“La Municipalidad de Nueva York ordenó a sus ciudadanos y visitantes comer más sano”. Desde ayer, los restaurantes, cafeterías y pastelerías de la ciudad ya no usan grasas trans para cocinar. El departamento de Salud de NYC cree que con la prohibición de esas grasas salvará de la muerte cardíaca al menos a 500 ciudadanos al año. Esta noticia, de DPA, la leí hoy, en Prensa Libre, en su página 64.
DPA
02
Jul 07