El califato islámico en acción

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Para evitar la inmoralidad y promover las actitudes islámicas, el califato islamista ordenó que todas las niñas y mujeres entre los 11 y 46 años de edad sean sometidas a la mutilación genital.  La ablación se practica, según los líderes del califato para alejar a las mujeres del libertinaje y la inmoralidad.

Esta costumbre bárbara, que es común en Africa, pero generalmente ajena al mundo musulmán, consiste en la extirpación parcial o total de los órganos genitales y es una violación de los derechos humanos. Su práctica, a menudo en pésimas condiciones higiénicas, puede provocar hemorragias prolongadas, infecciones, infertilidad e incluso la muerte. En Egipto, por ejemplo, sus partidarios insisten que se trata de una practica religiosa que reduce la libido de las mujeres, preserva su virginidad hasta el matrimonio y elimina cualquier tentación de adulterio.

Recientemente, líderes del Estado islámico de Iraq y el Siria destruyeron la histórica mezquita de Yunus o templo de Jonás, una joya del siglo 8 a.C en donde se cree que esta enterrado el profeta Yunus o Jonás, y que es una de las más importantes de Mosul.

A principios de este mes miles de iraquíes cristianos huyeron para preservar sus vidas. El grupo terrorista Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS, por sus siglas en inglés) está atacando sus aldeas, conforme continúan su intento brutal de tomar más territorio.   Por esas fechas, cristianos fueron crucificados por ISIS, por dejar el Islam.

¿Te acuerdas de cuándo los talibanes dinamitaron estatuas de Buda, que tenían más de 1500 años, en Afganistán?

Este tipo de cosas es lo que ocurre cuando el vigor y la fortaleza islamistas controlan el poder.

Por eso me llamó la atención que en su columna titulada ¿El fin de la historia?, Roberto Blum escribiera que la constitución del Estado islámico de Irak y Siria  y la restauración del califato enla ciudad de Rakka son los últimos síntomas del renacimiento de la gran civilización musulmana.  Sin duda es políticamente incorrecto de mi parte; pero…¿cómo es que ordenar la ablación y dinamitar deliberada y específicamente antiguedades como la mezquita de Yunus y los budas son síntomas de civilización? Voy a ser más atrevido y voy a decir que el islamismo es un ataque a la civilización.

En El genio de Occidente, Louis Rougier escribió que la civilización árabe fue maniatada por el Islam.  Y explica que el largo sueño del Islam, entre el siglo XIII (luego de su expulsión de Europa) y el siglo XIX (cuando retomaron el contacto con Occidente) se debió al hecho de que los árabes perdieron el contacto con los persas, sirios, cristianos y judíos cuya presencia tuvo un impacto vitalizante en su cultura.  A partir del siglo XII una reacción teológica sacudió todo el Islam y ya no hubo filósofos -la palabra misma se convirtio en sinónimo de infiel– y sólo ocasionalmente hubo algún erudito como Ibn Khaldun; y el Islam, retornando a sus fuentes, paralizó la investigación con una fórmula que no admitía réplica: Dios conoce mejor lo que es.

Rougier continúa: Para el musulmán, toda verdad que vale la  pena de conocerse está contenida en el Corán, que es a la vez un dogma yun código de fe, y cuyas prescripciones regulan hasta los más pequeños detalles de la vida.  El musulmán reza, pero no ora; no conoce el remordimiento, ni expresa un mea culpa. Desde el momento en que satisface la prescripción fundamental del Corán -crer en el Dios único y su Profeta- está en paz consigo mismo.  Puesto que Alá ha hecho la morada del hombre tal como es, ¿para qué tratar de majorarla mediante invenciones que rayan en la irreligiosidad y que nada contribuyen a la salvación del hombre?

El Islam -como el del siglo XII y el del ISIS- es lo que ocurre cuando la fe tiene el poder.  Y es lo contrario a cualquier síntoma de civilización.

El vídeo es muy impactante; no lo veas si crees que te impresionarás.

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2 comments

  1. Lázaro Chacón

    Desagradable y repulsivo, y no se ve una luz al final del tunel, no parece que van a cambiar esas costumbres salvajes y retrogradas, que les puede importar el resto del mundo si le pueden hacer eso a sus hijas, o como en el caso de Hamas ponerlos de escudos humanos para el deleite de la prensa y poder crear la impresión que Israel es el malo. Con ellos no hay diálogo, no hay punto intermedio, o es su ley o la guerra continúa, muerte al infiel y punto. No nos engañemos.

  2. Geraldine Pearse

    A uno le duele el alma cuando un hijo se raspa una rodilla, no me puedo imaginar ese sufrimiento. No quise ver el video, aunque he visto otros. Están verdaderamente mal de la cabeza. ¡Qué espanto!