21
Oct 13

El que pinta pared y mesa…20 de octubre


El que pinta pared y mesa demuestra su bajeza dice un adagio que aprendí cuando era muy niño; y a la dirigencia popular -que salió a ensuciar las calles el 20 de octubre pasado- aquello parece no inquietarla.  De hecho, en una de las parede manchadas, justo debajo de un letrero que dice Por favor no manche las paredes, algún patán escribió: Las paredes gritarán los que los medios callan.  Y…¿qué gritan las paredes?

Primero gritan con hoces y martillos -que no podían faltar-, y esta vez cortesía del Partido Socialista Centroamericano.  Gritan que Jesús era guerrillero y preguntan: ¿Cristo al servicio de quién?  Quizás para deleite de quienes están resucitando la teología de la liberación y añoran los tiempos en los que jesuitas, maryknoll y otros miembros del clero participaban activamente en grupos guerrilleros.

Las paredes ensuciadas por los manifestantes revolucionarios sostienen, a gritos, que si hay más educación hay menos ladrones, como si la gente que no ha tenido educación fuera ladrona, y como si no hubiera ladrones bien, bien educados.  Las paredes gritan y claman por el ven vivir cuando se refieren al buen vivir y gritan minerras cuando aluden a las empresas mineras.  Las paredes gritan que la dirigencia popular quiere la estatización de los servicios públicos para que los políticos y sus funcionarios las controlen y se enriquezcan de ellas sin prestar servicios como ocurría cuando los servicios públicos estaban en manos de los políticos y sus funcionarios.

Es interesante el hecho de que la mayoría de manifestantes son burócratas y empleados del gobierno.  ¡Miembros del gobierno que quieren hacernos creer que son pueblo! Pueblo, muchá, somos los que no estábamos ahí.  Pueblo somos los que les pagamos sus sueldos.

Las paredes gritan que la dirigencia popular no se ha enterado de que el dogma de Montaigne sólo es realidad cuando los grupos de interés pueden hacer uso de la ley para expoliar a los demás.  Montaigne planteó que el provecho de unos es la pobreza de otros y eso sólo es posible en sistemas como el mercantilista, el socialista y otros en los que no hay igualdad de todos ante la ley, ni se respetan absolutamente los derechos de todos a la vida, la libertad y la propiedad.

A veces, las paredes gritan ideas con las que uno no puede sino estar de acuerdo: ¡No más salarios de hambre!, por ejemplo; o ¡Por el  buen vivir!…ojalá y explicaran cómo.  Digamos: Clamando contra los impuestos expoliatorios, o a favor de más y mejores inversiones productivas, o a favor de más y más flexibilidad laboral.  Las paredes gritan que ellos mandan, porque tu los dejas.   Pero para eso, claro, no hay necesidad de pintar paredes y mesas.

Y a todo esto…¿qué se celebra el 20 de octubre? Pues la revolución que en 1944 acabó con el ancién regime en Guatemala y que luego fue secuestrada por los socialistas; mismos que ahora festejan pintando hoces y martillos en la Sexta Avenida del Centro Histórico.


24
Jul 13

¡Me encontré con los payasos!

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Ayer, en el Centro Histórico, me encontré con el desfile de payasos porque en Guatemala se está celebrando el IV Congreso Latinoamericano de Payasos.

Los propósitos de esta actividad son la profesionalización del arte de los payasos y el intecambio de técnicas, trucos y chistes para hacer reír a quienes gustan de aquel arte.

Yo tengo sentimientos encontrados con respecto a los payasos.  Por un lado el niño que hay en mí goza con el humor cándido; pero por otro lado, otra parte de mí goza mucho con el humor negro y retorcido.  Lo que no aguanto es el humor vulgar y corriente con  el que algunos payasos hacen reír a un público al que creo que subestiman.  He visto eso en algunos espectáculos públicos como los que algunos payasos montan en lugares como la Sexta avenida y como el que montaba, hace años, un payaso en el Parque Central de La Antigua.

En fin….me alegró mucho ver el desfile de los payasos y me reí con muchas de sus payasadas.


31
Dic 12

Espectáculo de fuego y cadenas


Alegre lucía la Sexta Avenida el sábado por la noche. Las familias pasean y salen a cenar, y disfrutan de los distintos espectáculos que ofrecen algunos chicos que salen a ganarse unos pesos.

Las luces de Gallo le dan un aspecto hermoso y festivo a la calle; y la gente puede relajarse y pasar buenos momentos.

Claro que ahora es muy distinto; pero a mí, estos paseos siempre me van a recordar mi niñez y mi adolescencia en aquella vía. Si era con mi padre, los paseos siempre incluían pasar por el los almacenes Marlin, Biener, y Max Tott. Si era con mi madre, o mis abuelas, los paseos siempre incluían El Cairo, El Gan Emir, Mi amigo, tal vez La Perla. Y las paradas para tomar energía eran en el Café París, el Hotel Panamerican, la pizzería Bologna, o las pastelerías Bohemia, Jensen, o Lutecia.

Por eso me gusta mucho cuando me encuentro a las familias paseando por ahí, y veo como es que los niños se gozan las luces y lo que comen. Supongo que, algún día, ellos también tendrán recuerdos buenos y entrañables de estas experiencias.


18
Jul 12

El caso del Fu Lu Sho

Mi cuata, Claudia, solía presentarme así: Luis Figueroa, que fue cocinero del Fu Lu Sho.  A mí me cae en gracia la broma y cuando la hago de mesero, cocinero, o cantinero, digo: Es que fui mesero (cocinero, o cantinero) del Fu Lu Sho.

Hace años, para que no se diga que me morí sin ir a dicho restaurante chino ubicado en el Centro Histórico de la ciudad de Guatemala, fui a cenar ahí.  Me comí una hamburguesa y un milk shake de vainilla; y lo puse en mi currículo.  Para que tuviera verdadero valor cultural fuí antes de que fuera remozada la Sexta Avenida y los otros comensales eran prostitutas y taxistas, principalmente.

Todo esto viene al caso porque el inmueble que ocupa aquel negocio -que existe desde 1956- cambió de dueños; y con el remozamiento de la Sexta Avenida, muchos propietarios -inlcuidos los del edificio en el que esá el restaurante-  han subido los alquileres de sus locales.  Esto, claro, incomoda a los inquilinos.  Y algunos inquilinos creen que tienen algún tipo de derecho al alquiler bajo, o algo parecido.  Los dueños del Fu Lu Sho han acudido al público para evitar que les suban el alquiler. Y algunos miembros del público los apoyan.

Ejemplo de ello es una carta en la que el lector dice que se debe congelar la renta que el propietario anterior estableció, y que este debería indemnizar a los dueños del Fu Lu Sho por todo el tiempo que estuvieron en ese local.

La mara no le atina; pero menos mal que de cuando en cuando la luz de la razón alumbra por ahí.  Este es el caso de la columna La controversia del Fu Lu Sho, por mi amiga, Dina Fernández.  En el caso del Fu Lu Sho, se vale lanzar una letanía por la posible pérdida de un restaurante con personalidad e historia. Pero en vez de llorar, sería mucho más útil para los propietarios una asesoría diseñada para incrementar ingresos o una campaña en redes sociales para llevarles clientes.   Hay que evitar, sobre todo, caer en la tentación de proponer que a los lugares antiguos se les proteja por la cantidad de años que llevan operando. Esas medidas bien intencionadas generan incentivos perversos que consiguen exactamente lo opuesto de sus propósitos. Ni qué decir de la gente que aconseja a los dueños del Fu Lu Sho que se atrincheren en el local y se conviertan en invasores. Eso raya en lo delictivo, pues los propietarios del edificio tienen todo el derecho de recuperar su inversión, dice la columnista.

Este es un caso en el que un interés, el de los dueños de un negocio, entra en conflicto con un derecho, que es el del propietario del inmueble que ocupa aquel negocio.  Como los derechos son principios morales que permiten la cooparación social pacífica, los derechos deben prevalecer sobre los intereses para que la sociedad sea sana y viable.

Y alguien dirá que, entonces, ¿qué ocurre con el derecho de los dueños del restaurante a tener su negocio?  Pues no hay problema.  El derecho de unos a tener un restauante no es violado por el derecho de otros a pedir determinado alquiler por el local que ocupa aquel restaurante.  El alquiler le da al inquilino la facultad de ocupar un espacio del que no es propietario; y priva al propietario de la facultad de usar ese espacio para otras cosas.  Pero el cambio de las condiciones del alquiler no priva al inquilino -en este caso el dueño del Fu Lu Sho- del derecho a tener su restaurante…en otra parte.

Nadie tiene derecho a ocupar una propiedad ajena, sin llegar a un acuerdo pacífico y voluntario con el propietario.  No se vale usar la coerción, ni los privilegios, para obligar a alguien a darle algo a uno contra su voluntad, o en condiciones que de otra forma no aceptaría.  Eso es usar la violencia para conseguir los propios fines.

No olvides que la característica inequívoca de un derecho es la de que para su ejercicio no necestitas violar los derechos de otros.  Esto es porque mi derecho a levantar la mano termina donde comienza la nariz de mi vecino.

Ta vez sea una lástima que desaparezca el Fu Lu Sho. No se. Nunca volví a comer ahí.  Pero sería más lastimoso aún que desaparezcan los derechos, en favor de los intereses.


11
Jun 12

“La Shakira” del Centro Histórico


“La Shakira” es una señora que baila y se divierte en la Sexta Avenida del Centro Histórico de la ciudad de Guatemala.  Acompaña, o es acompañada por un grupo de músicos y el público goza mucho con ellos.  Su pecho lo cruza una banda que dice Reina…de algo que no pude leer.

Me recordó a La abuelita del disco, un personaje de la peli Studio 54; y es uno de los personajes que hacen que cada visita al Centro Histórico valga la pena.


10
Jun 12

Los jóvenes y la estatua de Tasso

Ayer, que andaba por La Sexta, me dio gusto ver a este grupo de jóvenes tomándose una fotografía con la estatua de Tasso Hadjidodou. Su actitud contrasta con la de los delincuentes que dañaron ese monumento durante su manifestacion del 1 de mayo.

La gente le tiene mucho cariño a esa estatua y es muy común que individuos, familias y grupos se tomen una foto con Tasso.  Y es una lástima que haya por ahí, sueltos, cretinos que la dañen de cuando en cuando.  Por cierto que las estatuas de jaguares, también ubicadas en la Sexta están como abandondadas.  Sin pintura, con plasticos pegados.  Triste su caso.

Y Tasso, por cierto, andaba ayer caminando por la Sexta, acompañado por dos damas que lo llevaban dándole apoyo en sus brazos.


10
Jun 12

Peligro en la Sexta

Esta ilustración, de una señora con mariposas, se halla sobre la entrada de lo que era el estudio de fotografía de El Canche Serra, en la Sexta Avenida del Centro Histórico.  Hasta hace poco era sólo una curiosidad; pero de un tiempo para acá la ilustración se ha ido moviendo y ahora se ve muy separada de la pared.  ¿Cuándo se irá a caer y sobre quién?


08
May 12

La dirigencia popular y sindical ensucia


El viernes, después de la marcha que organizaron los sindicatos para celebrar el Día del Trabajo fui al centro para mostrarle la ciudad a una visitante de Virginia, EUA.

Fui con ese propósito y con el de ver las pintas que la dirigencia sindical había hecho en la Sexta Avenida del Centro Histórico. Tanto mi cuata, Rosemary, como yo estábamos indignados. No sólo por la suciedad que dejaron los sindicalistas; sino por la abundancia de hoces y martillos, el símbolo del socialismo real, que es como si un grupo de manifestantes hubiera pintado esvásticas, el símbolo del nacional-socialismo. Sólo que peor.

A Rosemary y a mí nos conmovieron dos escenas: la de una mujer -que fotografíé junto a la estatua mutilada de Tasso Hadjidodou- que expresó: Que mala esa gente que hizo eso; y la de los grupos de jóvenes que se dieron a la tarea de limpiar la inmundicia que dejaron los manifestantes. Ojalá que cuando recuerden la suciedad que tuvieron que limpiar, también recuerden la abundancia de ominosas hoces y martillos.

¿Malos? ¡Malísimos, y de hecho, criminales! Los muertos del socialismo real se cuentan por millones. Los muertos en la República Popular de China, entre 1949-87, se estima que llegan hasta 76,702,000. En la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, entre 1917-87, se calcula que llegan hasta 61,911, 000. Durante los soviets de Mao, en China, puedes añadir otros 3,468,000. En Corea del Norte, entre 1948-87, hubo unos 1,553.000 de muertos (¿Cuántos habrán muerto de hambre y frío entre 1988 y 2012?). En Camboya, entre 1975-79 (en sólo 4 años) hubo 2,035,000. Todos estos muertos y más en regímenes socialistas de uno u otro color. Todos ellos, poco más o menos unidos por símbolos comunes como la hoz y el martillo, y las banderas rojas y negras.

Al utilizar símbolos de regímenes (y de filosofías) criminales para pintar paredes y destruir monumentos, la dirigencia popular chapina -que alienta, o tolera- el uso de hoces y martillos, no sólo pone en evidencia sus raíces y vinculaciones políticas reales; sino que radicaliza el diálogo político e introduce elementos de violencia que fueron pesadillas en los años 60, 70 y 80 cuando le guerrilla intentó tomar el poder por la fuerza e imponer la dictadura el proletariado, con las consecuencias que muchísimos guatemaltecos lamentamos. Un ejemplo de lo que es capaz de hacer la gente de la hoz y el martillo es el bombazo del Parque Central en 1980, bombazo del cual muchos jóvenes no han oído hablar.

Las pintas del 1 de mayo deben darnos que pensar.


10
Sep 11

“Bboying” en La Sexta


Después de los aguaceros de hoy en la tarde el aire estaba muy limpio y el ambiente estaba fresco; así que salí a dar un paseo por La Sexta en el Centro Histórico y me encontré con este alegre grupo de chicos haciendo Bboying.

Me cayó en gracia porque hoy me voy enterando de que el Break Dancing ya no se llama así, sino Bboying. Es que soy old fashioned, me dijo uno de mis sobrinos hace unos meses. Ja ja, old fashioned sería si dijera que los chicos estaban haciendo suertes en la calle.

Me dio mucho gusto ver a estos patojos pasándola bien y haciendo que la gente también pasara un buen rato.


27
Sep 10

Constructivistas y racionalistas en plena faena

Tengo sentimientos encontrados con respecto a la Sexta avenida de la zona 1.  Me gusta verla limpia y me gusta cómo están adquiriendo vida viejos edificios a los que siempre les he tenido cariño.  Por eso voy por ahí de cuando en cuando.  Pero me incomoda que la remodelación sea de una forma coercitiva y artificial  Se ve que las autoridades municipales no aprendieron la lección que les dio Cuatro Grados Norte, y que insisten en sus planes constructivistas y racionalistas.

La Sexta Avenida está dejando de ser parte de la ciudad para convertirse en un mall; tengo la impresión de que le va a ocurrir lo mismo que le ocurrió al citado distrito de la zona 4 que fue egullido por la realidad económica y social chapina.  A los planificadores les gusta imponer paletas de colores e imponerle, o prohibirle usos específicos a la propiedad ajena.  Todo ello contra la naturaleza humana, y contra la naturaleza de la urbe.  Y eso tiene costos que, en Cuatro Grados Norte no pudo aguantar la magra economía de los guatemaltecos, como creo que no los podrá aguantar en la nueva Sexta avenida.

Ahora andan, los constructivistas y racionalistas, con la novedad de que van a llenar de obras de arte aquel paseo.  Por lo pronto comenzaron con unas esculturas de metal que están medianamente interesantes; y siguieron con jaguares de fibra de vidrio pintados de formas caprichosas.  Y a la gente le gusta subirse en ellos y fotografiarse con ellos.

Mientras tanto, y al margen de la propaganda y del orpel, otros monumentos de la ciudad están en el abandono.  Tal es el caso del monumento a Miguel Angel Asturias y el del Ferrocarril para mencionar sólo dos, que están dañados, que han sido saqueados y que están en el abandono.  O el monumento a la Constitución, que es una caricatura.