26
Sep 14

Desde Encuentro por Guatemala, nueva intentona contra la libertad de expresión

Encuentro-por-Guatemala-logo

Ni bien medio acabamos de salir de la intentona de la Vicepresidencia en cuanto a regular la libertad de expresión en la Internet cuando Encuentro por Guatemala, el partido de Nineth Montenegro, sorprende a los guatemaltecos con otro ataque en esa dirección.  ¿Será exagerado decir que la libertad de expresión está bajo acoso intenso?

Con el pretexto de detener abusos y evitar el uso inapropiado de redes sociales, aquel grupo político ha presentado una iniciativa de ley que pretende castigar a quienes publiquen material que los legisladores consideren abusador e inapropiado. Los memes con los que el humor chapín se burla de los abusos, los desmanes, la corrupción, la prepotencia la mala administración y la estupidez de muchos políticos, ¿serán inapropiados según la nueva legislación?

El caso es que en la legislación guatemalteca ya existen los delitos de injurias, calumnias y difamación (delito este último que se refiere a las dos figuras anteriores cometidas en medios masivos). ¿Qué necesidad hay de crear una ley específica para regular la Internet y las redes sociales? ¿Qué motivo como no sea el de la intimidación, el de la posibilidad de ejercer la censura y el control total? ¿Quiénes, sino el establishment político se beneficiarían grandemente con una ley que regulara lo que la gente puede decir y poner en la Internet y las redes sociales? ¿Es este, el tipo de cosas que los polìtiqueros chapines aprenden de gente como Rafael Correa? Los guatemaltecos ya han vivido la experiencia de cómo una ley puede ser utilizada para intimidar y para amordazar. Tal es el caso de cuando la ley de pánico financiero fue usada contra un tuitero que fue a parar preso en mayo de 2009.

¡Vergüenza para Montenegro, para Encuentro Por Guatemala y para los patrocinadores ocultos de semejante legislación!

La ilustración la tomé de Facebook.


13
Sep 07

¿Será el racismo?

Al momento en que han sido contados 99.5% de los votos válidos en las elecciones de Guatemala, Rigoberta Menchú ha recibido un total de 3.09% del total de sufragios. El argumento del racismo está siendo somatado para explicar esta derrota. Pero, ¿es válida esta consigna? ¿Cuál es la realidad del “racismo” en Guatemala?

Según un despacho de Associated Press, publicado el 12 de septiembre de 2007, “Menchú ha explicado los magros resultados que estaba previsto que obtuviera desde la perspectiva del racismo que divide a los guatemaltecos en indígenas y ladinos, como se conoce a los blancos y mestizos en este país donde el 42% de los 13 millones de habitantes pertenece a una etnia maya”. Por su parte, en el mismo despacho, el también dirigente indigenista, Alvaro Pop, advierte que tras la derrota “queda el movimiento de líderes indígenas Winaq, que servirá de germen para un partido político integrado por mayas que, en futuras elecciones, podría postularla con más éxito”.

Hoy, Nineth Montenegro, seretaria general de Encuentro por Guatemala (el partido que postuló a Menchú), dice que “el racismo en el país impidió que la candidatura de Rigoberta Menchú obtuviera el apoyo que esperaban”. Montenegro añade que “se demuestra que no hay movimiento indígena en el país. Más que por identidad étnica son intereses personales”.

Si los argumentos de Menchú y Montenegro tuvieran sustentación alguna, ¿cómo se explican los malos resultados de la candidatura de la Premio Nobel en la tierra de sus abuelos y de sus hermanos?

En el Departamento de Quiché, Menchú sólo ha obtenido 2.83% de los votos válidos.

En el municipio de Uspantán, el total que ha alcanzado asciende a 2.78% de los sufragios válidos.

En los Departamentos de Alta Verapaz, Sololá y Totonicapán, que como Quiché son mayoraitariamente indígenas, Menchú ha alcanzado 3.22%, 5.05% y 7.95% de los votos válidos, respectivametne.

¿Es el racismo, o algo más, lo que determinó la derrota de Menchú? ¿Son racistas los indígenas que no votaron por Menchú? ¿Es viable el indigenismo como una opción política?


19
Jul 07

La exguerrilla y la transparencia electoral

Leo que “Los partidos políticos en contienda fueron evaluados por Acción Ciudadana (AC), en un primer ranking de transparencia que incluyó el cumplimiento de requisitos e informes de gastos de campaña entregados al Tribunal Supremo Electoral (TSE). De 16 partidos examinados, 10 obtuvieron una calificación de mala a regular, entre éstos, Alianza Nueva Nación (ANN), Unión Democrática (UD), Democracia Cristiana (DC), Desarrollo Integral Auténtico (DIA) y Unión del Cambio Nacionalista (UCN)”.

Las excusas de la exguerrilla le van a sacar una sonrisa: La URNG dice que “no tiene financistas ni gastos excesivos de campaña. Son aportes de los candidatos y miembros del partido”; y con esa finta las sombras prevalecen sobre sus gastos de campaña. La ANN va por el mismo lado; y dice que “los aportes provienen de simpatizantes afiliados y candidatos, por lo que los gastos no se incluyen en las cuentas del partido. En resumen: la exguerrilla no rinde cuentas, y no hace transparentes sus cuentas.

De la noticia me llama la atención que Encuentro por Guatemala, el partido que respalda la candidatura de la lideresa indígena y Premio Nobel de la Paz, Rigoberta Menchú, ni siquiera está mencionado; o sea que no se sabe si pasó la prueba, o no.

Si así son las vísperas, ¿cómo serían las fiestas? Menos mal que la exguerrilla no está en el radar de los electores porque si no rinden cuentas cuando hacen campaña, ¡¿qué van a rendirlas si llegaran al poder?!


06
Jun 07

Tribunales agrarios

La propuesta de su partido respecto de la reforma agraria fue uno de los temas abordados por el Rigoberta Menchú y Fernando Montenegro frente a la cúpula empresarial de Guatemala. Luego de unas declaraciones de Menchú respecto de una política de expropiación de las tierras ociosas, los empresarios le solicitaron a la candidata de Encuentro por Guatemala más información. Menchú habló de una “jurisdicción agraria”.

Este tema es importante porque el derecho de propiedad y el llamado derecho agrario son ejes importantes para las izquierdas chapinas más jurásicas. Para los empresaurios y para los empresarios progres el tema no es de mayor trascendencia porque para ellos todo es cuestión de saberle jugar la vuelta a los socialistas. ¡El que hace la ley, hace la trampa!, es muchas veces, la idea que guía las políticas que se transan entre unos y otros.

Comparto, con ustedes un diálogo entre el magistrado guatemalteco Luis Fernández y el abogado peruano Enrique Ghersi al respecto. El tema de la propiedad, como se verá, es nada menos que un tema de principios. Si a usted le interesa el estudio del derecho, más que el de la legislación; y si le interesa más la ciencia económica, que la economía política, este vídeo lo va a poner a pensar en serio.