05
Ago 18

Sequía, cambio y colapso maya

Como atiendo muchos visitantes extranjeros, con frecuencia debo responder a la pregunta de por qué es que colapsó la civilización maya.

Con base en conferencias a las que he asistido y a artículos especializados que he leído, mi respuesta siempre va en cuatro vías: 1. Sequías que causaron falta de lluvias, y en consecuencia malas cosechas, entonces hambre, multitudes hambrientas y enojadas, y luego sacerdotes, aristócratas y monarcas decapitados.  2. Malas filosofía y tecnología, incapaces de entender y de enfrentar efectivamente lo que estaba ocurriendo. 3. El mantenimiento de élites improductivas y ciudades inmensas que pesaba sobre las masas cuya productividad era precaria.  4. Lo de siempre: guerras, enfermedades y tecnología insuficiente que dificultaban el comercio.

En un plazo de tiempo no muy prolongado, las principales dinastías desaparecieron y las ciudades más importantes fueron abandonadas a su suerte. Aunque los mayas sobrevivieron, su poder económico y político fue desde entonces una triste sombra de tiempos mejores.

Recientemente, con base en los análisis de los isótopos de oxígeno en un lago de Yucatán,  científicos confirmaron que sequías extremas y muy frecuentes fueron una de las causas principales del colapso maya.

Nuestras reconstrucciones paleoclimáticas ponen de manifiesto que durante este periodo se produjo un descenso en la cantidad de lluvia anual de un 40 al 55 por ciento, con picos de hasta el 70 por ciento, y una reducción de la humedad ambiental de hasta un 7 por ciento, en comparación con la actualidad», ha enumerado este investigador.

Y me pregunto: ¿Un Protocolo de Kyoto que hubiera reducido las emisiones de dióxido de carbono, metano, oxido nitroso; así como de hidrofluorocarbonos, perfluorocarbonos y hexaflourouro de azufre, hubieran detenido aquel proceso? ¡Por supuesto que no!, porque el cambio climático no es antropogenico.  El cambio no es causado por los seres humanos, sino que es una constante de toda la vida en la naturaleza de las cosas aquí en el planeta Tierra. Es el dinamismo y no la estasis lo que no cambia.

La foto la tomé desde la pirámide El tigre, en El mirador.


31
Jul 18

Tempestad, rayos crepusculares y Venus

El cielo de julio ha sido una maravilla.  Venus, Saturno y Marte han alegrado las noches; también Antares (mi estrella favorita).  Los rayos crepusculares han estado bellísimos.  No es temporada de celajes; pero los ha habido estupendos y las tempestades han estado magníficas.

Esta es parte de la tempestad de ayer que ese una de las más espectaculares que he visto; sumada a que -aunque mi teléfono no lo capta- el volcán Pacaya estaba manando lava.

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El sábado, al atardecer, Venus se lució en el cielo del Oeste sobre los celajes y sobre lo que se veía del volcán de Agua

Esa misma tarde, pero un poco antes, los rayos crepusculares engalanaron el cielo sobre la ciudad.

Julio no es el mejor mes para ver los volcanes, así que el momento en que pude atisbarlos fue de ser aprovechado.

 


14
Jul 18

Lava en el volcán Pacaya

En la noche del jueves, el volcán Pacaya dejó ver ríos de lava que fluían en su costado.

A ratos se veía más abundante y con los binoculares se podía ver cómo salía con fuerza; pero sin formar columnas notables a simple vista.  ¿Sábes qué me recordaron las fotos uno y dos? Me recordaron  Una noche en la montaña desnuda, por Modest Mussorgky, en Fantasía.

Esa actividad fue precedida por un atardecer espectacular en el que parecía que el cielo hubiera agarrado fuego.

Y el volcán Pacaya se lució en el sur junto a los colores del ocaso.

Con respecto a Pacaya, el Insivumeh reportó expulsiones de gases y pequeñas explosiones en el cráter Mackenney. Se mantiene el flujo de lava con una longitud de 100 metros en dirección norte del complejo volcánico. La estación sísmica PCG registran vibraciónes internas debido al arrastre del flujo de lava y ascenso de magma.


01
Jun 18

Arcoiris, volcanes y la ciudad

Con un arcoiris completo y dos volcanes en actividad, el primer día de junio en la ciudad de Guatemala empezó de forma espectacular.

Fue cosa de unos minutos.  Hacia el sur, un extremo del arcoiris parecía posarse sobre el Volcán Pacaya que estaba hermoso y lanzaba vapor y arena.  Por unos segundos la luz del sol resaltó muy bien las formas del volcán que, normalmente, no es muy fotogénico desde aquí.

Y hacia el oeste, el arcoiris parecía pasar sobre los volcanes de Agua, de Fuego (que también estaba en actividad -como casi todos los días-) y Acatenango.  La luz del sol iluminó los edificios de la ciudad, y dime si no es magnífico.  Además…había dos arcoiris.  En la esquina superior derecha, con algo de esfuerzo, puedes ver el segundo.

Ciertamente fue uno de los amaneceres más bellos que he visto.  ¡Cómo hubiera querido que el fenómeno durara más tiempo!…hubiera querido apreciarlo sentado, con una taza de café con leche y escuchando Alto Giove.

¡Muchas gracias a Soy 502 por ponerle atención a mis fotos!


22
Abr 18

Paseo a la finca El Zapote

Un paseo a la finca El zapote, con amigos, es siempre una de las experiencias más agradables que uno se puede regalar en un fin de semana casi cualquiera.

Hay tres cosas que a mí me encantan del lugar: su magnífico jardín inglés, el ambiente propicio para relajarse y disfrutar de los amigos y de la buena comida de día de campo, y la proximidad del volcán de Fuego.

El zapote es la creación de Leif Lind Pettersen y su esposa, la artista, Carmen de Pettersen, que  diseñaron y sembraron 15 manzanas de jardín en 1958.  Al salir a caminar por los jardines encuentras un bello nacimiento de agua el cual alimenta la piscina natural, cuatro lagunas, e impresionantes flora y fauna que hacen de la finca un espectáculo, especialmente cuando el Volcán de Fuego está despejado y hace  erupción.  La finca tiene una larga historia de sembrar árboles de quina.

Normalmente visito la finca cuando el Museo Ixchel organiza su día de campo anual; pero este año no pude asistir; y fue buena idea que un grupo de amigos dispusiera ir de pic nic ayer.  La experiencia de tener sólo para uno aquellos jardines, es distinta a la de disfrutarlos con más gente.  Además comimos delicioso porque todos nos esmeramos con los alimentos y las bebidas.

Marzo y abril son dos de los mejores meses para ir porque la naturaleza -que ya de por sí es exuberante- está en su apogeo y la variedad de sonidos y colores es espectacular.

Algunas de las flores que puedes ver en el jardín son, Heliconia rostata:

Zingibarezia sp:

Peperonacea sp:

Huevos de mono:

No fue posible ver el volcán de Fuego porque estaba cubierto por las nubes; pero lo vimos en el camino entre Escuintla y la finca y escuchamos cuatro retumbos impresionantes de esos que despiertan la imaginación y maravillan a cualquiera que sepa disfrutarlos.

Yo no me meto en aguas frías, pero parte de la diversión es la piscina natural y ver como la disfrutan aquellos que pueden disfrutar de las aguas gélidas.  La foto de abajo, por cierto, es de un sapo que andaba en las inmediaciones.  A mí me caen en gracia los sapos; y como al inframundo maya se entra por medio de cuevas, o cuerpos de agua, estos personajes son mensajeros del inframundo.

Es una lástima que no haya podido tomar foto de alguno de los pájaros que amenizan el paseo, durante el cual uno encuentra abundancia de rincones encantadores, como este puente de troncos.Ya quiero regresar porque a pesar de las varias veces que he ido, no conozco la catarata y nunca he visitado la plantación de quina, ni he visto el proceso de ese producto tan importante.  ¿Sabes? La quina se usa contra la malaria, y se usa en la fabricación de bebidas (como la que usas para tu Gin and tonic), para el Amargo de angostura, que tanto me gusta; para el Campari, que no me gusta;  y para elaborar el Calisay, un licor que no es muy conocido por aquí y que era muy sabroso (y cuya receta estropearon los fabricantes), y también sirve para otros propósitos.


01
Feb 18

El volcán de Fuego en acción

¿Por qué no me levanté media hora antes?  Hoy, temprano, el volcán de Fuego ofreció un espectáculo magnífico de fuego, lava y cenizas, sobrecogedor. La erupcion fue acompañada por una Luna preciosa, más preciosa que de costumbre.

Casi todos los días dicho coloso lanza cenizas y/o vapor; además suelo arrojar lava.  Todos los días, en cuanto me levando, voy a checarlo con la esperanza de ver algo maravilloso.

El volcán de Fuego ha estado activo a lo largo de toda la historia conocida de Guatemala.  Se lo ve en el Lienzo de Quaunquechollan, pintado en 1530 por los quauhquecholtecas -del actual México- para contar como es que ellos, en compañía de unos que venían del otro lado del océano, habían conquistado los señoríos que se hallaban en lo que ahora conocemos como Guatemala.

Haz clic en la imágen para ver el vídeo:

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En Guatemala hay 37 volcanes y tres de ellos están activos: Santiaguito, Pacaya y Fuego.  La de hoy en la mañana, por cierto, es una de las actividades más impresionantes que he visto desde que me aficioné a ver el volcán todas las mañanas.  Desde mi ventana se ven, también, Pacaya, al sur que, aunque esta activo no es tan espectacular como Fuego; y los volcanes de Agua y Acatenango.  Estos dos junto a Fuego, en el occidente.

En este enlace puedes ver el Periscope que hice en la mañana.


22
Oct 17

Excursión a Chuwa nim abaj

Chuwa nima´ab´aj, que quiere decir Frente a la gran piedra, fue la capital del señorío Poqomam.  Es un sitio arqueológico encantador. Haz clic en la foto para ver más fotos.

Es una ciudadela situada en cerros junto a la confluencia de los ríos Motagua y Pixcayá, rodeada de barrancos que sirvieron para su defensa.  Fue fundada en el siglo XII de la era común y se estima que llegó a tener unos 10,000 habitantes.  Desde lo más alto de las pirámides uno puede imaginar los campos de milpa, las casas de la gente y la vida comercial, social y política en aquel lugar.

Hacia 1470 fue conquistada por el señorío Cakchiquel y en 1525 fue conquistada y destruida por Pedro de Alvarado luego de un sitio de tres meses. Sucesivamente tuvo los nombres de Saqik’ajol NimakaqapekJilotep’ek  y Mixco viejo.

Las ruinas se dividen en 15 grupos con por lo menos 120 estructuras mayores, que incluyen templos, palacios y dos canchas de juego de pelota. Entre 1954 y 1967 se llevaron a cabo excavaciones arqueológicas bajo la dirección del arqueólogo Henri Lehmann, del  Museo del Hombre, de París. En el sitio había un pequeño museo; pero hace unos diez, o doce años fue saqueado.

Por la vegetación que es intensa en esta temporada, por su arquitectura característica y por la naturaleza de sus piedras -muy bien cortadas, de colores variados y brillantes- este sitio es uno de los más bellos.  Hay mucha paz, aquí; ocasionalmente interrumpida por los gritos de no muchos visitantes.

Chuwa nim abaj bastante bien cuidada. El sitio está limpio y hay unos ranchitos muy convenientes para disfrutar bien el día de campo y descansar.  Antes de caminar por la ciudadela, comimos e hicimos siesta en uno de esos ranchitos, en el que estaba màs alto y en el que acariciaba la brisa.  Las estrellas del pic nic fueron los sandwichs de salchichón de sangre y lengua, con jamón de pavo y queso manchego, aderezados con cebollas caramelizadas, o con pepinillos finamente rodajados, y un chorrito de aceite de oliva, mostaza de Dijón y mayonesa.

Como el sitio es grande y el sol es implacable, hay que llevar agua abundante, sombrero y bloqueador solar.

Ah, como disfruto de pasear entre las ruinas de pirámides y palacios, entre la hierba y los árboles.  Buscando la sombra y recibiendo la brisa.  El silencio es maravilloso entre todo aquello.  Cuando el sol bajó y la temperatura se hizo más agradable, la experiencia fue todavía más agradable.  Fue el momento para sacar el bakhlavá y el café de Huehuetenango, para reponer energías y proceder a escalar más estructuras.

Cuando vimos que la lluvia se acercaba iniciamos el retorno para encontrar refugio en el cobertizo que compartían don Lucio y don Jesús, que están a cargo del lugar.  Ahí esperamos que escampara, y compartimos ese tipo de conversaciones que se tienen con dos personajes, junto al fuego y bajo la lluvia.

El camino hacia Chuwa nim abaj esta en muy bien estado durante el 85% del trayecto; y aunque son sólo 60 kilómetros desde la ciudad de Guatemala, uno tarde dos horas y media en llegar debido a: las curvas, lo que toma salir de la ciudad, y el paso por las poblaciones.  Con todo y todo es un viaje agradable.  De ida nos fuimos por Ciudad quetzal y San Raymundo, que es un camino que nunca habíamos tomado. Teníamos 9 años de no ir, y la primera vez que fuimos fue en 2001.  De vuelta decidimos hacerlo por San Juan Sacatepéquez que es el camino que conocíamos; pero nos distrajimos y paramos desviados por Sajcavillá. Lo que le añadió algo de emoción al paseo, sobre todo porque ya había oscurecido.

¿Cuáles fueron los pelos en la sopa? Una calle muy empinada en San Juan, que estaba cerrada por una cadena y de la cual nos costó mucho salir; y la actitud de muchos camioneteros y conductores de moto irresponsables que se dejan ir violentamente, sobre todo en las poblaciones.

Fue buenísima idea ir a pasar el día de ayer a Chuwa nim abaj, disfrutamos de las características y de la historia de ese sitio extraordinario, comimos rico, nos gozamos la naturaleza y la paz del lugar, compartimos un momento con dos personajes y tengo muchas ganas de volver.

Actualilzación: hice una consulta entre los lectores de @luisficarpediem y resulta que de los 15 que contestaron, 9 dijeron que sí han visitado Chuwa nin abaj; en tanto que 6 dijeron que no lo han hecho.

 


26
Sep 17

La ardilla y su jocote

Andaba paseando en el jardín de mi oficina y me encontré con esta ardilla:

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Debe ser temporada de estos animalitos porque he notado más de los usuales.  En esta ocasión lo divertido fue que se le cayó el jocote que estaba comiendo.

Además, ya sabes, las ardillas son ratas con buenas relaciones públicas.


25
Jul 17

Esas comen carne

Esas comen carne, le dijo uno de los muchachos que tenemos trabajando en casa a su compañero, mientras ambos veían con asombro a Ofelia.

Ofelia es mi Stapelia gigantea, una admirable suculenta que siempre he visto como si fuera una flor de Perdidos en el espacio; y que siempre he visto con la misma admiración que la observaban los trabajadores.

Ofelia no come carne, por cierto; pero hiede a carne podrida.  Despide una cierta pestilencia y aparte de eso llama la atención que es notoriamente hirsuta; y llaman la atención sus colores y  su tamaño.  Nunca ha sido polinizada pero atrae moscas que han de acudir embobadas  por su olor característico.

¿Te preguntarás que cómo es que me causa alegría aquella flor tan poco agraciada? Y te diré que quizás es por su aspecto raro, que va más allá de exótico; y porque es perseverante y generosa.

Un cuate hawaiano me contó que esta flor se encuentra en las partes más secas de la Isla grande, y es conocida como Caron Flower; seguramente que en referencia al barquero Caronte y en alusión a su olor. Uno ve el centro de esta flor y parece estar frente a un vórtice que lo llevará a la presencia del barquero del río Estigia. Cuando mi cuate era guía turístico, allá,  se divertía mucho porque los visitantes no le creían lo del olor y acercaban sus narices a las flores.


17
Abr 17

¿Quién cuida a Balam?

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La biosfera maya y el patrimonio histórico son víctimas de la guerra perdida contra las drogas y de los invasores. Incendios atribuidos a narcoganaderos y a rozas sin control están arrasando con la selva en Petén.

Aquellos que sostienen que los políticos y los burócratas son los mejores guardianes de la naturaleza y del património histórico deberían meditar sobre lo que está ocurriendo porque no es un fenómeno nuevo.  Ya desde hace 13 años se advertía que el parque nacional de la laguna del Tigre es una tierra sin ley, paraíso de narcos, madereros e invasores que -con conocimiento y quién sabe si al amparo de los funcionarios del gobierno- hacen lo que quieren en la biosfera maya.  Yo visité Perú-Waká ca. 1999 y ya desde entonces aquellos eran temas de preocupación.

Pero claro, si los políticos y funcionarios no pueden con la educación estatal, la salud estatal, ni con las carreteras estatales, para mencionar tres, ¿por qué iba a ser diferente con la naturaleza a cargo de ellos?

Aquí en Guatemala todo urge y el cuidado de la naturaleza también es prioridad.  ¿Quien cuida a balam, a kuk, y a mo? Está claro que los políticos y burócratas, no. Es tiempo de buscar opciones y de dejar de hacer lo mismo con la esperanza de tener resultados distintos.

No se vale decir que los políticos y funcionarios cuidan bien de la naturaleza en otras latitudes y que lo que ocurre aquí en Guatemala es sólo porque el estado está cooptado, por ejemplo.  En los Estados Unidos, que es un país desarrollado y con instituciones enraízadas, la efectividad del cuidado estatal de la naturaleza es muy cuestionada como puedes ver en este enlace.