Si en la empresa en que usted trabaja se fueran algunos de los mejores ejecutivos, ¿qué pensaría usted? Pues bien…la administración socialdemócrata de Los Colom acaba de perder a Ana de Molina que era una de las mejores cartas en su Gabinete. Aunque en su momento se dijo que su nombramiento era para satisfacer la cuota de mujeres en el Gabinete, que Alvaro San Nicolás había ofrecido durante la campaña política, lo cierto es que de Molina no era cualquier cosa. Fue ministra de Finanzas en tiempos de Ramiro De León; y fue decana de Economía en una universidad privada.
La exfuncionaria dijo que se fue porque su cartera no recibía el apoyo presupuestario necesario para cumplir con sus cometidos. Se quejó de que la administración creaba la demanda de educación gratuita y luego no respondía para satisfacerla. ¡Duh! Empero, sería muy, muy preocupante que su salida tuviera que ver con la conformación del presupuesto para la cartera de Educación en 2010; mismo que podría crecer en apariencia, pero inmediatemente constituir nada más que una base financiera para los programas de Cohesión Social y Mi familia progresa (que son la campaña electoral de la Unidad Nacional de la Esperanza).
En otro orden de noticias, pero muy relacionado con la irresponsabilidad de la administración de Los Colom, también nos enteramos de que, en junio, la Secretaría de Seguridad Alimentaria les informó a San Nicolás y al vicepresidente Rafael Espada que la sequía habría escasez de alimentos en el llamado corredor seco de Oriente. ¡Por supuesto que la administración no reaccionó! y claro, la excusa es que no tienen fondos; pero usted sabe que si hay dinero para corrupción y para desperdicio, de plano que sí había para aliviar el hambre.
De hecho, en agosto pasado supimos de que los habitantes pobres de siete municipios de Baja Verapaz recibirían sus bolsas de alimentos hasta la llegada de Sandra Evita Torres. ¡Nadie comería hasta que Evita llegara! ¡Nadie comería hasta que no estuvieran listos los fotógrafos y los encargados de la propaganda socialdemócrata! ¡Nadie se llevaría un bocado a la boca antes de que Evita esruviera ahí, solidaria, repartiendo comida para sus pobres!…sus pobres.
