29
Mar 22

¡”Bravissimo” está de vuelta, todo el orbe cante!

 

El Festival Bravissimo está de vuelta con El canto y la ópera, la voz del alma.

¡Todo el orbe cante! El programa incluye E lucevan le stelle, un composición magistral de Giacomo Puccini.  La amo por su música, su letra y su momento dramático en Tosca; sino porque la canta Mario Cavaradossi, un pintor republicano y liberal. Claro que, independientemente del fin que le espera a ese personaje.

Bravissimo es organizado por el Departamento de Artes Escénicas de la Universidad Francisco Marroquín.  Cada año nos deleita con una selección exquisita de música, danza, teatro y otras expresiones de arte escénico.

El último festival completo fue el de 2019; y en 2020 fue interrumpido por los encierros forzados.  La semana pasada recibí mi carné para 2022 y estoy feliz como una perdiz. De verdad que he extrañado mucho la calidad y el ambiente de las presentaciones.

Geraldina Baca-Spross y su equipo hacen un trabajo maravilloso al ofrecer esta serie de espectáculos y yo, desde aquí, les ofrezco una ovación de pie.


05
Nov 21

Quiché vinak

 

Quiché vinak o Pueblo K´iche´ es el nombre de la ópera guatemalteca escrita por el músico Jesús Castillo, con libreto de Virgilio Rodríguez Beteta; y ¡Me alegro tanto de haberla visto la semana pasada en el Centro Cultural Miguel Ángel Asturias!

Aunque no tiene un aria para recordar, cantar y tararear -como una de mis favoritas, E lucevan le stelle, de Tosca; o un momento estremecedor como el sexteto de Lucía di Lammermoor– la música de Quiché vinak atrapa, conmueve y nada tiene que envidiarles a otras obras de su género.

¿Sabes? Es la única ópera guatemalteca, fue la primera centroamericana y fue estrenada en 1924, en una sola presentación, en formato de concierto y con sólo seis instrumentos.  Sólo casi 100 años después se lució en todo su esplendor.  La verdad es que los responsables de esta puesta en escena hicieron un trabajo admirable.  Ha de ser complejísimo montar una ópera y la presentación de Pueblo K´iche´ me recordó a la de Akhnaten, o a alguna de Aida.

Quiché vinak es una historia de amor; y como lo ha explicado Ayn Rand, en las óperas la base estética es la música, con el libreto sirviendo solo para proporcionar un contexto emocional apropiado, una oportunidad para la partitura musical y una línea integradora para la interpretación total.  Si me preguntan yo hubiera hecho visualmente más dramático el sacrificio de Alitza; el vestuario del primer acto es el mejor de los tres; y la decisión de hacer el montaje atemporal fue atinada.  No por atender el absurdo anticoncepto de apropiación cultural, sino porque requirió de menos recursos y comunica bien.  Si me preguntan, la abundancia de blancos y grises fue compensada por las mascaras coloridas de los nahuales que, si me preguntan, yo hubiera puesto más. El uso del coro del tiempo me encantó; y si tuviera que elegir dos momentos favoritos esos fueron el dueto de Alitza y Amalchi en el bosque, y el dueto previo al sacrificio.

Chapó a los responsables de Pueblo K´iche´.

¿Cuál es tu ópera favorita?

Columna publicada en elPeriódico.


21
Jun 20

“Akhnaten” una sorpresa inesperada

Para hacer el encierro forzado más llevadero hoy fue día de ver Akhnaten, la ópera de Phillip Glass, en la Met.  ¡Que sorpresa más agradable nos llevamos en casa!

Haz clic en la imagen para ver “Akhnaten”.

La producción es magnífica por monumental, lujosa y de altísima calidad, como era de esperarse; y, además, llena de recursos memorables y sorprendentes; no sólo por parte del elenco y la orquesta, sino por todo.  ¡Todo!  Y si he de destacar algo que me haya impresionado más, sería la coordinación entre los malabaristas y la orquesta; y el uso del mural egipcio para contar la historia.  Y no digamos lo bien que la esta ópera cuenta la historia triste de Akenatón. ¿Cuál fue mi parte favorita? La rebelión y la muerte del malogrado faraón, que conmueve muchísimo.

Puedes ver el libreto aquí.

Akanatón se prepara para su coronación. Haz clic en la foto para ver el trailer.

Creo que Akhnaten y la historia de Akenatón son buen material para discutir temas como lo peligrosa e inapropiada que es la imposición de valores y sistemas de creencias desde el poder, sin contar con una ola de opinión pública favorable que demande los cambios.  Sobre lo arriesgado y peligroso que es oponerse a los intereses del establishment. Sobre lo peligroso que es engasarse con el misticismo, sobre todo cuando se tiene la responsabilidad de gobernar.

Arriba, Akenatón al centro, a la izquierda Nefertiti, su esposa; y a la derecha Tiy, su madre. Abajo Amenhotep III, su padre.

De alguna manera y salvando las distancias y las diferencias y todo lo que quieras, la historia triste de Akenatón y de Nefertiti (su esposa) me recordaron la historia triste de Maximiliano y Carlota Amalia.  ¿Sabes? Ese tipo de gente que pudiendo ignorar la realidad, cree que puede ignorar las consecuencias de ignorar la realidad.

La rebelión contra Akenatón.

Dicho lo anterior, no soy fan de la música de Phillip Glass y el preludio no contribuyó a mi entusiasmo; este detalle es importante porque en las óperas y operetas, la base estética es la música, y el libreto solo sirve para proporcionar un contexto emocional apropiado, u oportunidad para la partitura musical, y una línea integradora para la interpretación total, según Ayn Rand. Extrañé, por ejemplo, una aria, o una tonada que pudiera traerme a la mente la música de esta presentación.  Cosa que no hallé Akhnaten.  Es cosa mía, claro, porque soy del siglo XX y crecí con otro tipo de ópera.  Just say´in.

Horemeb; Aye, el padre de Nefertiti; y el sumo sacerdote de Amón contra Akenatón.

Si tienes la oportunidad de ver esta ópera hoy (tienes hasta las 4:00 p.m. (Central time) para empezar a verla), vela y quédate para ver las entrevistas detrás del escenario.  Seguramente la volverán a presentar de nuevo y te la recomiendo.

Conocí a Akenatón cuando leí la novela Sinuhe, el egipcio, por Mika Waltari, ca. 1975/76 y me fasciné con los egipcios antiguos. De hecho, la primera vez que visité Nueva York sólo tenía una mañana libre y la dediqué completa a visitar la sección egipcia del Metropolitan Museum of Art. Esa es una de mis novelas favoritas; y, por cierto, hay película.


16
May 20

¡Tarde de Lucia di Lammermoor!

En casa, hoy le dedicamos la tarde a Lucía di Lammermoor cortesía de The Metropolitan Opera y fue la versión de 1982, con Joan Sutherland y Alfredo Kraus.  Lucía es mi opera favorita desde que era niño y fui introducido a ese mundo encantador por mi abuela, Frances.

Siempre me han gustado mucho el dueto de Lucia y Edgardo en su despedida; la bienvenida de Arturo al castillo de Enrico; el sexteto clásico y magnífico, y el enfrentamiento entre Edgardo y los Ashton. Pero hoy vi Lucia di Lammermoor con otros ojos.

El enfrentamiento de Edgardo y los Ashton; y la intervencion del cura Raimondo.

El segundo acto, se centra en el engaño y en el sacrificio, Lucia es conminada por su hermano a sacrificarse por él; el cura la extorsiona con que si no se sacrifica por su hermano, su madre se retorcerá en su tumba; y la chica es forzada a casarse sólo para terminar en la locura.

Creo que es buen material para discutir la inmoralidad del sacrificio.

La nostalgia me llevó a tomar Tales from the operas, el libro de historias de operas que era de mi abuela y que antes había pertenecido a Edyth M. Vinter (un día les cuento quién era Mrs. Vinter).  Ese libro contiene las historias de muchisimas operas y es de principios del siglo XX.  Mi abuela me lo daba a leer antes de que escucharamos una opera y luego de que ella me daba un resumen ejecutivo de la historia y me señalaba los highlights.

El libro de operas, de mi abuela.

Luego, la nostalgia me llevó a buscar el libreto de Lucia di Lammermoor con el que escuché por primera vez aquella opera, en los discos de vinil de mi abuela.  Y en él estan marcadas con lápiz mis escenas y arias favoritas. En aquel tiempo, los años 70 sólo podíamos oir Lucia, Tosca, Madama Butterfly y otras en los discos, durante tardes lluviosas y no había posibilidad de verlas (como no fuera viajando).

Libreto de Lucia di Lammermoor.

Lucia di Lammermoor, por cierto, fue la primera opera que vi, en VHS, en la televisión de mi casa a finales de los años 80. Madama Buterfly fue mi primera opera en vivo, y Lucia di Lammermoor, la segunda.

Joan Sutherland durante el aria de la locura.

Fue una dicha pasar la tarde con Lucia y entre buenos recuerdos.


21
Mar 17

Homenaje a María Elena de Seidl

María Elena y Werner Seidl son mecenas del arte; y específicamente de la opera y del bel canto.  En reconocimiento a su generosidad y a su entusiasmo María Elena recibirá la Orden Vicenta Laparra de la Cerda.

María Elena comentó que la recibe con gusto, como un homenaje al maestro Luis Felipe Girón May, a quien le atribuye el mérito de haber renovado el interés operático en Guatemala.

Desde hace años, y en su villa encantadora, María Elena y Werner organizan veladas musicales y operáticas que, hasta antes de su asesinato, estaban a cargo de Luis Felipe y de sus estudiantes, entre otros talentos.  Es una dicha y un honor asistir a una de esos encuentros, no sólo desde el punto de vista de un humilde espectador; sino que para los nuevos y futuros talentos.

Conocí a María Elena y a Werner gracias a mis amigos Maite y Bertrand; y por ello les estoy muy, muy agradecido.  Tengo ratos de no ir a Villa Elena; pero siempre recuerdo -con cariño- los buenos momentos pasados en sus corredores y salones.

La medalla de la orden Vicenta Laparra de la Cerda, colgará dignamente en el cuello de María Elena, en homenaje a su filantropía y a su amor por la música y la opera; en recuerdo de Luis Felipe, a quien la opera en Guatemala le debe tanto; y de la mano de Werner, porque detras de una gran mujer…seguramente hay un hombre que la ama.


23
Ene 17

“Marguerite” una peli muy recomendable

Imagen de previsualización de YouTube

¿Qué tal si tu amor por la música y por la ópera fueran inmensos? ¿Qué tal si tuvieras recursos para organizar espléndidos recitales de caridad en tu chateau? ¿Qué tal si tuviéras una magnífica colección de fotografías tuyas en los mejores escenarios del mundo operático, con vestuarios impresionantes y en escenas dramáticas?

¿Y si decides no sólo presentarte ante un selecto grupo de amigos; y decides cantar frente a un público de verdad? No te voy a contar que sigue para no estropear tu experiencia con Marguerite (no veas el trailer); una peli que te recomiendo no sólo si te gustan la música y la ópera, sino por si se diera el caso de que te fascina la condición humana.  La peli es drama y comedia a la vez; y no pude sino sentirme muy conmovido por ella.

Esta peli es una adaptación al ambiente francés de 1925, de la vida y aventuras de Florence Foster Jenkins, una mezzo soprano aficionada y socialite en los Estados Unidos de América.  Aquí puedes oír una grabación original de Florence (pero no la escuches si no has visto Marguerite).


23
Ago 13

“Opera for All” vuelve al IGA

¡Todo el orbe cante!…literalmente.  Ayer fue anunciado el programa de la temporada 2013-2014  de Opera for All en el Instituto Guatemalteco Americano.  La temporada anterior fue un éxito y estoy seguro de que esta que empieza en octubre va a superar a la anterior.

El programa incluye Eugene Onegin, de Thaikovsky; The Nose, por Shostakovich; Tosca y La Bohéme, de Puccini; Falstaff, de Verdi; Rusalka, por Dvorak; Prince Igor, de Borodin; Werther, por Massenet; Cosí fan tutte, por Mozart; y La Cenerentola, de Rossini.

¡Me muero de ganas de ver Tosca, Werther y La Cenerentola.  Tosca porque es una de mis favoritas y E lucevan la stelle me saca las lágrimas; Werther porque me gusta la trama; y La Cenerentola porque Rossini es genial. Ah, y también Cosí fan tutte.

Opera for All es un programa de The Metropolitan Opera y se transmite en Alta Definición con un equipazo que -en el Teatro Dick Smith- hace que se lucan las presentaciones.


18
Ago 13

Falleció el gran Luis Felipe Girón May

Con la muerte del barítono Luis Felipe Girón May, los guatemaltecos hemos perdido a un gran artista.  Luis Felipe era un maestro de su arte y un amante de la buena música, la buena comida y la buena vida. Era un apasionado de la ópera.

Durante su vida profesional llevó su arte por casi todo el mundo y quienes tuvimos la dicha de escucharlo en operas y en recitales sentimos mucho su partida.  Yo tuve la suerte de conversar con él porque solía presentarse con frecuencia en espectáculos de la Organización para las Artes Francisco Marroquín; y también tuve la suerte de platicar con él, varias veces, en Villa Elena donde gracias al mecenazgo de María Elena y Werner ofrecía recitales con estudiantes y colegas.


17
Feb 13

¡Que música la de “Rigoletto”!


¡Ah, que música la de Rigoletto!; y que dicha que este dueto entre el bufón y su hija Gilda esté en Youtube.  Ayer, durante la presntación de esta ópera magnífica, en el IGA, descubrí la música de esta obra de Giuseppe Verdi.  Era una de las que ponía mi abuela, Frances, y nunca le puse mucha atención.  Quién sabe por qué.  Y ayer me encontré con una historia desgarradora de venganza y maldad; pero también con música que toca el alma y eleva el espíritu.

Por supusto que yo conocía bien La donna e mobile, y Bella figlia del amore, para mencionar dos.  Y claro que conocía las escenas del asesinato de Gilda, o cuando Rigoletto llega en busca de su hija.  Pero esta…la del vídeo, me había pasado inadvertida.  Una escena tierna -entre un padre y su hija- con música que atrapa los sentidos y mueve algo íntimo en quien tiene la dicha de ponerle atención.

En fin, ¡que buenísimo que no me perdí de Rigoletto!


15
Feb 13

¡Mañana es día de “Rigoletto”

Mañana, a las 11:55 a.m. y en directo desde la Met, en Nueva York, veremos Rigoletto, en el IGA.  Esta es una ópera muy conocida, y recuerdo desde niño La donna e mobile porque mi tía abuela, La mamita, la cantaba alterándole la letra para divertirnos a los niños.

Esta producción busca atraer a una audiencia contemporánea sin perder su carácter universal e intemporal.  Estoy ansioso por verla porque es una historia arrebatadora y grandiosa como sólo la buena ópera puede serlo.

Ah, povero Rigoletto.  ¡Allá nos vemos