En la calle donde vivo, todos los días, pero más a estas horas, docenas de automóviles y autobuses extraurbanos se meten contra la vía. Está de más decir lo peligroso que es eso; pero bueno…
Hoy la PMT montó un “operativo” y han caído como moscas, uno tras otro, los buses y los carros que -de forma abusiva- ponen en peligro la vida de los demás al circular en contra de la vía. Cuando yo me encuentro a uno de estos irresponsables, aveces les miento la madre; pero uno ya no puede ni desquitarse así porque me han contado que hay gente que, en vez de aceptarlo con hidalguía, o de devolverlo, responde a balazos. Por eso me alegra que la PMT les esté dando caza a los que se pasan de listos y van contra la vía.
En fin…lo que me causó algo de inquietud es que en un momento algunas personas que circulaban en el área se dieron a la tarea de prevenir a los infractores. En un momento a muchos les dió tiempo de volver sobre sus pasos y evadir la responsabilidad que implicaba su abuso porque la gente les avisaba que la Policía los estaba esperando a la vuelta.
¿Saben qué ha pasado? Que la PMT (y me temo que la autoridad en general) ha cometido tantos abusos a su vez, que es percibida como “el enemigo” por la población. Y entonces, ¿qué ocurre? Pasa que con tal de burlar a la autoridad (que carece de autoridad moral), muchas personas se ponen del lado de los infractores…o peor aún, se ponen del lado de los delincuentes.
Yo mismo he publicado en este espacio la lista de dónde están las cámaras de Emetra; no para que la gente sepa dónde correr y acelerar irresponablemente y dónde no, sino para tener el placer de exponer un secreto estratégico de la autoridad del tránsito.
En fin…mea culpa, tambien.