Hoy nos enteramos de que el Congreso aprobó una normativa que obliga al Ministerio de Educación a impartir educación ambiental en el pensum de estudios de todos los niveles, tanto en las escuelas totalmente estatizadas, como en las que administra el sector privado. El Ministerio tendrá que asignar Q27 millones para hacer efectiva la norma, a partir del año entrante.
Lamentablemente, la corriente que prevalece en el ambientalismo es una que condena las ciudades, la cultura, la ciencia, la tecnología y la industria; y prácticamente empuja a devolver a la sociedad al oscurantismo. Lo vemos en el rechazo al uso del petróleo, en el rechazo a la construcción de hidroeléctricas, en la oposición a nuevas fuentes de empleo en minas, fábricas y otras actividades productivas.
Ojalá que la educación ambiental a la que sean sometidos los niños no sea una que deforme sus mentes para convertirlos en ecohistéricos y en enemigos del progreso. Si a usted le interesa la conservación del ambiente, sin caer en la ecohisteria, seguramente querrá visitar estos dos sitios valiosos:
Property & Enviroment Research Center
Yo tambien detesto los extremos pero pienso que a ambos bandos no les gustaria llegar a esto:http://bit.ly/9bBeJI