Los vientos de fin de año

Hoy, los majestuosos liquidambares que veo desde mi ventana, en mi oficina, se agitan y se mecen gracias a lo que bien pueden ser los primeros vientos del fin de año en Guatemala.
Estos vientos inauguran la temporada de barriletes; y traen el frío característico de noviembre, diciembre, enero y febrero.  Los vientos coinciden con un cielo azul intenso y con el tiempo de los celajes.  Mi amiga Karen Cancinos, dice que “el frío es una fuerza civilizadora”; y estoy completamente de acuerdo con ella.
Los vientos estos son agradables; pero recuerdo que -a mediados de los años 70- hubo unos que me botaban de la bicicleta, en Panajachel.  Eran tan intensos que impedían que uno avanzara con eficiencia.

Comments

comments

1 comment

  1. Herr Kommandant! qué bonito texto… efectivamente, hoy me siento como el sapo al que echaron al charco a nadar, jajaja! reuerde usted que soy un mono highlander, y este frío, impulso civilizador, me hace recordar mi pueble queride, cuando era una niña regordeta, sonrosada y muy feliz (ya no soy una nené, pero sí que continúo regordeta, sonrosada y muy feliz)