La cooperación exterior es síntoma de dependencia, explica experto Eduardo Fernández, en esta conversación con Su Servidor.
Países de Africa y de América Latina dependen de los Estados Unidos de América, o de la Unión Europea. Esta última genera dos vías de cooperación: una interna que se enfoca en elevar el nivel de vida de países que tienen renta baja per capita; y otra externa que implementa políticas públicas para promover el desarrollo de países subdesarrollados o en vías de desarrollo.
Fernández afirma que la cooperación externa tiene un fondo perverso porque la misma responde a diversos intereses, en contraposición al concepto transparente de orden de cooperación espontánea que propone Friedrich A. Hayek.
A propósito, Martin Farrows, opinó que “El proteccionismo europeo es lo que se debería abolir progresivamente si de verdad se tiene el deseo auténtico de que los países en vías de desarrollo, tanto africanos como de América Latina, prosperen”.