Lo que me llamó la atención de don Tomás Guzaro fue que transmitía paz y que, para ser un héroe -porque fue un héroe- sabía como hacer que uno se sintiese cómodo y apreciado.
Terri McComb, Luis Figueroa y Tomás Guzaro.
Aquello no me extraña, porque mi maestro Manuel F. Ayau me dijo una vez: vas a ver que los más grandes, son los más generosos y sencillos. Mi amiga, Mayra, escribió que don Tomás fue un hombre valiente, que vivió una vida de luz y de paz, y esa también es una buena forma de describirlo. Conocí a don Tomás y a su esposa doña Petronila, porque en 2014 visitaron la Universidad Francisco Marroquín y el rector, Giancarlo Ibárgüen, me invitó a conocerlos y a conversar con ellos. Vinieron acompañados de Terri y Michael McComb. En esa ocasión visitamos los museos Popol Vuh e Ixchel, paseo que los cuatro visitantes disfrutaron mucho.
Petronila y Tomás Guzaro en el Museo Popol Vuh.
Terri y don Tomás son autores del libro Escaping the Fire, obra que yo había leído casi un año antes, y que inspiró la película Nebaj. El libro está disponible, en español, con el título de Escapando del fuego. Don Tomás murió el 3 de abril de 2021.
¿Qué es un héroe?
Los héroes actúan para promover la vida y lo hacen con gran habilidad, explica el escritor Andrew Bernstein. ¿Qué es lo que hace posibles y necesarios a los héroes? Dado que el mundo está abierto a la consecución y creación de valores por parte de personas racionales, los héroes son posibles; y las grandes mentes creadoras, que hacen posible la vida humana, merecen ser protegidas. Andy explica que aunque los héroes cometan errores y tengan flaquezas, y la cultura enferma en la que vivimos se enfoque en aquellas flaquezas y errores, las personas racionales deben poner en su justa dimensión los errores y flaquezas y estilizar la grandeza en los héroes y que los artistas románticos siempre estilizan.
Un héroe, dice Bernstein, es un individuo de elevada estatura moral y habilidades superiores que -de forma audaz- persigue valores en condiciones de dificultades extremas.
Michael McComb, Terri, Luis Figueroa, Tomás Guzaro, Petronila.
Andrew analiza la naturaleza del heroísmo y su papel vital en la vida humana, no de acuerdo con las definiciones de héroe y heroísmo que hallas en el diccionario, sino por medio de la aplicación de principios filosóficos tradicionales; mediante la identificación del carácter esencial de aquellos conceptos.
Los héroes proveen de inspiración vital a las personas…como don Tomás.
Escapando del fuego
Con ocasión de que leí el libro, esto es lo que escribí al respecto: Los guerrilleros llegaron a nuestra aldea… y forzaron a cada persona capacitada a unírseles… Tuvimos que ir a sus campamentos… en las selvas bajas del Ixcán, como a unos cuatro días de camino desde mi aldea Salquil Grande. Nos entrenaron para pelear, nos enseñaron que matar a los hombres era como matar perros, que los hombres no tenían alma y que al morir solo servían como abono para la tierra… Nos dijeron que nos matarían si no lo hacíamos. Algunas veces aceptaban dinero a cambio de dejar de amenazarnos… Pero… solo la gente que había trabajado en las fincas tenía efectivo, y los guerrilleros ya no nos dejaban ir a trabajar allí, esta es parte del testimonio conmovedor y heroico de Tomás Guzaro, pastor evangélico que, en 1982, ayudó a su gente a escapar del fuego entre la guerrilla y el Ejército. El mismo se halla en Escaping the fire, por Tomás Guzaro y Terry McComb.
Cuando yo era niño me impresionaba una película acerca de un pueblo chino que huía de la invasión japonesa. Es posible que fuera La estirpe del dragón, basada en una novela de Pearl S. Buck. Lejos estaba, yo, de imaginar que centenares y centenares de guatemaltecos vivirían la barbarie y un drama similar durante los últimos días de mi adolescencia.
El libro no solo es el relato de cómo es que cientos de personas salvaron sus vidas durante el enfrentamiento armado que les llevó el Ejército Guerrillero de los Pobres, sino que nos permite atisbar en la cultura ixil por medio de sus tradiciones; de las relaciones entre la costumbre, el catolicismo (generalmente aliado de la guerrilla) y los evangélicos (generalmente al margen de las pretensiones revolucionarias); y de experiencias como la de trabajar en las fincas de la Costa Sur.
Las patrullas de la guerrilla… bloqueaban toda forma de escape conocida. Nos necesitaban como sus esclavos para sembrar su maíz y para que fuéramos sus soldados en su revolución. Si nos agarraban tratando de escapar, nos masacrarían, y sin lugar a dudas, si el ejército del gobierno nos encontraba en el camino, nos asesinaría también, cuenta Guzaro. Es valioso que esta parte de la historia sea conocida, y de verdad te recomiendo el libro.
Adiós, don Tomás.