¡Carpe Diem, este espacio de periodismo de reflexión por la libertad y la razón, cumplió 9 añitos y aquí hay 7,060 entradas publicadas! Cuando empecé este espacio leí que para ser bloguero había que postear todos los días, durante dos años seguidos. Y bueno…ya van nueve años seguidos.
Este blog nació porque pensé que era bueno publicar mi columna -que ahora es publicada generosa y semanalmente por el diario guatemalteco El Periódico– en un rincón propio del ciberespacio. Existe porque, en Filosofía: quién la necesita, mi filósofa favorita, Ayn Rand recomendó: Si a usted le interesa seriamente luchar por un mundo mejor, empiece por identificar la naturaleza del problema. La batalla es ante todo intelectual (filosófica)…en una batalla intelectual, no es preciso convertir a todo el mundo. La historia fue hecha por minorías, o, más precisamente, por movimientos intelectuales los cuales son hechos por minorías…No deje pasar una oportunidad para expresar sus puntos de vista sobre las cuestiones importantes…Si alguna vez se implanta una dictadura en este país, será por la negligencia de aquellos que guardaron silencio.
Este espacio existe para los visitantes, y para los que dejan comentarios (siempre que tengan la bonhomía de identificarse y que no insulten a las personas a las que les tengo cariño y respeto). Gracias a los que están suscritos y a los que leen las entradas en Facebook y en Twitter. Gracias a los que se ríen, se enojan y lloran conmigo. Gracias a los que me mandan enlaces, fotos, vídeos y otros materiales.
En 9 años de bloguear he aprendido un montón y no es fácil enfrentarse todos los días a un público exigente. Unos porque con ellos comparto valores y detectan cuando incurro en inconsistencias; y otros porque no comparto valores con ellos y me exigen que piense mejor mis argumentos.
Carpe Diem significa Apodérate del día (hazlo tuyo, chúpale la médula a la vida) y resume bien mi visión del mundo. La libertad es el valor fundamental que guía mi vida y mis reflexiones en este espacio. Vivo en Guatemala, un país que aún está por ser construido y en el que los derechos individuales y la igualdad ante la ley tienen una existencia precaria. Por eso, aquellos son mis temas favoritos para estos comentarios. Con todo y todo, este espacio existe al amparo del artículo 35 de la Constitución de la República; y del 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (por si acaso), en ejercicio de mi libertad de expresión. Me gustan la cocina, la lectura y la compañia de mi famila y de mis amigos. También me gusta pasar tiempo conociendo mi país y a su gente. Al perpetrar Carpe Diem -un espacio políticamente incorrecto- comparto con mis lectores algunas reflexiones y experiencias en busca de lo que es bueno, lo que es bello y lo que es pacífico. ¡Por la libertad y la razón!
¡Gracias a ustedes por mantener vivo a Carpe Diem!