les cortaba el pelo a los patojos.  Pero en la Alemania nacionalsocialista, los menos suertudos pararon en campos de concentración.

De aquella peli me acordé cuando leí que el centro cultural Rock’ol Vuh está bajo asedio de Tu Muni, de los gazmoños y de los zelotes del orden y la disciplina.

Para hacer la historia corta, Rock’ol Vuh nació en Cuatro Grados Norte; y allá ofrecía clases de música, y animaba poetas, pintores y productores noveles. Cuando aquel proyecto urbanístico colapsó, los propietarios del centro cultural decidieron trasladarlo al barrio de San Sebastian y “desde entonces comenzó una historia de terror”, explica Sergio Taz Fernández, baterista que seguramente recuerdas porque tocaba con una de las bandas de rock más célebres de Guatemala.  Conoce algo de Taz, en http://youtu.be/gQq0ER-b8uc

Rock’ol Vuh ha enfrentado las arbitrariedades de la oficina del POT y la hostilidad de los vecinos de San Sebastian que lo acusan de ser un bar “que pondrá en riesgo a nuestros jóvenes exponiéndolos a ambientes nocivos” y que contaminará éticamente el barrio.  Eso mismo deben haberle dicho los vecinos de los swing kids a la Gestapo.  Y el barrio, por cierto, no es residencial porque está lleno de establecimientos comerciales y gubernativos.

Lee el reportaje que hizo El Periódico el 17 de agosto pasado.  Ahí verás los detalles del acoso, que incluyen verificaciones de campo nunca realizadas por Tu Muni, multas confiscatorias y otras arbitrariedades. Dado el antecedente similar de acoso al que está sometido el bar rockero Bad Attitude, parece evidente que Tu Muni la tiene contra el rock.  ¿Como los nazis la tenían contra el swing?

Esta columna fue publicada en El Periódico.


15
Ago 11

Celebrando la fiesta de la ciudad de Guatemala

Cool!! Me entrevistaron de Emisoras Unidas para preguntarme, con motivo de la fiesta de la Ciudad -que es hoy-, que cuál es mi mejor recuerdo de la Urbe y cuál es mi lugar favorito de ella.  Así que esto es lo que les conté:

Mi mejor recuerdo es que entre 1974 y 75 estudié en el Centro Histórico cuando las jornadas eran de 8:00 a.m. a 12:00 p.m. y de 2:00 a 4:00 p.m. Yo solía capearme en las tardes e ir al Parque Central a buscar turistas para mostrarles el Palacio Nacional y la Catedral que me conocía muy bien.  Generalmente el pago era un helado o unos centavos y yo me divertía mucho explorando el Centro.

Con respecto a mi lugar favorito, indudablemente es el Mercado Central a donde iba desde muy pequeño cuando acompañaba a mi madre, o a mi abuela a comprar frutas y verduras donde La Catocha y La Chusita.  Ahora siempre que voy como tortitas de yuca donde doña Mela y disfruto mucho de todo el ambiente del mercado.  Con mi padre, por cierto, iba a La placita, donde él tenía a sus proveedoras.

No se a qué hora pasarán el reportaje, o si serán cápsulas que pasarán a lo largo del día.  Lo bueno, claro, es que me dio mucho gusto recordar aquello y compartirlo.

La foto es de uno de mis puestos favoritos en el Mercado Central.


20
Mar 11

Temporada de Palos Blancos, Jacarandas y Matilisguates

Ya es la temporada de Palos Blancos, Jacarandas y Matilisguates.  Los primeros no son tan abundantes en el valle de Las Vacas; pero este, que veo desde mi ventana, se luce hermoso con el Centro Histórico de fondo.  Allá, atrás, se ven la cúpula y campanarios de La Merced.

El resto de áreas verdes de la ciudad se halla salpicado por montones de nubes moradas a causa de las Jacarandas; y la 11 calle de la zona 10 luce sus mejores galas con los matilisguates.  Esos Matilisguates, por cierto están ahí a solicitud de mi bisabuelo, Federico, que vivía en la esquina de la 11 calle y Calle Real de la Villa.  El Intendente de la ciudad -en tiempos de Jorge Ubico- le preguntó que qué árboles le gustaría que sembrara ahí, y mi bisabuelo pidió Matilisguates.


20
Feb 11

Facta non verba: ¿Ritos satánicos?

Después del proceso de permisos y licencias ––en el que incluso se vio obligado a firmar una irrisoria declaración jurada en la que prometía no hacer ritos satánicos en el local–– … “Bad Attitude” se fue consolidando, poco a poco, en un espacio en el que las diversas “tribus” urbanas se sentían cómodas para convivir en paz entre las calaveras y telarañas que al parecer a algunos incomodan.  José Farnés, propietario de un bar en la zona 1, al comentar los disparates por los que tuvo que pasar para abrir su negocio que ahora está bajo acoso.


18
Feb 11

¿Los bares de rock “no califican”?

Como comenté en julio pasado Los cultunazis salieron de cacería y la agarraron contra un bar de roqueros.  Y ahora dispusieron que Bad Attitude, un bar de roqueros de la zona 1 no califica para estar donde está.

Los cultunazis se han erigido en jueces superemos de lo que califica y de lo que no como cultura y como vecino.  El snobismo de los cultunazis se pasa; pero la culpa no es del loro, sino del que le enseña a hablar y los responsables de que haya grupos de interés que tengan el poder para decidir quién califica y quién no, la tienen aquellos que creen que los políticos deberían tener al poder para zonificar y para ordenar a su antojo lo que no les parece que está bien ordenado.

Los roqueros que favorecen la planificación urbana y la zonificación deberían echar pan en su matate. Esto es lo que pasa cuando los ciudadanos le dan a las autoridades la facultad de decidir qué aporta, y que no aporta a una zona urbana. Los roqueros que favorecen el control político de la cultura y la asignación política de fondos tomados de los tributarios, para la cultura, deberían echar pan en su matatate. Esto es lo que pasa cuando los ciudadanos les dan a los políticos la facultad de decidir qué es cultura, y qué no. El precio de la libertad es su eterna vigilancia.

Al respecto, lee:

Municipalidad versus rock

Bad Attitude



01
Feb 11

Murales de González Goyri en el Centro

Este edificio tiene murales de Roberto González Goyri, celebrado muralista y escultor guatemalteco.  Algunas de las obras de este artista se hallan en el Centro Cìvico de la ciudad de Guatemala,  suyo también es el monumento a Tecún Umán de esta urbe.

Este edificio en cuestión tiene estos murales de mosaicos sobre la 15 calle de la zona 1, en tanto que otros de metal lo adornan sobre la 5a. avenida.  Ahora el lugar está muy venido a menos; pero supongo que en sus mejores tiempos ese debe haber sido un edificio elegante y codiciado, con obras de González Goyri integradas a su arquitectura y con vista al Parque Enrique Gómez Carrillo y el conjunto monumental de San Francisco y la Policía Nacional.


30
Ene 11

Limosnero y con garrote

Dame cinco varas, o te meto dos puñaladas, me dijo un muchacho hace un rato.  ¿Dónde se quedaron los tiempos en los que los pedigüeños pedían por el amor de dios?  Una limosnita por el amor de dios, decían los pordioseros decentes.

Ahora no es así.  Este es un muchacho, que huele pegamento, y que se mantiene en la Séptima avenida y 14,o 15 calles de la zona 1 no es la excepción.  Un cuate me acaba de contar que, en las camionetas del transporte colectivo urbano se suben personajes similares que dicen cosas como:  Buenas tardes respetuosamente vengo a ofrecerles dulces para que me compren; pero no me ignoren.  Agradezcan que no estamos sacando un cuchillo, porque nosotros estamos trabajando honradamente.  Y con miradas y gestos desafiantes intimidan a los usuarios.

¡Que va!, cuando yo iba en camioneta recuerdo que se subía un ciego que cantaba acompañado por guitarra.  Y no es que cantara bien; pero la gente le daba lo que podía…con gusto…sin sentirse amenazada.

De vuelta al muchacho de la Séptima, creo que mi tata ni siquiera tenía puñal; y lo único que recibió por respuesta fue un No, y una mirada de no seas impertinente.   Lo que me pregunto, porque este muchacho se mantiene ahí desde hace años es, ¿a cuántas personas asustará a diario? y ¿Por qué es que las autoridades permiten que opere?  ¿Cuántas patojas, o señoras incautas pasarán por ahí y el pisadito este les mete el susto de sus vidas?

Como dice mi amiga, Lucía: Tu Muni espanta a los niños que venden bananos, anacates y otras cosas en las calles; pero delincuentes como estos operan a su antojo.  Eso sí: Arzú es orden.  Ya vas.

Por cierto que luego de cumplir con la diligencia que me había llevado a aquella área, pasé en auto para tomarle una foto y ya no estaba.  Como eran las 13:00 horas, ¿será que se iría a almorzar?


28
Oct 10

Mis respetos para estos patojos

Hay un grupo de patojos chispudos que tiene planeado ir a limpiar la Sexta Avenida de la zona 1, este domingo 31 de octubre.   Si usted está interesado en colaborar, seguramente querrá más información y puede encontrarla aquí.

Yo critico mucho el origen constructivista de las remodelaciones en aquella área, e insisto mucho en que la raíz de el problema del Centro Histórico tiene que ver más con inseguridad, que con falta de planes centralizados y macetas.  Y tiene que ver con la evolución natural de las ciudades.  Pero, siento que el lugar ya estaba en proceso de limpieza y embellecimiento, me da tristeza que la dirigencia de los sectores populares encuentre  que es apropiado ensuciar el área y devolverla a la fealdad.

No queremos calles burguesas, dice una de las pintas que dejaron los revolucionarios el pasado 20 de octubre.  Como si la limpieza y la belleza fueran un asunto de lucha de clases, o exclusivas de una clase social.  Como si la limpieza y la belleza fueran ajenas a una clase social.

Por eso presento mis respetos a quienes han tenido la iniciativa de ir a limpiar la mugre que dejaron los manifestantes.  Yo creo que la principal responsabilidad de mantener el área limpia es de la Municipalidad capitalina que ha creado el espacio deliberadamente y que debería tener prespuesto para darle mantenimiento y para evitar las pintas; pero es muy sano y educativo para la sociedad, saber que así como hay vándalos y gamberros que salen a pintar paredes ajenas, también hay gente idealista y comprometida que está dispuesta hasta a ir a limpiar lo que ensucian otros, con tal de no dejarse egullir por el rencor y la inmundicia.  Ah, y esta no es la primera vez que este grupo acude a limpiar.

¡Animó, muchá!

La foto, por cierto, la tomé de http://www.facebook.com/pages/REevolucionemos-Guate/137568932958617


17
Oct 10

Helados y tradición en el Centro Histórico

La heladería Marylena tiene casi 100 de existir en el Centro Histórico de la Ciudad de Guatemala; pero lo que más llama la atención de este lugar es que, además de los sabores de helado tradicionales como vainilla, chocolate y fresa, ofrecen opciones menos conocidas como el helado de aguacate -que a mí me gusta mucho- y el de elote, entre otros.  Pero la cosa no se queda ahí, entre los 160 sabores que ofrece el negocio se cuentan unos que son verdaderamente audaces:  tamal, michelada y pescado, para mencionar sólo unos.

Conozco el lugar desde principios de los años 70 porque una de mis tías abuelas vivía enfrente; y es altamente recomendable.  Marylena está ubicado en la Sexta calle y Segunda avenida de la zona 1.

Ayer, al atardecer, pasamos ahí con un grupo de amigos y participantes en un tour alegrísimo y muy educativo que organizó el Museo Popol Vuh.


12
Ago 10

Imágenes perdidas, en un mausoleo viviente

Esta imagen se halla sobre la puerta de donde estaba el negocio de fotografía de Alberto El Canche Serra, sobre la Sexta avenida y décima calle de la zona 1. Durante décadas estuvo oculta por alguna cenefa que fue puesta cuando esas cosas se pusieron de moda; y ahora ha resurgido en esa edificación que parece una ruina viviente. Esa casa siempre me pareció como un mausoleo inmenso, y ahora lo parece más.

En las vitrinas de El Canche Serra estuvieron las fotos de mis abuelos, la de la boda de mis padres y la de mi primera comunión. Me pregunto si la imagen que ilustra esta entrada tenía relación alguna con el negocio de fotografía.