Menchú a por la Presidencia

Ayer leí que Rigoberta Menchú, Premio Nobel de la Paz, podría competir para la Presidencia de la República de Guatemala. (No hay enlace porque Siglo Veintiuno no puso esa noticia en su sitio Web).

A mí me parece buenísimo porque seguramente le agregará colorido y sabor chapín a los comicios; y porque su participación democráctica sería un bonito ejemplo para los jóvenes que, como la chica de la foto, pasaron su adolecencia vinculada a la guerrilla guatemalteca y ven en Menchú a un ejemplo de vida.

La foto, por cierto, fue publicada aquí por el semanario El País, en abril de 1988 cuando Rigoberta Menchú volvió a Guatemala con otros miembros de la Representación Unitaria de la Oposición Guatemalteca. El pie de foto indica que fue publicada, originalmente, en 1982 por la revista mexicana Por esto, en un reportaje sobre la actividad guerrillera en Huehuetenango.

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5 comments

  1. Yo admiro a Rigoberta Menchú por su trayectoria y labor como activista en cuanto a derechos humanos se refiere. Y ha logrado lo que muchos, sabiendo y pudiendo no lo hecho.Sin embargo creo que no tiene la formación académica, y experiencia necesaria para guiar una nación.Sé de un diputado con escolaridad de 3ero. básico solamente. Y a veces, las buenas intenciones, el ímpetu y deseo de luchar no son suficientes.A mi parecer, Rigoberta Menchú caería víctima de politicas, o politicos manipuladoras.Adelante Rigoberta Menchú con lo que ha hecho hasta ahora!!… pero hay que recordar el dicho aquel de “zapatero, a tus zapatos…”

  2. Pues…nadie tiene la formación académica y la experiencia necesaria para guiar una nación. ¡Dios nos libre de aquellos que quieren guiar a la nación! Vea usted: Berger es abogado; Portillo era profesor universitario; Arzú no tenía títulos académicos, pero ya tenía experiencia de alcalde; De León Carpio, era abogado; Serrano era ingeniero; Cerezo era abogado. Yo no me guiaría por la formación académica, ni por la experiencia.Ciertamente no necesitamos ni un guía, ni un mesías, ni un líder; lo que necesitamos es un gobierno de leyes, no uno de personas.Por otro lado, qué presidente que usted haya conocido no ha sido “víctima de políticas”, y muchos no sólo han sido manipulados por grupos de interés, sino que han sido unos manipuladores de primera.Yo digo que la señora Menchú por lo menos le añadirá chile al caldo. Nos preocupamos demasiado por el piloto, sin darnos cuenta de que el problema es el pichirilo. Saludos

  3. Sigo pensando, que si es cierto que se necesita un buen pichirilo, tambien necesitamos un buen piloto.El problema con los que hemos tenido antes, es que aparte de profesionales, abogados, ingenieros etc. tambien eran corruptos. Y para eso no necesitaron título. No me gustaria que Rigoberta Menchú terminara siendo manipulada politicamente. Pero si decide aceptar, pues que le dé para adelante. Como siempre, la última palabra la tiene la historia.Muy buen Blog. Siempre leo Carpe Diem.

  4. Muchas gracias, Paco; buena onda. Saludos y ¡Animo!

  5. Abelardo Gándara abe.gandara@gmail.com

    Ahora, ya olvidando el regaño por la payasada que escribió en el segundo párrafo le doy mi comentario.Este tema va más allá de las parodias que se acostumbra hacer contra los indios (o indígenas, según sus parámetros. Para mí no es despectivo si es dicho por una persona respetable que en ningún momento intenta ofender sino utilizar términos adecuados y no políticamente correctos).Acá tenemos un tema candente para la prensa internacional, incendiario para las ONG que buscan pisto y además preocupante para el estado institucional pútrido y decadente en que nos encontramos. Ahora, en la modernidad, los indios reclaman sus derechos para gobernar sus pueblos. Pues bien, enhorabuena! Que intenten hacerlo y ojalá logren conseguir sus metas.Ya es hora de dejar a los mestizos, descendientes de mezclas, hacer lo que mejor han hecho desde que los reportes sobre la colonia llegaban al “aparente mundo civilizado” en Europa: brindar y luchar entre ellos por el escaso poder que ostentan, gastar y desvirtuar el melancólico honor hidalgo que antaño tuvieron y ante todo… dejarlos vivir en una sociedad libre a su gusto y gana. ¿Por qué es aún tan difícil para nosotros entender que los indígenas están cansados de ver nuestras reuniones desde los balcones? Nosotros como ladinos pasamos por lo mismo no más de cuatro siglos atrás. ¿O acaso ya olvidamos eso también?On Liberty,