Según la Encuesta libre 2015 Manuel Baldizón es moro al agua y ya fue desplazado al segundo lugar con 22.9% de intención de voto simulado con papeleta; el primer lugar lo ocupa Jimmy Morales con 25% y el tercer lugar es para Sandra Torres con 18.4%.
Los demás están bien abajo con un sólo dígito, a tres días de las elecciones generales. La exguerrilla no llega ni a 2%. Electoralmente es casi imposible ser más anodino; pero por medio de grupos como Semilla y la Plataforma para la reforma del estado son un cáncer.
Morales ha cosechado el voto de descontento y el voto antisistema. Según la Encuesta libre el factor clave de Morales es que es confiable, 45% de los encuestados dicen que da confianza y me acordé de una frase que dice: Confiamos en quienes no conocemos porque nunca nos han engañado. Nota que sólo 14% estima que Baldizón da confianza, y sólo 15% opina que Torres da confianza. De los encuestados 25% estima que Morales no tiene mala historia, y el hecho es que no tiene historia alguna. Se sabe poco de él como no sea que es comediante. Con todo y todo es menos peligroso que Badizón, bien conocido por inescrupuloso y rayano en lo vesánico; y menos peligroso que Torres que ya gobernó cuando estaba casada con Alvaro Colom y tiene vínculos con el chavismo, y ese tipo de cosas.
El margen de error es de 3.1% por lo que no hay que dejar nada al azar y puede haber sorpresas.
Baldizón se desplomó en el area rural de 41 a 29% entre julio y agosto de 2015, cayó de 17.4 a 10.8% en el área metropolitana y se fué en picada de 26.7 a 21.6% en el interior ubano. Torres no se movió de 28 en el área rural, es irrelevante en el área metropolitana con entre 7.1 y 6.2%, y bajó de 11.5 a 9.8 en el interior urbano. Morales se encaramó de 9.3 a 13.8% en el área rural; subió de 31.7 a 24% en el área metropolitana, y de 30.9 a 38% en el interior urbano. Es evidente que el rechazo a Baldizón fue creciendo y creciendo.
Es interesante que entre 30 y 35% de los encuestados cree que Torres y Baldizón tienen buenas propuestas, aunque no les inspiren mucha confianza. Creo que esto es fruto de ese populismo regalón que ofrece algo para cada grupo de interés y que es zalamero con las masas.
¡¿Sábes qué me parece increíble?! Que para el Congreso 16% tenga la intención de votar por los candidatos de Todos, que es el partido al que se arrimó Alfonso Portillo. No friegue, ¿en serio? Estamos tratando de salir de esa ralea de gente ¿y los van a llevar de nuevo al Congreso? 13.1% piensa votar por los candidatos del partido de Baldizón, 9.6% les va a dar su voto a los del partido de Torres. ¡6.9% piensa votar por los candidatos del Partido Patriota! ¡¿En serio?!
El Congreso va a estar fragmentado, lo que es muy bueno. ¡Hay que votar cruzado!, pero si los chapines fueramos mejores electores, quizás no repartiríamos el poder entre los mismos, quizás votaríamos por los candidatos a diputados de partidos que estén muy, pero muy lejos de los potenciales ganadores de los comicios presidenciales…y bien lejos del pasado. ¿Qué hay que tener en la cabeza para votar por los candidatos de Todos, Lider, UNE y Patriota? En esta elección la exguerrilla no está en el mapa. Será sorprendente si logran arañar algún diputado. Logran, sin embargo, ser los convidados de piedra (porque nadie espera que un muerto llegue a una cena) a fuerza de prácticas como el corporativismo y su influencia con organismos internacionales, gobiernos extranjeros y multitudes de organizaciones no gubernamentales.
Del Parlacen ni hablar. 25% de los encuestados votarán nulo o en blanco en esa papeleta; pero 14.6 votarán por Lider, 12.0 votarán por todos. Otra vez…¿en serio? Yo escribiré alguna mofa, befa, o escarnio.
En la elección presidencial el voto nulo es de casi 18%, casi el mismo porcentaje que Torres y más del doble que el porcentaje para la siguiente candidata en la fila. Es un voto de rechazo que cuando hay dos candidatos muy peligrosos a punto de tomar el control del Organismo Ejecutivo y sus facultades reguladoras en casi todas las actividades humanas, es un voto que innecesariamente pone en peligro no sólo la libertad, sino las posibilidades de rescatar lo poco que haya de una república.
Este domingo encontrémonos en las urnas, vayamos a votar, evitemos que queden Baldizón, o Torres.