25
Mar 19

El problema guatemalteco de Biden

El ex vicepresidente Joe Biden dejó  claro que si se lanza a la carrera presidencial de 2020, se presentará como Demócrata con las opciones de política exterior que el país necesita. Centroamérica, cada vez más importante para la seguridad nacional de los Estados Unidos, es una región en la que se considera un experto.

Haz clic en la foto para leer el artículo que da origen a esta entrada.

Aquella pretención fue afectada el martes cuando Guatemala emitió una orden de arresto para la ex fiscal general Thelma Aldana por cargos que incluyen la falsificación de documentos y el fraude fiscal; con estos dos párrafos inicia la columna titulada Biden´s Guatemalan Problem, de Mary Anastasia O´Grady publicada en el diario Wall Street Journal, que añade que los guatemaltecos se quejaron amargamente del desprecio de la Sra. Aldana por la ley durante su mandato como fiscal general de 2014 a 2018. Pero ella fue protegida contra la investigación por la embajada de los Estados Unidos y por la Comisión contra la Impunidad en Guatemala, conocida como CCIG (financiada por los EE.UU.) y su comisionado colombiano, Ivan Velásquez.

Una ex fiscal general, que trabajaba con la ONU es acusada de fraude, dice el subtitulo de la columna que es objeto de esta entrada.

Biden ha sido uno de los más entusiastas promotores de la CICIG, a pesar de que la Comisión terminó siendo un fracaso épico, explica O´Grady.

Luego, en su columna que es de antología y que hay que guardar, la periodista relata como es que el rol de aquella comisión se fue deteriorando a pesar del apoyo del que llegó a gozar en 2015. Cuenta cómo es que la comisión no responde a nadie y cómo es que Velásquez llegó a comportarse como un virrey.

En esas circunstancias, O´Grady cuenta cómo es que la arbitrariedad de Velásquez -condonada por Aldana- creó una cultura de miedo y cómo es que uno y la otra llegaron a necesitarse mutuamente. No fue hasta que los abusos de la CICIG llamaron la atención internacional, que los guatemaltecos recobraron confianza para manifestarse sobre aquellos abusos.

Luego, en su columna, Mary Anastasia O´Grady les cuenta a sus lectores las cuitas electorales y judiciales de Thelma Aldana, que viajó a El Salvador.

De vuelta a Biden, la columnista señala que Biden no ha sido el único Demócrata que ha continuado apoyando a la CICIG luego de que sus asaltos contra el estado de derecho fueran documentados; y menicona a Norma Torres y James Mc Govern, así como a Patrick Leahy.

O´Grady finaliza su columna con la siguiente observación: No podría haber evidencia clara de que la comisión de la ONU se ha convertido en un instrumento político de la izquierda guatemalteca y estadounidense. Esto retrasó el objetivo de fortalecer la democracia guatemalteca y dañó los intereses de seguridad de los Estados Unidos en la región. Si el Sr. Biden corre, tendrá que dar algunas explicaciones.


06
Feb 19

Se peló Iván Velásquez

Iván Velásquez -el jefe de la CICIG- le pidió a los Estados Unidos de América que fuerce un estado de derecho en Guatemala, según EfeNoticias, divulgado por Emisoras Unidas.

¡Se peló Velásquez!…le salió el cobre.

Está claro que el Comisionado no entiende lo que es un estado de derecho; y está claro que su veta autoritaria (si no totalitaria) y su veta constructivista, tan propias del socialismo, se impusieron sobre el maquillaje democrático con el que ha paseado por aquí.  Al lobo se le cayó la piel de oveja.

A la luz de la petición en cuestión, parece evidente que Velásquez cree que las valoraciones pueden ser impuestas por la fuerza.  ¿De verdad cree que por la fuerza se puede imponer sobre los chapines la valoracion de eso que conocemos como estado de derecho?  Digo, porque -para que florezca en el largo plazo- la valoración del estado de derecho tiene que ser consecuencia de que las ideas acerca del estado de derecho prevalezcan en la sociedad, sobre las ideas de otras modelos de orden.  No puedes llegar a una sociedad y forzar ideas e instituciones.

Eso lo saben los estadounidenses, o deberían saberlo, por su experiencia en el medio oriente y en América latina.

Por la fuerza puedes llegar a una sociedad y ayudarla a deshacerse del tirano que le impide desarrollar ideas e instituciones contrarias al autoritarismo y al  totalitarismo. Eso sí. Pero por la fuerza no puedes imponerle aquellas ideas a una sociedad. Eso lo sabe, o lo intuye cualquiera que entienda la naturaleza de la sociedad y cualquiera que no se tome en serio las alucinaciones totalitarias y constructivistas.

Al respecto, Hannah Adendt, escribió:  a lo que aspiran las ideologías totalitarias no es a transformar el mundo exterior, o a transmutar revolucionariamente la sociedad, sino a transformar la propia naturaleza humana. ¿Cómo? ¿Por la fuerza., como quiere Velásquez?

Una de dos, puedes tratar de hacer realidad un estado de derecho de una forma empírica, basada en la tradición y en instituciones que evolucionan, uno basado en la educación y el convencimiento; o puedes forzar un remedo de estado de derecho basado en la construcción de una utopía. La primera es propia de las experiencias británica y estadounidense; en tanto que la segunda es propia de las experiencias de la revolución francesa, y de los socialismos que costaron tantas vidas en el siglo XX e increíblemtne están costando vidas en el siglo XXI.

En fin…¿en serio se piensa que el estado de derecho se puede imponer por la fuerza?


19
Sep 18

Una solución razonable sobre la CICIG

El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas , Antonio Guterres,confirmó a Iván Velásquez como Jefe de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala.  Velásquez habrá de nombrar a un comisionado adjunto que vendrá a Guatemala en tanto que el titular permanecerá fuera de Guatemala.

A mi me parece que esta es una buena salida política y diplomática y estoy convencido de que la Administración de Jimmy Morales y el Presidente no deberían reaccionar con el hígado. Es una forma de encontrarse en la cresta y si las partes involucradas actúan racionalmente es una forma de preservar al paz y evitar conflictos.  Es una forma de decir: Ni usted, ni yo. Otra cosa será si el objetivo de alguna de las partes fuera hacer crecer el conflicto, en el que en río revuelto ganancia de pescadores. ¡Cuidado con los vividores del conflicto!

El de la CICIG fue un acuerdo mal hecho y así lo advertimos muchos desde que se hablaba de la CICIACS.  Lamentablemente muchos que ahora se han dado cuenta de eso pusieron oídos sordos a las advertancias.  Ahora, porque los acuerdos deben respetarse, no queda más que echarle ganas y actuar de forma civilizada, Ya se hizo lo que se podía sin violar la ley, ni el acuerdo, la ONU ya cedió porque Velásquez no vendrá al país.  Todavía hay espacio para enmendar la Comisión en el año que le queda para trasladar sus capacidades.

Dicho lo anterior, les recomiendo mucho la lectura del artículo La CICIG, un experimento fallido, por Warren Orbaugh.  Ojalá que aprendamos algo.

Foto por elPeriódico.


04
Sep 18

El sucesor de Iván Velásquez

Quien sea designado para suceder a Iván Velásquez, como jefe de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala, debe ser un profesional de la justicia, y no un activista; debe asegurar una transición -entre ahora y septiembre del año entrante- que fortalezca el sistema de justicia y no dañe más a las instituciones; debe generar suficiente confianza como para desfacer el entuerto que deja Velásquez.

Es posible que la decisión de Jimmy Morales en el sentido de prohibir el ingreso de Velásquez sea un desatino y seguramente el asunto tendrá que dilucidarse en los tribunales; pero lo que no debe ocurrir es que Velásquez sea impuesto y que esa imposición genere daños institucionales y contribuya a profundizar y a agravar las fisuras sociales en Guatemala.

En los tribunales se habrá de dilucidar, por ejemplo, si el Presidente tiene, o no la facultad de ordenarle al Director General de Migración que le prohiba la entrada al país a una persona; habrá que dilucidar si el Jefe de la CICIG necesita visa, o no; y otros detalles.  El sucesor de Velásquez habrá de continuar las investigaciones pendientes contra Jimmy Morales en su calidad de secretario general del partido con el que ganó las elecciones.

Y con todo y eso, ¿sábes? Pienso que si el Secretario General de la ONU y los gobiernos que no sólo financian a la CICIG, sino que se empecinan en mantener a Velásquez como jefe de la misión, de verdad quisieran contribuir a acabar con la impunidad y la corrupción en Guatemala, deberían detenerse y preguntarse: ¿Hicimos lo mejor que podíamos haber hecho? ¿La agenda que no es evidente, vale la pena a cualquier costo? La imposición de Velásquez, ¿puede ser una victoria pírrica que desate quién sabe qué clase de monstruos?

De paso, ¿qué agenda? La de Patrick Leahy y otros políticos y gobiernos que quisieran ver a Latinoamérica convertida en una enorme Cuba.  La que no terminan de ver los funcionarios republicanos que no distinguen Guatemala de Guadalajara, ni de Guam.

A lo largo de los años, la CICIG amplió su autoridad para hacer avanzar la política de la extrema izquierda, que busca consolidar el poder mediante el control de las instituciones. Es la misma estrategia empleada por el fallecido dictador venezolano Hugo Chávez, explica Mary Anastasia O´Grady, de el Wall Street Journal.

En esta misma dirección, O´Grady apunta a que la izquierda internacional ha aplaudido la turbia influencia y el capricho de la CICIG porque arma y silencia a los oponentes ideológicos del socialismo. En la CICIG, los socialistas dentro y fuera de la ONU creían haber encontrado un modelo que podían desplegar en todo el mundo en desarrollo para debilitar a los defensores de las ideas de centroderecha y potenciar el colectivismo, todo bajo el pretexto de luchar contra la corrupción. Abundan los rumores de que el Tribunal Constitucional, un aliado del  señor Velásquez, se está preparando para declarar ilegal la decisión del presidente. Eso explicaría por qué, el martes [hoy], el señor Morales anunció que al señor Velásquez no se le permitiría regresar al país.

Además, en su columna de hoy, O´Grady añade: El señor Velásquez no es un funcionario electo. Es más un virrey moderno, que reprime con fuerza la oposición en la “colonia” contra aquellos que desafían su autoridad. Los guatemaltecos han llegado a entender que denunciar los métodos ilegales de la CICIG es arriesgarse a la condena pública como amigo de los corruptos, o incluso a la investigación y la detención preventiva. Empresarios turbios, políticos, matones notorios y especialmente jueces parecen tener un pase siempre que acepten la agenda del señor Velásquez, o se mantengan fuera de su camino. En otras palabras, la administración de justicia de la CICIG ha sido selectiva.

Comparto estos párrafos de la columna de O´Grady porque ayudan muy bien a entender qué es lo que está en juego y por qué es que es importante defender las instituciones, por precarias que sean; evitar la fractura social que desate monstruos y defender el pequeño germen de república que pueda haber donde quiera que lo haya.

El sucesor de Iván Velásquez tiene la misión de trasladar las capacidades de la Comisión al Ministerio Público; y para cumplirla a cabalidad y terminar la gestión de la CICIG con algún grado de respetabilidad no debe actuar como un virrey, ni al margen del debido proceso y de otras garantías constitucionales, ni del sistema de pesos y contrapesos.

¡Con, o sin CICIG, todos contra la corrupción!, ¡Con, o sin Velásquez, todos contra la corrpución!


08
May 18

¿Por qué se van los chapines y no regresan?

El ingreso de divisas por remesas familiares creció en el primer trimestre de 2018.  Mientras tanto, en Guatemala el Indice de confianza en la actividad económica sigue en picada, igual que el crédito bancario al sector privado, y en contraste la tasa de desempleo, en los Estados Unidos de América, ha llegado a su nivel más bajo en 18 años. Guatemala aleja a su gente y los migrantes chapines, ¿qué incentivo tienen para regresar si allá las cosas van bien y aquí las cosas pintan mal?

De aquellas circunstancias me acordé cuando leí el arttículo titulado George Soros and the “Caravan”, publicado en The Wall Street Journal.

La “caravana” de centroamericanos en la frontera sur de Estados Unidos, que busca asilo, tiene a algunos conservadores retorciéndose las manos a causa de una invasión hispana. Deberían, en cambio, preguntarse qué hay detrás de la desestabilización de los países a los que han huido esos migrantes desesperados, dice la columnista, y miembro del Consejo Editorial del WSJ, Mary Anastasia O´Grady.

De forma certera, la autora apunta a que la corrupción, el estatismo y el capitalismo de amigos [el viejo y conocido mercantilismo] en América Central han conducido a la región a la pobreza y la exclusión. También, de forma certera, O´Grady señala que los liberales clásicos de la región entienden esta conexión y han luchado para fortalecer el estado de derecho. Pero sus esfuerzos se han visto socavados por las redes criminales de financiamiento del narcotráfico que agobian a las instituciones.

Muchas personas, en Guatemala, creyeron que el remedio contra aquel azote y el de otras mafias, iba a ser la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala; pero yo advertí, desde que esa comisión era discutida y se iba a llamar Comisión de Investigación de Cuerpos Ilegales y de Aparatos Clandestinos, que el concepto presentaba dos peligros: 1. Que los chapines abdicábamos a la responsabilidad de resolver nuestros problemas; y 2. Que un organo perseguidor, todopoderoso, era un peligro.  Y dicho, y hecho.

La columnista dice que existe evidencia sustancial de que la solución financiada por los EE. UU. para el problema en Guatemala [la CICIG], utilizando un fiscal de las Naciones Unidas, ha sido corrompida por actores sin escrúpulos y la por ideología izquierdista de Organización de las Naciones Unidas, y más razón no podría tener. A mí, por cierto, ya no me gusta usar izquierda y derecha porque son términos vacíos y su significado cambia dependiendo de los contextos.  Yo digo, para aclarar las cosas, que la solución ha sido corrompida por la ideología socialista de la ONU…y por los actores inescrupulosos.  Hace ratos sostengo que los guatemaltecos enfrentamos un project of nation buliding diseñado para llevarse a cabo sin la aprobación de los chapines en las urnas electorales y para mí es cada vez más evidente que se hace por medio de los organos jurisdiccionales (los tribunales y las cortes) y del manejo de la opinión pública a nivel de acuerdos entre oligarquías de todos los colores. Para aclarar las cosas la oligarquía es un grupo minoritario de personas, pertenecientes a un mismo estrato social, generalmente con gran poder e influencia, que dirige y controla una colectividad, o institución.

Algunas de esas oligarquías son ese montoncito de organizaciones no gubernamentales y operaciones mediáticas que trabajan en Guatemala y que están financiadas por la Open Society Foundations de George Soros y otros de esa persuación. En ese caso, sus instrucciones son rodear los vagones para defender al fiscal de la CICIG, Iván Velásquez, y destruir a quienes se atrevan cuestionarlos.

Los estadounidenses se están preguntando, con razón, por qué es que los Estados Unidos financian aquella operación de la ONU carente de responsabilidad y transparencia.  El caso que disparó las alarmas es el de la familia Bitkov, porque parece evidente de que esa familia es víctima de persecusión por parte de Vladimir Putin, por medio del banco estatal ruso VTB y parece evidente que la familia fue embaucada por una red de corrupción en Migración, el Renap y otras oficinas estatales de Guatemala.  Este no es espacio para los detalles; pero lee otras entradas al respecto y el artículo  George Soros and the “Caravan”.

En el, Mary Anastasia O´Grady concluye: En una declaración hecha ante la audiencia de la Comisión Helsinki, el Senador Mike Lee (R., Utah) señaló que, si bien la CICIG fue “creada para erradicar la corrupción y defender el estado de derecho”, se ha convertido en un árbitro extrajudicial, parcial e injusto . “Su politización es injusta para todos los que buscan una Guatemala libre y próspera”. Algo en lo que pensar cuando los autobuses llenos de refugiados llegan a la frontera [entre México y los EE.UU.].


12
Sep 17

Jalisco y las “organizaciones campesinas”

¿Ya sabes lo que se dice de Jalisco, verdad? Que Jalisco nunca pierde y cuando pierde arrebata. Lo dicen quienes quieren mostrarte valientes y terribles, y pretenden infundir miedo.

De eso me acordé cuando leí que miembros de varias organizaciones campesinas están bloqueando vías en la ciudad de Guatemala y se dirigen al Congreso de la República para presionar con el objetivo de que le sea retirada la inmunidad a Jimmy Morales.

Esta operación ocurre un día después de que aquel organo rechazara retirarle el antejuicio al Presidente tal y como lo había solicitado el Ministerio Público y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala.  El propósito de corto plazo de aquella solicitud es investigar al Mandatario por el supuesto delito de financiamiento electoral ilegal (del cual la comisión pesquisidora del Congreso no encontró evidencias); pero el propósito a mediano plazo es remover a Morales, de la Presidencia y sustituirlo por Jafeth Cabrera (el Vicepresidente); para luego remover a este e imponer un Presidente electo a dedo y al margen de la voluntad popular expresada en comicios. Un Presidente cuyas acciones hagan germinar la semilla de un proyecto socialista.

El plan falló ayer porque se impuso el buen juicio en el Congreso donde privó el criterio de que el Tribunal de antejuicio deberá declarar sin lugar la solicitud, aunque haya plena comprobación de que le funcionario es culpable del delito (que no la hubo), si su procesamiento pudiera causar al estado un daño mayor que el causado al agraviado por el delito.

En el espíritu de Jalisco, parece que los grupos que quieren remover a Morales y hacerse con la Presidencia van a acudir a lo que mejor saben hacer: el bloqueo, la plaza y la barricada.  Sin descontar que, en el Congreso, van a tratar de revivir el proceso cada vez que puedan, con la esperanza de que luego de las cansadas y bajo amenazas de inestabilidad y actos de violencia, se haga su voluntad (y la de sus patrocinadores).

Para mucha de la dirigencia popular en este estado de cosas, los procedimientos democráticos -como los comicios y la actividad parlamentaria- son valores y no se cansan de defender la democracia frente al concepto de república, por ejemplo; y esto es porque la democracia es el gobierno de la mayoría o de los que dicen representar a la mayoría. Pero para aquella dirigencia, los procedimientos democráticos sólo tienen utilidad y valor mientras que aquellos procedimientos sirven a sus intereses específicos (como remover al Presidente y poner uno de su gusto). Una vez que los procedimientos no responden a sus expectativas (porque se advierte el peligro que implican), el plan B es jacobino: El bloqueo, la plaza y la barricada. Es soreliano, en el sentido de que, desde su perspectiva, la violencia (los bloqueos, por ejemplo) puede ser moralmente buena (si no es cruel) y a partir de la idea de que -tarde, o temprano- los procedimientos democráticos no hacen más que animar al proletariado a participar en instituciones burquesas, como el parlamento, que son fuentes de desmoralización, corrupción y minado de la solidaridad de clase.

Jalisco siente que perdió ayer; y va a intentar arrebatar.  Lo que ocurrió ayer no debe ser visto con triunfalismo por parte de la Presidencia -y no debería ser aprovechado para profundizar el clima de conflicto por parte de la dirigencia popular y sus patrocinadores-; sin embargo, debe ser aprovechado para resolver el tema de Iván Velásquez y la CICIG.  Por eso, este es un muy buen momento para recordar el consejo de Ayn Rand: En todo conflicto entre dos hombres (o grupos) que comparten los mismos principios básicos, gana el más consistente. En toda colaboración entre dos hombres (o grupos) que se apoyan en diferentes principios básicos, el más maligno, o irracional es el que gana. Cuando los principios básicos opuestos están abierta y claramente definidos, eso obra en ventaja del lado racional; y cuando no están claramente definidos, sino que están ocultos, o difusos eso obra en ventaja del lado irracional.

La foto es de RepúblicaGt


01
Sep 17

Morales y Velásquez no son relevantes

Como debemos actuar mientras vivamos, una sociedad irracional y paralizada está lista para ser tomada por cualquiera que esté dispuesto a determinar su curso. La iniciativa pude venir de dos tipos de personas: las que están preparadas para asumir la responsabilidad de afirmar los valores racionales, y las que persiguen lo contrario.

Esa frase ha rondado mi cabeza desde que estalló la crisis política que desvela a los guatemaltecos.  Superficialmente, la crisis es un enfrentamiento entre el presidente Morales y el jefe de la CICIG, Velásquez.  No falta quienes creen que hay que tomar partido por uno, u otro personaje, y olvidan, o ignoran, o quieren que no se discuta el hecho de que lo que está en peligro es algo más valioso: los principios que determinan el curso de este país…y el de nuestras vidas.

El miércoles, que entre las fotos de los manifestantes que apoyan a Velásquez vi una efigie del Che Guevara –que se suma a las banderas de Codeca, el CUC y Winaq en otras manifestaciones– tomó forma el primer párrafo de arriba.  ¿Qué principios representan Guevara y aquellos a quienes no les da pudor asociarse con él? Estas son frases suyas: Los jóvenes deben aprender a pensar y actuar como una masa. Para enviar hombres al pelotón de fusilamiento, la prueba judicial es innecesaria…esta es una revolución. Y un revolucionario debe convertirse en una fría máquina de matar motivado por odio puro. Descubrí que realmente me gusta matar.

Es cierto que pronunciar un juicio moral es una responsabilidad enorme; pero, ¿cómo se puede dormir tranquilo sin advertir que –a estas alturas de la historia– pedir “la revolución” y alinearse con banderas del Che no es un error de conocimiento, sino maldad?

La alternativa que tenemos enfrente es entre los valores que representan el Che, Codeca, CUC, Winaq, Semilla, Somos y otros actores similares; y la esperanza de una sociedad en la que se respeten absolutamente los derechos individuales de todos por igual, sin privilegios.  Opto por esta última.  ¿Y tú?

El párrafo primero es paráfrasis de ¿Cómo se puede tener una vida racional en una sociedad irracional?, por A. Rand.

Columna publicada en elPeriódico, la foto la tomé de Facebook.


30
Ago 17

¿Qué esta pasando en Guatemala?

Hoy temprano, y en Emisoras Unidas, estaban Luis Fernández Molina y Carlos Luna Villacorta.  Uno es exmagistrado de la Corte Suprema de Justicia y el otro fue magistrado de la Corte de Constitucionalidad.

Luis Fernández Molina comentó los siguente: la CICIG debió buscar aliados, entre estos al presidente “y no atacarlo”. “CICIG debió haberse ganado aliados, pero lejos de este lo están echando”.

Lo hicieron los griegos cuando atenienses y espartanos (que eran enemigos) se aliaron contra el enemigo común que eran los persas; y lo hicieron los cakchiqueles con los españoles, cuando el enemigo común eran los quichés. Digo yo: la observación de esta mañana tiene sentido si el propósito principal de la misión (o el del mandato de Velásquez) fuera, por ejemplo, destapar y procesar mafias.  En el caso de Guatemala, aún si el presidente Jimmy Morales fuera corrupto (¿Y por qué no podría serlo?), no tiene sentido que Velásquez se enemistara con él en las primeras de cambio y que en el proceso se generara una crisis política de profundidades graves.  La CICIG de Velásquez podría perseguir al Presidente más adelante en el proceso de destapar y procesar mafias y corruptos, e incluso podría hacerlo cuando abandonara el poder, sin causar daños institucionales. Pareciera que remover al Presidente tiene prioridad sobre otros objetivos más propios de la Comisión.

Esta operación, la de remover al Morales, tiene sus raíces en el intento semillero de suspender las elecciones en septiembre de 2015, en otros intentos similares y en la derrota de la social-democracia en aquella ocasión; y tiene precedentes en numerosos intentos posteriores dirigidos a deslegitimar la decisión que tomaron los electores en aquellos comicios.

El propósito de estas meditaciones no es el de abonar a una pugna personal entre el Presidente y el jefe de la CICIG.  Empero, la amenaza y la concreción de un rompimiento institucional -así como la posibilidad de la toma del control del poder por parte de grupos que no han sido electos, sino que operan a la sombra y mediante la manipulación- claman por perspectivas que aclaren lo que está ocurriendo.

Iván Velásquez tiene una ventana de oportunidad.  Puede reconocer que su empeño en aferrarse al puesto que ocupa está causándole daños a una sociedad muy vulnerable y puede, como caballero, retirarse antes de que -si obtuviera la victoria- esta fuera una victoria pírrica.

La cuestión es si va a aprovechar la ocasión, o va a desperdiciarla.

La foto la tomé de Publinews.


27
Ago 17

WTF La lucha entre Morales y Velásquez

¡Que mal se ve la decisión del presidente, Jimmy Morales, en cuanto a declarar non grato a Iván Velásquez, jefe de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala!

Vale aclarar, sin embargo que el rumor de que Morales iba a la ONU a pedir la remoción de Velásquez no pasó de ser un rumor.  Uno rumor que nunca llegó a serverdad y que desató la crisis actual. Antonio Guterres, secretario general de aquel organism confirmó que el Presidente de Guatemala nunca pidió la destitución del jefe de la CICIG.

Empero, la decisión del Presidente se ve mal porque:

-La Comisión y el Ministerio Público pidieron un antejuicio contra Jimmy Morales por financiamiento ilícito al partido oficial FCN-Nación.  Se ve feo que siendo señalado el Presidente, procediera a expulsar al señalador, ¿con la esperanza de que la Fiscal General cumpla su amenaza de renunciar en caso de que Velásquez fuera removido?

-Esta es la hora en que Jimmy Morales no ha explicado clara e inequívocamente sus razones para declarar non grato al Comisionado. De acuerdo con la Convención de Viena no tendría que hacerlo; pero en un ambiente de silencio han surgido toda clase de especulaciones y estridencias.  Los mandantes y tributarios merecemos una explicación porque la incertidumbre y las aguas turbias quién sabe a quién van a terminar sirviendo.

-Luego del fracaso de la operación de ayer, en la plaza que no fue multitudinaria, ni nada parecido, ¿qué necesidad habría de fortalecer a los grupos cuyas banderas e intereses se reunieron en la plaza?

-Tanto Jimmy Morales como Iván Velásquez -si hubieran unido, en vez de separar a los guatemaltecos- tuvieron la oportunidad de liderear el rescate de Guatemala, de las manos de la impunidad, de la corrupción y de las mafias. Esa oportunidad de oro se está yendo, si no es que ya se fue, dada la fragmentación que estamos viviendo.

Desde antes de su creación, cuando aún existía el concepto de CICIACS, me opuse a la creación de una comisión internacional que dirigiera la lucha contra la impunidad, la corrupción y las mafias, no con argumentos nacionalistas (y menos por defender aquellas lacras); sino porque nos quitábamos, los chapines, la responsabilidad de encabezar aquella lucha.  Y ya sabes, no ser responsable de algo es cómodo; pero tiene un precio terrible: la impotencia.  Y así está resultando.

Con todo y todo, sin explicaciones claras e inequívocas, en un ambiente enrarecido y de divisiones profundas, en el contexto de los señalamientos de financiamiento ilícito y a la vista de las banderas que había ayer en la operación de la plaza, la decisión imprudente del presidente Morales es digna de un WTF; y ha puesto en grave peligro a Guatemala y -lo que es peor a los guatemaltecos-.

…y aún así, esta lucha de poder nos involucra a todos como mandantes y va a requerir que separemos la paja del trigo y que -en la medida en que se aclare el panorama- actuemos de forma racional, pensando en el largo plazo y de forma objetiva.  ¿Vamos a ser actores, o vamos a ser observadores? ¿Vamos a involucrarnos en una lucha personalizada, o vamos a tomar decisiones conforme a principios?

La foto la tomé de elPeriódico.


25
Ago 17

Algo grave en este pueblo

Hay un cuento de García Márquez, titulado Algo muy grave va a suceder en este pueblo, y empieza así: Imagínese usted un pueblo muy pequeño donde hay una señora vieja que tiene dos hijos, uno de 17 y una hija de 14. Está sirviéndoles el desayuno y tiene una expresión de preocupación. Los hijos le preguntan qué le pasa y ella les responde: “No sé, pero he amanecido con el presentimiento de que algo muy grave va a sucederle a este pueblo”.  Los hijos se ríen de la madre, y dicen que esos son presentimientos de vieja, cosas que pasan.

El rumor del presentimiento de la vieja pasa de sus hijos a los amigos de estos y de los amigos al carnicero.  Al rato, todos en el pueblo están esperando que pase algo; y la gente empieza a ver en el calor (de siempre) y en la presencia de pájaros (de siempre) augurios de que algo grave va a pasar.

La tensión se eleva en el pueblo y las personas agarran sus muebles, sus hijos y sus animales, y en carretas abandonan el pueblo. No faltan quienes incendian sus casas; y hay un éxodo como de guerra. Al final del cuento…no les cuento con la esperanza de que lo googleen y lo lean porque es bueno

De aquello me acordé cuando -luego del rumor de que Jimmy Morales quería salir de Iván Velásquez- se encendieron las redes sociales, la Fiscal General amagó con renunciar, los medios masivos hicieron eco y los colectivos de siempre amenazan con salir a la plaza para deponer al Presidente.  Los intoxicadores le colgaron el sambenito de corruptos a quienesquiera que no se unieran al frenesí y…¿quiénes se benefician con semejante río revuelto?

Desde el día uno, los colectivos -de siempre- le llevan ganas a Morales, que a ratos es un indefendible y a ratos también. Esto y la victimización de Velásquez les cae como anillo al dedo no sólo para salvarle la cara al jefe de la CICIG y a la Comisión (luego de meses y meses en que sus casos no terminan de cuajar), sino para conseguir, por la vía de los rumores, la incertidumbre y de las barricadas, lo que los votantes les niegan en las urnas –siempre-.

La foto es de elPeriódico y esta columna fue publicada en ese diario.