Ve pues. Hoy leo que hay quienes temen que el endudamiento en el que quieren meternos los pipoldermos podría aumentar la inflación y la ingobernabilidad. Por gobernabilidad se entienden dos cosas: un grado elevado de cooperación e interacción entre el quienes ejercen el poder y los actores no estatales en el interior de redes de decisiones mixtas públicas y privadas; o bien el conjunto de formas de coordinación de las acciones individuales, entendidas como fuentes primarias de construcción del orden social. Por extensión, gobernabilidad es definida como cualquier forma de coordinación social.
Yo digo que siendo que la sociedad es un Kosmos (o sea un orden espontáneo, en el sentido hayekiano) no debería ser el caso que la coordinación social dependa de los pipoldermos. La provisión de seguridad y justicia podrían serle encargadas a un gobierno bajo la ley; pero la coordinación social no es tarea propia de quienes ejercen el poder. Es peligroso encargarles la coordinación social.
De la lectura de la nota en cuestión no me extraña que la inflación pudiera causar dificultades para la cooperación y la interacción entre los mandatarios y los mandantes. Así debería ser porque los mandatarios son los causantes de la inflación, y esta es un impuesto oculto que le roba valor al dinero de las personas y empobrece a los más vulnerables. En una sociedad sana la inflación debe ser motivo de indignación y de ingobernabilidad.
Es perturbador, eso sí, que la gobernabilidad (como cooperación) dependa de la satisfacción de las demandas de ciertos grupos de interés (académicos, deportivos, empresauriales, culturales, sindicales, o de cualquier otra naturaleza). La satisfacción del clientelismo (o sea la dependencia que algunos grupos de interés tienen con respecto la concesión de prestaciones obtenidas de parte de la función pública) no debería ser fuente de gobernabilidad. Y esto sólo ocurre por alcahuetería, y porque todas las partes involucradas (menos los tributarios y los ciudadanos, como tales) se benefician de las inteacciones que ocurren al amparo de la arbitrariedad y de la legislación que perpetúan ese estado de cosas en las que no hay distinción entre los límites de lo privado y lo público.
Al final de cuentas criamos cuervos, y ya sábes lo que pasa cuando crías cuervos.
Al hablar claro con sentido de la realidad los pueblos en mayoria se han alienado de diversas imagenes creando un espacio de poder, para unos pocos que manejan a su sabor y antojo a una sociedad diversa en ambiciones, educacion e idiosincracia, esta amalgama no tiene sentido ni orientacion, solo la guia de señas que manipulan unos pocos, podemos ponerle nombre y su afinidad, que somos nosotros los del diario vivir, los que conforman su seguridad, los delincuentes, los pobres de siempre y bochincheros. ¿Como se llaman? rosca, crimen organizado y tascamanes que son los fefes tambien de sardinas que atienden a los tiburones. Los que trabajamos en la ciudad o el campo y migrantes somos los generadores de divisas y los gozan en su mayor parte los ya mencionados, son los que por miedo o pago electoral han inflado la burocracia incluso al menos un ministerio nuevo se avienta el gobierno entrante. Deudas es lo esencial para incrementar corrupciones, en donde disque politicos se sacrifican por este pueblo desagradecido, esto es mas en latino America, donde salvadores cobran con sudor y sangre a los pueblos mal educados, es mas entre menos se gaste en eso que crea ingobernabilidad, ya que los tiempos cambiantes, sin saber leer(Solo Alfabeto) los muñequitos en la internet les esta habriendo los ojos, se ven en peligro. Espero que en mis lineas pudieren leer lo tratante a: Clientelismo, inflacion e ingobernabilidad.