Con Kerry Halferty conversamos sobre el pesimismo de la juventud francesa en particular, y de la juventud europea en general.
Aquel pesimismo -que a mí me parece muy triste- está enraizado en la cultura y en un principio de precaución. Uno que añora una época dorada que nunca existió.
Claro que en Francia y Europa hay jóvenes y emprendedores optimistas; pero hace falta cambiar la retórica que usamos para comunicarnos con los jóvenes y hablar más de lo emocionante que es resolver los retos y enfocarnos menos en los problemas, dice Kerry.
En la cultura francesa aquel pesimismo es profundo y Kerry piensa que está vinculado a una baja tolerancia al riesgo; y también al contenido pesimista en las fuentes de noticias.
Kerry invitó a buscar espacios y tiempo para apagar la negatividad y para buscar grupos, artículos, e ideas acerca del optimismo para el futuro y para encontrar soluciones a los problemas.