Anda, en Facebook, un letrero que dice algo así: No son tus principios, sino tus acciones las que te hacen una mejor persona; idea que puede traducirse a algo así como: Por sus frutos los conoceréis.
De aquello me acordé cuando leí que, en el Ministerio de Salud hubo un recorte de Q135 millones correspondientes a programas contra la desnutrición. Los fondos serán usados en otras cosas prioritarias. ¿Como qué? El movimiento presupuestario no es para vacunación, ni para dotar a los hospitales con medicinas, ni para algo parecido. ¡Es para pagárles a los burócratas de la salud su bono de antigüedad!
¿No te lo crees? Yo sí. ¿Qué otra, sino algo como eso, iba a ser el propósito prioritario de la costra nostra en la burocracia de la salud? Por eso es que los gastos de funcionamiento superan a los de inversión. Está claro, clarísimo, que la prioridad del Ministerio -y de su burocracia- no es la desnutrición, sino el cheque de fin de mes, y los privilegios de vivir a costillas de los tributarios.
El Ministro de Finanzas dice que aquello no es cierto; pero su explicación no es satisfactoria. El dice que los bonos de antiguedad fueron pagados con un endeudamiento que ascendía a Q180 millones. Esto es que nos están endeudando a tí, a mí y a tus hijos para pagarles sus sueldos y privilegios a la burocracia. El endeudamiento no es para combatir la desnutrición, ni para comprar algodones, jeringas y alcohol. Es para que la burocracia esté contenta.
ESto que hicieron es inhumano. Mejor cortar el número de diputados, sus salarios y beneficios.