Ayer me dió por irme a comer un helado Marylena y coincidí -en el Parque Centenario- con la manifestación de la Coordinadora Nacional de Organizaciones Campesinas. Y que ternura da esa pobre gente utilizada por una dirigencia criminal. Ahí estaban, bajo el sol, hombres, mujeres y niños; sentados como bien pudieran. Aguantando los interminables y manidos discursos y consignas de sus dirigentes.
Hoy leo un titular que dice: Marcha campesina, la segunda en un mes, para reclamar desarrollo rural; y una de las ironías es que uno de los manifestantes lleva un cartél que exige la nacionalización de la energía eléctrica.
Y me pregunto…la dirigencia que exige la nacionalización de la energía eléctrica, ¿está a favor, o contra las hidroeléctricas? Si fuera nacionalizada la energía eléctrica, digamos que así como Cristina Kirchner quiere nacionalizar YPF en Argentina, ¿la dirigencia popular y campesina favorecería u obstaculizaría las hidroeléctricas estatales?
Los campesinos acarreados para estas manifestaciones, ¿saben que sin hidroeléctricas no podrán tener luz, energía para los enfriadores de cervezas, energía para las incubadoras de niños, ni televisiones?
¿Sabrán, o recordarán que la energía eléctrica ya fue estatal, al estilo socialista? ¿Sabrán, o se acordarán de que cuando era estatal era fuente de corrupción? ¿Sabrán, o se acordarán de que cuando la energía eléctrica era estatal había apagones de 6 horas? ¿Sabrán, o se acordarán de que cuando la energía eléctrica era estatal mucha gente tuvo que comprar generadores eléctricos que dependían de combustibles fósiles y que así la luz resultaba muy, muy cara? ¿Qué dirían de esto el Corazón del cielo y corazón de la tierra?
La dirigencia popular y campesina criminal, ¿le contará a sus acarreados que cuando la energía eléctrica era estatal llegamos a un punto en que ya no había energía eléctrica y en el que hubo que hacer contratos de emergencia altamente costosos?
