17
Jul 09

Y…¿qué tal si?

Así de la nada, mientras comía tortitas de yuca con miel de abejas, Cándido preguntó: ¿Qué tal si se extiende el mandato de la Comision contra la Impunidad en Guatemala? ¿Qué tal si la CICIG avanza en la investigación del caso Rosenberg? ¿Qué relación tienen la riña en el Congreso, con el retraso en la confirmación de la CICIG, el reportaje de Indigo Media sobre el caso Rosenberg y el aborto del golpe de Zelaya en Honduras?

Y como no supe qué contestarle, agregó: ¿Qué relación tienen las manifestaciones populares como la de San Juan Sacatepequez, y otras, con un escenario en el que la CICIG termine de destapar el caso Rosenberg?

Y así como si nada, Cándido se terminó sus tortitas, se levantó y se fue. ¡Vaya usted a saber por qué se le ocurren esas cosas! Casualmente, Cándido estaba leyendo la columna de hoy, de Juan Luis Font, en la que se cuenta que una mano misteriosa repartió el listado de llamadas telefónicas que dió origen al reportaje de Indigo Brainmedia; y que otra, o la misma mano peluda, repartió copias alteradas de una primera plana de El Periódico en relación al caso Rosenberg.
Curiosamente, en el contexto del reportage de IB, Alvaro San Nicolás Colom volvió a referirse al caso en cuestión en términos de que va en camino a resolverse.

Vaya usted a saber cómo pasó Cándido del artículo de Font a las preguntas que cité arriba, pasando por las tortitas de yuca.

06
Jul 09

Publicidad y ¿masturbación?

No me he casado. Disfruta de tu soledad. Así dice una valla publicitaria que ha alborotado al conservadurismo chapín. La valla en cuestión, que se encuentra en la Calle Montufar, muestra a una mujer en una bañera y bueno…la verdad es que es ingeniosa y si uno se esfuerza bien podría pensar que la modelo se está masturbando. Pero claro, eso es más fácil de suponer si uno anda alerta y en ese canal.

Mi amigo Toño, por ejemplo, ve senos en lámparas, adornos, elementos arquitectónicos, y en cuanta cosa sea de forma semi esférica. Pero es que él anda en ese canal.
En tiempos victorianos, a los pianos se les cubrían las patas…porque parecían piernas. A El Gato Viejo, Marco Augusto Quiroa, le criticaron mucho una valla que puso cuando era candidato a diputado, porque la imagen era la de La Maja Desnuda; lo cual era algo ridículo y en otras latitudes ese tipo de cosas se toman como vienen.
Hace años, cuando yo trabajaba en un diario, los de Ventas hicieron mucha bulla cuando el anuncio de ciertas cremas para cuerpo fue impugnado por un grupo de señoras que veían en un cuerpo femenino muy hermoso y sensual, algo pecaminoso, sucio e indigno.
¡Hay que tener cuidado con esa mentalidad gazmoña que ve micos aparejados! Y si de verdad hay lo que los mojigatos dicen que hay, ¿qué tal si dejamos un poco a un lado la moralina? Vea lo que se le ocurrió a Cándido:
¿Qué fue primero, la masturbación masculina o la femenina? Me pregunta, mientras se toma su Clam Chowder.
No sé, le dije.
La masculina, me contesta; porque la masculina es manual y la femenina es digital.

09
Jun 09

Facta, non verba

Vos. Nosotros no somos marxistas-leninistas, ni maoistas, ni socialistas, ni socialdemócratas, ni socialcristianos; de modo que de plano no somos izquierdistas. Pero tampoco somo fascistas, ni conservadores, ni mercantilistas, de modo que tampoco somos derechistas. O a lo mejor -como estamos a favor de los derechos individuales para todos sin distinción y como estamos contra los privilegios- somos izquierdistas de vanguardia. A lo mejor estamos más a la izquierda, que la izquierda. Esto me lo dijo un amigo…y durante el desayuno. Cándido, que estaba ahí, sólo arqueó una ceja y remojó su churro.


09
May 09

Autoridad sin autoridad, San Nicolás en su laberinto

Yo soy el rey y lo que digo se hace.  Lo que mi corazón concibe, lo ejecuta mi mano.  Soy el cocodrilo que arranca, aferra y destruye si piedad.  Las palabras no dormitan en mi corazón.  La frase es de Sensuret, de la XII dinastía faraónica, citado por Carlos Samayoa Chinchilla en El dictador y yo; un libro que escribió sobre sus experiencias como funcionario del dictador guatemalteco, Jorge Ubico.

¿Adivine usted quién me las leyó hoy en la mañana mientras desayunaba waffles con copetines?  ¡Exacto! Cándido me dijo: Lea usté.  Alvaro “San Nicolás” Colom dice que él es la autoridá y que la gente tiene que alinearse a esa autoridá.  Ya se parece al faraón aquel que Samayoa Chinchilla menciona en su libro sobre Ubico.  ¡Já!, si no manda ni en su casa, ¿qué autoridá va a tener?

Yo no se lo de la casa, aunque sí se que según la percepción popular, la que manda y dispone -no sólo allá, sino en la esfera pública- es Sandra Evita.  Sin embargo, una cosa sí es cierta:  San Nicolás fue electo para un cargo de autoridad.  Lo que pasa es que una cosa es ser electo para un cargo de autoridad, y otra muy distinta, pero muy distinta, es la de ganarse esa autoridad, conservarla y hacerla crece; y, peor aún, más distinto es el caso en el que la autoridad obtenida por razón del cargo, se pierda y se diluya por razón del carácter, de la falta de autoridad moral, o de la falta de méritos.
La autoriadad nominal por razón del cargo se obtiene; pero la autoridad de fondo, la que permite gobernar y la que viene de la autoridad moral, esa se gana todos los días.  Y su existencia es tan precaria que para conservarla, cada día es uno nuevo, lo cual quiere decir que de poco sirven las ejecutorias pasadas.  365 días de ejecutorias brillantes en el ejercicio del poder, pueden venirse abajo y perderese totalmente por un día de irracionalidad, de delincuencia, o de desatinos.
Un gobernante puede ser el rey y puede ser el cocodrilo que arranca, aferra y destruye sin piedad y puede creer que los súbditos deben alinearse a sus deseos; pero si no tiene autoridad moral, si los electores y los tributarios no le reconocen autoridad alguna, seguramente ejerce algún nivel de poderío; pero es cuestionable si tiene autoridad.  Por supuesto que la autoridad no debe ser confundida con la popularidad; la autoridad no es cuestión de masas, sino de criterios.  
No creo que a San Nicolás alguien le quite el mérito de haber sido electo presidente de la república; pero de eso a que tenga algún nivel respetable de autoridad hay distancia.  Y, ¿por qué? Porque, como dice el editorial de hoy en Siglo Veintiuno, el Presidente pierde seriedad y pone en entredicho sus intenciones, aún en casos delicados como el de la Influenza A.  Porque la gente ya se dió cuenta de que no había tal inteligencia para combatir la violencia.  Porque casi no hay día del año en el que no haya escándalos de corrupción, o de ocultación de información por parte de su administración.  Porque su administración está obsesionada con elevarles los impuestos a los guatemaltecos, a pesar de que sabe que estamos pasando por penas económicas. Porque usted puede hacer una lista larga de razones.
San Nicolás fue electo para un puesto de autoridad y en ese sentido en algo se parece a Sensuret; empero, y parafraseando una canción: La autoridad se le va, se le va, como el agua entre los dedos.