Gracias a una generosa invitación del equipo de The New Intellectual, el domingo pasado conduje una discusión de la novela Himno, por Ayn Rand, y fue una experiencia muy agradable y enriquecedora.
Como la realidad supera a la ficción, esta distopía muestra lo espeluznante, despersonalizante y empobrecedora que es una sociedad colectivista en donde está prohibido no ser feliz. Poco de lo que describe Ayn Rand en esta obra no lo hemos visto en las noticias recientemente.
Que no te engañe el tamaño del libro, que es de sólo 119 páginas. Un lector hábil puede devorarlas en menos de dos horas; pero te recomiendo que lo hagas despacio, que imagines y trates de sentir lo que sienten Igualdad 7-2521, Internacional 4-8818 y Libertad 5-3000 en un mundo en el cual todo lo que no está permitido está prohibido, y en el cual somos uno en todos y todos en uno. Un mundo en el que las personas no se animan a decir los pensamientos que pasan por sus mentes. Porque todos deben estar de acuerdo con todos y, como no pueden saber si sus ideas son compartidas por los demaás, entonces temen hablar.
Lee Himno como comerías un plato complejo y delicioso; y no como si te zamparas comida rápida.
La actividad fue el domingo 19 de noviembre de 2017, en la librería Sophos, y la la foto (que originalmente es clara) es por Marta Yolanda Díaz-Durán.