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Jun 09

Malacates, héroes entre nosotros

La peor definición de héroe, es aquella que identifica al heroismo con el sacrificio; según ese punto de vista es héroe el que da algo de mucho valor a cambio de algo de poco valor. A mí, la que me gusta, es la que dice que héroe es aquel actúa correctamente o que hace lo que es correcto siempre, aún en los casos en que hacerlo lo perjudique.


Héroes, por ejemplo, son los integrantes del grupo musical Malacates Trebol Shop, de Guatemala. Hoy, en una entrevista que publicó el diario Al Día, en su página 14, a Malacates le preguntan: ¿Qué piensan del caso del asesinato del abogado Rodrigo Rosenberg? y la respuesta de estos chicos es que Nosotros teníamos planeado apoyar al Gobierno en una campaña de concientización para apoyar al sistema tributario y acabamos de cancelar toda actividad con ellos. Estamos en desacuerdo con nuestro Gobierno.

Entre muchos artistas son comunes dos tipos de actitudes: la pusilánime de no meterse a discutir asuntos controversiales que podrían comprometerlos; y la pancista que condeciende con el poder para no perder patrocinios, contratos, oportunidades y otros privilegios que suelen dispensar quienes administran el dinero de los tributarios, por medio del presupuesto del estado. De hecho, sobran los artistas y deportistas que utilizan la ley y el poder para beneficiarse descaradamente.

Tengo la hipótesis de que Malacates forma parte de una nueva generación de chapines; una más comprometida, mas escrupulosa, más exceptica, y menos trabada. Menos dispuesta a venderse por un pasaporte diplomático, un patrocinio, o un concierto.

En la entrevista citada, Francisco Páez, de Malacates, relata que tenemos una cancion que creemos será muy fuerte que se llama “Todo se pagará. Estamos hartos de que en Guatemala, y en muchos otros países, reine la impunidad y que el gobernante tenga el derecho de cometer delitos horribles y que todo quede impune. Y al hablar de censura comenta que no la hemos podido meter a la radio porque no quieren que la toquemos, hemos recibido mensajes. En un concierto del Gobierno nos dijeron que no tocaramos esa canción, pero obviamente la toqué dos veces.

Ricardeo Arjona hizo algo parecido; y aunque Arjona es mucho menos vulnerable que Los Malacates, sus declaraciones son valientes y poderosas. El Diario Las Américas acaba de publicar que el cantante Ricardo Arjona sigue dejando oír su voz en el caso del abogado Rodrigo Rosemberg, quien antes de morir baleado, dejó un video en el que acusaba de su muerte al presidente de Guatemala, Álvaro Colom. A casi un mes del escalofriante caso, en cada ciudad que visita el cantante es abordado por la prensa que quiere saber su opinión. De esta forma, el artista se ha convertido en un embajador de su país por la justicia. Claro, es difícil sentenciar a un presidente mientras se encuentra en el poder, pero el hecho de que haya un video que lo implique en la muerte del abogado, cuyos clientes también fueron asesinados por supuestamente negarse a tapar fraudes en las altas esferas del gobierno. Arjona dice que el presidente debería ser investigado como cualquier ciudadano lo estaría en circunstancias parecidas.

De cualquier manera Malacates y Arjona son ejemplos para los guatematltecos que, demasiadas veces, pareciera que estamos muy dispuestos a doblar la cerviz.