El mundo del pequeño Adam era un programa que me gustaba mucho, cuando yo tenía unos 5 ó 6 años de edad. Nótese lo moderno de las naves espaciales. El programa era sobre cosas científicas y siempre concluía cuando Adam le hacía una pregunta a Wilbur (el chico de los anteojos); y este contestaba: “Eso, pequeño Adam, es otra historia”.
nostalgia
04
May 08
El antiguo consulado de los EUA
09
Abr 08
Música en Ecléctico
Tal y como estaba anunciado, ayer estuve en Ecléctico, el nuevo programa de radio de mi amiga Marta Yolanda en 100.9 F.M. y http://www.radiopolis.info/
Cómo siempre, ella se luce con la música que elije y por si usted no lo escuchó, o no apuntó la música seleccionada, aquí va:
1. Going out of my head, con Ella Fitzgerald y Duke Elllington
2. Bella Notte, con Bryn Terfel
3. Nuestro tema, con Silvio Rodríguez
4. Quelqu´m M´a dit, con Carla Bruni
5. Nada sin tí, con Eros Ramazzotti
6. Bleeding Love, con Leona Lewis
7. Io no vivo sensa te
8. Contigo en la distancia, con Christina Aguilera
Por supuesto que hablamos del amor entre Dominique Francon y Howard Roark, tal y como lo prometimos; pero la música nos llevó por otros caminos. A mí, Going out of my head e Io no vivo sensa te, me metieron al túnel del tiempo y me llevaron a los cinco años de edad, con mi pantalón corto, sentado en la sala de la casa de mi abuela. Belle notte me recordó que no he hecho el numerito del spaghetti, de La dama y el vagabundo; Nada sin tí, me recordó una noche tormentosa en Sherlock´s; y Quelqu´m, me encantó oirla porque Bruni es la esposa del Sarkozy, el actual presidente francés.
03
Abr 08
Bule bule
Pues…no se por qué…ahora, a esta hora, me he acordado de Bule Bule; y encontré este vídeo que me recordó mi más tierna infancia y las fiestas de mis tías en casa de mi abuela.
07
Feb 08
Desde mi balcón
Ayer, desde el balcón de mi casa, podía ver a este par de personajes. Uno cortándole el pelo al otro durante una agradable y brillante tarde.
La escena me recordó las barberías a donde iba a cortarme el pelo cuando era niño; eso sí, cuando no era don Rafa el que llegaba a cortarnos el pelo a la casa. Normalmente despues de almuerzo, justo antes de que pasara el bus para llevarnos al colegio, a mi hermano y a mí.
Cuando era niño pasé por Los caballitos, en la Quinta avenida y Primera calle; por la barbería del Hotel Palace, en la Cuarta avenida y ¿12 calle?; y por la barbería España, en la Quinta avenida y Novena calle, todas en la zona 1.
03
Feb 08
En el Centro Histórico, recuerdos en bronce
19
Nov 07
Las canciones de mi padre
Como consecuencia de mis primeras entradas del día de hoy, me dieron ganas de acudir al Club de la Nostalgia. Y me puse a pensar en las canciones que me recuerdan a mi padre, canciones que él nos cantaba a mis hermanos y a mí. Por supuesto que están las dos que mencioné temprano. Aquella que dice:
Y nosotros los pobres marinos
hemos hecho un barquito de vela
pa’ vivir en el centro del mar
con una bodega repleta de vino.
Y nosotros los viejos marinos
hemos hecho un gran submarino
pa’ vivir en el fondo del mar
pues ya no se puede vivir en la tierra.
Y luego, la también mencionada:
Las pelotas, las pelotas, las pelotas de carey
son lo mismo en La Habana, en Japón y en Camagüey.
Mi padre solía cantar:
Pajarillo, pajarillo,
pajarillo barranqueño.
Que bonitos ojos tienes,
lástima que tengan dueño.
Otra, de su repertorio, era:
En un bosque, de la China,
la chinita se perdió;
como yo andaba perdido
nos encontramos los dos.
Algunos creerán que aquella es original de Enrique y Ana y que data de c. 1980; pero no. Esta que viene me costó encontrarla porque sólo recordaba bien la música y, como es en italiano, más bien me acordaba de sonidos, pero no de las palabras exactas:
Aveva un bavero color zafferano
e la marsina color ciclamino
veniva a piedi da Lodi a Milano
per incontrare la bella Gigogin.
Y por último la que más recuerdo en mi infancia, More, de Mondo cane, interpretada por Frank Sinatra.
More than the greatest love the world has known,
This is the love I give to you alone,
More than the simple words I try to say,
I only live to love you more each day.
More than you’ll ever know,
my arms long to hold you so,
My life will be in your keeping,
waking, sleeping, laughing, weeping,
Longer than always is a long long time,
but far beyond forever you’re gonna be mine.
I know I’ve never lived before
and my heart is very sure,
No one else could love you more.
15
Nov 07
El club de la nostalgia y el Odyssey
La mía debe haber sido la última generación urbana chapina que hacía capiruchos con canutos de madera para hilo y un pedazo de vidrio roto, o en hacer teléfonos con hilo y cajitas de fósforos de madera. Debe haber sido la última en usar televisores de tubos de esos a los que les quedaba un puntito de luz en la pantalla luego de apagarlos, o en usar teléfonos de disco y radios de bolsillo. La mía todavía conoció discos de vinilo.
Hoy, el Blog Tayuyo trajo a mi memoria algo que pasó tan fugazmente que es increíble. En casa teníamos un Odyssey.
El Odyssey es el tatarabuelo de los videojuegos. Aunque el juego es de 1972, a casa no llegó hasta finales de 1976. Mi padre los vendía y me pagaba unos pesos por irlos a instalar a las casas de quienes los compraban, también por revisar que todo viniera cabal y sin daños en su caja.
En su versión más sencilla era un simple ping pong; pero para hacerlo más complejo, el juego traía pantallas plásticas que uno adhería a la pantalla del televisor ya fuera con la estática que se generaba, o con cinta adhesiva.
El juego traía una casa embrujada, un rifle para la galería de tiro, una ruleta y no recuerdo qué variaciones más. Lo jugabamos con mis hermanos, mis padres y con los amigos. En casa no quedaron más que las fichas blancas, rojas y azules del casino de Odyssey. Y ahora…el recuerdo de tardes divertidas gracias a ese juego.
05
Oct 07
Nombres de recuerdos
Hace ratos leí, en un blog una entrada sobre nombres de recuerdos, y me cayó en gracia. Hoy, que no tenía ganas de comentar sobre el hoyo en el Barrio San Antonio, ni sobre otras cosas que deberían llamar la atención, hice mi lista: Miel de morro, Meme, el del 7, bicicleta, Panajachel, mosh, matemáticas, lectura, Emulsión de Scott, Drácula, astronautas, piratas, buques, el mar, el asesinato de Kennedy, figuras de caricaturas en madera barnizada, una casa de bloques de madera, una cubeta por casco, Mandy, Simón, Manix, Chiqui, Panchita, algo escondido en la mesa de noche, una pieza de trofeo, Joselito, Natasha Kinsky, la torre de control, la copa de peltre, balas de algodón, el Astrocar, el perfume en un frasco de Buda, vino tinto, el Mall, una artesa enorme, canciones (y más canciones), aroma y olores, frutos de café, química orgánica, El Mirador, El Q´sh, azul intenso y profundo, Howard Roark, Géminis, el sótano, Lucia di Lamermoor, el Bar Cinto, Goo Lin, pantalón azul de corduroy y camisa roja de cuello de tortuga, Templamere, pan para los lustradores, ojos color miel, galletas de Navidad, lunada, los espíritus de los conejos, las formas de las nubes, las Aes, El último adiós, Mi casita, el terremoto, malaria, hepatitis, la cebollita, yesos de colores, lluvia de estrellas, las fiestas de mis padres, Coca Cola float, grandes lodazales, la lluvia en el campo, barranquear, las calles del Centro, cacerías de orquídeas, esquí acuático, miel de abejas, anacates, monedas de plata, los centavos viejos, los chocolates Polo, leer noticias, Monterrico, goma blanca, Dipididú, panes franceses con Ketchup, panes franceses con queso crema y frijoles, manos metidas en el depósito de arroz, la despensa, la lavandería, panes franceses con aceite de oliva y tomate rallado, té con leche, Tortrix, centavos viejos pintados con mercurio, doña Tinita, la casita de madera sobre el garaje, latas de pulpo, Carpe Diem, Luna Llena, Aquí el mundo, Perdidos en el espacio, barquitos de papel en la toma, El Circus Bar, el árbol de Navidad en El Capuccino, jalea de mandarina, sopa de tortuga, las tardes del otro lado del río, Calisay, Cosito, S.E.D.C…
Y bueno…la lista irá creciendo.
10
Jun 07
Precios de 1960
Para el Club de la Nostalgia: precios de 1960, año en el que se casaron mis padres.
Una docena de huevos de gallina: 45 centavos de quetzal; unos $0.05 al tipo de cambio actual, sin deflatar. Una docena de huevos de parlama: Q0.60; unos $0.07.
Un ciento de naranjas: Q2.00; unos $.20. Una bolsa de vegetales mixtos para cocido: Q0.35; unos $0.04. Un camote: Q0.06, unos $0.007