¡Hay que ponerle fin a esta demencia!

Doktor_Murners_Narrenbeschwörung_001

Hoy nos enteramos que la deuda pública llega a los Q120 mil millones y de que creció 9% en los primeros cuatro meses de 2015.  El endeudamiento interno incluye bonos del tesoro por parte del Ministerio de Finanzas -dinero que se desvía del sector productivo y voluntario de la economía para destinarlo al gasto en el sector plúblico que es político y coercitivo- y la deuda externa obtenida de los organismos internacionales que actúan como celestinas de los políticos corruptos.

Nos enteramos de que, por medio del Transurbano, un grupo de empresaurios que surgió en colusión con la administración de los Colom/Torres ha recibiro millonarias transferencias de recursos de los tributarios.  Ahora los titulares de aquel engendro enfrentan una denuncia penal por Q122.7 millones  por bienes adquiridos sin utilizar (Q102.5 millones), pagos en exceso por distribución incorrecta del subsidio al combustible (Q18.5 millones) y pagos improcedentes (Q1.7 millones).

Ayer leímos que la Junta Directiva suplente del IGSS aprobó la compra de un paquete de licencias de software por Q17.3 millones mediante un proceso de licitación cuestionado en el que se descalificó a una empresa que había ofertado el lote de licencias en Q6.8 millones; lo cual es un sobreprecio de más de Q10 millones.

¡La vorágine de los millones es espantosa!, y los de arriba són sólo unos ejemplos. Mientras tanto a seis meses de que concluya la administración de los pipoldermos los políticos y funcionarios a cargo de administrar el dinero que toman de los tributarios, por la fuerza, quieren aumentar el techo del gasto y sumarle Q5 mil millones más.  ¡Dinero que no tienen! y que seguramente querrán obtener por medio de endeudar más a la gente (y la deuda se paga con impuestos), de hecho, Finanzas analiza colocar bonos del tesoro por Q4 mil millones.

Mientras tanto los activistas tributarios se lamentan porque la recaudación de impuestos sigue sin cumplir sus expectativas; ¡Y así no se puede gastar, desviar, robar, ni redistribuir!  Los militantes tributarios hablan y hablan de no cumplir con sus objetivos de expoliación; pero nada se dice de reducir los gastos, la mala administración, la corrupción y la transferencia de recursos a grupos de intereses. ¡Hay que ponerle fin a esta demencia!

Pareciera que las consignas de los pipoldermos son las mismas de Isidro López, un diputado español, de Podemos: Os vamos a hundir y a freír a impuestos.  Se os fuerza democráticamente a pagar.

Ilustración anónima [de dominio público], via Wikimedia Commons

Comments

comments

Comments are closed.