Los elegidos, para los cargos entre las autoridades tradicionales indígenas de Guatemala, son personas muy respetadas y con amplia trayectoria de servicio a la comunidad. No sólo entre los mayas, sino en muchas culturas del mundo, ese reconocimiento a la trayectoria de vida de las personas es el requisito principal para formar parte de los consejos de ancianos, y de otras instancias similares.
En el proyecto de reforma constitucional ProReforma, ¿Quiénes llegarían al senado como está propuesto? ProReforma no discrimina a nadie, pues las reglas son iguales para todos. Llegarían personas electas por sus contemporáneos (de 50 años de edad) quienes conocen mejor su trayectoria, demostrada a través de los años —no por sus promesas— como ciudadanos responsables y con buen juicio, cualidades que necesitan madurez.
Con ProReforma, por cierto, el senado no tendría más poder que el de fijar las reglas del juego dentro de las cuales los políticos jóvenes, o viejos pueden ejercer el poder, e inclusive manejar el presupuesto, lo cual estaría a cargo de la Cámara de Diputados, en que la edad requerida sería de 30 años.
Si usted comprende la importancia de la madurez, de la experiencia, de la trayectoria de vida, no para el ejercicio del poder, sino para fijar las reglas para el ejercicio del poder, seguramente querrá saber más de ProReforma.
