19
Nov 07

Las canciones de mi padre

Como consecuencia de mis primeras entradas del día de hoy, me dieron ganas de acudir al Club de la Nostalgia. Y me puse a pensar en las canciones que me recuerdan a mi padre, canciones que él nos cantaba a mis hermanos y a mí. Por supuesto que están las dos que mencioné temprano. Aquella que dice:

Y nosotros los pobres marinos
hemos hecho un barquito de vela
pa’ vivir en el centro del mar
con una bodega repleta de vino.

Y nosotros los viejos marinos
hemos hecho un gran submarino
pa’ vivir en el fondo del mar
pues ya no se puede vivir en la tierra.

Y luego, la también mencionada:

Las pelotas, las pelotas, las pelotas de carey
son lo mismo en La Habana, en Japón y en Camagüey.

Mi padre solía cantar:

Pajarillo, pajarillo,
pajarillo barranqueño.
Que bonitos ojos tienes,
lástima que tengan dueño.

Otra, de su repertorio, era:

En un bosque, de la China,
la chinita se perdió;
como yo andaba perdido
nos encontramos los dos.

Algunos creerán que aquella es original de Enrique y Ana y que data de c. 1980; pero no. Esta que viene me costó encontrarla porque sólo recordaba bien la música y, como es en italiano, más bien me acordaba de sonidos, pero no de las palabras exactas:

Aveva un bavero color zafferano
e la marsina color ciclamino
veniva a piedi da Lodi a Milano
per incontrare la bella Gigogin.

Y por último la que más recuerdo en mi infancia, More, de Mondo cane, interpretada por Frank Sinatra.

More than the greatest love the world has known,
This is the love I give to you alone,
More than the simple words I try to say,
I only live to love you more each day.

More than you’ll ever know,
my arms long to hold you so,
My life will be in your keeping,
waking, sleeping, laughing, weeping,
Longer than always is a long long time,
but far beyond forever you’re gonna be mine.
I know I’ve never lived before
and my heart is very sure,
No one else could love you more.